En tiempos donde la edición física del libro ha perdido -en general- bastante calidad y encanto, sorprende que te llegue un volumen -para ser leído, se entiende, no de esos libros bellísimos destinados a ser hojeados- como Sáhara español, el último reemplazo (Arzalia ediciones, 2017). Un libro profusamente ilustrado, maquetado con gusto y escrito con pasión y detalle.
Dice Juan Eslava Galán en el prólogo de la obra que el de Xavier Gassió es «algo más que un libro sobre el Sáhara. Es también un libro sobre España y los españoles, un verdadero tratado sociológico». Y tiene razón. Gassió, periodista, director y guionista, directivo del grupo Planeta, fue uno de aquellos quintos que formaron el último reemplazo en el Sáhara español y ha compuesto, cuarenta años después, un relato único sobre aquel tiempo: es, al mismo tiempo, un libro de historia, de memorias, de viajes, de anécdotas, de información sobre el servicio militar; un relato histórico y político que mezcla la mirada a pie de los acontecimientos del recluta de entonces y el análisis informado del periodista cuatro décadas después.
A través de los textos y de las más de 1.000 fotografías (inéditas, la mayoría salidas de la máquina del autor, otras hechas específicamente para este libros y otras cedidas por otros veteranos) el lector se adentra en un tiempo exótico por extinto, aunque no sea tan lejano: es el mundo del servicio militar obligatorio y de la última colonia que existió en África.
A los que no vivimos aquel momento y lo vemos desde la lejanía nos ofrece una oportunidad única de sumergirse, de sentir, de observar. De reflexionar sobre lo histórico y político. De juzgar, sí, pero también de pensar si, seguramente, no somos tan diferentes de aquellos que vivieron aquellos momentos.
La obra sirve para introducirse en la historia de la antigua colonia y ahondar y analizar cómo se puso fin al dominio español, una «traición» que provocó un conflicto internacional que aún a día de hoy sigue sin resolverse.
Pero también deleitará -y de ahí sobre todo esa mirada sociológica, que decía Eslava Galán- el conocer el día a día de aquellos hombres que fueron testigos activos de los hechos históricos, que quizá sentían que en cualquier momento tendrían que intervenir. Y aquí el libro ofrece una generosa cantidad de información y anécdotas: desde la instrucción y el famoso CETME, hasta las relaciones con los locales, el sexo, el alcohol y las drogas, o como el inalcanzable Parador de Turismo de Al Aaiún, que les quedó grabado como un mal recuerdo para los que vieron a los oficiales marroquíes tomar posesión del mismo en diciembre de 1975. Describe incluso, los que los soldados sabían del Sáhara -mediante lo estudiado en la Educación de la época- antes de ir allí.
Aquella mili tenía el formato de un reality show de superviviencia del que todos los concursantes querían ser expulsados.
Una verdadera máquina del tiempo, sensorial e intelectual. Si os interesa este tema y ese momento histórico, no debéis dejarlo pasar.
¡Buenas lecturas!
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