La salida de tono de Kiko Matamoros que casi pasó desapercibida en ‘La última tentación’: «Me he confundido con el beso con p…»

¡Qué gracioso es Kiko Matamoros! ja ja ja NO. Para mí tiene la misma gracia que quitarte el calcetín y ver que has perdido un dedo por la gangrena. El colaborador que hace esfuerzos ímprobos por no quedarse dormido hizo una gracieta en El debate de las tentaciones anoche que se la podía haber ahorrado.

Tuvo una salida de tono que dejó incómodo a todo ser vivo en el plató. Entre grito y grito de cuñado venido arriba en una boda, soltó una que casi no se oyó y que menos mal que todos los demás tuvieron la habilidad de pasarla por alto para no darle más importancia.

Pero llegará un poco más adelante, así que vayamos por partes con lo que pasó anoche.

«¡Qué bien, cómo me gustan los lunes!», dijo Sandra Barneda nada más salir al plató. «Como me gustan los lunes», nunca, nadie. Menos Sandra Barneda, que está el fin de semana intranquila, mirando el reloj a ver si llega el lunes para pasarlo pipa mientras el resto del mundo se caga en todo lo que se menea.

Sandra Barneda nos vendió la próxima gala: «El programa del miércoles es la pera, la repera y la más pera», es el Perón. LA PERA MADRE. Si Dios fuera una pera sería ESA PERA de programa.

Tema Isaac y Marina.

Vimos unas imágenes raras en las que Marina estaba en la piscina haciendo algo con las tetas, como si estuvieran enseñándolas a nadar. Marina llevó a sus pechos a matronatación a los seis meses.

Marina le dijo a Isaac que es «mentirosillo». Estaban los dos con la ropa encima de la cama, colgándola en perchas más arrugada que los cojones de un galápago de 200 años.

La cosa iba en plan bien, quiero lo mejor para ti, pero es el típico equilibrio tenso, porque a la mínima eso se desequilibra y así fue, acabó Isaac acusándola de ser infiel. «Tírame mierda a mí, no a mi relación», pidió Marina, que quiere para sí toda la mierda posible. Marina iba a las cabalgatas de los Reyes Magos y no cogía caramelos, cogía las cacas de los caballos.

«No, si te la estoy tirando a tí», le aclaró Isaac, como si eso fuera una piñata de mierda y que quedara claro que solo podía coger Marina.

«Si Marina quisiera estaría con Lobo», dijo la madre de Marina. JAJAJAJAJA Si Marina quisiera y tuviera una furgoneta blanca, esposas, somníferos y cuerdas, estaría con Lobo. Con Lobo en un sótano amordazado.

Vimos fue a Manuel contra Isaac en un círculo de fuego. Son tan cuñados que el único fuego en el que yo les veía era el de una barbacoa y discutiendo por el punto de la carne.

«Manuel, es muy importante que cuando llegue tu oponente le mires a la cara«, le dijo Sandra Barneda. Joder, te meten en el círculo al Dioni y a ver quién le sostiene la mirada.

Y claro, su contrincante era Isaac. En ese círculo de fuego había tanta testosterona que si fuera inflamable morían achicharrados los dos.

Manué no quiso darle la mano a Isaac, que se quedó con el brazo como el que está saludando a alguien en el suelo.

«Eres un ponecuernos», le reprochó Manué. JAJAJAJA Os lo juro. JAJAJAJA Es como si Jack el destripador le dijera a Annibal Leckter ¡es que eres un matagente!

JAJAJA

«Tú vas de lobo, pero no eres ni un gatito», aseguró Manué, haciendo una metáfora poco comprensible. Este chaval se lía con los depredadores.

«Yo en pareja soy una cobaya, yo respeto», respondió Isaac. Voy a dejar de lado el hecho de que tienen una obsesión malsana por los animales, para reflexionar sobre si las cobayas son leales y respetan mucho. Ahora que lo pienso, es verdad, no tengo noticia de ninguna cobaya que haya faltado el respeto a otra. Dos cobayas van a pasar por una puerta y se dicen cosas como «después de usted», o «por favor, pase». Ellas respetan.

