Estaba a punto de cumplir su séptima década en el mundo, pero una mañana de enero de hace cinco años la noticia paralizó al mundo del cine y a millones de fans de todo el planeta: Alan Rickman había fallecido a causa de un cáncer de páncreas.
Ayer fue el aniversario de la despedida del mundo terrenal de uno de los gigantes de la gran pantalla, de alguien que, de verdad, nos regaló momentos como pocos intérpretes pueden hacer. En cada uno de sus papeles emanaba una magia, una especie de halo profundo, que te absorbía, te sumergía en su historia y lo hacía inimitable. Especialmente, cuando le tocaba «no ser el bueno» de la historia.
Hoy desde aquí me gustaría hacerle un pequeño homenaje a uno de mis actores favoritos de todos los tiempos. Estos son, por orden cronológico, mis 10 imprescindibles de Alan Rickman. Y que conste que me ha costado mucho elegir, porque se han quedado fuera papelones. Como todo lo que él hacía.
Romeo y Julieta (1978). Tybalt.
Seguro que muy pocos lo recordáis y menos aún lo habréis visto aquí, pero cómo no voy a ponerlo, si fue su very first rol. Tenía 32 años, y una carrera brillante por delante, aunque él eso aún no lo sabía.
Jungla de Cristal (1988). Hans Gruber
En la peli de acción más mítica de todos los tiempos, una que muchos califican aún hoy, más de 30 años después, como imprescindible para ver en Navidad, Rickman era el delicioso malvado que ponía a Willis a sudar.
Robin Hood: Príncipe de los ladrones (1991). Sheriff de Nottingham.
Pero qué tío más guapo, por la diosa. Os diría que en Jungla de cristal tendría que haber sido McClane y que aquí tendría que haber sido Robin Hood, pero no: el papel de machote heroico mejor para los loosers. A él le pegaba la sibilina inteligencia. «Voy a sacarle el corazón con una cuchara» es una amenaza que digo desde niña gracias a él 🙂
Sentido y sensibilidad (1995). Coronel Brandon.
Porque reunir a Rickman y a Thompson en la misma cinta siempre es una gran idea, y esta fue la primera vez que los vimos compartir pantalla a lo grande. Un par de años después volveríamos a verlos como dos detectives (un detective y una agente del FBI) en El beso de Judas, y ni Mulder y Scully molaban tanto como ellos dos.
Harry Potter (2001-2011). Snape.
Me siento incapaz de hablar de este personaje. Me emociono. En casa somos fans de la saga de libros, y nunca, jamás ni en un millón de años, podríamos habernos imaginado a un Snape mejor que él. Always.
Love Actually (2003). Harry.
Una película británica con un enorme elenco de estrellas patrias como es Love Actually no podía dejar de contar con él. Habría perdido toda la credibilidad. Y ya si lo emparejan con Emma Thompson pues es que no se puede pedir más.
Guía del autoestopista galáctico (2005). Marvin.
Dentro del traje iba Warwick Davis (Willow), pero la voz de Marvin era la de Rickman. Una combinación memorable para los fans de Davis, de Rickman y de la Guía del autoestopista galáctico. ¿Que por qué lo pongo en esta lista si ni siquiera se le ve? Pues porque 42.
El perfume: Historia de un asesino (2006). Richis.
El perfume no solo es uno de mis libros favoritos, sino que siendo una buenísima adaptación a cine también es una de mis películas favoritas y, además, Ben Whishaw (el protagonista) es un actor que me encanta. Tener en ella a Rickman es un regalo.
Sweeney Todd: El barbero diabólico de la calle Fleet (2007). Juez Turpin.
Por favor, si es que Rickman había nacido para vestir outfit victoriano, no me digáis que no.
Alicia (2010 y 2016). Absolem, la oruga azul.
Ahora que sabéis que, en su versión original, la voz de la oruga azul de las pelis de Alicia era la de Alan Rickman, decidme si no es perfecta. Es imposible imaginar a ningún otro tras esa pipa.
Vale, vale, ya… Al final han sido once :/
Joder, se olvidan su mejor papel: en Héroes fuera de órbita. ¡Por el martillo de Grabthar!
15 enero 2021 | 5:57 pm
¡Jamás! xD
15 enero 2021 | 9:34 pm
Qué razón llevas! Buenísimo actor y con esa elegancia que sólo tienen los grandes. Lástima que nos dejara. ¿ Por qué se van tan pronto los mejores?
16 enero 2021 | 12:09 am