Milá, más chula que un ocho con tupé, en la Gala Final.

Si es que vio la mujer que se acababa y se dijo: «yo no me quedo nada dentro, que el cagar y el opinar, hay que echarlo para andar«.

Así es que el último debate… bueno, en primer lugar, manda gónadas que a eso le llamen debate. La mitad de los que acuden a debatir no serían capaces de escribir «argumento», los que más, de marcarlo con un punzón si les dieran una plantilla.

Para muestra un botón: el principal argumento de Omar es: «sobran las palabras«. Con dos ovarios, así se debate muy bien, es como si Rafa Nadal dijera: «sobran las raquetas«. Espero que Rafa Nadal no me demande por la comparación.

En fin, volvamos al tema. Milá se quedó calentita de la gala final, con las intervenciones críticas de los primos, Fran, Luci-Fer, Azahara… y ha estado estos días afilando las uñas que las ve Lobezno y las patillas salen corriendo solas del acojone.

Vamos primero con Lucía. Esta chica el día menos pensado me va a dar hasta pena. En el debate la vi desmejorada y con el pelo como si la acabara de arrastrar un trolebús ocho manzanas. Y aunque es bien cierto que se lo busca, le caen hostias que si le contaran como haber comulgado estaría bendita para los restos.

Le pusieron a la muchacha de las gafas como escaparates del Zara los vídeos en los que se la veía haciendo comentarios poco gratos sobre los vídeos que le pusieron durante la gala. Si se descuida la sacan hasta quejándose de la paella de la cafetería de Telecinco.

«No sé por qué soy siempre la mala de película«, se preguntó. Mujer, Lucía, a ver, que tampoco eres la madre de La Casa de la Pradera y te han cogido manía, es que eres más chula que Lorenzo Lamas en un colchón viscoelástico.

Merces, ya más caliente que la cafetera de Belcebú, le dijo básicamente que para eso había entrado a GH y que ajo y agua y entonces, Lucía, que no sabe porqué siempre es la mala, le dijo a Milá que sí, que pasar al siguiente vídeo.

Si alguna vez tenéis que elegir entre cortar a Milá de mala manera o apretar un botón que pone «misil nuclear», mejor le dáis al botón. Es más seguro.

«Cómo vuelvas a hacerme un desprecio como éste…» empezó Milá, «me voy del plató», terminó Lucía. Más sabe el Luci-Fer por viejo que por Luci-Fer.

Vamos con Fran, alias «paloporelculo». Ya sabéis que en la gala se quejó de que no se le habían sacado los buenos vídeos, sino sólo el 2% y de eso, lo peor. En el debate insistió, diciendo que se le «habían empalmado todo lo malo». Esa frase da para el comienzo de una peli de Nacho Vidal.

«Asume la imagen que has dado, como todos la han asumido, es mucho más sano», le espetó Milá. «He sido la persona conciliadora«, dijo Fran. JA JA JA JA, sí, intentó conciliar la mierda con el cotilleo. Con erótico resultado.

Pero al apoderado, que entró diciendo que él no se había enfadado nunca y joder, se está desquitando, aún le quedaba cacota que soltar para quedarse a gustito como cuando Miley Cirus cuando ve un martillo.

Así que acusó al programa de haber enseñado las caras de sus hijos por televisión. Por cierto, Fran es como Belén Esteban, cuando afirma cierra los ojos. No sé, lo mismo quiere ser el príncipe del pueblo ¿mentiendes?

«Eso-es-mentira», le dijo Milá moviendo la mano como si estuviera haciendo una pajilla. «Tú estás deseando que me cabree contigo y no me voy a enfadar«, le dijo Milá, relajada como un luchador de sumo pisando fuerte en el tatami

Peeeero, Milá aún tenía un par de hostiejas guardadas en la manga. «¿Cuando te ves en las imágenes te das un poco de vergüenza? Porque a mí me dabas», le dijo sobre su acoso a Jonathan a la pequeña Yoli, que tenía una carilla de perrillo abandonado que el año que viene la ponen a protagonizar enero en el calendario de El Refugio.

Y por si eso fuera poco luego fue y le levantó al maromo en directo. Sabéis que en la gala Jonathan y Milá casi salen a hostias, pues de ahí al amor y quien dice amor dice frote corporal que no lo tienes ni con la esponja de los domingos, hubo un paso.

Como el primo tampoco es que vaya a estar nominado al Nobel próximamente le pidió a Milá que le repitiera una pregunta, a lo que Milá reaccionó tirándose al suelo. Jonathan la vio allí, indefensa y se dijo, pues al pilón, y se le echó encima de Milá.

Pero era una trampa, porque Milá le agarró con los brazos a lo planta carnívora y siguió con la entrevista. Yoli miraba aquello con ganas de tirarle de los pelos a los dos. «Mer, Mer, Mercedes, por favor«, dijo el primo cuando se empezó a acojonar y notó que estaba siendo digerido y Milá soltó el abrazo del oso.

Muchos os metéis con ella, pero una cosa os digo: Milá genio y figura y como ella, ninguna.

Y es cierto y me consta, lo que dijo Milá sobre los exconcursantes: «Yo no tengo mal rollo con ninguno, pasado el tiempo«.

Llaman a Alejandra al confe. Dice Milá que se van a enfrentar a sus fantasmas del pasado, a lo que más les ha marcado en Gran Hermano.

JA JA JA JA JA

A Paula le han metido a Omar.

– ¿Qué haces por aquí?, dice Paula.

– Estaba esperando el autobús y llegado aquí.

Están teniendo una conversación de lo más amable…

Es como si se hubieran encontrado en un ascensor. Paula lleva el peso de la conversación. Pero claro, eso lo hace Paula en cualquier conversación. Si hubiera estado con Paula, Zaratustra se habría quedado callado y no habría hablado si así ni asó.

Vídeo de su amorío. De cuando Omar era ese chico agradable que la amaba e iba a estar siempre con ella, cuando se la pelaba cómo estuviera fuera Luci-fer.

