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Entradas etiquetadas como ‘extranjero’

La saturación a la hora de renovar el DNI en Madrid

Por Raúl de Juan

Una cola en una comisaría para renovar el DNI (Archivo).

Una cola en una comisaría para renovar el DNI (Archivo).

Si tratas solicitar cita previa para renovar u obtener el DNI o pasaporte en las comisarías de Madrid comprobarás que ya no te la dan por saturación y si te la dan es para más de mes y medio.

A los funcionarios les da igual la urgencia que tengas (un viaje al extranjero, inscribir un nacimiento en el Registro, matricularte en la Universidad, selectividad…), es tu problema. No te dan más solución que recorrer mendigando por las comisarías de la región, o hacer cola desde las 5 de la mañana para coger uno de los pocos números que dan sin cita en alguna.

He visto una comisaría llena de gente y funcionarios fumando en la puerta, e incluso trabajadores yéndose hasta que le tocase la siguiente cita, en lugar de atender a otra persona, y aguantado la soberbia y desprecio de la supervisora.

Me temo que la privatización es la única solución.

 

Los continuos problemas con los consulados españoles (como el de Houston)

Consulado de España en Houston.

Sede del Consulado de España en Houston (Texas). (GOOGLE MAPS)

Por Elisabet Purcalla

El Consulado General de España en Houston ya no recibe llamadas. Sí, han oído bien, o quizás no han oído absolutamente nada porque, como dicen en la grabación del buzón de voz, «este consulado ya no puede recibir atención telefónica». Añadimos a esto un horario de atención muy limitado, de lunes a viernes de 9 a 13 h. Las elecciones del 20-D se asomaron a la vuelta de la esquina y el Consulado no nos permitió realizar el cambio de domicilio correspondiente en los registros para poder recibir las papeletas en casa. No hemos de olvidar que una de las funciones de los Consulados es la de ofrecer un servicio y asistir a los ciudadanos del país de origen en lo máximo que se pueda. El Consulado ha de ser un ente facilitador en las tareas que por cuestiones de localización resultan extremadamente tediosas. Tengo 10 emails enviados back and forth durante una semana donde responden pero no resuelven mi problema para realizar un cambio de domicilio, una situación que se podría resolver en una llamada de 5 minutos el mismo día.

Por otro lado, nosotros vivimos en Dallas y el Consulado de España en Houston exige desplazarse en persona hasta allí para el cambio de domicilio. Recordemos que el Consulado se debe a los españoles que vivimos fuera de España para no tener que trasladarnos a nuestro país de origen a realizar los trámites. De todas formas si que nos obligan a realizar un viaje de 4 horas de ida y otras 4 de vuelta en coche. Entonces, ¿qué sentido tiene si igualmente hay que viajar? Se trata de hacer las cosas bien y no de hacer las cosas menos mal. Ojo, que este Consulado también enmarca territorialmente otros estados aparte de Texas como pueden ser Nuevo México, Oklahoma, Luisiana, Arkansas, Tennessee, Alabama y Mississippi.

Para aquellos españoles que no han pisado EE UU, las distancias aquí son muy largas. Un español viviendo en Tulsa (Oklahoma) tiene 8 horas de ida. Peor aún, alguien que vive en Nuevo México tiene 14 horas de viaje hasta Houston (solo de ida) para cambiar su domicilio. Estamos en el siglo XXI: se firman contratos a distancia y se realizan millones de transacciones sin estar en persona. Esta es una situación insostenible a corto y largo plazo. Lo que este cambio de dirección supone es perder al menos un par de días en el viaje. A eso hay que añadirle los gastos del viaje, hotel, días de fiesta a pedir en el trabajo, etc.

Pedí al Consulado que me diera alguna opción como enviar el formulario por carta firmada y sellada, testificar delante de un notario y que este confirme nuestra identidad o lo que se requiera. Incluso les he preguntado si la Cónsul honoraria que vive en Dallas podría hacer algo al respecto como ser testigo y dar fe de que nosotros somos realmente nosotros, los que vamos a cumplimentar el formulario. La señal desde Houston ha sido muy clara: «Señora, deben venir en persona«.

Quiero recordar a los lectores que la presencia de empresas españolas en Dallas es muy relevante. Compañías como Ferrovial, BBVA, Santander, etc., con un importante número de desplazados desde España. Además de que han llegado a Dallas más de 150 profesores visitantes en 2015. Todos estos datos respaldan la gran comunidad española que vive solamente en Dallas-Fort Worth, ya no hablo de todo Texas.

