Pocos pobres diablos han sido tan odiados en la pantalla como Joffrey Baratheon, el repelente King Joffrey de Juego de tronos.
La ficción de HBO, basada en la saga de libros de Canción de Hielo y Fuego de George R. R. Martin, fue llevada al streaming entre 2011 y 2019. En cuatro de sus ocho temporadas, Joffrey Baratheon, el joven rey de 14 años, tuvo tiempo suficiente para despertar los más oscuros sentimientos entre los fans de la serie. Tanto fue así que a Jack Gleeson, el actor encargado de darle vida, su personaje le pasó alta factura.
Quién no recuerda Love actually, ¿verdad? Madre mía, Love actually, qué chulada de película. Esta historia la he contado más veces: una vez conocí a un chico cuya primera recomendación de cine para mí fue esta peli y, cuando vi la peli, me dije: «este tipo sabe lo que hace». En breve haremos dieciséis años juntos.
Love actually, estrenada en 2003, es una de esas maravillosas tramas de vidas paralelas e historias cruzadas, que meten un reparto tan exacerbado de estrellas que te hace sentir experto porque “las conoces a todas”, lo que te deja un buen sabor de boca extra y es parte del éxito de la cinta. Emma Thompson, Hugh Grant, Alan Rickman, Keira Knightley, Colin Firth o Liam Neeson son sólo algunos de los nombres que luce en sus orgullosos créditos. Y no solo eso: es que además la película ha envejecido (sí, envejecido) estupendamente bien, que no es algo que pase con todas cuando las miras desde el filtro de unos añitos de evolución social.
Entre todo este mogollón de conocidos adultos enamorándose unos de otros, un niño protagonizaba su propia historia: Sam (Thomas Brodie-Sangster), hijastro de Daniel (Liam Neeson) quien, a su vez, lloraba la reciente pérdida de su esposa. Sam se enamoraba perdidamente de su compañera de clase Joanna (Olivia Olson) y su estrategia para llamar la atención su atención fue aprender a tocar la batería para participar junto a ella en la actuación de Navidad del colegio, que fue el punto álgido de la película para muchas de las historias.
¿Qué ha sido de la más joven pareja de la peli de amor por antonomasia?
Hace nada menos que tres años ya que le escribí un post a este muchacho, y lo voy a recuperar porque, claro, asomó su naricilla (en sentido bastante literal, porque se ha pasado media serie con la cara enterrada debajo de un sombrero) en Gambito de dama, que lleva semanas arrasando día tras día en Netflix, y tengo que recuperarlo.
Vamos a empezar un poco por el principio: ¿os acordáis del peque de Love actually, verdad? Madre mía, Love actually, qué chulada de película. Una vez conocí a un chico cuya primera recomendación de cine para mí fue esta peli y, cuando vi la peli, me dije: “este tipo sabe lo que hace”. Quince años, llevamos juntos.
Love actually, estrenada en 2003, es una de esas maravillosas tramas de vidas paralelas e historias cruzadas, que meten un reparto tan exacerbado de estrellas que te hace sentir experto porque “las conoces a todas”, lo que te deja un buen sabor de boca extra y es parte del éxito de la cinta. Emma Thompson, Hugh Grant, Alan Rickman, Keira Knightley, Colin Firth o Liam Neeson son sólo algunos de los nombres que luce en sus orgullosos créditos.
Entre todo este mogollón de conocidos adultos enamorándose unos de otros, un niño protagonizaba su propia historia: Sam, hijastro de Daniel (Liam Neeson) quien, a su vez, lloraba la reciente pérdida de su esposa. Sam se enamoraba perdidamente de una compañera de clase y su estrategia para llamar la atención su atención fue aprender a tocar la batería para participar junto a ella en la actuación de Navidad del colegio, que fue el punto álgido de la película para muchas de las historias.
Pues este nenín tan resalao, que llevaba solo dos años en esto del cine y que nos enamoró a todos con su actuación de fin de curso, era Thomas Brodie-Sangster. Y hay que decir que, a pesar de que entonces tenía trece añines y ahora luce treinta, se le sigue reconociendo perfectamente. Y así seguirá siendo, mientras no le salga toda la barba, porque está idéntico a como estaba entonces. Más alto, eso sí. Mucho más alto:
Thomas junto a Kaya Scodelario, en 2015 (GTRES)
Y, además, seguro que en estos años lo habéis visto en más de una ocasión.
