Sin mujeres no hay democracia

Por Belén de la Banda@bdelabanda

Hace más de 30 años que un grupo de mujeres, entre las que estaba Khadija  Errebbah, fundó la primera asociación feminista en Marruecos.

“Me he implicado en la defensa de los derechos políticos y económicos y civiles de las mujeres porque creo que en mi país hay poca igualdad, poca justicia y no hay democracia.  Porque considero que la democracia es sinónimo de una presencia activa y participativa de las mujeres”, explica.

Khadija Errebbah, y la Asociación Democrática de Mujeres de Marruecos (ADFM), que fundó en 1985, no sólo tienen una gran experiencia, sino también múltiples frentes abiertos: todos pasan por las violencias que sufren las mujeres y configuran el mapa de la injusticia, la pobreza, del alto número de mujeres que mueren durante el parto, del analfabetismo, del desempleo y de las violencias físicas.

A pesar de este complicadísimo panorama, Errebbah se muestra optimista respecto al futuro. Uno de los elementos de esperanza son los cambios que se han dado en la legislación marroquí a partir del año 2000. Desde entonces, se ha modificado el Código de la Familia de 2003; el Código Penal y el de Trabajo un año más tarde y la ley de partidos políticos en 2005, por señalar algunos hitos. Además, Marruecos ha visto también una ley contra la violencia de género.

No obstante, el gran paso –desde un punto de vista jurídico- se ha dado en 2011, con la modificación de ciertos artículos de la Constitución para promover la libertad, la igualdad y los derechos, teniendo en cuenta también los derechos económicos, sociales, culturales, civiles y políticos de las mujeres”.

Pero el camino hacia la igualdad es largo.

Seguimos haciendo reclamaciones, porque las leyes que existen no recogen totalmente el espíritu de la Constitución. Por eso la lucha debe seguir, especialmente con la nueva generación de mujeres que están preparadas para empezar a  trabajar en su territorio, en sus ayuntamientos, en sus ámbitos urbanos. Ellas son las que deben protagonizar y reivindicar sus derechos. Esas mujeres son las que podrán traer el cambio y, no solamente los legislativos, sino también una nueva mentalidad”, apunta la activista.

Y, al llegar a este punto, Errebbah aclara algo que considera muy importante: la estrecha relación que existe en su país entre religión y los asuntos relacionados con las mujeres y la familia.

Por eso, para conseguir un reconocimiento pleno de nuestros derechos hay que hacer un doble cambio: el político y el interno”, subraya.

En la agenda de Khadija Errebbah y sus compañeras hay también otro reto importante, la erradicación de la violencia física contra las mujeres.

Llevamos trabajando contra ella desde principios de los años noventa – explica- . En esa época en Marruecos era muy difícil hablar de violencia, era un tabú. Pero desde 1995 se han hecho grandes trabajos, tanto desde el plano  legislativo como en cuanto a la implementación de servicios. Logramos, por ejemplo, abrir el primer centro de escucha de Marruecos.” 

A él, acuden las mujeres víctimas de la violencia machista. En y se les ofrece servicios de acogida y asesoría jurídica y social.  Desde entonces hasta ahora se han seguido haciendo cosas, como la puesta en funcionamiento de lo que ellas denominan “cadena de servicio”, que supone interconectar los departamentos de Justicia, Policía y Sanidad.

Otro de los logros de estas defensoras de los derechos humanos es la puesta en marcha, durante la campaña electoral de 2016, de un espacio para ayudar a las mujeres que quisieran participar en política.

Estamos en un periodo de búsqueda, de inspiración de otras experiencias en el ámbito internacional. Todavía no tenemos muchos testimonios de mujeres, pero constatamos que hay una violencia institucional, que surge desde la propia organización de los partidos políticos contra las mujeres. Creo que este puede ser el primer centro de este tipo que trabaja con las candidatas durante las campañas electorales”, concluye.

 

Belén de la Banda es periodista y trabaja en el equipo de comunicación de  Oxfam Intermón

4 comentarios

  1. Dice ser infoshow

    Sin hombres no hay mujeres

    15 diciembre 2017 | 17:50

  2. Dice ser little

    Sin mujeres no hay democracia… y sin hombres ¿si?

    15 diciembre 2017 | 20:15

  3. Dice ser infoshow

    me niego a que no haya mujeres cargando sacos de cemento y corriendo tejados con la pelona en invierno y con el asfixiante calar del los meses estivales.

    16 diciembre 2017 | 10:39

  4. Dice ser infoshow

    me niego a que no haya mujeres trabajando en las cocinas de los hoteles y restaurantes.

    16 diciembre 2017 | 10:40

Los comentarios están cerrados.