Los dos están poniendo cara de póker y no precisamente de cuando llevas buena mano. Es más como si estuvieran jugando al Texas Holdem y se hubieran dado cuenta de que llevan dos sotas, un basto y oros.

«Lo bonito está muy bien. Ahí se queda, Omar…», dice Paula. «Ahora viene lo otro…», añade. «Son cosas que pasan», apunta Omar, que es muy de desarrollar los temas.

Milá ahonda en el tema. Milá pilla a Cristo en la cruz y no se limita a clavarle un poco la lancita en el costado. Se la hinca que tienen que hacer los crucifijos en dos partes.

Omar le adelanta lo que hay fuera y la fama:

«No puedes ni salir a la calle, vas a flipar», le dice.

JA JA JA JA JA JA

LE VAN A AMARGAR LA FINAL A PAULA

Le han metido a Lucía. Ahora sí que ha llegado el frío a la casa de Guadalix.

Veo a Lucía llorar en los vídeos y me acuerdo de cuando pensábamos que era una pobre muchacha abandonada. JA JA JA JA. Luego se le vio el rabo por debajo del vestido.

En la casa Omar discute con Lucía. Ella está haciendo gestitos de los suyos, como de «si no te gusta te jodes».

«Estoy un poco hasta las narices de ver siempre los mismos vídeos», dice Lucifer.

«Es la noche de Paula, Lucía, no la tuya», le dice Milá, haciéndole la rotura del siglo.

Se ponen a discutir Paula y Lucía y Omar intenta mediar. JA JA JA JA Al final va a recibir hostias por todos los lados.

Paula les desea que «vivan su historia juntos, que yo voy a vivir la mía». Traducción: «Sé que voy a ganar y os van a dar por culo».

¡¡¡DESLIZ DE LUCÍA!!! Mañana tenéis doscientas capturas de la entrepierna de Lucía al descubierto. O soy yo o no es muy de usar ropa interior para no gastarla.

YOLI LLEGA AL BOSQUE DE ABETOS DE FUERA DE TELECINCO. Ha llegado en una calesa tirada por trineos y más contenta que un conejo de las nieves con una zanahoria.

La familia de Yoli la recibe en el plató como debió recibir la madrastra a Hansel y Gretel cuando llegaron de nuevo a la casa siguiendo las piedrecitas. JA JA JA

Yoli está nerviosa. Pero no nerviosa de «uy, que nervios», no, nerviosa de he cenado bocata de anfeta con redbull en vena. Le falta la botellita de agua en la mano y que sean las 10 de la mañana en un after.

Milá conecta con la casa. Hostia. HOSTIA.

Lo primero que les ponen es el vídeo del sacrificio, en el que las familias deciden que concentren los votos en Alejandra. «Vimos a Alejandra más fuerte», «tienes que apostar por el caballo ganador», «tienes que ir a ganar», dice la madre de Alejandra en los vídeos.

Alejandra se pone muy contenta.

Milá le pregunta a Yoli si le parece justo «si, si, si, si, si», dice Yoli. Creo que aún no se ha enterado muy bien. A esta chica la dicen que su familia ha decidido arrojarla a un volcán como sacrificio a los dioses para que a Alejandra no le salga celulitis y lo ve bien.

Vídeos de Alejandra. Vemos los vídeos con Vitín, en los que él dijo «pues si con una prima no cuela… pues a ver la otra». Pero tampoco coló.

– Antes entrará Vitín en una prima que un rico en el reino de los cielos, ¿qué le parece, eminencia?

– Na, mejor pon algo de una aguja y un camello.

Vitín entra en la casa. «Te deseo de todo corazón que te lleves esto», le dice Vitín. JA JA JA JA Él sabe que no, que Alejandra no se lleva ni nieve en los zapatos.

Yolanda dice que han arruinado a sus seguidores, porque han estado nominadas todas las semanas y que su gente ha tenido que votar a muerte.

MILÁ YA TIENE EL SOBRE.

CAMBIO DE POST. CAMBIOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Hugo, con cara de Johnny Fucker castigador.

Ay, soy sensible y buen chico, noblote y sincero… ¡¡Y UNA MIERDA COMO LA CACA DEL WHATSAPP CON ANABOLIZANTES!!

El chaval ha salido de la casa y como suele pasar se le han echado al cuello las mozas y el muchacho no se ha visto en otra así en su vida. Según contó en El Debate con cara de haber perdido más líquidos que una vaca en temporada de quesos, tenía el número de móvil en las redes y no lo quitó al entrar a la casa.

Así que al salir «tenía un montón de mensajes de pibones de yate. Yo pensé, ¡madre mía!, ¡cuántas tías!», dijo el chaval.

Analicemos:

«Pivones de yate». Fantástico, Hugo tiene 18 años y ya piensa como Hugh Hefner entrando en su mansión PlayBoy. A la próxima gala va vestido con una bata de seda roja y un par de muchachas neumáticas del brazo.

Se va a gastar todo lo que gane en los bolos en comprar pompones blancos para adornar culos de fémina.

«Yo no he tenido una oportunidad así en mi vida» y «tengo 18 años y quiero aprovechar este momento«, dijo el mozo.

Traduzcamos:

Que dice que le ha subido la demanda como el turrón en navidad y que se le ha hecho el culo pesicola, que no se ha visto en otra así y que si puede va a tener la empanada de carne más tiempo fuera del pantalón que dentro.

Antes de seguir leyendo contad hasta diez.

En el tiempo que habéis tardado Hugo ya se ha cogido ladillas, gonorrea, tres tipos diferentes de sífilis, hongos como champiñones, la enfermedad del beso y hasta el moquillo canino.

Le va a picar la culebra que se la va a tener que rascar con una máquina de abrillantar zapatos.

¿Pensábais que era tonto? Pues no. Tiene la cara más larga que el nazi de la peli de Indiana Jones cuando se le derrite. Porque no ha cortado con su novia, no, la ha llamado y le ha dicho que le de un poco de tiempo, que hagan una pausa.

Reproduzco la conversación como debió ser poco más o menos:

– «¿Cariño?, sí, hola, soy Hugo«.

