Por Pablo Lozano es director del Festival Internacional de Cómic Europeo (en Facebook, Twitter e Instagram) y colaborador especializado en cómic histórico en XX Siglos. Le podéis seguir en Twitter, Facebook e Instagram, y escuchar en el podcast de cómic La buhardilla de Venger.
Recuperamos para esta semana negra en la que estamos todos muy atentos a la inexplicable invasión de Rusia en Ucrania, una entrevista con un autor que teníamos pendiente de publicar.
Debido a los fatídicos acontecimientos que nos tienen atenazados a la pantalla pensé en sacar algún artículo sobre algún cómic del artista francés Tardi que plasmó de una manera muy singular los desastres y sucesos de la Primera Guerra Mundial. Pero necesitaré más tiempo para ello y, por lo tanto, tendrá que esperar.
Así que, mientras tanto, recupero una entrevista que tuve el gusto de realizar en la pasada edición de Madrid Cómic Pop Up, que tuvo lugar el pasado mes de diciembre de 2021 y de la que ya sacamos hace unas semanas un artículo sobre el Arrowsmith de Carlos Pacheco.
Hoy vamos hablar de un Sherlock Holmes “made in Spain” realizado por el guionista Sergio Colomino.
Sergio Colomino
Son muchos los seguidores del afamado detective creado por Arthur Conan Doyle. Yo me incluyo entre ellos y no es la primera vez que escribo o aparece reflejado Holmes en alguno de mis artículos.
Entre los muchos autores que estuvieron presentes en Madrid Cómic Pop Up, que además acaba de anunciar que también contará con una nueva edición del 6 al 8 de diciembre de 2023, estaba bastante interesado en poder sentarme y charlar con el guionista Sergio Colomino, concretamente sobre sus obras Sherlock Holmes: La conspiración de Barcelona y su precuela El legado de Moriarty, que son en las que centraremos principalmente nuestra entrevista.
Sergio debutaría como guionista con el cómic Sherlock Holmes y la conspiración de Barcelona en el año 2012, con dibujo de Jordi Palomé, recibiendo una nominación como mejor autor revelación en los premios del Salón del Cómic de Barcelona.
En esta historia que transcurre en el año 1893, Sherlock Holmes, el gran detective a quien el mundo vio morir en Reichenbach, llega a Barcelona para investigar la reaparición de una nave submarina codiciada por media Europa. Pero en una ciudad dividida por el conflicto entre burguesía y clase obrera, la investigación inicial de Holmes extenderá sus hilos para acabar conduciéndole hasta las sociedades anarquistas, y convertirle en testigo directo de uno de los sucesos más sangrientos en la historia de Barcelona.
Su segunda obra El Legado de Moriarty apareció en el año 2016.
La precuela nos trasladaba al año 1891. Mientras la noticia de su fingida muerte en Reichenbach empieza a extenderse, Sherlock Holmes emprende la huida hacia San Petersburgo, perseguido por la organización criminal de Moriarty. En la esplendorosa capital de un imperio en declive, Holmes será de nuevo requerido por Londres para salvar la vida del zar y evitar un conflicto que podría destruir el precario equilibrio de poder entre Rusia e Inglaterra; una misión en la que el camino del detective de Baker Street se cruzará de nuevo con el de la única persona que fue capaz de vencerle: Irene Adler.
Con el escenario de la decadente Rusia zarista y con La Mujer como coprotagonista de excepción, la precuela revisita lugares comunes del mundo de Sherlock Holmes con el escenario del Miguel Strogoff, de Julio Verne.
Su trabajo más recientes ha sido el cómic AK-47. La historia de Mijail Kalashnikov, una aproximación a la biografía del inventor del tristemente célebre fusil de asalto y su influencia en la historia del siglo XX, publicada también por Norma Editorial en 2017.
También ha realizado el libro de divulgación Sherlock Holmes de Hayao Miyazaki. Basado en la historia del genial creador de Studio Ghibli, cuando siendo todavía un joven animador, invierte su talento en toda una serie de proyectos para diversas productoras japonesas y europeas; entre todos ellos, una versión canina del detective por excelencia, Sherlock Holmes, que llegaría a nuestro país para convertirse en un referente para toda una generación de espectadores.
Os dejamos algunas preguntas de las que le lanzamos durante la extensa entrevista que le realizamos para el podcast La Buhardilla de Venger.
Por lo que hemos visto y explicado en tu presentación, sientes una gran atracción hacia Sherlock Holmes…
Indudablemente. Mi primer contacto con el personaje fueron los dibujos animados de la serie de Miyazaki. Desde entonces la parte que he dedicado en mi obra al conocido detective es muy amplia. El personaje de Sherlock Holmes me ha marcado mucho como autor y lo seguirá haciendo.
