De mis pelis favoritas de los ’80, de mis pelis favoritas de Tim Burton y, probablemente, el papel que más me gusta del currículum de Michael Keaton. Beetlejuice (Bitelchús en España) se estrenó el verano de 1988 con un guion apetecible y más que bien desarrollado: un matrimonio de fantasmas (Geena Davis y Alec Baldwin como Barbara y Adam Maitland) contratan a Bitelchús (Keaton), un especialista en espantar mortales, cuando una familia se muda a su hogar.
Después de que los rumores sobre una segunda parte flotaran en el aire durante mucho —demasiado— tiempo, y de que en 2019 pareciera que, de forma casi definitiva, todos tendríamos que renunciar a la idea de que esa segunda parte viera la luz, sucedió el milagro: después de que Michael Keaton y Winona Ryder confirmaran que estarían presentes en ella, Plan B, la productora de Brad Pitt, se ha puesto manos a la obra y este mismo verano planean iniciar el rodaje. Y más le vale (pobrecita) hacerlo bien, porque los fans llevamos más de 30 años esperando este momento, y las expectativas no pueden ser mayores.
Con la perspectiva de esta segunda parte en el horizonte, y solo confirmadas (por el momento al menos) las vueltas de Ryder y Keaton, cabe preguntarse: «¿Cómo están los protagonistas de la entrega original, 34 años después?»