– Oh, amor, te he echado mucho de menos estos días y…

– Sí, sí, escucha. Que mira, que me han enviado mensajes un montón de jamelgas que están más buenas que mojar pan en la salsa de las albóndigas y que me las quiero trincar a todas así muera en el intento o se me caiga el trabuco al suelo. Pero oye, que tampoco lo quiero dejar contigo, que me des unos mesecillos y tal y me esperas mientras me pongo fino.

– (Silencio. El auricular cae. Crujido seco del corazón de la muchacha partiéndose como una nuez bajo el peso de Falete).

Hay que tener jeta.

Aquí vemos a Hugo en su primera cita con una de las chicas que le han contactado:

Éste es Hugo antes de Gran Hermano 15.

Y éste es ahora.

Para que luego digan que GH no te cambia la vida…

¡Gracias por la corrección de los pibones!

Antes de nada, un llamamiento: MONO NILSON, te recordamos. Si estás por ahí, haznos una señal.

Y ahora sí, os diré que la de anoche fue una de las mejores galas de la historia de Gran Hermano. Bueno, en realidad fue una mierda como de Frankenstein con colitis, pero quería motivarme.

La cosa comenzó con Milá embutida en un vestido de látex rojo. Lo de embutida es literal: se lo pusieron metiéndola en una máquina de hacer morcillas, poniendo el vestido en la boquilla y dándole al botón de encendido.

Llevaba las tetas tan plastificadas y rojas que parecían dos paquetes de carne para guisar en el expositor de un supermercado. Eso no eran tetas, eran escorzos. El día menos pensado mandan una sonda espacial para que se pose ahí y estudie su composición.

Si Caperucita Roja hubiera ido así cuando se encontró con el Lobo, éste habría acabado con una correa con bola roja en la boca, a cuatro patas y con un tacón metido por el ojal.

Encuentra las 7 diferencias

Flo se había vestido de persona que sale a correr un domingo y acaba con un infarto. Tendría que ir a Guadalix a llevar una caja para algo que sabremos después. Pensé que lo mismo eran bocatas para el equipo, pero no.

Vídeos que vimos:

«Me he dado cuenta de que tengo unos cambios de humor muy raros…», dijo Paula. A buenas horas, chiquilla. Ya sólo queda que te des cuenta de que chillas como un gorrino viendo un cuchillo y casi podrás ser normal.

«Tu hijo cuando está nominado se arrima a la prima que ni te cuento, no sé si será por eso o no…», le dijo Milá a la madre de Jonathan, presente en el plató, demostrando que la objetividad es una de sus mejores virtudes.

Si Jonathan dijera «Yoli, quiero acostarme contigo«, ella estaría desnuda antes de que Jonathan acabara de pronunciar la Y.

En el público había dos señores con traje negro y corbata roja que me da que pensaban que iban a un congreso de ventas de pienso para gatos y se equivocaron y acabaron en el plató de GH.

Esta semana no ha habido prueba semanal, sino una especie de anuncio del «parato» ese que no vale para nada más que para espiar a la vecina cuando se ducha.

El bicho ese que salta y corre ha estado a punto de follarse a Luis y a Aza. Seguramente tenga un pequeño pene cibernético con el que puede tener sexo clónico.

En otro vídeo vimos conversaciones sobre el órgano reproductor femenino: «El chichi es verdaderamente una cosa bonita», dijo Luis, que tiene una copia de El origen del mundo de Courbet en el salón.

«Lo nuestro es una cosa… como un bolsillo», aportó Yoli. «Como un bolsillo«, dice. Digamos que Yoli nunca lleva mochila.

¡¡Y A LA CALLE LUIS!!

AIBALAHOSTIA

No me lo esperaba para nada. Paula se quedó hecha una caca pasada por la turmix. Se cogió un sofoco de los suyos, llorando a lágrima viva y con el rímel haciéndole churretes por la cara que eso parecía un mapa de carreteras.

52,1% de los votos fue el porcentaje de Luis.

Flo, en su papel de Súper Maligno entró en la casa, con los concursantes con orden de permanecer congelados. Una vez allí les entregó unas cajitas donde había unas cintas para el pelo con el número de teléfono al que hay que llamar para que gane cada concursante.

El súper normal llamó entonces al súper Maligno al confesionario. «Pícaro, no me falles», le dijo. Uuuuuuy, aquí hay cópula en la cumbre. ¿Qué cojones tienen los súpers cuando se aparean? ¿Supercitos?

Mientras Flo estaba en el confe se abrió una puerta en el salón y apareció el payaso cabrón de las tartas. Llevaba una mesa llena de pasteles.

Milá conectó con ellos y les dijo que las tartas eran para el Súper Maligno, al que iban «a poder bombardear». El payasín estaba encantado, porque también iba a poder inflar a Flo.

Yoli se puso a comerse la tarta. Es lo único que se va a comer en el concurso.

Flo salió del confe pensando que se iba a casa… Alejandra falló el tartazo, pero Paula le pilló de lleno y cayó en la emboscada del salón, donde le dieron tartazos como para dejarle los poros de la cara como cuencos de natillas.

El enano se escondió detrás de un sofá para aparecer en el momento cumbre y… ¡¡¡Y EN TODA LA PUTA CARA!!! JA JA JA JA JA JA Este hombre puede poner en el currículum que su puntería con las tartas es +10.

La entrevista a Luis… A ver. Cuando los marines de EE UU están en combate y al sanitario se le acaba la morfina para atender a los heridos, saca el móvil y les pone la entrevista de Luis y se quedan tan dormidos que les puede amputar la pierna, operarles de apendicitis y hasta cambiarles de sexo sin que sientan nada.

Lo primero que dijo fue «son ya 80 días y… estoy nervioso, cagonlamar«, citando a Fray Luis de León tras salir de la cárcel.

«Paula se ha quedado rota, llorando como si te hubieras muerto«, le dijo Milá a Luis. Milá es la alegría de la única huerta en la que se suicidan las patatas.

«¿Morreo o no morreo bajo el edredón?», le preguntó Milá: «algún beso de cariño ha habido«, respondió Luis, pero «es que esos micrófonos suenan mucho», explicó.

