Javier Olivares: «En Felipe II está el origen de esa actitud política española de mirar a otro sitio y dejar que los problemas se pudran solos»

Javier Olivares (© Asis G. Ayerbe / cedida por Ediciones B)

Si piensas en un nombre que, en la actualidad, haya sabido sacar partido a la unión entre historia y ficción con indudable éxito, es probable que pienses en Javier Olivares (@olivares_javier en Twitter), creador de series como Isabel, Víctor Ros o la reciente El Ministerio del Tiempo. No sólo parece lograrlo en pantalla, sino también con sus novelas. En estos días lanza su segunda novela Felipe. Heredarás el mundo (Ediciones B, 2015). Un novelón de casi 800 páginas que repasa la vida de Felipe II desde una perspectiva muy humana.

Llega a la entrevista en un hotel de la Gran Vía madrileña, como un escritor sin prisa, con ganas de hablar de su libro, de su serie, de la historia o de lo que se tercie. «No me gusta la política ni dar mensajes», dice en un momento, «mi pensamiento está en lo que escribo». Sin embargo, sus palabras evidencian una visión combativa y muy crítica sobre la televisión, la política, la literatura, la historia… Durante la entrevista, le gusta ejemplificar con detalles históricos. La familiaridad con el pasado es tal que habla de sus reyes, sin necesidad de ordinales, ni sobrenombres: Isabel, Carlos y Felipe.

Historiador de formación, documentalista, guionista, productor,… su carrera incipiente como novelista tiene mucho que ver con su éxito en la ficción televisiva. Y con los reyes. Su primera novela, Isabel (Plaza&Janés, 2012), nació gracias a su creación televisiva, y la segunda se origina en la serie que querría haber hecho.

Mientras la televisión apuesta por una serie sobre Carlos I (y V de Alemania), apuestas por una novela sobre Felipe II…

Cuando se hablaba de hacer una serie sobre Carlos dije en una entrevista que era un error porque no hablaba español  y porque era muy difícil empatizar con él. Era un señor que vino aquí sólo a llevarse el dinero.

Hoy no suena tan raro…

Sí, un alemán (bueno, un Habsburgo) que se lleva dinero de aquí, eso ya lo conocemos bien ahora.  Así que dije que yo haría una serie sobre Felipe. Con Felipe puedes empatizar en parte o criticarle en gran parte. Recibí una llamada de la editorial y me dijeron ¿por qué no haces una novela sobre él? Y me puse.


Con Carlos V es muy difícil empatizar. Era un señor que vino aquí sólo a llevarse el dinero


¿Sólo por eso elegiste a este personaje histórico para tu novela?

Los tres momentos de la historia en los que España puede ser una cosa u otra son Isabel, Felipe (con un punto anterior que son los comuneros) y Fernando VII y la Guerra de Independencia. Son los tres momentos en el que este país se va al traste. Y como historiador, son mis tres temas predilectos.

Felipe II es un personaje marcado por dos leyendas. La del rey prudente, con un imperio donde no se ponía el sol y la leyenda negra…

Esos son tópicos. Felipe es el blanco y el negro, a la vez. Era tantas cosas a la vez, que no se le puede definir. Cada episodio de su vida es una película. Es el gran rey para entender el momento máximo de la historia de España, pero también acaba siendo una oportunidad perdida de habernos constituido como una gran potencia. Es el inicio del declive. El primer Felipe, que firma como príncipe, se opone a su padre para que no esquilme a Castilla. Cuando él es rey, es él el que la esquilma. Su evolución es la prueba de cómo el ser humano se adapta al medio y cómo el medio acaba cambiando al ser humano. Es la prueba de que el poder absoluto corrompe absolutamente.


Felipe II es la prueba de que el poder absoluto corrompe absolutamente


Carlos I y Felipe II, en un óleo de Antonio Arias Fernández.

Carlos I y Felipe II, en un óleo de Antonio Arias Fernández.

¿Eran tan diferente de su padre, el emperador Carlos?

Son opuestos, aunque Felipe juega a ser Carlos para compararse con el padre. Carlos es cerebro pero, sobre todo es acción y garra. Felipe es organización y estrategia alambicada, a veces hasta la extenuación.

¿Era un rey burócrata?

Sí. Hasta sus asesores le llegaron a insinuar que diera salida a sus papeles más rápido.

¿Por qué crees que era así Felipe II?

20435gLa educación que se le da es que oculte sus emociones y desconfíe. Hay unas instrucciones de Carlos en la que les dice que escuche y aprenda de los viejos y que no se junte con los jóvenes. Y a los consejeros viejos los describe a uno como ambicioso, a otro como un envidioso… Así que también le dice que desconfíe. Y después de leer esto, le dice, quémalo y que no lo vea ni tu mujer.  Así se educa a un niño. Multiplica esa desconfianza por toda la vida: ése era Felipe. Carlos le puso una casa propia a su hijo para que no estuviera rodeado de faldas, para que no fuera demasiado sensible.

¿Se parece a los políticos de hoy?

En Felipe está el origen de esa actitud política española de mirar a otro sitio cuando hay un conflicto y dejar que los problemas se pudran solos. Y no lo digo yo, lo dice Geoffrey Parker que sabe de él mil veces más que yo.

¿Y la España de entonces a la de hoy?

Con la preparación de la Armada Invencible, te das cuenta de lo que es, ha sido y será este país a nivel de ‘cerebros privilegiados’. Ves cómo se puede poner en manos de alguien que no sabe de navegación una empresa marítima. Ya desde el segundo viaje a América se estaba estafando. España es así, y no lo digo para que lo asumamos, sino para que lo veamos y digamos que ya basta de que sea así. En ese momento, también te das cuenta de cómo el concepto de España y Castilla se han mimetizado y cómo muchos de los problemas que tenemos ahora vienen de ese concepto castellanocentrista de España.


