El primitivo hacer de las parejas y los ridículos rituales de apareamiento, al descubierto en ‘La isla de las tentaciones’

Pocas cosas hay más ridículas que ver a una persona tratando de ligar. Y más cuando se hace con cortejos más pasados que un bocadillo de 1974. Y ese es el caso, sobre todo, de los varones de La isla de las tentaciones, que tienen unas frases que le parecerían rancias a José Luis López Vázquez.

Y no sólo eso, está el lenguaje corporal, que básicamente dice: «Mira mis músculos. ¿Has mirado ya mis músculos? Me paso el día rodeado de otros tíos sudando, joder, mira mis músculos». Y así.

Total, que yo, que no tengo músculos más que para para no cagarme en los desfiles, os pido que… ¡ME SIGÁIS EN REDES! Incluso que me sigáis en Instagram: @GusHernandezGH | Twitter: @realityblogshow | Facebook: Gus Superviviente Hernández.

Vamos con el resumen. La primera noche tras la separación tanto los novios como las novias estaban muy tristes. Ah, no, que estaban todos de juerga que parecía que se habían separado de un callo del pie en lugar de sus parejas.

«Me he dado cuenta del buen fili que tengo con Rubén«, dijo Fani, a la que las cosas guays le parecen bericul y tumás fasion.

Y Rubén, que está en un plan que parece el cazador de Jumanji, no pierde comba para lanzarle tejos a Fani, que el muchacho lanza tanto tejo que te techa un chalet en quince minutos.

«Fiama es una chica diez y…» estaba diciendo Fani cuando él la interrumpió para decir «no, una chica diez eres tú». Bien jugado, Rubén. ¿Oís eso? ¿Ese clin, clin? Son las fichas de Rubén le mete a Fani. Este hombre es como un chino con una tragaperras.

«Cuando Rubén [¿he comentado que Rubén es un maromo que se pone al lado de Khal Drogo y el Khal Drogo parece un funko?] me da ese cariño y me hace reír me siento súper bien«, dijo la muchacha.

«Si yo fuera Christofer no sentiría celos por él, todo lo contrario, tendría que estar agradecido de que cuiden a su chica«, dijo de su actual novio. JA JA JA Claro, todo lo contrario, si yo fuera Christofer me acercaría a la farmacia a por condones y lubricante del 15 por si no tienen. Que no le falte de ná al que cuida de tu chica.

En su fiesta, Christofer practicaba para un casting que creo que quiere hacer para una campaña sobre abandono de animales. Se movía por entre las chicas con cara de pesadumbre. Se encuentra con Marco y Amedio y le consuelan ellos a él.

Vamos con Gonzalo. Si alguna vez habéis perdido la autoestima, la tenía él. «La casa sin mi estaría perdida», dijo el chaval sin sonrojarse siquiera. Australia se quema porque no tiene a Gonzalo. La culpa es de los putos koalas por no invitarle a sus fiestas.

¿Quién de vosotros ha tenido relaciones sexuales en público, que os vean?, preguntó una «¿La policía cuenta?», respondió él. Alguien le hizo algo malo con una porra, creo.

De vuelta en Villa Montaña, donde están las novias, Andrea dijo que no se enteró de nada de lo que hicieron las demás porque sólo estuvo hablando con Óscar.

Hoy, en frases para ligar, Óscar: «Te he visto y he dicho, hostia, esta chica sí me interesa a mí», como el que está pidiendo presupuestos para cambiar la bañera por plato de ducha. Es un romántico.

– Óscar, ¿me quieres?

– Una vez valorada la relación calidad-precio y los elementos accesorios, así como la rentabilidad y amortización a plazo variable, sí.

Es un romántico.

Otro que también tiene el don de la palabra, que si le llega a conocer Quevedo le copia versos, es Julián, que pretende a Fiama. Él le dijo que había conectado con ella. Conectado. Fuera de todo, conectado. Conectado. No es una errata, es que se repite que le oyes y no sabes si reiniciarle porque se ha quedado pillado. Conectar… ah, qué bonito. Para Julián poner a cargar el móvil es una historia de amor.

Jose, el maromo de Adelina y novio pretendido, para que os hagáis una idea, ese ese muchacho que ocupa lo que dos, conocía a la mitad de las muchachas pretendientas, de discotecas, por Instagram… Joder, Jose es la persona más sociable del planeta, conoce al 97% de la población femenina. Justin Bieber se pone pesado para que Jose le etiquete en sus fotos a ver si liga.