Sí y unos cojones como cocos sin pelar. Que le comiste el morro como el que rebaña un kiwi con los dientes.

Madre mía… eso era como entrevistar a un mono perezoso. Milá le preguntaba y él tardaba un minuto o dos en responder y cuando lo hacía era como si lo hiciera un diplomático chino, que ni se moja ni le entiendes.

OJO, que Luis se quiere petar a la Milá. «Me encantas… tienes una forma de mirar que es intensa«, le dijo a la presentadora. Yo creo que ha visto que la Milá va de rojo y se ha puesto como un Miura.

«Se me está poniendo el látex… qué calor tengo«, dijo Milá mientras se aireaba los bajos con la faldita del vestido y preguntaba la edad del torero, por ver si es ilegal o no hacerle hombre encima de la mesa del plató.

Pasada una hora, que personalmente considero tirada a la basura como las horas jugando al Age of Empires, supimos que el segundo expulsado era ¡¡¡JUANMA!!!

O sea, que la gente votó a todo el mundo menos a él, del que sólo se acordaron como ganador el 4,9% de los que votaron.

Entonces era Aza la que lloraba como si estuviera meando por los lacrimales. Juanma, que es muy atento, se despidió de todos antes que de ella. Ya hay dos viudas en Gran Hermano 15: Paula y Azahara.

Hugo también lloró. Lo que pasa es que Hugo ve el anuncio en el que Antonio Banderas corta con el donut rosa y también llora.

Juanma aprovechó que Aza le abraza… ¡¡AZA te ABRAZA!! JA JA JA Parece el nombre de un peluche para estas navidades. En fin.

El caso es que pasó del abrazo y se puso a darle un discurso a los demás de lo mucho que le ha gustado la experiencia.

En paralelo, Luis veía en el plató su vídeo resumen del paso por la casa y también lloraba. Para consolarle Milá le puso la cabeza al lado de una de las tetas y se sabía lo que era cabeza y lo que era teta porque Luis tiene pelo. Si llega a ser calvo no lo distingue ni Perry.

Luis le regaló a Milá un póster suyo vestido de torero que le firmó. JA JA JA, que sutil y modesto. ¿Para qué gastarse dinero en cosas caras cuando puedes regalar fotos de ti mismo? Estos reyes todos mis amigos van a recibir una puñetera postal con mis nalgas en primer plano.

«Eres un bombón de mujer«,  le dijo Luis a Milá. Sí, un bombó de los envueltos.

«Que coño haces aquí tú», le preguntó Milá a Juanma cuando llegó al plató. «La gente quiere que esté aquí«, dijo él. Cooooooorrecto.

Su entrevista duró tres minutos. «Tampoco habría sido una entrevista muy larga porque tú lo que has hecho ha sido hacer deporte y mantener la tablita», le dijo Milá a bocajarro. Le faltó acabar con «pedazo de soplapollas» para ser más amable aún.

Y ahí acabó la cosa. Ya sólo queda votar al ganador y se irán acumulando los votos de una semana a otra… ¡Gracias por leerme!

Yo no sé para que echan resúmenes durante la semana si luego nos vuelven a poner los vídeos, tooooodos los vídeos en las galas, pero en plan versión extendida, montaje del director.

Para hablar de Luis han llevado al plató a una señora que parece una alcaldesa del PP dando un pregón de las fiestas.

Esta semana no ha habido prueba semanal, sino una especie de anuncio del parato ese que no vale para nada más que para espiar a la vecina cuando se ducha.

El bicho ese ha estado a punto de follarse a Luis y a Aza. Seguramente tenga un pequeño pene cibernético con el que puede tener sexo clónico.

«El chichi es verdaderamente una cosa bonita», dijo Luis, «lo nuestro es una cosa… como un bolsillo», aportó Yoli. «Como un bolsillo», dice. Digamos que Yoli nunca lleva bolso.

¡¡Y A LA CALLE LUIS!!

AIBALAHOSTIA

No me lo esperaba para nada. Paula se va a quedar hecha una caca pasada por la turmix.

En el plató dice Fran que la salida de Luis no se comprende.

Pollito Volador, como le llama Milá (yo prefiero llamarle pollito que se hostió y se hizo mierda) que le molestó que Omar le dijera a Luis que tenía pluma y Luis se lo tomara a mal.

Tócate los cojones, ahora resulta que el malo es Luis por ofenderse y no Omar por usar eso como si fuera un insulto.

Y Paula ve que no vuelve Luis. Llora. Aza la consuela y también llora. Vaya mierda de consuelo.

A Paula se le está corriendo el rímel y parece un payaso diabólico. «Le voy a echar mucho de menos, que es mi mejor amigo aquí dentro, puf», dice la muchacha, entre sofoco y sofoco.

Flo está en el confe echándose la siesta. Yo quiero un trabajo como ese. Bueno, excepto por el hecho de que lleva unos pantalones demasiado cortos y de un momento a otro se le va a salir un cojón, con desolador y traumático resultado para nosotros.

Dice Milá que los concursantes hoy podrán vengarse del súper Maligno.

Milá dice que la semana pasada se le olvidó saludar a dos personas que le habían pedido, que lo siente. Eso la ennoblece. No se puede decir que Milá no se implique.

El súper Maligno conecta con la casa. Les dice que se congelen y que les va a ver. Están todos acojonados por si les lía alguna.

Aparece y se descojonan de su atuendo de marcapaquete. El caso es que se pone a repartirles cajitas de colores en las que están sus números de teléfono.

El súper normal llama al súper Maligno al confesionario. «Pícaro, no me falles», le dice.

En la casa, se abre la puerta y aparece el payaso cabrón de las tartas. Lleva una mesa llena de tartas.

Milá conecta con ellos y les dice que las tartas son para el Súper Maligno, al que «van a poder bombardear». El payasín está encantado, porque también va a poder inflar a Flo.

Yoli se está comiendo la tarta. Es lo único que se va a comer en el concurso.

Flo sale del confe. Alejandra falla el tartazo, pero Paula le pilla de lleno y cae en la emboscada del salón, donde le han inflado a tartazos.

