No quiero ni necesito que nadie me diga que estoy muy pesadita con el tema navideño. Ya lo sé. Mi familia vive conmigo y me lo dice a diario.
La cosa es que, como bien sabéis, he recopilado últimamente mis películas imprescindibles para Navidad de los ’80 y de los ’90. Y entre ellas, está, EVIDENTEMENTE, Eduardo Manostijeras.
Hace ya tiempo os hablé de lo que fue de Michael Oliveri, el hermano pequeño de Wynona Ryder en esta peli. Y en otro post, este mismo año, repasamos las caras de Johnny Depp en los últimos 30 años, y abríamos con Edward.
Pues al recopilar mis pelis navideñas he reparado en Jim, el chico malote novio de Wynona al principio de la cinta, y me he dicho: «Ay que ver lo que suena este mozo«.
Y claro, he ido a los créditos, he visto su nombre y ya me ha cuadrado todo.
Pongámonos en contexto: Eduardo manostijeras se estrenó en 1990, número rendondito que abría la década del color y el neón (bye, bye, hombreras). Para entonces, Anthony ya había hecho cosas importantes en cine y televisión: había aparecido en varios programas de Saturday Night Live, cuna por antonomasia de los cómicos de los EE.UU., y había interpretado a Brian Johnson en El club de los cinco de John Hughes.
Durante toda la década de los ’90 hizo, sobre todo, televisión, tanto en formato peli como en serie (sobre todo en episódicos, como Tocados por un ángel o Diagnóstico asesinato). Aunque aún incluyó algo de cine a su repertario. En 1993, por ejemplo, aparecía en Seis grados de separación, un peliculón con un reparto excepcional que incluía a Stockard Channing, Will Smith, Donald Sutherland e Ian McKellen.
En 2002 llegó el que ha sido sin duda uno de los papeles más importantes de su carrera: fue Johnny Smith, protagonista de La zona muerta, una serie de mucho éxito (remake de la película de 1983 que protagonizó Christopher Walken), con buenísima crítica y público, en la que Johnny es un profesor de ciencias de un pequeño pueblo con una vida perfecta que, un día, tiene un accidente de coche y se tira seis años en coma. Cuando se despierta, su madre ha muerto, su prometida está con otro y él tiene poderes psíquicos. Un chow xD Pero, en serio, es buena.
La zona muerta tuvo seis temporadas entre 2002 y 2007, y justo después Anthony tuvo un pequeño papel como Mike Engel, el reportero, en El caballero oscuro que, por si andáis perdidos, os comento que es en la que salía Heath Ledger.
Puede que en los últimos años lo hayáis visto en alguna serie más, como Almacén 13, La chica invisible o Asesinato en primer grado, y en episódicos en otras tantas, entre ellas Psych y Rosewood. Pero donde volvió a resonar su nombre por las webs más frikis fue en la película de Netflix Máquina de guerra, en la que Hall es Greg Pulver, compañero de Brad Pitt.
Entre sus últimos trabajos (de los que ya han visto la luz, que tiene varias cosas en post-producción), destaca un episodio como estrella invitada en Agentes de S.H.I.E.L.D., este mismo año.