José Zoilo, ganador del premio Edhasa 2023: «Me encanta contar con personajes ajenos a las culturas predominantes»

El escritor José Zoilo (EP)

Suma y sigue el escritor canario José Zoilo su idilio con los premios de género histórico en español. Con sus cinco novelas anteriores había logrado cuatro galardones, a los que se suma ahora el premio Narrativas Históricas Edhasa, que ha obtenido con la novela La frontera de piedra (Edhasa, 2023). Una novela épica, seguramente la «más épica» que ha escrito según el autor, que narra los acontecimientos que dieron lugar a la capital batalla de Adrianópolis, allá en el año 378 d.C.

Fiel a su cita con este blog, Zoilo nos cuenta las claves de esta novela, con la que se recuenta con el pueblo alano de sus primeras novelas…

Debutó con la historia de un alano… y gana el premio con la de otros miembros de ese pueblo… ¿Es una señal?

Justo en estos días se cumplen cuatro años de la publicación de mi primera novela, Premio de Novela Histórica de Pozuelo de Alarcón en 2020, así que no sólo parece ser un pueblo que me apasiona, sino que también se ve que me trae algo de suerte…

Ahora más en serio: desde que comencé a escribir sobre Attax y sus aventuras tuve claro que, más adelante, en algún momento, me gustaría seguir investigando sobre este pueblo tan desconocido, y tan diferente a los reinos germánicos con los que podríamos decir que comenzó la edad media, mi época favorita. Estaba convencido de que, si rebuscaba entre la documentación de la época, encontraría material más que suficiente para hilar una buena historia; y, desde luego, me he quedado muy satisfecho con el resultado.

Qué relación tiene con lo bárbaro (en el término clásico de la palabra)? Sus novelas, hasta la fecha, tienen como protagonistas a godos, vikingos, alanos…

Sin duda, me encanta contar con personajes ajenos a las culturas predominantes a la hora de afrontar la ficción. Creo que enriquecen el texto desde la primera página, pues su presencia permite mostrar multitud de conflictos con quienes habitan en el territorio. Bélicos, claro, pero también culturales, religiosos, étnicos, sociales… Desde luego, estoy convencido de que no tardaré mucho en encontrar otro bárbaro que me guíe hacia una nueva aventura.

Cambio climático, fronteras, migrantes… Cualquiera diría que está escribiendo sobre el siglo IV…

Totalmente… Por desgracia, algunos hechos parecen repetirse a lo largo del tiempo de forma recurrente, aunque las circunstancias, lógicamente, sean diferentes. En este caso, además, el área en la que los pueblos godos se establecen al abandonar su Escandinavia originaria, así como las tribus alanas desplazadas desde el este por los hunos, ocupa zonas de la actual Ucrania y parte de Rumanía, por lo que la coincidencia puede parecer aún mayor. Siempre digo que los anhelos de quienes vivían entonces, así como los nuestros hoy, son muy similares. Todos queremos seguridad, prosperidad, paz… aunque la forma de obtenerlas, por suerte para nosotros, en la mayoría de los casos ha cambiado. Así el amor, la amistad, la traición, o la maldad también, por qué no: todos los sentimientos que podamos recrear se repiten en cualquier época, y son los que mueven a mis personajes, los que hacen que el lector pueda empatizar con ellos.

¿Por qué hacer una novela sobre Adrianópolis?

Subjetivamente, porque es un hecho histórico que siempre me ha llamado la atención. De forma más objetiva, porque es un episodio interesantísimo: un episodio duro y violento, pero también clave, pues la derrota imperial supuso toda una debacle para las armas de Roma, que vio como gran parte de su ejército de campaña y el propio emperador Valente fallecían en el campo de batalla. Desde luego no fue la batalla que acabó con el imperio, pues este, no sólo en su mitad oriental, sino también en la occidental, pervivió durante casi un siglo más; pero sí supuso un punto de inflexión, pues a partir de ese momento la permeabilidad de las fronteras no hizo más que aumentar.

La importancia de Adrianópolis ha sido tal que, durante siglos, ha suscitado el interés de muchos historiadores: las tácticas empleadas, el uso de la caballería por parte de unos y otros, la composición del ejército tardorromano, las consecuencias… todo esto se ha abordado desde diferentes ópticas. Yo me documenté sobre este hecho todo lo que pude, revisando textos de la época, pero también investigaciones actuales, y quedé maravillado con lo que encontré. Hay bastante información acerca de lo que ocurría en el bando romano, claro; y algo menos en el de las tribus llegadas desde el otro lado del gran río, lo que resulta lógico. Pero también ahí era donde yo quería ahondar, en el bando vencedor, aunque en este caso no hubiera historiador alguno que lo ensalzara en la época, sino todo lo contrario.