Como llegó un momento en que se pusieron chulos y macarras los dos, Isaac justificó su chonismo diciendo: «Soy de barrio, soy de barrio«. A ver, los del Barrio de Salamanca o de Pedralbes también son de barrio y van de finolis.

Si alguna vez una señora mayor con abrigo de piel y perlas os atraca y os habla mal es porque es de La Moraleja, que encima de ser de barrio son de extrarradio.

Manué: «Eres una persona que no puede estar en pareja, tienes que estar soltero«, le dijo a Isaac, como aconsejándole. JAJAJA Manué es médico y te receta Solteril 400 mg.

Las caras de Sandra Barneda viendo esa discusión y lo que se decían valían oro puro. Sandra Barneda tiene una cámara en Gringotts llena de oro a base de vender miradas.

Manué, como anfitrión, decidía si Isaac se quedaba en la isla o no. «Yo lo voy a dejar aquí para ver si muestra lo canalla y lo sinvergüenza que es», dijo Manué.

Isaac trató de darle la mano de nuevo a Manué y Manué volvió a dejársela en el aire. Isaac se la dio a Barneda un poco por darle la mano a alguien. Llega a estar ahí el capitán Garfio y le da la mano igual.

«Eres feo», le dijo Manué a Isaac cuando se iba. JAJAJAJAJAJA Es como enfadarte con Pau Gasol y tratar de insultarle llamándole bajito.

Cambiamos de tercio. Óscar llevó a la casa la noticia de que Andrea había tenido algo fuera de la casa con Manué, estando ya ella con su novio.

¿Pasó algo entre vosotros?», le preguntó Sandra a Manué, con Andrea y el resto delante. Y Manué están caballero que en lugar de decir que no, se quedó callado, como asintiendo.

Andrea negó que pasara algo, dijo que Manué intentó dormir con ella y le echó, pero que «tonteó» con él «porque le parece atractivo». UF.

Pablo y Maika.

Maika le dijo que había estado «muy enamorada de Pablo hasta niveles tóxicos, de querer abarcarlo todo». Había gente limpiando en Chernóbil con menos toxicidad que Maika enamorada.

«Yo te quiero y eso creo que no va a cambiar nunca», le dijo Pablo a Maika de una manera tierna que se lo dice un Teletubbie a Bob Esponja llorando los dos y es menos tierno.

«Tú tienes tu novio y yo no quiero historias y por eso pongo distancia, porque no quiero confundirme yo ni liarte a ti y darte por culo», dijo Pablo. Joder, ese «dar por culo» era muy ambiguo en este escenario.

Por otro lado, Gonzalo está a saco a por Maika. El muy flipao se ríe cada dos por tres cuando Maika le dice que ya no está por él. El ego de este muchacho extiende cheques que Gonzalo no puede pagar. Es que va a acabar en la cárce por estafa fiscal por las cosas que hace su ego.

«Fui contigo porque me transmitiste algo diferente, pero como era todo una puta farsa me desenamoré«, le dijo Maika, para mi gusto demasiado conciliadora y paciente. Habría preferido una conversación como las que tenía Rambo con los vietnamitas.

«¿Y por qué me dijiste que te gustaba, que no sentías eso por nadie…?.«, se preguntaba Maika. A ver, Maika, hija… bueno, no le digo nada que un poco más adelante se dio cuenta ella sola.

«¿Quién es el que ponía corazoncitos y prrruuuuu?», reveló Maika de los mensajes que le mandaba Gonzalo, que además de un moñas es todo un poeta.

– Puuuuur puuuuuuur, corazoncito, corazoncito…

– No sé, Neruda, antes te currabas más los poemas.

Y así.

«Yo porque soy buena, pero otra te manda a tomar por culo», le dijo la rubia. Exactamente, es que alguna con la más minima malicia y/o amor propio se acerca a Gonzalo sólo para asegurarse de que el escupitajo le da en la cara.

«Algo tendré si me hablas así», dijo chulo Gonzalo.