La cultura y el conocimiento genera gente crítica, con mayor capacidad para discernir quién es un trilero


Si te refieres al debate soberanista catalán, en ese conflicto las versiones de la historia de cada bando no pueden ser más distintas…

Si la gente leyera más, las visiones de la historia de ambas partes serían más reconciliables. Se darían cuenta de que el grito de las tropas catalanas que resistían a los Borbones era por Cataluña y por España. Soy madrileño y hablo catalán y he escrito series en Cataluña. Nadie analiza cómo se ha llevado el conflicto en Cataluña. Hay dos partes a las que les conviene que siga para que no se hable de otras cosas. Sí creo que Cataluña ha sufrido una desafección continua  e insistente, pero tampoco se nos puede olvidar que en la época de Isabel ya se decía que los peces tenía las cuatribarradas, porque todos los tratados de navegación estaban en catalán. Si la gente leyera historia, llegaría a acuerdos más rápido. La cultura y el conocimiento genera gente crítica, inteligente, con mayor capacidad para discernir quién es un trilero.

Así que cuando hablas del pasado, también hablas del mundo en el que vives…

Tengo una frase que algún día esculpiré en mi casa: No se puede viajar en el tiempo en vano. Antes, para criticar la sociedad en la que vivías tenías que hacer ciencia-ficción. Huxley, K. Dick, Orwell… viajaban al futuro para que no les metieran en la cárcel. La historia, ahora, es la nueva ciencia ficción. En España es tal el desconocimiento y la falta de cariño a la historia, y somos tan acríticos con ella, que hablar de la historia no es ver ya de dónde venimos sino ver lo que nos está pasando.

Además, has sabido dar con el truco de contar la historia como el público actual desea…

El truco no es hacer un resumen. Mis textos son muy fáciles de leer pero tienen una gran complejidad. Yo cuento lo que me emociona y lo cuento en imágenes. Recuerdo con imágenes y he aprendido a escribir en  imágenes, leyendo literatura, porque leyendo imaginas y generas imágenes. Precisamente me quejo de que muchos guionistas españoles solo ven series y no leen. No saben generar imágenes, sólo las replican.

Procuro generar historias donde los personajes no sean avasallados por los hechos históricos que todos conocemos. La Wikipedia es una cosa; la novela, otra. Para preparar Felipe me documenté rigurosamente: tenía unas 300 páginas entre cuadrantes y esquemas. Después establecí un hilo narrativo que recorriera toda su vida a través de grandes conceptos. Lo escribí con capítulos no muy largos pero sí de gran impacto emocional.


En este país hay un gremio que dice lo que te tiene que gustar y lo que no. Hasta que no rompamos con esos programadores de nuestro intelecto, este país estará atado a una cultura cicatera


¿El truco, entonces, es hacer la historia entretenida?

¿Quién dice que la historia es aburrida? ¿Los que quitan horas de historia y filosofía de los planes de Educación? En este país hay un gremio, que tiene poder, que dice lo que te tiene que gustar y lo que no. Hasta que no rompamos con esos programadores de nuestro intelecto, este país estará atado a una cultura cicatera. El problema es que muchos de ellos son políticos o tienen altos cargos en cadenas televisivas. La gran rebelión que hay ahora en el mundo cultural es que la gente se niega a ver lo que otros le programan. Y surge Internet, Netflix… y nos encaminamos a un punto de salida donde no hay puertas en el campo.

Fotograma de El Ministerio del Tiempo

Fotograma de El Ministerio del Tiempo

Ahora mismo, estáis rodando la segunda temporada de El Ministerio del Tiempo, ¿qué nos deparará?

Empezaremos la temporada con el Cid y la difícil barrera que hay entre la historia y la leyenda. Además, mezclamos a tres personajes como Spínola, el Cid y Alonso de Entrerríos que nos sirven para hablar de lo mal que trata España a sus héroes.

¿Vamos a notar alguna novedad en la serie?

La primera temporada estuvo muy marcada por el duelo por mi hermano, que tuvo la idea original, y por mis sentimientos. Ahora hemos dado un paso adelante y hemos decidido hacer una segunda temporada más de aventuras, con ritmo, con más conceptos, más homenajes pop. Teníamos que seguir adelante para tener vitalidad. No hacemos culebrón, así que no podíamos seguir dando vueltas a la historia de la mujer fallecida.

¿Cómo te sientes al transmitir la historia al gran público y tener éxito?

Es mi función social. Lograr que Lope de Vega sea Trending Topic (como ocurrió con esta serie) emociona porque te dice que no todo está perdido.

¿Y saldrá Felipe II?

Aparecerá esta misma temporada.

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4 comentarios

  1. Dice ser logo

    Hala, entonces Rajoy es descendiente de los Austrias, toma ya.

    19 noviembre 2015 | 08:37

  2. Dice ser AreaEstudiantis

    El libro tiene que ser interesante, aunque discrepo en algunas cosas.

    http://areaestudiantis.com

    19 noviembre 2015 | 08:58

  3. Dice ser rusfi

    Los polvorones «Felipe II» están de muerte

    19 noviembre 2015 | 11:02

  4. Dice ser Nemigo

    coincido en que en españa no se ha sabido contar la historia, más que nada porque a los que la enseñan no les gusta, no la entienden y tampoco les interesa. El único interés ha sido imponer una visión histórica por parte del poder y así es imposible aprender nada. Es pensar en la guerra civil española y da vergüenza la manipulación

    19 noviembre 2015 | 11:51

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