Y yo me pregunto, ¿no es más lógico que todo este río de españoles no tenga que desplazarse a Houston para un cambio de dirección? Acordémonos que cambiar de dirección es algo bastante frecuente, sobre todo si estamos temporalmente en el país. Este viaje fácilmente tendríamos que hacerlo cada año. Hay que tener en mente que el objetivo de todo esto es facilitar el papeleo y evitarnos los traslados, que ya suficientes viajes nos hemos de pegar para ir a España.

Por último, acabo con una cita del ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, que ha instado a los nuevos diplomáticos a defender en el exterior los intereses de España con «patriotismo» y «sin pasteleos”, además de «con tenacidad, firmeza y trabajo«. Si esto fuera real no nos encontraríamos ahora en esta situación. Ya no quiero pedir un cambio de dirección, lo que pido es que cambien los requisitos en el propio Consulado General de España en Houston como mínimo, en este caso, para poder ejercer nuestro derecho al voto.

¿Dónde ha quedado mi derecho de voto?

Por J. F.

El próximo día 27 de septiembre los catalanes pasan a las urnas para elegir un parlamento regional. Siendo español empadronado en Terrassa viviendo en Francia, inscrito en el CERA (Centro Electoral de Residentes Ausentes) en el Consulado General de España en Perpiñán, tengo derecho a voto. En las últimas elecciones al Parlamento Europeo recibí la documentación para votar por correo 3 días más tarde de la fecha límite para enviar mi voto por correo postal. Así que no pude ejercer mi derecho a voto.

El pasado 7 de agosto recibí por correo postal la documentación para la solicitud de voto a las elecciones del Parlamento de Cataluña. Para acelerar los trámites lo hice por internet el día 8. Inscripción efectuada, el justificante de la inscripción por internet me fue entregada también por la red. Viendo que el tiempo pasa y no recibo nada me pongo en contacto con el centro electoral; me dicen que la documentación ha sido enviada a los residentes en el extranjero a partir del día 1 de septiembre. Quedan 10 días para las elecciones y todavía no he recibido la documentación para dicho voto. En el Consulado me han dicho que no saben nada, que las documentaciones fueron enviadas desde el 1.

Cierto, quedan todavía 9 o 10 días, pero me da el presentimiento que no podré ejercer mi voto como ocurrió para las elecciones europeas. Si es así es una vergüenza privar de voto a residentes en otros países. No quiero ni me gustaría pensar que es una maniobra política, pero tengo ese presentimiento.

(Pau Cortina / ACN)

(Pau Cortina / ACN)

Es cierto que los votos de residentes en el extranjero pueden influir en los resultados finales y con ello estropear los planes de ciertos politicuchos. Si yo fuera simplemente un caso aislado no tendría influencia en los resultados, pero si se trata de miles de personas en este mismo caso se tendrían que denunciar esas irregularidades ante los medios de comunicación. Entre tanto quedo a la espera de esa documentación con la esperanza de poder ejercer mi derecho a voto.

Se han olvidado de una promoción entera de enfermeros

Por Ana Mª García González

¿Se acuerda de aquella alumna o alumno de enfermería que se encontró en el hospital? Estoy segura de que sí. Aproximadamente 400 personas nos graduaremos este año en Galicia como profesionales de enfermería. Después de 4 años de preparación, ¿qué opciones tenemos?, ¿qué futuro nos espera? Yo les explico:

En primer lugar nos graduamos tarde, muy tarde. Las facultades no se han adaptado a los tiempos que corren, en especial la mía. El 3 de julio nos darán el título, es decir, a partir de esa fecha podremos ejercer. En qué se traduce eso, en que las vacantes de verano en las instituciones privadas estarán cogidas, así que, mal vamos.

Imagen de archivo de una enfermera poniéndole una inyección a un anciano. (ARCHIVO)

Imagen de archivo de una enfermera poniéndole una inyección a un anciano. (ARCHIVO)

A las oposiciones del Sergas de 2015 no nos podemos presentar. Por un mes de plazo nos hemos quedado fuera. ¿Se pueden imaginar la cara que se nos ha quedado? Facultades de enfermería, instituciones sindicales y el propio Sergas se han olvidado de toda una promoción a la cual han formado. Así que lo de trabajar en el Sergas vamos a descartarlo hasta dentro de unos cuantos años.

Otra elección, preparar la especialidad de enfermería, conocido como EIR. Este año 2015 se han convocado para toda España 959 plazas para aproximadamente 13.000 aspirantes. Sí han leído bien: 13.000 aspirantes. Pero no acaba aquí la cosa, ¿sabía usted que existen seis especialidades y la única que en Galicia tiene lista de contratación es la de matrona? A usted no se le pasa por la cabeza que un cirujano cardíaco le opere de un riñón, a mí tampoco. ¿Por qué no avanza la profesión enfermera en este aspecto?

