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Entradas etiquetadas como ‘recortes’

Centralizar la sanidad

Por Rafael Ayala Marín

Últimamente, se está dando en Córdoba algo que, si bien, por un lado puede ser una medida de ahorro positiva para la sanidad y organismos públicos, por otro lado, puede ocasionar un cierto trastorno a los ciudadanos en general.

Me refiero a la apertura reciente del Centro Sanitario Castillo del Pino, en la barriada del Arroyo del Moro, conllevando el cierre de centros como el de Colón o el de la Avenida de América.119363

Ignoro la opinión de los demás ciudadanos, pero pienso que centralizar la sanidad en un solo edificio o zona, llevaría consigo una incomodidad mayor al tener que desplazarnos a una distancia mayor. Evidentemente, no es lo mismo tener el médico en cada distrito o zona a un paso, que llevarlo todo a una parte concreta de la ciudad, aunque ello suponga supresión de gastos.

Evidentemente, es difícil compatibilizar ambas cosas. No todo en este mundo se puede conseguir. Sin embargo, invito a la reflexión acerca de este tema y a ver si buscamos entre todos una solución que satisfaga a la población en general, aunque reconozco que es compleja.

Recortes en las ayudas sociales

Por Lalo Monsalve

De un tiempo a esta parte, en casi todos los hogares, suele haber una maquinilla eléctrica para cortarse el pelo, lo cual ha tenido como resultado un duro golpe para las tradicionales peluquerías de caballeros.

Cuando yo era niño iba a la peluquería acompañado por mi madre, a la que le preguntaban: “¿Cómo quiere usted que se lo cortemos al chaval?”. “A tijera, cortito y a raya”, contestaba ella. Otras madres preferían otros estilos. Por ejemplo: “A navaja” o “A lo Marlon Brando”. A algunos les recortaban más el flequillo que a otros, y lo normal es que te dejasen perfilado el cabello del cuello, a la altura de la nuca, en línea recta o curva. Esos son los recortes que yo recuerdo de mi infancia.117166

En nuestros días proliferan otro tipo de tijeretazos, que van directos al bolsillo del ciudadano. Han comenzado por la Sanidad y la Educación, pero también hay otros distintos a las meras subidas de precios y de tributos directos e indirectos.

Me comentan que a los funcionarios les están reduciendo brutalmente las ayudas sociales de un año a otro. Ese tipo de ingresos también existen en las empresas privadas, sobre todo en las grandes compañías. No olvidemos que resulta gratificante y estimulante para cualquier trabajador o empleado público recibir una ayuda para cubrir parte de los gastos de transporte, de dentista, de gafas o lentillas, o para los costes derivados de los estudios de los hijos.

Pues bien, hay organismos públicos en los que el montante global de las ayudas sociales se ha reducido un 80 % y corren el riesgo de desaparecer en un par de años. Es decir, no sólo les reducen el sueldo a los funcionarios o se les congela de manera permanente sino que, además, les van a dejar sin las ayudas de carácter social, e incluso está en peligro hasta el abono para el transporte público.

Estamos hablando de cantidades totales de unos 150.000 euros al año para una institución en la que trabajan unas 400 personas. O sea, un importe similar al de los presuntos sobresueldos individuales que percibían, de manera poco clara, determinados miembros de cierto partido político.

En definitiva, después de tantos y tantos años, volvemos a recordar la tijera y nos vamos todos a casa más cortitos y, desde luego, a raya. Nos mantienen a raya. Y lo que nos espera.

La educación universitaria vista por una madre

Por Alicia Pinillos

Solo soy la madre de uno de los miles de estudiantes que tiene la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense de Madrid.

Cuando mi hija comenzó los estudios de Grado en Derecho, le aconsejé que lo hiciera en la UCM, pensando en el prestigio de la Universidad y en una buena formación.

Desde el primer momento, durante la matrícula, ya se vió que el personal no estaba precisamente motivado y dispuesto a ayudar a los nuevos alumnos, pero bueno, eso es algo con lo que cuentas. Le dices a tu hija: “cariño esto no es el colegio, esto es la administración pública, vete acostumbrando”.

