A quienes seáis más jóvenes puede que esto ni siquiera os suene o que, incluso, no hubierais aún nacido. Pero a quienes ya teníamos edad suficiente para que nos pillara un poquín desarrollada la memoria histórica, esto nos acompañará toda la vida: el caso del matrimonio Bobbitt.
En 1993, el matrimonio Bobbitt -formado por Lorena y John- conmocionó al mundo al saltar a todas las portadas por un suceso hasta entonces nunca oído o, al menos, nunca tan verificado a tan gran escala. Los hechos meridianamente probados y reconocidos después fueron que John llegó a casa una noche con un estado de embriaguez importante y tenía ganas de mambo. Lorena se negó, él la forzó, ella se resistió y, finalmente, John acabó violando a su mujer. Cosa que, según dijo luego Lorena, sucedía con demasiada frecuencia (aunque una vez ya es «demasiada frecuencia»).
La diferencia es que, aquella noche, algo en el interior de Lorena se rompió, o saltó o llámalo equis: mientras John dormía, Lorena se armó con un cuchillo y le cortó el pene a su marido. Después huyó de su casa en su coche y kilómetros más tarde -contaba ella-, aún conmocionada, se dio cuenta de repente de que algo en la mano le molestaba y al mirar descubrió que aún llevaba el pene en la mano y, con las mismas, lo lanzó por la ventanilla.
De esto hace ya 27 años. Y si os preguntáis: «¿Qué sería de ellos, tras tan terrible suceso?», os propongo un juego: de los dos miembros de este matrimonio, uno se dedicó al porno y otro preside una organización de ayuda altruista a mujeres maltratadas. Adivinad quién es quién 🙄
Evidentemente, el matrimonió se separó después de aquello (aunque el divorcio tardó dos años en llegar). No mantuvieron contacto a pesar de ser comúnmente invitados a diferentes programas de televisión y, de hecho, después de su separación no volvieron a verse hasta 2009, año en que aceptaron ir juntos a una entrevista en The Insider, en la CBS.
Lorena, que por cierto ya no utiliza su apellido de casada -ahora es Lorena Gallo-, preside en la actualidad y desde 2008 Lorena Gallo Foundation que, según reza su descripción en facebook, es «una organización sin ánimo de lucro que trabaja con varios grupos comunitarios para ayudar a víctimas de violencia de género».
El año pasado, Lorena volvió a colocar su rostro en el punto de mira mediático, porque nada menos que Prime Video estrenó un docuserie con su nombre, Lorena, en el que participaron tanto ella como John.