«Que eres gilipollas»,respondió Maika.

ZASCAAAA

JODER, SE OYÓ LA HOSTIA EN JAPÓN.

«¿Y por qué me buscas? Si yo no te doy bola. No estás conmigo porque no he querido», dijo Gonzalo. Gonzalo, amor, no te busca. Te estaba intentando perdonar la vida, pero es que a ti te va a preguntar el de la gasolinera que si diesel o 95 y te piensas que se te está insinuando. Gonzalo se piensa que la Mona Lisa estaba por él porque le miraba fijamente. Bueno, eso sería si Gonzalo hubiera entrado alguna vez en un museo.

«Le vendes la moto a las tías para follar, pero luego empiezas con las excusas«, acabó por dilucidar Maika. ¡ALELUYA, HERMANA!

Tantos tíos majos (como Pablo) que dicen te quiero (como Pablo) de verdad (como Pablo) y algunas muchachas acaban con los mentirosos pagados de sí mismos (como Gonzalo, a juzgar por lo visto en La última tentación).

MAIKA REINA DE ESPAÑA

Gonzalo ha quedado a la altura del betún. Es más, el betún estaba un día tumbado y notaba algo que le hacía daño en la espalda y resultó que era Gonzalo que estaba debajo.

El caso es que la pobre Maika se quedó hecha polvo por haberse tragado las mentiras, darle la deferencia a Gonzalo de tratarle bien y que encima él fuese de chulo y seductor.

«Si él hubiera sido claro y me hubiera dicho ‘quiero esto y ya’, pero no me dijo eso«, se quejaba la pobre Maika. Ay, la de veces que ha pasado eso y la de veces que pasará.

Y OJO, EN PLATÓ APARECIÓ INMA CAMPANO

Iba en calidad de testigo.

La muchacha dijo que estuvo en Ibiza con Andrea y Manué que «para ella» hubo infidelidad, lo que se tradujo en «un beso y tonteo» y todo eso lo vio «de reojo», por lo que no vio «si había lengua o no».  La verdad es que como testigo Inma deja mucho que desear.

Inma vio una vez un robo.

– Y había allí una cosa y vino alguien y luego la cosa ya no estaba, señoría.

– …

– Señoría, ¿por qué se está usted pegando con el mazo en la cabeza? ¿Señoría? ¡¡SEÑORÍA!!

Y así.

Pero está segura de que no pasaron la noche juntos.

Y llegó la salidita de tono. La psicóloga del programa estaba contando que una vez leyó un estudio sobre qué consideraba la gente como infidelidad y qué no. «Un beso de pico sí es infidelidad, pero no computa si es un pico con un ex», dijo.

Y ahí saltó Matamoros: «Yo me había confundido con lo del beso con… puta«, dijo. Buah, qué descojone, me parto, me troncho, me rompo, se me abren las carnes del pecho de la risa. NO. Para que ese comentario no estuviera fuera de lugar le faltaba un puro, coñac y unos amigotes.

Y vimos el primer vídeo que Christofer va a ver en el próximo programa. Era Fani en la mesa, comiendo, hablando con Julián de buen rollo y diciendo «al final nos liamos» y «es que yo soy muy cariñosa» y luego al muchacho dándole besos en el culo en la frentecita, Fani pasando la manita por los abdominales del muchacho del pelo blanco anciana… Fani haciendo cosas de Fani.

Y claro, vimos la reacción de Christofer a esas imágenes. Muy contento él. «Pero tú, chica, en qué mundo vives. De esta chica no quiero saber nada, tengo un límite, estas cosas no las aguanto. Que siga zorreando, estoy hasta los cojones», dijo Christofer cabreado como un mono sin plátanos.

En paralelo, Fani lloró en su villa porque sonó la luz de la tentación y ella se disgustó por si había sido Christofer el infractor. JAJAJAJAJAJAJAJA Fani es el perro del hortelano en versión cuernos. El perro del hortelano, que pone cuernos, pero poner no deja.

Y por mí se acabó lo que se daba.

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