Como última opción tenemos irnos al extranjero. Hace poco en la facultad nos ofrecieron buenas condiciones de trabajo para Inglaterra y a sabiendas de que no va a ser fácil, muchos de mis compañeros van a emigrar y les puedo asegurar que si esto no mejora, no volverán.

La profesión de enfermería se fundamenta en una buena base de conocimientos y práctica, mucha práctica. El contacto con el paciente es fundamental y si nos apartamos durante años de ellos, todo el esfuerzo realizado hasta ahora se perderá.

¿Usted quiere ponerse en manos de una enfermera que lleva un par de años sin ejercer y que cuando lo haga será durante exclusivamente en verano? Ahora mismo puede pensar ¿y a mí qué me importa?, no va conmigo.

Reflexione: la enfermera es el profesional de la salud que más tiempo pasa con los pacientes y los cuidados que usted o su familia necesiten, está en nuestras manos. En un futuro nos va a exigir una atención de calidad, yo le pido ahora que nos ayude a hacernos escuchar.

Los residentes en el extranjero queremos votar pero nos lo ponen difícil

Por Sara del Barrio

Como española residente en Ámsterdam (Holanda) no me lo ponen fácil para votar. Votar es un derecho, pero el sistema electoral para emigrantes está lleno de obstáculos que muchas veces impiden que podamos ejercerlo.

Colas en un instituto para votar. (ACN)

Colas en un instituto para votar. (ACN)

Uno de los problemas más habituales es simplemente que las papeletas no llegan a tiempo. A pesar de tener que tramitar una absurda cantidad de papeleo para poder ejercer el voto, ya que, aunque estés registrado en el consulado y en el CERA como residente permanente, debes expresar formalmente tu deseo de votar, el sistema a veces no te lo permite.

Papeletas con retraso, errores en el censo, plazos inalcanzables, desinformación sobre el proceso… Son algunas de las razones por las que la abstención de los expatriados llegó a un 95% en las pasadas elecciones generales.

Los expatriados no paramos de aumentar así que espero que nos tengan en cuenta para las próximas elecciones. Estoy que segura de que muchos como yo queremos votar, pero a veces no nos dejan. Un derecho no se ruega.

Obligado a declarar las pensiones extranjeras no sujetas a IRPF

Por Rafael Rodríguez Rodríguez

Cuando recibí mis datos fiscales del año 2013, la Agencia Tributaria me envió una hoja adjunta en la que me comunicaba que tendría que declarar una pensión de 1.200 euros anuales que cobro de la Seguridad Social francesa. Por este motivo presenté una declaración complementaria en junio de 2014.

A día de hoy recibo una nueva comunicación (sin fecha ni certificada) de la citada agencia en la que me informa que tengo de plazo hasta el 30 de junio de 2015 para regularizar esta situación de los años anteriores.

Declaración de la Renta (JORGE PARIS)

Declaración de la Renta (JORGE PARIS)

A lo largo de los años todos los españoles que hemos trabajado en el extranjero hemos recibido informaciones de diferentes asesores de que estas pensiones públicas no estaban sujetas a IRPF en España. Ahora, y con su afán recaudatorio, el señor Montoro hace oídos sordos a todo lo anterior y nos obliga a declarar y, para más inri, con carácter retroactivo por estas pensiones.

Quiero avisar a todos los pensionistas que se encuentren en esta situación de cómo los responsables de la Agencia Tributaria, al igual que su jefe, son tan sibilinos que no aclaran en su comunicación qué años son los que se ven obligados a ser regularizados. Porque cuanto más nos quiten, mejor. Que deben tener en cuenta que la prescripción para la declaración de estas pensiones es de cuatro años, a contar desde la fecha de declaración efectuada sin incluir estas pensiones. Es decir, que en el año 2015 (declaración del 2014) ya no pueden reclamarles y, por tanto, solo deben incluirlas en la regularización las pensiones recibidas desde el año 2010 puesto que las anteriores ya han prescrito.

A mí se me caería la cara de vergüenza hacer esta reclamación a un jubilado de 73 años como yo que ha percibido una pensión pública de 1.200 euros anuales del extranjero.

¿Por qué no se dedican a perseguir a los verdaderos defraudadores de cantidades millonarias? Pues tenemos a cientos en este país. Deseo de corazón que en las próximas elecciones, tanto municipales como generales, se den el mayor batacazo de la historia, que es lo que de verdad se están ganando a pulso.

