De la nueva sociedad 3.0 organizada horizontalmente en red que ha enterrado la edad contemporánea. ¡Bienvenidos a la edad digital!

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El rap de la permacultura

PANG feat. MonkeyMixLes potes à Jé”. Así se titula este sugerente videoclip  que Pangy Pang y  Monkey Mix han realizado en conjunto con el colectivo de Bruselas Potagers Urbains. La canción pretende divulgar la permacultura – un concepto que aúna cuidado de la tierra, de personas, sostenibilidad, ética y formación de redes – con una estrategia viral. De hecho, Potagers Urbains, algo así como ‘hortelanos urbanos’, es una plataforma que mapea experiencias alrededor de la permacultura, conecta personas e iniciativas y comparte metodologías».

La letra de Les potes à Jé es un auténtico manifiestoDada su imperfección, apenas incluyo unas frases del traductor  automático del navegador Google Chrome. Quizá sería interesante que alguien subtitule el videoclip en español. Tal vez, incluso alguien se anime a replicar-remezclar la experiencia en España o América Latina.

«El único límite a su producción, amigo / no, no es el sitio / es tu propia imaginación / Entonces, construye enlaces, interconexiones  y verás todo lo que viene, y profusamente / No hay pesticidas o fertilizantes químicos, no jay tractor / Nadie aquí tiene asnos»

Ecología de código abierto

Coalition Of The Willing from coalitionfilm on Vimeo.

¿Qué relación tiene la ecología y el movimiento open source (código abierto)? ¿Qué relación puede tener la lucha contra el cambio climático y el movimiento que batalla para abrir el código de la sociedad y por los estándares abiertos? Algunas de las respuestas están en Coalition of the Willing, el corto de animación que han coordinado el australiano Timothy Rayner y el cineasta británico Simon Robson que abre esta entrada.

El propio Timothy Rayner, en una entrevista concecida a Open Source, reflexiona sobre los puentes entre ambas causas. Una de las que más me interesa es la comparación entre el movimiento contracultural de los años 60 y el movimiento open source: «Los radicales de los 60 cogieron fuerza basados en su lucha común. El camino open source podría unir las luchas contemporáneas en un movimiento global». Y tiene toda la razón. Pero tenemos que pasar página. Los conceptos-acciones-prácticas mutan. Las banderas se remezclan en red. Una nueva identidad colectiva está fagocitando todo lo que conocíamos. Y nos lo devuelve transformado.  La resistencia da paso a la resiliencia. La contracultura a la cibercultura o a  la permacultura. El pueblo unido (jamás será vencido) se trasforma en el pueblo distribuido. No sirven las viejas fórmulas. El documental Coalition of the Willing ha sido realizado de forma colaborativa, distribuida, por muchos equipos de animadores. Y financiado con crowd funding. ¿Qué mejor prueba de que los tiempos están cambiando?

El movimiento open source va muchísimo más allá de luchar por la apertura del código de programas y/o sistemas. Las dinámicas colaborativas que genera tener el código abierto son el eje común, efectivamente, de todas las luchas. Y la ecología es una de las más importantes.  Ya he citado en este blog el proyecto Open Source Ecology, una red que está trabajando en un kit global de construcción que garantice la independencia tecnológica de pequeños agricultores. Muy recomendable es el proyecto EcoHacking, de Our Project, que incentiva la licencia copyleft en las semillas para proteger la biodiversidad de la depredación de las multinacionales. Vale la pena echar un ojo a la guía de permacultura urbana que nació con proceso de #crowdfunding. Y para acabar, recomiendo encendidamente esta entrada de Wikipedia sobre las Redes de Intercambio de Semillas (semillas P2P).

Este post no existiría sin los consejos de @ComandanteTom_  y Vicente Jurado (@vjrj)

 

 

 

Baila en tu plaza, pásalo

Una frase clásica: «Si no puedo bailar, tu revolución no me interesa» (Emma Goldman). Una idea: salgamos en masa a las plazas, bailemos juntos. Un sueño: los ayuntamientos colocan un suelo especial que convierte el movimiento de las multitudes inteligentes (y bailongas) en energía. Cada paso, es una zancada de sostenibilidad. Cada danza coral, un baño de energía limpia.

Ahora, para llegar al párrafo-sueño, coloquemos algunos peldaños de esta escalera bailable. La tecnología para convertir pasos de persona en energía ya existe. La empresa Pavegen se ha especializado en ello. Y alguna marca ya ha sacado tajo de tan inspiradora idea. Johnny Walker convirtió gracias a su Keep on walking project  42.000 pasos colectivos en energía eléctrica. Y una excelente noticia para nuestra escalera al cielo bailable: ya existe una discoteca que transforma en energía los movimientos de sus clientes en la pista. La organización londinense Club4Climate  abrió un club en King´s Cross que convierte el baile en energía limpia. Y ya piensa abrir sucursales en Nueva York, Ciudad del Cabo y Rio de Janeiro.

La calle es nuestra. ¿O apenas pertenece a marcas de whysky que incentivan el pelotazo fácil? ¿Y si Rumba rave, el ya mítico flash mob que puso a bailar flamenco a varias activistas en un banco, se traslada a las plazas y encima produce energía limpia? ¿Y si el super concurrido y curioso Experimento MP3 que abre con un vídeo esta entrada generase electricidad?  Sigamos subiendo esta escalera-sueño. Es sólida, creéme: los visionarios de Pavegen, que están experimentando su tecnología en East London, no están solos. El estudio madrileño Ecosistema Urbano ha desarrollado un proyecto que convierte la energía el movimiento de un carrusel de feria. El Dordrecht Energy Carousel, llevado a cabo en Holanda, enreda con sutileza ludismo, espacio público y ecología. No te cortes: juega, comparte. Crea energía. Baila con otra persona.

Tras el espectacular éxito de Acampada Sol, que consiguió el premio especial del público en los Premios Europeos Espacio Urbano 2012, la mutación de las plazas ocupadas bien podría ser un baile. Si los gobiernos fuesen innovadores (y ahorradores) invertirían en el pavimento bailable-capta-energía. Incentivarían el mambo del procomún en cada plaza. El chachachá del copyleft en cada esquina. El tango del P2P. Las bulerías de la sostenibilidad. Sin embargo, creo que de momento, los Gobiernos están dejando de lado los bailes agarrados del colectivo. Prefieren el death metal de los mercados o el techno machacón y alucinado  de los recortes.

Imagen del proyecto Dordrecht Energy Carousel de Ecosistema Urbano.