Pero eso era solo la punta del iceberg. A cada paso que daba se encontraba con más obstáculos, no hay interés formativo, académico, administrativo ni humano. Ellos quieren formarse, pero todo son zancadillas. Para no hacer esta carta un diario interminable, intentaré hacer un resumen de lo que cualquier estudiante se encuentra durante sus estudios en la citada universidad:

Matrícula anual: te asignan un día determinado y si no has tenido suerte de ser de los primeros, te quedan disponibles los grupos y profesores que no quiere nadie, y ¡no se confundan¡, no es que busquen los que aprueban sin corregir, buscan los que aparecen por clase, los que explican aunque sea algo, los que no se buscan sustitutos de todo el cuatrimestre, los que al corregir sean correctos, etc.Universidad Complutense de Madrid

– Asignaturas que se solapan, ¿cómo puede ser que quien realiza los grupos no se dé cuenta de que un alumno no puede estar en dos clases a la vez? Y tampoco tienes ningún interlocutor válido al que dirigirte. Si además tenemos en cuenta el sistema Bolonia, pasan lista y la asistencia puntúa.

– Los profesores son de la antigua escuela, pero en el peor de los sentidos:

Por ejemplo, el profesor dice: “suspendida por no entregar los trabajos». «Pero si están entregados, los hicimos durante las clases a las que tiene constancia que asistí”, respondió la alumna. Mi lectura: se han perdido pero no lo voy a admitir. Venga te apruebo pero que no se entere nadie.

Otro ejemplo, en una revisión de examen un alumno: «perdone, ¿puede indicarme en qué ha fallado para haberme suspendido?”. “¡Das demasiada información!”, contestó el profesor.

– Los profesores no merecen llevar ese nombre, solo quieren vender su libro, imprescindible si quieres aprobar. Se buscan sustitutos, tienen otras ocupaciones, no explican las cosas, no corrigen de manera coherente, no motivan porque ellos ya no se acuerdan de qué es eso, llegan tarde a clase o directamente no van y tampoco avisan, no está interesados en la formación, explicación de la materia o cualquier otra tarea que un buen profesional tendría en cuenta. Muchos se limitan a indicar un tema del que deberán hacer una exposición, sin explicación previa ni posterior, ¿dónde está ahí la enseñanza?

– Muchos tienen otras ocupaciones (remuneradas o no) que les ocupa su maravilloso tiempo, por lo que no aparecen y siempre hay sustitutos inexpertos en su lugar.

Para colmo de males la universidad pública ya no merece llamarse así, el recorte en las becas y las subidas de tasas, invitan a todo aquel que pueda a irse a una privada. Por desgracia pertenecemos a esa clase media en vías de extinción, con trabajos mal pagados que solo permiten sobrevivir.

A todo esto se le podrían sumar mil historias y detalles más, pero sólo quiero añadir una, como ya he dicho según Bolonia, el alumno debe estar siempre en clase, así que no tienen la opción de estudio/trabajo para colaborar en el pago de las asequibles tasas, que nos subirán un 20 % este año.

Por todo y más, no puedo dejar de dar las gracias a nuestros gobernantes.

Muchas gracias señores, ya les queda poco para que solo sus hijos y los hijos de sus amigos sean los únicos que campen por las universidades españolas.

Desamparo para las víctimas del machismo

Por Geni Bolaños

Con tantas cosas como este Gobierno tiene que hacer en materia de derechos sociales, la ministra de Sanidad, Ana Mato, se descuelga con un cambio de criterio para elaborar las estadísticas sobre las mujeres que sufren violencia machista. Se excluirán todas aquellas cuyas lesiones no requieran un ingreso hospitalario de al menos 24 horas. Y ¿el daño psíquico o el miedo a oír que se abre la puerta de la calle? Cómo se mide el temor a una represalia violenta por cualquier cosa que se haga, que no se haga, que se diga o que se calle. Ana Mato

Es el miedo en esencia pura. Tantos años luchando para que las mujeres vencieran su miedo a denunciar, para que confiaran en las instituciones, para que aceptaran la mano tendida que se les tendía (y tiende) para que lucharan por tener una vida libre sin seguir al lado de su potencial asesino. Todo puede saltar por los aires. La ministra Mato quiere maquillar un comportamiento cobarde, cruel, permanente y muy peligroso para esconder otra nueva medida oculta que resulta de las políticas de austeridad. Se trata de recortes económicos, así de sencillo.

La sociedad se encuentra indefensa, únicamente conoce la ruindad de las medidas adoptadas por el Gobierno cuando se encuentra, como individuo indefenso, ante una situación concreta. Es entonces cuando nos enteramos de que no tenemos los mismos derechos, que las cuantías son inferiores, que el repago se ha ampliado o que, sin más, nos han dejado expuestas a la violencia, a la falta de asistencia médica o de protección social. Nuestro Estado se está haciendo cada vez más pequeño, menos protector. Se agiganta su imagen depredadora. Se ha convertido en una boca de pedir. Lo malo, malísimo es que da de comer a los de siempre. Indignación con mayúscula.

