John Amos es una de esas caras que yo llamo de Andaeste, porque uno nunca tiene del todo claro cómo se llama ni dónde lo ha visto antes, pero lo ves aparecer de repente en una peli o una serie y lo reconoces y dices «¡Anda! ¡Este!».
¿Sí o no?
Bueno, pues el Andaeste de hoy (me estoy pensando si hacer una nueva categoría que se llame así) es John Amos, a quien sin duda habéis visto en multitud de películas y series y de quien os prometí el otro día que haría un post cuando hablábamos del reparto de El príncipe de Zamunda.
Probablemente sea ese el título en el que muchos más podemos ubicar a Amos. Pero hagamos un repaso:
John Amos, hijo de mecánico y nacido en Nueva Jersey en 1939 (por lo que calza 81 primaveras), comenzó su andadura interpretativa en los años ’70 participando brevemente en shows de comedia como el de Tim Conway, el de Bill Cosby o en la magnífica Maude con Beatrice Arthur (Dorothy años después en Las chicas de oro), pero alcanzó la fama a partir del ’74, al protagonizar su propia sitcom: Good Times.
La televisión fue su medio natural durante años, y participó en series y miniseries, tanto cómicas como dramáticas, llegando a interpretar papeles de tantísimo calado como el del propio Kunta Kinte (en su versión «mayor») en Raíces.
Hacia finales de esa década y principios de la siguiente empezó a hacer también películas, primero para televisión y luego dio el salto al cine. En 1982 participó en su primer taquillazo, El señor de las bestias, en el 88 estuvo (como decíamos antes) en El príncipe de Zamunda con Eddie Murphy y, después de cerrar los 80 con Encerrado, de Stallone, estrenó los ’90 en la segunda parte de Jungla de Cristal, con Bruce Willis.
A partir de los ’90, sin embargo, Amos se convirtió en ese tipo de rostro, demasiado conocido para ser protagonista pero no lo suficiente para ser estrella, y quedó relegado al eterno lugar de la «estrella invitada». Seguro que lo recordáis también interpretando al padre de Lisa en El príncipe de Bel-Air.
Desde que empezara este milenio, a Amos se le vuelve a ver sobre todo en series, casi siempre con papel recurrente, casi nunca con papel protagonista. Estuvo, por ejemplo, en Todo sobre los Anderson y en la primera temporada de El ala oeste de la Casa Blanca, y se pasó también por Men in Trees y por episódicos memorables en Me llamo Earl o Dos hombres y medio.
No ha tenido, en los últimos años, prácticamente ningún papel protagonista. Entre ellos están el de Brady en un drama familiar de 2014, Acto de fe, y el del Juez Amos en la serie homónima, de la que se preparó un episodio piloto en 2015 pero nunca llegó a ver la luz.
Como curiosidad, en 2019 participó en un episodio de la webserie Your Pretty Face is Going to Hell, que es de lo último en lo que estuvo el actor Dustin Diamond, Screech en Salvados por la campana, recientemente fallecido.
De los cinco proyectos que sí ha terminado, el próximo que podremos ver es su vuelta a El rey de Zamunda, que se estrenará en marzo en Prime Video, en el papel de Cleo McDowell, el padre de la mujer del rey Akeem. Parece que el papel de suegro le va como anillo al dedo.