El enano se esconde detrás de un sofá. Debe ser que quiere poner la guinda del pastel. ¡¡¡Y EN TODA LA PUTA CARA!!! JA JA A JA JA JA JA

Este hombre puede poner en el currículum que su puntería con las tartas es +10.

CAMBIO DE POST PARA LA ENTREVISTA DE LUIS.

CAMBIOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

CAMBIOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Empezamos.

POR EL AMOR DE DIOS

¿Pero qué le han puesto a la Milá?

Milá, vestida de caperucita roja castigadora

¡¡Lleva un traje de latex rojo que parece la menstruación cuando practica Sado en la mazmorra!!

Si caperucita roja hubiera ido así que se encontró con el Lobo, éste habría acabado con una correa con bola roja en la boca, de rodillas y con un tacón metido por el ojal.

Lleva las tetas tan plastificadas y rojas que parecen dos paquetes de carne para guisar en la nevera de un supermercado.

Ay, señor.

El caso es que empezamos con los nominados. Alejandra a la sala de expulsión. Vemos un vídeo en el que dice que se siente sola porque su prima Yoli está más por Jonathan que por ella.

Alejandra ve lo que vemos todos menos Yoli: que el primo pasa de su prima como de comer mierda y ella bebe los vientos y hasta agua de la cisterna por él y él pasa de ella como de hurgarse en la nariz con un taladro industrial.

Regresamos. Flo se ha vestido de persona que sale a correr un domingo y acaba con un infarto. Irá a Guadalix a llevar una caja para alguna cosa. Lo mismo son bocatas para el equipo, pero no creo.

Vídeo de Luis.

«Me he dado cuenta de que tengo unos cambios de humor muy raros…», dijo Paula. A buenas horas, chiquilla. Ya sólo queda que te des cuenta de que chillas como un gorrino viendo un cuchillo y casi podrás ser normal.

El caso es que Luis ha estado esta semana haciendo muy buenas migas con Alejandra, lo que le hace mucha gracia a Paula. Eso si gracia significara úlcera.

Ahora Milá le agarra la cara a una del público, en principio para que la saquen, pero vamos, que si le pide la cartera la muchacha se acojona y le da el bolso entero.

Y nos tocan los vídeos pastelosos, incluído del que ya os hablé en el que en la camita Paula y Luis se comen el morramen y se dicen cosas susurrando. Puarg.

Paula se lleva mal con la lavadora. Al parecer ella no le da todo lo que ella querría. Al final hablaron y todo bien.

Otro día hizo un bizcocho con Hugo. Bueno, bizcocho… eso lo puedes usar como arma biológica y te quedas con el país que más te guste.

Y vídeo de Jonathan. Lo que pasa es que como en el caso de Luis, lo protagoniza Yoli. La muchacha, como os conté, está más salida que el pico de una plancha.

Si Jonathan dijera «Yoli, quiero acostarme contigo», ella estaría desnuda antes de que Jonathan acabara de pronunciar la Y.

«Tu hijo cuando está nominado se arrima a la prima que ni te cuento, no sé si será por eso o no…», dice Milá, demostrando que la objetividad es una de sus mejores virtudes.

Y vídeo Aza-Juannma. Éste no sabemos a qué viene, pero a mi me aburren lo que no está escrito. Son los dos taaaaaaaaaan guays, taaaaaaaaaaaaaaaaan correctos, taaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaan melosos…

El caso es que esta semana Azahara ha estado arisca con Juanma. El caso es que su Zoe, el novio que está fuera, ya puede ir buscando piso si vivían juntos.

Enésima entrevista/consulta a la gente de las gradas, véase familiares, véase exconcursantes. Esta gala promete ser entretenida como opositar a registrador de la propiedad.

En el público hay dos señores con traje negro y corbata roja que me da que pensaban que iban a un congreso de ventas de pienso para gatos y se han equivocado y han acabado en el plató de GH.

Milá conecta con la sala de expulsión. O se ha jodido mi tele o hay un efecto de luz raro que se parece a Matrix. El caso es que lo de siempre, que todos están nerviosos y que lo han asumido.

Ya no se juega en compañía, dice Milá. Y es que en un rato se abrirán los teléfonos durante una hora y el que sea menos votado, a la calle.

JA JA JA JA Dice Milá que por Twitter le han puesto que parece un mini babybel. JA JA JA JA descarado.

Volvemos con Aza y Juanma. Hay que rellenar tiempo, es lo que tiene. Lo que pasa es que Aza es tan sosa que yo preferiría que pusieran trozos de un documental de leones tumbados en la sabana.

Juanma se ha quedado picueto porque su supuesta novia no apareció en la gala de los familiares ni en los vídeos de apoyo que les pusieron el domingo. Y el tipo de la barba como el nido de una cigüeña no sabe si la muchacha le estará esperando o no.

EN FIN. CAMBIO DE POOOOOOOOOOOOOOOOOOOOST, CAMBIOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO CAMBIOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Paula, con la boca como para acojonar a Tiburón III.

Era un hecho insólito sólo conseguido por Arturo Requejo, el del pene como un tejo: hacer dos edredonings con dos personas diferentes dentro de la casa de Gran Hermano.

Ahora Paula se iguala a este fundamental hito de la historia de la humanidad dándole lo suyo a Omar y anoche al joven y sinsangre Luis, el torero.

Cuando en 2099 la BBC haga un resumen en imágenes del siglo XXI saldrá Obama, la llegada del hombre a Marte y Paula cepillándose a Omar y a Luis consecutivamente.

Llamadme loco, llamadme insensible, llamadme si montáis una fiesta de pijamas, pero después de lo mucho que estos dos han mareado la perdiz, que el pobre pájaro ha acabado vomitando, resulta que Luis le come el morramen a Paula justo la semana que está nominado con gente que tiene las mismas bazas que él.

La sinceridad y el amor de Luis, en una imagen:

Ah, el amor, siempre equilibrado y sincero…

En fin, os cuento cómo fue: estaban Paula y Luis en una de sus conversaciones en las que hacen repaso de lo mucho que molan uno y otro, dejando a sus abuelas como unas bordes de mierda a la hora de echar piropos en comparación, cuando la cosa derivó en te quieros sospechosos.

