Me ha costado asimilar que Carrie Fisher ya no está entre nosotros, aunque es un hecho que la princesa Leia vivirá para siempre en nuestro corazón (friki).

Han sido innumerables los homenajes y tributos que le han brindado, yo también hubiera querido unirme a ellos pero tampoco quería redundar en algo que ya ha inundado la red y las redes. Todo lo que se podía decir de ella, ya se ha dicho.

Por eso, he optado por dedicar mi particular momento de nostalgia a otro emblemático personaje de Star Wars. Es un secundario que brilló con luz propia y por el que también siento especial simpatía, y eso que debutó de la peor manera posible: siendo un vil traidor.

Lando Calrissian aportó al universo Star Wars una nota multirracial, con toda la variedad de extraños seres que pueblan sus películas, él fue el primer personaje relevante de raza negra.

Esperé verle de regreso en el Episodio VII, El despertar de la fuerza, junto con Han Solo, Leia y Luke, pero si J.J. Abrams consideró en algún momento esa idea la rechazó pronto. Una pena. Yo lo eché de menos, me hubiera gustado verle aunque fuera en forma de cameo.

Y eso me lleva a preguntarme: ¿Qué fue de su actor, Billy Dee Williams?

Lando era genial, el único en poner en un brete al mismísimo Han Solo, su más duro rival en el terreno de la picardía, el encanto y al parecer, los negocios turbios. De hecho, Lando fue el propietario original del legendario Halcón Milenario, que Han le ganó en «una partida de sabacc» (cita textual).

Pese al carisma de este personaje, solo participó en dos entregas cinematográficas de la extensa (cada día más) franquicia Star Wars.

El actor que lo encarnó, Billy Dee Williams, tenía 43 años cuando se enfundó por primera vez en la capa de Lando en El Imperio contraataca, en 1980.

Ya tenía a sus espaldas una extensa carrera como actor, con una nominación incluso a un Emmy por  La canción de Brian (1971), película en la que interpretó al jugador de fútbol americano Gale Sayers.

Después de El retorno del jedi (1982), su última aportación al universo de George Lucas, Billy Dee Williams fue fichado en el culebrón Dinastía, donde trabajó de 1984 a 1985.

A finales de los ochenta participó en la rara avis de Tim Burton Batman (1989), donde se puso en la piel de Harvey Dent.

Durante los 90 fue carne de película de acción, con títulos como Ilusión mortal (1987), La máscara de la muerte (1996), protagonizada por Lorenzo Lamas, y En zona de peligro (1996) con Michael Dudikoff y The Prince (1996), en la que coronaba el reparto.

Desde entonces se ha movido como pez en el agua en el mundo de los telefilmes y las series; hemos podido verle con personajes secundarios o episódicos en Aquellos maravillosos 70, General Hospital, Modern Family, Navy: investigación criminal y Glee.

También ha tenido alguna incursión esporádica en la pantalla grande, como en el drama Constellation (2005), en el que compartió protagonismo con Zoe Saldana, o las cintas terroríficas (en el amplio sentido de la palabra) Hood of Horror (2006), junto al rapero Snoop Dogg, y iMurders (2008).

La sombra de Lando es alargada…

Para bien o para mal, Williams ha vivido marcado por su personaje pero él lo ha aceptado de buenas maneras. En todos estos años Lando Calrissian le ha proporcionado infinitos cameos, guiños y parodias en toda clase de formatos, desde videojuegos a la delirante comedia Fanboys (2009) en la que un grupo de frikis de Star Wars planea un asalto al rancho Skywalker.

En esta película no solo participó Billy Dee Williams en su papel de Lando, sino también Carrie Fisher como Leia.

Delirante también fue el cortometraje Star Wars Cantina Karaoke (2013), al que se prestó sin ningún tipo de pudor ni vergüenza.

Nunca ha faltado a su cita doblando a su mítico personaje en dibujos animados (en versiones autorizadas o no) como Robot Chicken: Star Wars Episode II (2008), El show de Cleveland (2011) o La Lego película (2014).

Recientemente ha hecho las delicias de nosotros, sus fans, con apariciones estelares de Lando en grandes series de animación Disney como Las crónicas de Yoda (2013) y Lego Star Wars: Droid Tales (2015), Lego Star Wars: las aventuras de los Freemakers (2016) y Star Wars Rebels (2015).

Y la cosa no acaba ahí. Lando también tendrá un papel relevante en el spin-off que Disney prepara sobre Han Solo, aún sin título, que se estrenará en 2018 y tendrá entre sus protagonistas a la mismísima Madre de Dragones, Emilia Clarke.

Lamentablemente, y al tratarse de un episodio de juventud de los famosos personajes de Star Wars, serán interpretados por otros actores: Alden Ehrenreich tomará el relevo de Harrison Ford como Han Solo y en el caso de Lando será el joven talento Donald Glover, también fichado para la próxima entrega de Spiderman.

Creo que Donald Glover lo hará genial como Lando, de hecho me pega mucho más que el actor que han cogido para Han Solo.

Volviendo a Billy Dee Williams, que es ya un abuelo de casi 80 años, de momento entre sus próximos proyectos solo destaca un papel en el remake televisivo que preparan de Dirty Dancing, que se estrenará en 2017.

Una ajetreada vida sentimental

Williams ha estado casado tres veces. Su primera mujer fue Audrey Sellers, un matrimonio de tres años que terminó en 1962 con un hijo en común, Corey Williams, y una profunda depresión por parte de él.

En 1968 se casó con la modelo y actriz Marlene Clark en Hawai. Este matrimonio duró aún menos: dos años.

Su tercera mujer fue la japonesa Teruko Nakagami, cuya boda tuvo lugar en 1972. William adoptó a Miyako, fruto de un matrimonio anterior de su mujer con el músico Wayne Shorter. También tuvieron una hija en común, Hanako, nacida en 1973. Se divorciaron en 1993 pero se reconciliaron en 1997. Aparentemente siguieron juntos hasta 2002, pero los datos se dispersan, no hay mucha información al respecto.

Una de las últimas apariciones públicas de Billy Dee Williams, en compañía de Harrison Ford, Peter Mayhew (Chewacca) y Ewan McGregor en un acto benéfico de 2010. (GTRES)

Lo que sí trascendió fue un escándalo que envolvió al actor en 1996, cuando fue arrestado por haber golpeado presuntamente su novia por entonces, Patricia Heitman.

Fue puesto en libertad tras pagar una fianza de 50.000 dólares. La presunta víctima alegó posteriormente que el incidente fue por su culpa y pidió que se retiraran los cargos contra el actor, que finalmente acordó aceptar una pena de 52 sesiones de terapia.

Nunca volvió a tener problemas con la justicia. Esperamos que hayas sido un chico bueno, Lando.

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