El optimismo empieza a cotizar al alza

Por Suso do Madrid

Mariano RajoyEl presidente del Gobierno mantuvo desde que conoció en profundidad la realidad española que no hay milagros en economía que conviertan recesión en prosperidad de forma automática. Negar que la política del Ejecutivo haya logrado progresos sustanciales que permiten atisbar la recuperación sería falsear la realidad. La positiva evolución del PIB, del IPC, del paro registrado, de las exportaciones, del turismo, de la prima de riesgo, del déficit público, de la inversión extranjera y de la balanza exterior no es casualidad ni responde a episodios espontáneos, sino a una política de rigor, contención y equilibrio que permite al fin un cierto optimismo.

Tenemos más ricos

Por Enrique Chicote Serna

MillonariosLeo que según el Informe Anual sobre la Riqueza en el Mundo elaborado por dos empresas especializadas, España acabó el año 2012 con un total de 144.600 riquísimos. En términos comparativos, significa que entre nosotros hay circulando un 5,4% más de potentados que en 2011. Si la tendencia es: a mayor crisis general, mayor número de multimillonarios, no es descabellado pronosticar que de confirmarse las previsiones de los distintos organismos internacionales sobre la economía española, llegaremos a finales de 2013 con un nuevo crecimiento de gentes que nadan en la opulencia. Luego dicen que las medidas del Gobierno no están dando frutos.

Esta casa es una ruina

Por Ignacio Caballero

Aeropuerto de CastellónHay ciudadanos que no salen de su asombro al contemplar que nada ha cambiado a pesar de la crisis. Seguimos descubriendo escándalos de comisiones que, como poco, suponen seis meses del salario medio que tenemos los españoles, excepto algunos ponentes ilustres que ganan diez mil euros por una hora de trabajo en una conferencia o determinados políticos se reúnen con ellos mismos y además cobran dietas. Además de los que viven en la misma ciudad que trabajan y en la que tienen varias casas en propiedad, porque curiosamente algunos partidos políticos tienen tanto dinero (nuestro) que pueden hacer préstamos sin intereses.

No consuela demasiado la alternativa, que propone descentralizar la justicia para multiplicar por diecisiete este disparate de competencias y gastos superfluos. Las autopistas ruinosas las vamos a pagar entre todos aunque no sepas ni dónde están, ni por qué se construyeron (si lo supieras igual tendrías los avales para presidir la Casa Blanca). ¿Por qué nos extraña que se sigan inaugurando kilómetros de alta velocidad en un país que acumula aeropuertos que son monumentos al despilfarro? Lo triste es que sigamos presumiendo de tener más kilómetros de AVE que nadie, sin pararnos a pensar que igual en otros países las cosas no se hacen de forma descerebrada.

Es triste ver al heredero, que sigue leyendo los discursos como su padre porque ha decidido no trabajar en preparárselos un poquito, soltar palabras banales hijas del copy-paste mientras la Educación y la Sanidad están siendo desmanteladas y muchos de nuestros hijos están malnutridos.

Todo esto resulta profundamente bochornoso, pero es comprensible que siga ocurriendo. Porque todos y cada uno de los inútiles y ladrones que nos gobiernan, cuyo sueldo de un año supone el precio de la casa que muchos españoles tardarán décadas en pagar, se siguen aprovechando del poder. Saben que no tendrán que responder penal ni económicamente por nada. Ni por un aeropuerto sin aviones, ni por una ruina de autopistas, ni por el saqueo de las cajas, ni por un túnel mal hecho en el paraíso natural, ni por un submarino que pesa demasiado, ni por dejar una ciudad endeudada hasta las cejas de su mentor pero con aspiraciones olímpicas. El problema es que no vayan a la cárcel por su mala gestión y, lejos de eso, algunos de ellos reciben homenajes o son premiados con Ministerios. Para colmo me entero de que en este país sigue siendo noticia que una serie de televisión se estrene, por fin, doblada al castellano. La guinda. You know what I mean.

¿Desiguales o desigualdades?

Por Victorio Martínez

Mapa muncial de la desigualdadLas personas por naturaleza no somos iguales. Hasta ahí bien. Pero a partir de ahí, según el Gobierno de turno y las políticas que desarrolla, vienen los problemas y las desigualdades.

Qué casualidad que siempre perdemos los mismos: el 99% de la sociedad. ¿Cómo es posible que el 1% dominen al resto de la ciudadanía? Pienso que la culpa es nuestra, del 99%. No actuamos cuando nos quitan lo nuestro. Tampoco hacemos nada cuando recortan nuestros derechos que tanto esfuerzo y lágrimas nos han costado. Miramos el fútbol, ¡ojo!