El caso es que por lo menos había tres a las que les había hecho el cuestionario ese que les hace a las chicas, como si les pasara la ITV. Es como un testigo de Jehová del ligoteo. Con esa dispersión no es que haya ligado más que Julio Iglesias, es que Julio Iglesias es su hijo.

«Me he quemado, me ha salido un herpes… creo que la isla no me está aceptando», dijo Jose. Que no te está aceptando en la solicitud de Facebook, que seguro que le estás metiendo ficha a Costa Rica.

– Doctor, estaba paseando por el Teide, me he ido a abrochar los zapatos y un camello con gonorrea me ha copulado.

– La isla no le acepta. Salga de mi consulta.

Y así.

En general los chicos novios son una panda de blanditos, que el segundo día estaban ya llorando porque no estaban con sus novias. He visto siameses con órganos compartidos con menos pena al separarse. De verdad, que se va su novia a cagar y hasta que no oyen la cadena están en la congoja por si no vuelven.

«A mí me da mucha pena… la pena«, dijo Susana. A tomar por culo. Y la alegría le da alegría y la alergia le da alergia.

El vocabulario, acudiendo a la mente de Susana cuando va a construir una frase:

Y llegaron las primeras citas.

Fue empezar las citas y las novias se fueron con sus maromos a la playa. Éstos las cogieron y las metieron en el agua que no sabías si estaban teniendo citas o descargando fardos de hachís.

Los chicos se fueron con sus zagalas a conducir unos cochecillos como de golf, pero dopados. Christofer salió muy contento, porque «Jenni en el aspecto de la conducción se parece mucho a Fani».

– Me recuerdas mucho a mi abuela.

– ¿Por el cariño que te doy?

– No, porque no esperas a llegar a 3.000 revoluciones para cambiar de marcha.

Más romanticismo.

Andreína, una de las pretendientas, se fue con Ismael y le tocaba todo el rato. Ismael se apartaba como si le estuviera tocando un zombi con las uñas sucias. «Eso es porque tiene miedo de que algo suceda en él», dijo Andreína. Algo = erección.

Y yéndonos al otro extremo estaban Óscar y Andrea. Él se puso a darle crema a ella y creo que le dio crema hasta por dentro de los intestinos. Qué forma de sobar. Que le dio crema hasta por donde Andrea se llegaba sola.

Gonzalo y Katerina se fueron a una cama balinesa. La muchacha se quitó el pareo y Gonzalo la miraba como Paquirrín mira el carrito de los postres. En un alarde de metáfora erótica, ella preguntó: «¿Te gustan los cocos?». Y el dijo que dependía de cuales.

¿¿CUÁLES?? ¡¡¡LOS DUROS Y PELUDOS, NO TE JODE!!!

Antonio, por su parte, habla con Susana, su pretendida, como si estuviera tratando de vendérsela a sí misma. Es un comercial del amor. Aburría a Susana que la muchacha si lo sabe se lleva a la cita a un registrador de la propiedad que le leyera el temario de las oposiciones.

Lo de Fani es un cachondeo. Nada más llegar le dijo a Rubén: «Mi biquini va a juego con tu bañador» y para tal afirmación se señaló el culo. No pegaba el bañador con el biquini una mierda, pero Fani tiene culo y quiere que se sepa.

«Cuando una mujer se encuentra a un hombre como Rubén, que es alto, guapo, atento, divertido, se siente protegida», dijo la muchacha. Leamos entre líneas…

Cuando una mujer MELOFO se encuentra a un hombre MELOFO como Rubén, MELOFO que es alto, MELOFO guapo, MELOFO atento, divertido MELOFO MAZO, se siente protegida LO DEJO SECO.

En la segunda fiesta nocturna en uno y otro lado todos hablaban de lo mismo. Del amor, de las parejas, de las relaciones. Joder. 48 horas así. A mi me meten esa isla y a las seis horas hablando de eso me interno en el mar hasta que se me empiecen a comer los peces abisales.

Susana dijo de Gonzalo: «Lloré en la primera prueba porque me daba miedo de que quedara como un imbécil«. Hay miedos infundados, como el del hombre del saco y luego los hay fundados.

Y apareció en la villa de los chicos Mónica Naranjo. Les dijo, básicamente, que estaban siendo unos sosos que no se relacionaban. Y les dejó una tablet con lo que estaban haciendo sus parejas. «Espero que esto os haga reflexionar sobre cómo vivir ésta experiencia», les dijo y se piró.