No me digáis que me vaya al extranjero

Jóvenes universitarios. (ARCHIVO)

Jóvenes universitarios. (ARCHIVO)

Por Carlota Poveda,

No es ninguna novedad que muchos jóvenes tengan que marcharse al extranjero en busca de oportunidades que aquí son inexistentes.

También somos conocedores de la situación actual, tanto laboral como económica, en nuestro país. De las cifras de desempleo, de los sueldos base y de los recortes en educación.

Aún así, no puedo quejarme. Actualmente tengo trabajo como becaria en una importante empresa. Allí estoy aprendiendo y ganando una experiencia única para mejorar mi formación. Además, ¡cobro! Algo insólito en el mundo de los becarios.

Por otro lado, trabajo de camarera los fines de semana para, con ambos sueldos, poder pagarme los estudios. Aún así, cruzo los dedos deseando que al terminar mis prácticas, pueda quedarme en la empresa en la que estoy. Me da miedo encontrarme con una mano delate y otra detrás. Con un grado, un máster y un par de títulos de inglés pero con una mano delante y otra detrás.

Muchos me dicen que no me preocupe. Que si me quedo sin trabajo puedo aprovechar para irme al extranjero a aprender algún idioma o en busca de oportunidades.

Me insisten en que no deje escapar la oportunidad y me aseguran que si no lo hago, me arrepentiré. Y yo les pregunto, ¿me pagáis la aventura?, ¿Realmente creéis que, en el contexto actual, el mejor consejo que le podéis dar a un joven es que se vaya a otro país?

Profesores, amigos, conocidos, familiares… No me lo digáis más. Por supuesto que quiero, pero dejemos de creer que es algo asumible para todos.

 

 

Perder la prestación por desempleo al salir del país

Por Paula Coto

El pasado diez de junio acudí al INEM a preguntar por lo siguiente. Yo debía salir de España el catorce de junio por vacaciones contratadas con anterioridad a la notificación de mi despido.

Dado que el despido no era efectivo hasta el quince de junio, yo debía solicitar el alta inicial de la prestación por desempleo entre el quince y el treinta de junio conforme a la legislación vigente.

El diez de junio me informaron de que, sin problema, podría solicitarla un representante en mi nombre, junto con la notificación de viaje de treinta días por turismo en el extranjero y los billetes ya adquiridos.

Una fila de personas hacen cola ante una oficina de empleo. (GTRES)

Una fila de personas hacen cola ante una oficina de empleo. (GTRES)

A mi regreso el quince de julio solicité cite previa y el veintidós de julio acudí al INEM (oficina de la calle Acacias en Madrid) a llevarles las tarjetas de embarque y visados que me habían solicitado y me notificaron que mi prestación, me correspondían dos años y la máxima cuantía, se había revocado por haberla solicitado tras mi salida del país por viaje de ocio y me dejaban sin nada.

¿Cómo puedo reclamar ya que ni el diez ni el dieciséis de junio nos informaron de este requisito, sino que los dos funcionarios que me atendieron a mí y a mi representante dijeron que no habría problema y nosotros nos limitamos a seguir las instrucciones que nos indicaron?

Si ha sido una negligencia del funcionario, ¿cómo puedo reclamar mis derechos con éxito y sin coste (nótese que la negligencia ha ocasionado una reducción de mis derechos y potenciales ingresos)? Ya he presentado reclamación, pero se niegan a responsabilizarse de las consecuencias de su error.

Errar es humano, pero rectificar también. Si no lo hacen, ¿de verdad tenemos los ciudadanos que soportar la carga, y el coste, de un funcionario inhumano e ineficaz?

Demenciales problemas para la vacunación

Por Juan Manuel Villas Subias

Este año mi pareja y yo hemos decidido hacer un viaje especial con una ONG y al mismo tiempo aprovechar a visitar uno de los países más pobres del mundo, Nepal. Como somos previsores y no es lo mismo ir a este país que pasar un fin de semana en la playa, llevamos preparando todo lo necesario desde hace tres meses.

Una de las cosas que hay que tener previstas, es el tema de las vacunaciones. Ya tenemos varias puestas, pero nos falta una de ellas, la de las fiebres tifoideas. vacuna

En el centro de vacunación internacional nos dijeron que nos las teníamos que poner un mes antes de comenzar el viaje. Pues bien, tengo una receta que nos facilitó nuestro médico de cabecera, de las NO oficiales, ya que la Seguridad Social no financia ésta en concreto.