En 2012 apareció tu primera obra sobre el personaje. ¿Aprovechas el vacío del personaje tras su ”supuesta” muerte en el canon holmesiano para situarlo en Barcelona, tu ciudad natal?
Efectivamente aprovecho el conocido como “el gran hiato” de tres años del que no sabemos a qué se dedicó el personaje. Para aquellos que no lo conozcan, El gran hiato es el nombre con el que se conoce al período de tiempo durante el cual Sherlock Holmes desapareció de Londres. Es decir, desde la primavera de 1891 hasta la de 1894. En esos tres años se le dio por muerto y sus incondicionales seguidores lamentaron amargamente su pérdida. Muchos autores también lo han aprovechado para relatar sus propias historias. En mi caso, me di cuenta de que estas fechas coincidían con un acontecimiento muy importante en Barcelona como fue el atentado de la bomba del Liceo (1893). A partir de ahí empecé a trabajar junto al dibujante Jordi Palomé sobre la historia. Cuando lo teníamos bastante avanzado, presentamos el proyecto a Norma Editorial que estaba interesado publicarlo.
En la trama usas el tema de los movimientos anarquistas y políticos como trama principal. ¿Qué ocurrió en el atentado del Liceo?
La noche del 7 de noviembre de 1893 de Barcelona está marcada por un suceso trágico. Una bomba fue lanzada a la platea del Liceo mientras se estaba representando la obra Guillermo Tell del compositor italiano Gioachino Rossini. Era el día del gran comienzo de la temporada y había muchísima gente, además de estar presente toda la flor y nata de la ciudad.
Este atentado produjo gran cantidad de muertos y heridos que servirían para acentuar los conflictos entre la clase burguesa y la clase trabajadora de la Barcelona del momento. Este acto también acabará produciendo el conocido como proceso de Montjuic.
El proceso de Montjuic fue un juicio sumarísimo en el que muchísimos anarquistas fueron juzgados sin ningún tipo de garantía judicial y en el que incluso se ajustició a varios de ellos.
Barcelona, en aquellos momentos, se convirtió en una ciudad muy violenta que incluso era conocido en toda Europa con el sobrenombre de “La ciudad de las bombas”. Me pareció, por lo tanto, un contexto muy interesante para plasmarlo y que casi nadie conoce.
Me sirvió para crear una historia con un escenario muy riguroso y en el que podía, además, introducir al personaje de Sherlock Holmes.
Viajamos de Barcelona a Rusia en tu segunda obra ¿A qué se debe este cambio de escenario tan importante?
El primer cómic funcionó muy bien a nivel de ventas y la editorial me pedio rápidamente una segunda parte.
En la primera obra tuve mucho respeto hacia los lectores por lo que quise que el arco argumental se abriese y cerrase totalmente. No quería que existiera la posibilidad de que si no lo cerrase bien, los lectores se pudieran quedar sin conocer el final. Eso podría haber ocurrido si las ventas no hubieran ido bien.
Continuar con la historia donde lo había dejado era bastante complicado. Así que decidí hacer en esta nueva ocasión una precuela. Para ello cogí una referencia que hacía el detective a Rusia en una de sus novelas.
En aquellos años Rusia tenía un gran conflicto con Inglaterra al que se ha denominado “El gran juego”. Expresión utilizada para describir la rivalidad entre el Imperio ruso y el Imperio británico en su lucha por el control de Asia Central y el Cáucaso, durante el siglo XIX.
Me planteé entonces qué hubiera pasado si Sherlock Holmes hubiera tenido que realizar alguna gran misión en Rusia durante el reinado del Zar Alejandro III.
Para ello quise recuperar a un personaje del canon holmesiano como es Irene Adler. Es la única persona que ha logrado vencer a Sherlock Holmes y a la cual el detective admira y respeta mucho.
¿Qué tal funcionó la precuela?
Funcionó bastante bien. Pero no tuvo tanto tirón como la primera.
Seguramente debido al hecho, de que la primera aventura transcurría en Barcelona. Motivo que seguramente animó a muchos a comprarlo. Ahora mismo va por la 3º Edición que no está nada mal.
¿Estás trabajando en una próxima aventura del detective?
En breve podremos ver un nuevo cómic que se llamará Sherlock Holmes y el Misterio del Tíbet. Es continuación de la obra anterior, que justamente finaliza su periplo en esas lejanas tierras.
Va a ser distinta a las dos anteriores. Esta vez la historia será un poco más “pulp” y aparecerán personajes sacados de la obra de Rudyard Kipling o Julio Verne. La podréis ver próximamente.
Aprovecho para dar las gracias especialmente a la Casa del Tibet en Barcelona, ya que nos está ayudando mucho con este nuevo volumen.
Estaremos muy atentos a su próximo cómic y si queréis escuchar la entrevista completa al autor podéis hacerlo en este enlace.
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