JAJAJAJAJAJA

El vídeo era la mayor incitación a la infidelidad desde las orgías romanas. Era una sucesión de imágenes de sus novias bailando con los chicos, riéndose, abrazos, roneo… Sólo faltaba un letrero sobreimpreso que pusiera: «SE LAS ESTÁN TIRANDO».

«Me revienta que se ría con los putos neandertales«, saltó Álex, que es licenciado en seis carreras, inventó la filosofía y está a punto de resolver los enigmas de la física cuántica.

«No hay necesidad de ir todo el día sin camiseta«, dijo Ismael de los maromos del otro lado. JA JA JA le preocupan los melanomas, fijo.

Andrea está en otro nivel. «Me acerqué a Julian para darle celos a Óscar«. JA JA JA JA Y funcionó, hubo choque de gorilas. «Gurf, gurf, mi cita, no robar, gñé», y así.

De vuelta a la casa de los novios, las pretendientas lo dieron todo con el twerking. Era como si hubiera una plaga de lombrices y estuvieran tratando de expulsarlas centrifugando el culo.

Y llegaron las primeras eliminaciones. «La que no haya provocado… esa chispa en ninguno será eliminada«, les dijo Mónica. Chispa = poner tó burro.

El caso es que Mónica les dio un minuto para decidir «cual de estas solteras se marcha de Villa Playa«.

«Qué fuerte, tía… ¿y a dónde se va?», preguntó Andrea, una de las solteras. A un gulag ruso, mujer, si esos sitios se llenan con solteras rechazadas, critaturita. «¿Pero y se va a España?», insitió Andrea, que no entiende bien el concepto «ida y vuelta».

Y eliminaron a Melani. La que tenía broncas con Álex, porque eran exnovios.

Y se repitió ritual en el lado de las chicas, que tenían que largar a un soltero.

«Llorar no es una muestra de debilidad, al revés, es una muestra de valentía», les dijo Mónica. Eso, te pillas un cojón con la cremallera y te pones a ser valiente.

Total, que se fue a la calle un tal Bryan, al que no conocían ni en su casa a la hora de comer.

Y después llegó lo gordo. Mónica les dijo lo que Torquemada les decía a los novicios en la Inquisición: «Bienvenidos a vuestra primera hoguera».

He visto desprecios grandes, muy grandes y luego el que Fani le hizo a Christofer, diciendo que si se liara con una chica, en España ésta le dejaría al enterarse que «su futuro es ser teleoperador«. Ella, cuyo futuro es ser la primera mujer en pisar Marte y encontrar la cura para el cáncer.

El primero en ponerle vídeos fue Christofer. Vídeo de Fani hablando de Rubén como si fuera la quintaesencia de los varones. Los compañeros, lejos de apoyarle y bravucones sin saber lo que se les venía a ellos, se reían.

«¿Te incomodan estas imágenes, Christian?«, le dijo Mónica Naranjo, metiendo el dedo en la llaga. Hasta el codo metía el dedo. «Hay más, Chistofer», le decía poniendo voz de «te vas a cagar hasta el hígado».

Al muchacho ver a Fani ronear con el maromo le sentó a cuerno quemado. Seguramente porque Gonzalo y Álex se estaban descojonando detrás. Eso son amigos. Y acabó llorando el chiquirritín.

Y turno de Gonzalo. Estaba tan seguro de sí mismo que eligió ver las imágenes él solo. Básicamente, Susana no hacía nada. Era sosa como una croqueta desnatada. Y cuando vio que Susana elegía como favorito a Lewis sólo acertó a decir «pobrecito, muy agraciado no es». Ego. Ego everywere. La hostia va a ser de aúpa.

Álex fue el siguiente. Las quiso ver él solo. Lo primero que vio es a su chica dándole la mano a otro. Y ya. Para él ya era un trauma gordo. Madre de Dios, qué tara.

Turno de José. Adelina es sosa. José se puso encendío viendo a su chica en la tablet. «Es que está muy guapa», dijo. No se la sacó y se la peló ahí mismo porque habría salpicado a Ismael, que estaba delante.

Y vamos con Ismael. Lo de Fiama era un canteo tirando a un pasote que te cagas. Y además vio el vídeo de la cremita, en el que la untaban como a una tostada. «A partir de ahora mi actitud va a cambiar bastante«, dijo Ismael, que parecía Kim Jon-un amenazando con un misil en la mano.

Y llegaron ellas. Pero eso ya lo dejaron para la siguiente semana. TACHAAAAAN.

 

 

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