Por supuesto, ha seguido paseándose por la pantalla grande, y además muy a lo grande. Ha participado en producciones como La niñera mágica (de nuevo junto a Emma Thompson), Tristán e Isolda (en que era la versión joven de Tristán) o La última legión (con Colin Firth).
Pero más recientemente ha aparecido en películas tan sonadas como la trilogía de El corredor del laberinto.
O anunciando una salida no autorizada desde el muelle 2 en Star Wars: El despertar de la fuerza.
Aunque hay que decir de Thomas que ya era un animalillo de televisión antes de Love Actually y, después de ella, no dejó la tele. Ha aparecido en varias series, como en Feather Boy, interpretando a Robert Nobel, en la reciente Wolf Hall, o en algunos capítulos aislados de Lewis o Doctor Who.
Y, además, ha puesto voz a numerosos personajes en afamadas series de animación, como Padre Made in USA, Thunderbirds are go o (y, si tenéis hijos, esto os va a encantar) Phineas & Ferb, donde Thomas es la voz de Ferb desde el año 2007.
Ferb, profanos amigos míos, es el del pelo verde.
Pero si tenemos que destacar alguna participación reciente en series de este chico es, sin duda alguna, en la ultra aclamada Juego de Tronos (advertencia: si continuáis leyendo es bajo vuestra responsabilidad, ¿eh?):
En la exitosa serie de HBO, Thomas interpreta a Jojen Reed, poseedor de la vista verde, el don de la profecía. En la serie, es el personaje que ayuda a Bran a comprender y madurar su propio don, durante un total de diez capítulos, repartidos en dos temporadas:
Y llegamos a 2020, donde interpreta a Benny Watts en Gambito de dama junto a Anya Taylor-Joy (la chica de Múltiple) y lo vemos de pronto con pinta de australiano de barra (hasta cuchillo lleva) y escondido detrás de un sombrero Y UN BIGOTE y así pues normal que surjan dudas.
¿Es él? ¿Es el niño de Love actually?
Después de haber pasado por Juego de tronos y Gambito de dama, su próxima serie, Unsinkable, que ahora mismo se está filmando solo promete cosas buenas. Habrá que esperar.
Bueno, no es ningún misterio que Juego de tronos nos ha dejado enormes regalos para la posteridad, como el chascarrillo «No sabes nada, Jon Nieve» o un nuevo significado, grave y poderoso, para la expresión «Hoy no». Aunque otros regalos nos llegaron en su forma más humana, como es el caso de Gwendoline Christie: Brienne de Tarth.
El personaje de Brienne, aunque os reconozco que según quién mire lo puede ver de una u otra forma, tiene unas notas fascinantes ya que, aunque se la denota como un personaje «muy masculino», ella no pretende en ningún momento «ser como un hombre», que es el saco fácil en que suelen caer este tipo de personajes, sino que es, de pies a cabeza, una -pedazo de- mujer. Tal vez por eso, por el empeño de muchos en querer verla como un hombre, luego sorprende verla en su salsa.
Seguro que muchos de vosotros ya sabéis esto, pero estoy segura también de que a mucha gente, menos dada a comerse los créditos, le pillará por sorpresa: Gwendoline ha tenido otros papeles potentes, clásicamente asignados a roles masculinos, en películas recientes de mucho tirón. Lee el resto de la entrada »
El tiempo volará, pero este año y pico que llevábamos esperando el estreno de la octava y última temporada de Juego de tronos, a muchos, se nos ha hecho laaaaaaaaaaargo como un día sin café.
A partir de ahora, cada lunes de madrugada tenemos una cita con HBO (aunque, ya sabéis, podéis esperar unas horas para verlo ahí, a lo loco), para ver un nuevo episodio de estreno del que será el desenlace de una de las series más seguidas y aplaudidas de los últimos tiempos, basada en los libros de Canción de hielo y fuego de R. R. Martin, cuyo primer libro da nombre a la serie.
Pero, tranquilidad: tanto si sois de los que esperaban con ansias este momento como si aún no habéis empezado la primera temporada (pero tenéis intención de poneros a ello), en este post no haremos ningún spoiler. Más bien al contrario: vamos a mirar atrás. Muy, muy atrás, para recuperar los que fueron los primeros papeles de ALGUNAS de las estrellas de esta octava temporada de Juego de Tronos. Puede que alguno os sorprenda. ¿Vamos allá?