En una de esas, Luis le estaba hablando de distinguir el pimiento de la cebolla cuando tragas como un gorrino en una porqueriza cuando acompañó sus palabras con un paseo de su dedito por la entreteta de Paula. A ver, que si hubiera estado hablando de freír pechugas, pues todavía, pero no venía al caso.

En otra de esas le dijo Luis a Paula: «¡¡LO QUE CUENTA ES ÉSTO!!«, en principio se refería al corazón, a la nobleza, lo que pasa es que le agarró la teta a Paula que parecía que estaba exprimiendo un aguacate.

Voy a probar con la vecina, un momento. 

AIBA QUE HOSTIA ME HE COMIDO. Le he dicho que me dejara azúcar y cuando me lo ha sacado le he dicho que tenía un gran corazón y le he sobado la teta izquierda. No veas que hostias da para tener 93 años la hijalagranputa.

En fin, que la cosa se iba poniendo caliente como el pecho de un herrero, hasta que finalmente Luis le cascó un beso en los morros a Paula, pero a ver, no romántico de Pretty Woman de morderle un poco el labio antes de soltarse, no, un beso que sonó como agarrar un besugo por la cola y estampárselo en la espalda a Falete mientras toma el sol.

Jonathan, que pasaba por allí, se puso a chillar como si tuviera quince años y se hubiera encontrado a Justin Bieber meando en una esquina.

Paula y Luis, haciendo cochinadas (TELECINCO)

El caso es que a pesar de que Paula le dijo cosas como «nunca me casaría contigo» o «todo lo que a ti te gusta a mi me parece vomitivo», la cosa siguió marchando viento (culo de Paula) en Pompa.

Y acabaron metiditos debajo de las sábanas, que en esa casa los edredones los tienen que lavar más que en un hotel de esos que tienen luces de colores fuera, haciendo ruidos un poco asquerosillos, así como de que se te atasca el desagüe y le echas sosa cáustica y empieza a filtrar agua.

Son de esas personas que se besan pensando que cuanta más superficie de la cara del otro dejen llena de babas, mejor. Es como si marcaran el territorio de nariz a barbilla. Una vez me enrollé con una tía que me dejó la cara como si me hubiera lamido un rebaño de vacas con halitosis.

La cosa fue rara, porque hubo movimientos como si Paula hubiera decidido hacer mayonesa y se hubiera llevado la batidora, el aceite, la sal y el vinagre debajo del edredón. Los huevos ya los puso Luis.

Pero al cabo de un rato se quedó dormida la muchacha y entonces Luis… no sé cómo describirlo. No sé si Luis la recibió a porta gayola, o sólo a gayola, o si la quería empitonar pero ella estaba en el burladero o se la estaba colocando y no sabía cómo.

El caso es que al cabo del rato de hacer intentos como de aparcar con un bus en el hueco de un smart se la miró, respiró tranquilo porque Luisín seguía allí y se durmió.

Tu esto se lo cuentas a un cura y no sabe si mandarte tres avemarías o a una feligresa suya de vida licenciosa para que tengas algo que confesar.

Fran se defiende siempre diciendo que él es así, que es honrado. Vitín dice que no se lo compra.

Uno a uno los exconcursantes van diciéndole a Fran lo mucho que confiaron en el y lo mucho que le decepcionaron.

Excepto Paco, que dice que no, que allí todos han ido a ganar y que el que diga lo contrario miente.

«Lo que no puede ser es que yo vaya allí de Boy Scout», dice ahora Fran.

Loli interviene, pero no sé que dice porque estoy extasiado como conejo ante los faros de un coche mirando las hombreras con pedrería y lentejuelas de colores que lleva. Está transmutándose en Paco Porras.

Luis está en el confe. El súper le comunica a bocajarro que se ha ido Fran. Si el súper trabajara comunicando fallecimientos en un hospital la gente le donaba hasta las uñas de los pies de sus seres queridos.

Luis nomina con un punto a los primos y dos a las primas.

Sale al patio y le han montado una taberna taurina. De cartón piedra, pero taurina. JA JA JA JA JA

De detrás de la cabeza del toro ha aparecido el padre de Luis. No sé si eso es una meráfora o que. El señor, manteniendo toda la dignidad que puede, le dice a Luis que todo bien, que siga así.

Aparece también una chavala, no sé muy bien quién es, pero mira a Luis con ojitos tontorrones. «A ver que te vea», le dice Luis y se asoma a verle más que nada las domingas.

En este reencuentro ha habido la misma emoción que en la extracción de una muela cariada. Ah, la jamona es la prima de Luis.

Vemos un vídeo en el que intentaron asesinar a Luis poniéndole para beber el vaso que se usa para el suavizante. Lo que pasa es que salvó la vida eructando como si no hubiera un mañana. Van a usar ese audio para doblar a los dinosaurios del nuevo Parque Jurásico.

Al parecer Fran ha perdido 16 kilos.

«Si ahora mismo pusiéramos aquí mismo 16 kilos de grasa ni te digo el vómito que te iba a entrar», le dice Milá. Venga animar al señor. Le ha faltado decir: puto gordo seboso, eres una montaña de chicle mascado, joder, que si el Titanic hubiera chocado contigo en lugar de hundirse habría rebotado. Y así.

Hugo y Azahara nominan con dos a las primas y con uno a Luis.

Nos ponen un vídeo en el que Hugo llora. Lo que pasa es que Hugo llora todo el rato. De hecho, deberían hacer un vídeo en el que Hugo no llorara.

Hugo está solo en el confe. Le ponen un vídeo de su madre. Los dos se ponen a llorar como si se estuvieran viendo mutuamente siendo torturados. Bueno, en realidad creo que la madre está fumada, porque se riellora. «Ay, Hugo, que riquiño eres, ja ja ja ja». Dice la mujer.

JA JA JA JA JA JA JA

Hugo le pide perdón a su madre porque le habrá visto bebiendo en las fiestas y eso. Es como si le hubiera pillado bebiendo en un botellón. Hugo sale a por la cabra y al volver está su abuelo en el confe.

