Hacer lo que hace él no es fácil, porque teniendo uno de los físicos más fácilmente reconocibles de toda la industria hollywoodiense es capaz de pasar desapercibido y de que casi no se le reconozca de un título a otro. Un poco lo que le pasa a Javier Botet, pero sin duda con menos maquillaje.
Nació en Kenya en 1949, se llama Deep Roy y muchos de nosotros lo recordamos por haber sido TODOS los Oompa Loompas en el Charlie y la fábrica de chocolate de Tim Burton, en 2005.
De hecho, la parte del making of donde él explica cómo se le grabó una y otra vez desde mil ángulos para cada una de las canciones es, muy probablemente, lo mejor de los extras de esta peli.
Pero, aunque muchos lo recordemos por esta película, la cantidad de títulos, taquillazos de nuestra infancia muchos de ellos, en los que Roy ha estado presente bien merecen que hagamos un post de repaso a su carrera. Y vais a alucinar con todas las películas en que lo habéis visto y no lo recordáis.
Por poner un poco de orden, creo que lo suyo es ir en orden cronológico y empezar por el principio. Roy empezó como extra en algunas pequeñas producciones para tv a mediados de los ’70, la más importante de ellas todo un clásico: Doctor Who, donde interpretó a Mr. Sin en media docena de episodios.
en 1980 tuvo su primer papel en un título de éxito: Flash Gordon (incluida en mi lista de pelis de los 80 que son tan malas que son buenas). Y él, no os lo perdáis, era la mascota de la Princesa Aura.
Tras ella tuvo su pequeña cuota en Cristal Oscuro y El retorno del Jedi, aunque su personaje, Droopy McCool, hacía imposible reconocer al actor bajo el disfraz (como tantos otros personajes de Star Wars, y si no véase Warwick Davis).
No mucho después, su perseverancia tuvo -creo- su recompensa, porque le dieron un papel, ya más hecho, en La historia interminable en que, si bien es cierto que no era protagonista, dejadme que os diga que en esa cinta sí que se hace verdad el dicho de que «no hay papel pequeño», porque todos los personajes son importantes para la historia. Roy era Teeny Weeny, ¿lo recordáis? El jinete del caracol.
Pasó después por Oz, un mundo fantástico, The Resurrected o Freaked, que vienen a demostrar que los ’90 fueron para él una década tranquila, pero llegaron los 2000 y volvió a meterse en la cresta de su propia ola. En 2000 apareció como el cartero de El Grinch y, no os lo perdáis, ¿recordáis a la niña de El planeta de los Simios? ¡Pues adivinad quién era!
De hecho, en esta película tenía dos papeles: este y el de un «niño» que aparecía también brevemente, pero la caracterización de este es mucho más espectacular.
Pero todavía le esperaba otra gran película antes de llegar a Charlie, también de Tim Burton, y esa fue Big Fish, en la que interpretaba al payaso (y secretario) en el circo de Danny DeVito.
Pero debe ser que todavía le parecían pocos iconos, al hombre, que aún se pasó por Transformers (en La venganza de los caídos, como guarda egipcio) y -no os lo perdáis- por Star Trek (las tres del nuevo milenio: la primera, En la oscuridad y Más allá) en el personaje de Keenser.
Entre tanta peli de culto también ha tenido tiempo para el humor, y destacan sus apariciones en estos últimos años en Mantervention y en Paranormal Movie, una partodia de Paranormal Activity.