Quién fue… Helmut Schön: el entrenador que lideró a Alemania para ser campeona del mundo en 1974

Helmut Schön (WIKIPEDIA).

Hace unas semanas murió Franz Beckenbauer, y se me ha ocurrido hablar del entrenador que lo dirigió para que fuera campeón del mundo en 1974: Helmut Schön.

El 15 de septiembre de 1915 nacía en Dresden, Alemania, Helmut Schön. Empezó a jugar al fútbol como delantero en el Dresdner SC de su ciudad natal.

En 1936 debutó con la selección alemana. Durante la Segunda Guerra Mundial, Schön se libró de acudir al frente debido a su posición como futbolista. Las autoridades alegaron que estaba lesionado de una rodilla, para eximirle. Además, un directivo del Dresdner era alto cargo nazi, y logró que sus jugadores quedaran eximidos. Helmut Schön nunca se afilió al NSDAP.

Una vez acabada la guerra y tras haber sobrevivido al bombardeo de Dresden, Schön jugó un año cedido en el St. Pauli, y en 1947 regresó al Dresdner, donde estuvo hasta 1950, año en que fichó por el Hertha de Berlín, donde se retiró en 1951.

En 1952 adoptó su primer cargo como entrenador: seleccionador nacional del Sarre (Saarland), que por aquel entonces tenía selección de fútbol, porque era un estado independiente. No logró clasificarla para el Mundial de 1954 y poco después la selección del Sarre se integró en la Federación Alemana. Schön se convirtió en ayudante del seleccionador alemán, Sepp Herberger.

Tras ocho años en este puesto, que además incluía el de seleccionador sub-21 y que le llevó a los Mundiales de 1958 y de 1962, en 1964 se hizo con el cargo de seleccionador nacional absoluto de la República Federal Alemana.

Gerd Müller, Franz Beckenbauer y Helmut Schön, tras ganar el Mundial del 74 (WIKIPEDIA).

Fue él quien hizo debutar en la Mannschaft a Franz Beckenbauer, y en su primera gran cita, el Mundial de Inglaterra de 1966, llevó a la selección alemana a la final. Cuatro años después, en México, Alemania fue tercera, y en 1972, Schön logró su primer título como entrenador: la Eurocopa, después de que la RFA batiera a la Unión Soviética en la final.

Pero el gran logro de Schön llegó en el Mundial de 1974, que además se celebraba en Alemania. Liderados por Beckenbauer y con un equipo de ensueño con Maier, Breitner, Müller, Netzer, Hölzenbein o Vogts, entre muchos otros, la RFA derrotó en la final a la Holanda de Johan Cruyff y se hizo con su segundo Mundial.

Aquella casi invencible Alemania se quedó a las puertas de hacer un combo Eurocopa-Mundial-Eurocopa, porque en la cita europea de 1976 acabó perdiendo en los penaltis contra la Chechoslovaquia de Antonin Panenka y su famosa pena máxima en la tanda. El último gran torneo de Helmut Schön como seleccionador fue el Mundial de Argentina 78, en el que los teutones se quedaron en la segunda ronda. Poco después, fue despedido.

Schön no volvió a entrenar y se jubiló, instalándose en Wiesbaden. En la década de los 90, a Schön se le diagnosticó la enfermedad de Alzheimer, y murió en una residencia de Wiesbaden el 23 de febrero de 1996, a los 80 años de edad.

Aún hoy se considera a Helmut Schön como uno de los más grandes seleccionadores de todos los tiempos. Ostenta el récord de partidos dirigidos en Mundiales (25) y más victorias en ellos (16). Fue condecorado por el gobierno federal alemán y por la FIFA. Está en el Salón de la Fama del fútbol alemán, tiene una calle en Dresde y un busto en Wiesbaden.

Espero que os haya gustado el artículo. Nos leemos la semana que viene.

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