Por eso las élites nos quitan lo nuestro y nos obligan a cumplir so pena de sanción o cárcel lo que ellos incumplen todos los días. Saben que no tienen razón pero su billetera se llena de nuestro dinero. Durante esta crisis provocada, que se inició en aquel verano de 2007. Desde entonces nosotros somos más pobres y ellos, los poderosos, más ricos. A partir de aquí aumentan las desigualdades entre los pueblos y en los pueblos entre los ciudadanos.

No se puede permitir que haya menores pasando hambre y mayores sufriendo necesidades. Es inhumano que se gaste en un retrato de un político más de 100.000 euros, en fanfarrias religiosas y otras inutilidades de alta alcurnia política y que haya niños que no tengan para comer o personas mayores que tengan que dejar de tomar medicamentos que necesitan para vivir. Esto son desigualdades. Que paguemos impuestos y ellos defrauden también son desigualdades.

Es urgente actuar para evitar y prevenir las necesidades en la parte más débil de la población: niños, mayores y personas con discapacidad. La escasez aumenta en la mayoría de la población por culpa de los recortes del Gobierno de Rajoy y por la falta de unas medidas de prevención. Seguimos siendo desiguales por naturaleza, con muchas desigualdades por inhumanidad política.

Nos dejan sin talleres de bailes madrileños

Por Luisa Molina

C:UserslbelenguerPicturesTU BLOGch0001.JPGEscribo en nombre de un grupo de doce mujeres que durante bastantes años, algunas hasta 20, hemos estado asistiendo al taller de bailes regionales madrileños en el Centro Cultural Puerta de Toledo, en el distrito Centro de la capital.

El objetivo de nuestra carta es mostrar nuestro disgusto y perplejidad por la supresión de dicho taller de la programación para el próximo curso 2013/2014. Este centro cultural era el único en el que se impartían bailes regionales madrileños en todo el municipio de Madrid.

¿Les parece comprensible que en Madrid, en el próximo curso, no se enseñen bailes típicos madrileños en ningún centro cultural?
¿Se imaginan ustedes que en los centros culturales de Zaragoza no se impartieran clases de jotas? ¿O que en los de Sevilla no se dieran clases de sevillanas? Creo que para la mayoría de nosotros esto resulta impensable.

Desde luego pensamos que no es la mejor forma de conservar y promover las costumbres y el folclore típico de Madrid. Es una verdadera lástima que en esta ciudad no se fomente la afición y el respeto por nuestra tradición cultural.

La educación y la buena educación

Por Julio Domingo Jiménez Ledesma

A estas alturas, de todos será ya sabida la noticia de que unos universitarios se han negado a saludar al ministro Wert durante un acto de entrega de premios en los que ellos eran los ganadores. “Para protestar por los recortes de educación”, dice la gente, pero más bien me parece que en lo que se ha recortado es en “buena educación”. Y es un defecto demasiado extendido entre el español de a pie. Ante todo en esta vida hay que ser educados, así me han educado a mí, e intento ser educado incluso con aquellas personas a las que no aguanto, entre las que se incluye el citado ministro. Dejándolo en ridículo en directo ante media España no vas a quedar por encima de él, sino que se va a demostrar lo barriobajero que puedes llegar a ser.

Así pues expresé mi oWertpinión al respecto, educadamente, a través de un tuit. “Y no me parece bien que esos universitarios le hayan negado el saludo a Wert. En esta vida, ante todo, hay que ser educado.” En las contestaciones a dicho tuit, como se suele decir, me han dicho de todo menos bonito. Y ello me ha llevado a preguntarme. ¿Dónde ha quedado la buena educación? ¿También la han recortado y no nos hemos dado ni cuenta? ¿Dónde ha quedado el debatir civilizadamente sin mentar a la madre de ninguna de las dos partes? Porque, señores, en esta vida hay que ser educado ya seas ministro o panadero. Si no estás de acuerdo con alguien, insultándolo o dejándolo en ridículo no vas a conseguir nada. De hecho le vas a dar la razón a él. El tiro por la culata, vamos.

Y no, no soy un viejo carcamal de 70 años que añore los años del franquismo (como me dijeron en uno de los citados tuits), sino un universitario más como los premiados con matrículas de tercera y cuarta convocatorias que no ve un duro de becas, el primero que le diría cuatro cosas a Wert si lo tuviera delante de mí, pero cuatro cosas sin perder la buena educación. Al fin y al cabo, es lo único en lo que no nos pueden recortar.