¿Sabéis quién es James Franco, verdad? Ese tío súper magnético que, por lo general, escoge muy bien los guiones que acepta. Ese que se llevó un Globo de Oro en 2002 por su interpretación de James Dean y otro este mismo año por The Disaster Artist.

Franco en los BAFTA de 2018 (GTRES)
El joven James, que cumplió en abril 40 lustrosas primaveras, se ha convertido en los últimos años en uno de los actores más solicitados y mejor valorados en Hollywood. Y no solo por el magnetismo al que me referí más arriba, que es fruto seguramente de una expresión facial amable combinada con una personalidad arrolladora, sino porque su talento interpretativo lo lleva a ser camaleónico como pocos, y lo mismo borda un dramón como 127 horas (que le valió una nominación al Oscar en 2011)…
Como lo clava en su papel de presentador de medio pelo en una comedia que te deja aplatanado. Sí, hablo de The Interview, de 2014, en la que él y Seth Rogen entrevistan a un Kim Jong-un de lo más achuchable…
Sin contar que muchos estamos ansiosos por verlo en Multiple Man, tenemos La bóveda, ¿Tenía que ser él?, Retales de una vida, Oz, un mundo de fantasía, El origen del planeta de los simios, Caballeros, princesas y otras bestias, Mi nombre es Harvey Milk y un largo, larguísimo etcétera. Y eso sin contar que participó como actor de doblaje en El Principito, que fue una preciosidad, o en La fiesta de las salchichas, que fue… Bueno, fue otra cosa, you know.

Franco en ‘El origen del planeta de los simios’, de 2011
Para la inmensa mayoría, el estreno de James en el cine vino de la mano de su papel de Harry Osborn en Spider-Man en 2002 (por cierto, ¿qué fue de Tobey Maguire?), pero lo cierto es que, aunque no va muy descaminada la cosa, su estreno oficial en la gran pantalla fue en 1999, cuando tuvo un papel menor -menor, menor- en Nunca me han besado, protagonizada por Drew Barrymore y David Arquette.
No me puedo creer que hayan pasado casi 20 años de esta peli :O
SIIIIIN EMBARGO, lo más interesante de los inicios de James lo encontramos en la tele (que fue, a propósito, donde interpretó a James Dean).
En 2001, apareció en un pequeño papel (casi, casi un extra) en un episodio de Expediente X. En 1999 tuvo uno de los papeles principales en la sitcom adolescente Instituto McKinley (Freaks and Geeks), que si por algo destaca es porque entre sus protagonistas estaban también Seth Rogen y Jason Segel (Marshal en Cómo conocí a vuestra madre).
Por cierto, ¿veis al cahavalín del polo de rayas? Es John Francis Daley, el psicólogo de Bones.
Pero el primer papel de James, el primero primerísimo, su very first role, fue en 1997, en esa joya noventera que fue Pacific Blue, más conocida como… LOS BICIPOLIS.
El pobre James hizo de Brian: un tirillas al que cuatro matones le dieron pa’l pelo:
Porque lo pillaron sin el patinete volador, que si no…
Te has dejado lo más jugoso: James Franco atado a una cama y desnudo en el año 2000 en Whatever it takes (Cueste lo que cueste)
20 agosto 2018 | 12:33 pm
James Franco es el chico guapo y malo, tanto en las películas como en la vida real.
21 agosto 2018 | 4:01 pm