Y esa batalla es el clímax de la novela y la narra con detalle, ¿cómo ha sido recrearla?

Desde un principio tenía claro que, además de los personajes, la batalla tenía que ser un protagonista más de la novela, el hecho que diera pie a que los personajes se vieran arrojados al macabro tapete en el que se desarrolló uno de los más tremendos episodios bélicos de la Antigüedad.

Para mí, que tanto me gusta narrar batallas, supuso todo un reto. Echando la vista atrás, no creo que cuando empecé a escribir, hace ya once años, narrando historias en primera persona, hubiera sido capaz de plantear algo así. Ahora, por el contrario, con más experiencia y más tablas, me he sentido muy cómodo reflejando cómo tantos personajes diferentes tomaban parte de una lucha sin cuartel, desesperada, cada uno desde su punto de vista, cada uno en una posición distinta dentro del amplio frente de batalla.

Además, como siempre me gusta hacer en mis novelas, he tratado de mantener el mayor rigor posible en lo referente a la dinámica de la batalla y a lo ocurrido con cada uno de los personajes de carácter histórico que tomaron parte en la misma. Por supuesto, aquellos otros que son fruto de mi imaginación sirven como argamasa para completar la acción.

Su editor lo describió en la entrega del premio como un “escritor de batallas” y lo comparó con Bernard Cornwell…

Es un grandísimo honor, creo que el mayor que me pueden hacer, pues Cornwell es, sin lugar a dudas, mi autor favorito. Ojalá, con el paso del tiempo, los lectores digan también lo mismo.

¿Es la más épica de sus novelas?

Creo que si no es la más épica, está muy cerca de serlo. Narra una gran epopeya, la marcha de un pueblo condenado a desaparecer, forzado a abandonar la tierra de sus ancestros a su pesar, siempre en marcha, sin conocer su destino, ni tampoco su final. Así, nos encontramos frente a una historia con una gran carga dramática, además de bélica, y con una de las batallas más importantes de la Antigüedad Tardía como telón de fondo. Bien pensado, me atrevería a decir que sí, que esta es la más épica de mis novelas.

Con seis novelas tiene ya un buen puñado de premios de género histórico (cinco si no me salen mal las cuentas)?, ¿tiene un imán? ¿cómo explica esta situación en un país donde se publica tanta novela histórica?

Lo cierto es que no han sido pocos los compañeros que me lo han preguntado, y, con toda sinceridad, no he sabido qué contestarles. Hasta la fecha todas mis novelas, si contamos la trilogía como una sola, me han permitido alzarme con un premio, de forma consecutiva entre 2020 y 2023. ¿Por qué? Soy incapaz de explicarlo; yo creo que mi secreto, que tampoco creo que lo sea tanto, es tratar de escribir novelas que a mí, como lector, me habrían fascinado, que fueran capaces de hacerme vibrar, sufrir y alegrarme con los personajes y sus vivencias; llorar también, incluso.

¿Cómo explica el éxito de un biólogo, de formación y profesión, en algo tan de letras como la novela histórica?

Al principio pensé que era algo bastante inusual, la verdad, y confieso que me abrumaba cuando mis primeras novelas llegaron a las librerías. Después, poco a poco, pues hasta entonces no me había fijado, fui descubriendo que otros grandes compañeros del género también provienen de disciplinas académicas muy diversas; bastantes, incluso, de mi rama. Así que creo que, al fin y al cabo, lo más importante a la hora de lanzarse a esta aventura de escribir novela histórica son las ganas con las que empieces, el bagaje lector previo, y el amor por las letras, por supuesto; pero también contar con la imaginación necesaria para entretejer una historia de ficción a partir de unos pocos datos históricos. Creo que este es nuestro gran valor, y la gran diferencia que podemos aportar.

¿Qué le supone haber ganado el premio Edhasa?

Para mí ha supuesto un hito importantísimo en mi carrera literaria, además de una alegría inmensa. Un honor, también, pues desde muy joven, y gracias a la colección de Edhasa, me convertí en un amante de este género que tanto nos apasiona.

Ya que ha constatado que los bárbaros le dan suerte… ¿Seguirá escribiendo sobre ellos?

Nunca he escondido que mi zona de confort como escritor abarca desde el final del Imperio romano de occidente hasta las últimas décadas de la alta edad media, y ahí todavía tengo un montón de bárbaros distintos de los que sacar una buena historia…

Puedes seguirme en FacebookTwitter y Goodreads.

Si te ha gustado este post, quizá te interese…

Los comentarios están cerrados.