Pues bien, ésta mañana he ido a la farmacia para recogerla (ya la tenía encargada desde abril), y nos dice que ya no le sirven la vacuna hasta enero. He llamado a los tres centros de vacunación internacional de Madrid, pero como pronto nos la dan para finales de agosto (salimos el 9). Soluciones en éstos centros, ninguna.

Curiosamente, la telefonista que atiende las llamadas dice que esto pasa todos los años en estas fechas. Realmente, es demencial que esto ocurra, especialmente cuando llevamos tres meses preparando estas cosas y no somos de los habituales que dejan las cosas para el último día.

También es curioso que en el propio centro de vacunación internacional, una vez explicado el problema, no sean capaces de decirme si tienen disponibilidad de vacunas.

Hoy no me conformo con quejarme sólo en casa

Por Patricia Zamora

Hoy es uno de esos días en los que no ves la luz, en los que te sientes ahogado y sobre todo cansado, así que he decidido escribir. Llevo un tiempo renegando de la situación “que nos ha tocado vivir” y creo que esta es una forma de hacer algo. Soy una de tantas que vino a Londres a “buscarse la vida”. Vine supuestamente para unos nueve meses y ya llevo aquí casi dos años. Cuando llegué me topé con la realidad de que no todo es tan fácil como parece. Te das cuenta de que no tienes ni idea de inglés cuando te cuesta pillar el “how are you”, que el dinero es vital para cualquier plan y que Londres no es el sitio más indicado para ahorrar: pero sobre todo, te das cuenta de que no le vas a dar pena a nadie porque todos están igual o peor que tú.

Estoy cansada, agotada. No me quedan fuerzas para luchar por algo que no sabemos si llegará, algo que era nuestro y nos lo han quitado, un futuro decente. Soy periodista y lo más cerca que puedo estar de ejercer mi profesión es trabajando como voluntaria en una radio por Internet en la que hago un programa en español para los españoles de Londres todas las semanas. No sé si llegará a ser algo real, pero al menos no se me olvida que soy periodista Para poder permitirme esto, con 25 años me veo poniendo Big Macs durante ocho horas al día y todo mi patrimonio es un pometrortátil, una bicicleta de segunda mano y unos zapatos “caros” que me compré una vez como capricho. Desde aquí le quiero dar las gracias a todos los que nos han hecho llegar a esta situación a miles de jóvenes y me gustaría saber como tienen el valor de levantarse todos los días sabiendo la situación que estamos viviendo, los jóvenes que están perdiendo, porque lo peor de todo es que la gente viene con ilusión, con ganas de seguir adelante porque no quieren resignarse con “cualquier cosa”. Esta gente no sabe lo que es el amor por el trabajo, solo saben lo que es el señor don dinero, me encantaría que se pararan a pensar lo que le puede llenar a una persona hacer lo que gusta para que sea capaz de hacer el trabajo gratis durante meses. Con esto no digo que quiera su dinero, sus mansiones o todo lo que tengan, se lo pueden meter por donde quieran, digo que quiero una oportunidad, la oportunidad por la que llevo luchando los siete años que hace que empecé la carrera. La oportunidad de hacer que me guste, que me llene y que me permita crecer tanto personal como profesionalmente. Esto es lo que queremos todos y en lugar de poder optar a ello estamos aquí desperdiciado nuestra juventud porque “aquí al menos aprendemos inglés”.

No me considero alguien conformista, por lo que me parece frustrante que muchos se acojan al “y que le vamos a hacer” o al “es lo que nos ha tocado”. No, no podemos aceptar esta lotería. Y muchos te preguntan ¿y por qué no vuelves a España? Porque me da miedo, me horroriza la idea de volver y no tener NADA, de tener que volver a vivir con mi madre y depender de ella como si tuviera 18 otra vez, de dar pasos atrás en mi vida, porque desafortunadamente soy una más, no tengo padrinos ni madrinas en ningún sitio, así que si descartamos los enchufes, poco se puede hacer ahora en España.

Pese a todo, tengo que decir que durante este camino he aprendido muchas cosas y conocido a gente increíble, y que aunque a veces lo veamos todo negro sigo creyendo, o quiero creer, que todo esto merecerá la pena. Si algo me ha dado Londres es seguridad en mi misma y la muestra de que las oportunidades hay que buscarlas, nadie te regala nada. Al menos, de momento, sé que tengo experiencias y un mapa lleno de cruces en el que aún me quedan muchas más que poner, porque al final es lo que cuenta, tener una vida llena de experiencias que te hagan sentir que el sacrificio merece la pena.