Hugo llora. Llora. Vuelve a llorar. Los peces esos que beben en el río beben de lo que llora Hugo. Llora más. Y encima puede ir a ver a su madre, que está en el baño y llora aún más.

En el plató, Fran llora también. A tomar por culo la canción de Los chicos no lloran de Bosé.

Vídeo de las broncas de Fran y Omar, sobre todo de cuando Omar dijo que la infiltrada que entró (Lidia) era un ligue de Marbella de Fran y éste se cabreó como un mono escocido porque insinuaban que él podía ser infiel. Y eso no, eh, eso no, que Fran es más puro que una talla de Santa Brígida.

Eso sí, dice que el equivocado en algunas cosas fue él, pero que siempre diferenció el «concurso del corazón». Sí, el concurso es en lo que ganas pasta y el corazón una víscera.

Vamos con Azahara. Supongo que le habrán llevado una acelga para que la abrace.

Reciclan de nuevo la sala de la playa. Le hacen ponerse un casco. El caso no le entra, porque el pelo muelle que tiene impide que se lo encasquete. Tiene que coger pelotas con una red. JA JA JA, sutil referencia a lo de las pelotas de tenis de su novio…

Entran en la sala su padre y su madre metidos en unas burbujas de aire. Es como ver una peli de los ochenta sobre niños infecciosos.

«Cuando te hagas la pasta o el arroz te fríes un ajito como te dije», le dice la madre. Joder, eso es un consejo práctico y lo demás son tonterías.

Regresa a la casa llorando a mares. Madre mía que noche. Si tuviera corazón lo mismo hasta me emocionaba.

Llaman a Juanma al confe. Allí está el perro de Azahara. Es feo de cojones. Se lo lleva a la dueña. La perrilla está contenta como unas pascuas y para demostrarlo se ha meado en la tarima.

La próxima vez que vea a un colega le meo en la pierna para demostrarle mi contento.

Vídeo de paso por el programa de Fran. Creo que lo que más ilusión le ha hecho ha sido conocer a Jorge Javier Vázquez.

Ahora dice Loli que Fran soñó que se moría la duquesa de Alba y Loli interviene para decir que ella lo había visto ya. Y unos cojones.

«Cayetana Fitjerald», dice el jodío. Íntimos eran.

Milá le dice además que Pantoja ha entrado en la cárcel y Fran pone cara como de estar haciéndose una colonoscopia justo en el momento en que la cosa entra.

MILÁ conecta con la casa y lee los nominados.

NOMINADOS: LUIS, PRIMOS (se expone JONATHAN), PRIMAS (se expone ALEJANDRA). O sea, LUIS, JONATHAN Y ALEJANDRA.

Paula mira a todos lados flipando y dice «¿y yo no?».  JA JA JA JA JA Las primas la miran con un rencor que flipas.

Fran se despide de la casa.

Y se acabó lo que se daba.

Mañana, como siempre, resumencito de la gala.

¡GRACIAS POR ESTAR AHÍ!

Empezamos.

Nos ponen un vídeo de los concursantes más deprimidos que Kim Kardashian intentando sentarse en un taburete. Todos echan muchas cosas de fuera y tal y están muy tristes.

Y claro, esta noche les van a meter a sus familiares en la casa. Gala de lloros.

Milá conecta con la casa y están todos cenando. ¿Pero qué hora es? Preguntan. Lo más destacable es que Azahara se estaba comiendo un bocadillo de acelgas, cosa que debería estar prohibido por la ley.

Mandan a todos a la sala de pruebas menos a los nominados.

Milá va vestida de cota de malla, que sólo le falta la espada y una ciudad que asediar. Aunque si la pones de lado, como lleva unas bandas blancas podría ser también un disfraz de calzada de un carril para cada sentido.

Creo que vamos a empezar con Paula. Vemos un vídeo en el que dice que echa mucho de menos a su gente y que se quiere agarrar a una chica que debe ser su amiga o un trozo grande de velcro.

La mandan a la despensa. Por cierto, Paula va vestida de niña de la curva de putón-luto. Debe mover un hula-hop para poder ver a su amiga en el monitor y hablar con ella. Es su amiga la morena que la ha estado defendiendo en el plató.

Es imposible saber lo que se dicen, porque se ponen a gritar las dos a la vez. Sigue apareciendo gente… «Aaaaaaaaaaay, pero porqué tanta geeeeeeeeeeeeeeeeeenteeeeeeeeeeee», grita Paula.

Ha pasado de la risa a las lágrimas en un segundo y de ahí de nuevo a la risa-sonrisa. Ahora llora otra vez. Sólo falta que diga que Jekyll va a matar al Mr Hyde.

En el confe como regalo le han dejado cuatro piñas pequeñas «piñas bebé», según Paula. Dice que una de las que ha salido es «amiga desde que eran fetos en el vientre de sus madres». Lo mismo se conocieron por Fetook.

HOSTIA HOSTIA HOSTIA

En la sala de pruebas está la puñetera casa de Bob Esponja. Si sale Patricio os juro que me tatúo el logo de GH en una nalga.

Le han puesto por la casa un camino de piñas bebé. Cuantas piñas arrancadas de los brazos de sus madres. Paula llega a la sala de pruebas y dice que eso es Hawai. Con dos cojones una piña gigante y un patinete de mar, lo más característico de Hawai. Una conclusión: Hawai es Torrevieja.

Dentro de la piña estaba la abuela de Paula. Hay que joderse. Han metido a la señora dentro de una piña. A saber cuánto tiempo lleva ahí dentro a oscuras la pobre señora. Espero que no tenga los problemas de Concha Velasco.

«Abuela, que has salido de una piña, me muero de amor», dice Paula. La pobre señora intenta meter baza, pero Paula no la deja. No se calla. Al final la abuela se marea.

Vemos un vídeo en el que intentaron usar a Paula de agente doble en una broma entre grupos. A ver, ¿no había otra con menos luces? Si eso fuera la Guerra Fría, a Paula se la disputaban la URSS y los EE UU sólo por ver cuál de los dos la fusilaba.

Toca vídeo de la enésima broma de Paula con Luis. En mi opinión, no es casual. Fran, que está nominado, metiendo baza: «sois Pimpinela, no os peleéis», y Luis imponiéndose como nunca lo ha hecho, con salidas de tono y levantando la voz.

Eso sí, luego se reconciliaron con mucho pasteleo…

Publi.

Volvemos.

Le toca a Fran. Le vemos en un vídeo en el confe vestido de monje (del que se ocupa de la cocina) llorando porque echa de menos a su familia.

Ahora le vemos en el confe en directo. Le ponen un vídeo de su mujer hablándole y de sus hijos y se pone a llorar y de rodillas. Ahora se sienta. Igualito le pasó a Rajoy en el despacho cuando Ana Mato le llevó la dimisión.

Ahora se pone a llorar más, pero mientras habla. Y a hacer metáforas cursis sobre botellas lanzadas al agua y no sé qué.

En el jardín hay una tarta gigante y él pasa por delante como si llevara allí desde antes de hacer la casa de Guadalix. De dentro sale su mujer, pero no está en topless ni nada.

«Lo estamos pasando mal porque la tele es la tele y salen lo que la gente piensa. Tú no has hecho nada malo, pero la gente miente», le dice la mujer. JA JA JA Esta señora sí que sabe cómo animar a alguien.

Si Fran llega a estar en la cárcel mañana por la mañana le encuentran ahorcado en la celda con los cordones de los zapatos.

«¡¡POR LOS CLAVOS DE CRISTO, PERO COMO SE PUEDE SER TAN MALA!!», dice Milá, que está indignada y con razón. Joder la señora, es la alegría de la huerta.

Vamos con Yolanda. Bueno, vemos a Jonathan haciéndole cobras a Yolanda. La muchacha es inasequible al desaliento. Más le vale a Jonathan no palmar, porque Yolanda va por la noche al cementerio, roba el cadáver y se lo folla antes de que se le acabe el rigor mortis.

En el salón le han puesto una mesa con productos manchegos, incluídos miguelitos de la Roda que están de puta madre. Pero debajo de la caja está su madre. A mi me hacen eso y me cabreo. Si hay miguelitos tiene que haber putos miguelitos. JODER.

Se abrazan y se quieren en el reencuentro que lo mismo ruedan con ellas la segunda parte de Lo Imposible (gracias Lestat).

Se cierran los teléfonos.

Chaaaaaaaaaaan, chaaaaaaaaaaaaaaan.

Llaman a los nominados al salón. Yolanda está deshecha, ha llorado mucho y se le ha ido el titanlux que se había puesto en la cara: «¿para qué me he maquillado entonces?», se pregunta entre sollozos.

Fran dice «no estoy bien». «Ha sido muy emocionante y todo, pero nos conocemos desde hace muchos años y no lo está pasando bien y yo por mi gente sacrifico lo que sea».

Milá, en lugar de consolarle va y le dice que «sabías a lo que te arriesgabas». Hala. ¿Porqué no le dan una pistola con una sola bala y le dejan solo?

VAMOS A CAMBIAR DE POST.

CAMBIOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO CAMBIOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Seguimos con la entrevista descafeinada a Omar.

Tratamos el tema de la relación Omar-Alfredo.

Nos ponen hasta un vídeo del padre de los dos hablando en Telecinco. Peeeeeeero, Omar y Alfredo han hecho un pacto de silencio sobre ese tema.

Milá se cabrea porque insinúa que Alfredo y Omar lo que quieren es no hablar en la tele de este tema hasta que haya pasta de por medio.

«Te niegas a hablar, te niegas a decir cómo es ver a tu padre por primera vez en tu vida», dice Milá, enfadada porque se les escapa el morbo.

Y para acabar de cabrear a Alfredo y Omar se pone a hablarle al padre de Alfredo y Omar, diciéndole que tenía que haber estado esta noche aquí, a ver cómo se conocía con Omar.

Tema Fran. Vemos cómo Omar le idolatraba que si pilla a Fran en la ducha lo mismo le hace lo mismo que a Paula. Y mientras, Fran poniéndole a parir  a sus espaldas.

APROVECHO EL ABURRIMIENTO PARA RECORDAR QUE TENGO FACEBÚ Y PÁGINA DE FACEBÚ.

Vitín no ha visto GH en su puñetera vida porque dice que jugando no se puede ganar Gran Hermano, ja ja ja. No debe conocer a Pepe.

Primas abren su sobre. Deben ponerse unos antifaces de los de dormir y tendrán un minuto y medio para llegar al confe. Si no llegan no podrán nominar.

Está claro que iban viendo. TRAMPOSAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAS.

No han dudado ni un segundo, han esquivado todos los obstáculos.

Nominan a Paula con dos y a Fran y Luis con uno.

JA JA JA le preguntan a Omar si a la salida de Telecinco están las 817 mujeres esperando a Omar. No, no están. No está ni el guardia de seguridad de la puerta.

Bueno, que sopor de entrevista light y suabona, supongo que para que los antipaulistas no se quejaran de que se le machacaba…

Las primas han aprovechado para maquillar a los primos, que están congelados. Lo raro es que Yoli no haya aprovechado y se haya pasado por la piedra a Jonathan sin que se moviera…

Milá lee las nominaciones y salen nominados: PAULA, YOLI Y FRAN.

Esta vez el apoderado no se libra.

Omar se despide de la casa. En general les agradece la convivencia. Le ponen el careto de Lucía, pero pasa. Le dice a Fran: «no se que entiendes por honestidad, pero ya lo veremos fuera». A las primas que se merecen lo más. A Paula que «si te tengo que pedir perdón por decimaquinta vez te lo pido».

MIRA, ESO LE HONRA.

A Luis que han arreglado sus cosas como hombres y que se queda eso de el. Y a los primos que guay todo.

«No perdáis de vista el objetivo, es maletín de 300.000 euros que todos queréis», dice Milá.

Y se acabó lo que se daba. ¡¡Gracias por estar ahí!! Mañana, resumencito de la gala.

¡Besos!