Una noche de octubre de 1975, se cuenta que unos dieciocho millones de personas estaban pegados a la pantalla del televisor viendo en el programa Directísimo de José María Íñigo a un joven ilusionista israelí DOBLANDO UNA CUCHARA.
A día de hoy, con Chris Angel caminando sobre el agua y Tamariz dando vueltas por ahí, lo mismo esto como truco no llama demasiado la atención, así que os invito a recrearos en el pobre José María intentando traducir mientras el otro no calla y en ese magnánimo bigote que llena la pantalla con su sola presencia. Rediós, qué maravilla. Por cierto, ¿qué fue de Tamariz?
Uri Geller se convirtió en uno de los primeros virales de nuestro país. Durante AÑOS se habló de él y de su cuchara. Es más, es que han pasado 42 años y todos, INCLUSO LOS QUE AÚN NO HABÍAMOS NACIDO, hemos oído hablar de Uri Geller y su puñetera cuchara. Y del bigote de José María Íñigo también. Pero, especialmente durante los meses siguientes, España se dividió en dos: ¿los que aceptaban la nueva democracia tras morir Franco y los que no? ¡Nope! Los que pensaban que Uri Geller era un cuentista y los que creían que de verdad tenía poderes. Revistas, libros, portadas en periódicos, debates en radio y televisión… Que dicen que twitter divide a la gente. Ya os digo yo que no, que la gente se divide con menos.
A día de hoy, el paso de Geller por Directísimo es uno de los momentos más históricos, memorados y parodiados de la televisión de nuestro país.
¿Sabéis qué es lo más curioso de esto? Que cuando Uri Geller llegó en el ’75 al programa de Íñigo, hacía ya 2 años que en la televisión de los USA lo habían desacreditado.
Os cuento la historia: ¿os suena Johny Carson, verdad? Un presentador que, antes de sentar cátedra para los late shows, había sido mago. Carson invitó a Geller a su programa, pero con una supuesta previa intención oculta de desenmascararlo como farsante, de manera que pidió la ayuda de James Randi, mago y escapista profesional con muchas décadas de trayectoria que tenía especial interés en destapar a Geller. Hay que entender que Geller nunca se presentó como mago, sino como persona dotada de verdaderos poderes sobrenaturales. A Randi le molestaba que usara sencillos trucos de magia para hacer creer a la gente que era realmente un telépata… Total, que cuando Geller llegó al plató de Carson se encontró con una bandeja con todo el material preparado: cucharas propias del programa, relojes estropeados (que él decía arreglar) y dibujos ya hechos y guardados en sobres cerrados (que él decía adivinar). No le permitieron sacar nada de material propio. ¿Y cuál fue el resultado? Pues que el pobre Uri no pudo hacer nada de lo que decía hacer (y, de hecho, hacía) cuando trabajaba con su material. ¿Y qué hizo, entonces? Decir que era culpa del presentador, que era tan escéptico que bloqueaba sus poderes. Bueno, no seré yo quien diga que mentía…
Os dejo un vídeo de 10 minutines donde se explica maravillosamente todo esto. Si os queréis saltar la explicación podéis ir directos al Johny Carson Tonight Show a partir del minuto 8:
Pero como de todo esto no nos enterábamos como ahora, porque, precisamente, no teníamos twitter, pues dos años después llegó aquí y nos partió en dos. A la cuchara y a nosotros. En fin, y este señor, aparte de rompernos para siempre, ¿dónde se ha metido?
Bueno, no es difícil encontrarlo. De hecho tiene una página web muy vistosa y accesible con toda su información de actualidad.
En realidad, después de los ’80 se retiró bastante de la vida pública. Decía haber encontrado, gracias a sus poderes, varios pozos de petróleo en todo el mundo, contratado por compañías petrolíferas (cosa que mantiene como cierta a día de hoy), y decía estar dedicándose «a la buena vida y a disfrutar la riqueza acumulada gracias al petróleo».
Aparte de su autobiografía, publicada ya en el ’75 con el título original de «My story» y la traducción al español de «Mi fantástica vida», ha publicado más de una decena de libros sobre magia poderes psíquicos, incluido un volumen sobre cómo sanar el cuerpo utilizando el poder de la mente. El secreto del éxito de Geller, en cierta forma, siempre ha residido en hacer que la gente crea en la idea de que todos nosotros podemos tener poderes psíquicos como los que él dice tener. Y, a ver, ¿a quién no le gustaría alcanzar el mando de la tele sin moverse del sofá?
En 2007 lo vimos otra vez en la tele porque los de Menorquina lo ficharon para anunciar sus helados:
Y, aunque no es fácil verlo en la tele, es muy activo en redes. Aunque sorprende, por ejemplo, que en Instagram sólo tenga un millar de seguidores, con lo que él es (o ha sido). Aunque, claro, por otra parte pues es un señor de 70 años compartiendo vídeos de sus vacaciones, que es que la mayoría de sus amigos y fans pues lo mismo ni tienen Instagram :/
Su presentación en twitter es de lo más cachonda: «Hola, me llamo Uri Geller y doblo cucharas con la mente. ¿Te lo crees? ¡La CIA sí!» (que parece que sólo le falta añadir «los muy gilipollas…»).
I’m Uri Geller, and I can bend spoons using my mind. Do you believe? The @CIA does! To see more, go to my site at https://t.co/GM0wlS8UWz pic.twitter.com/1SG30vkU19
— Uri Geller (@TheUriGeller) 27 de julio de 2017
Y en facebook, el día del eclipse de sol del día 21 de agosto, compartió un vídeo desde Tel Aviv utilizando su poder mental para tener su propio eclipse… Y APAGÓ UNA FAROLA.
Dobla cucharas, apaga farolas… Es una especie de súpercuñado de la magia. En serio, seguro que también es capaz de robarte la nariz.
Mis aplausos. Plas, plas, plas.
Hola, recuerdo a Uri Geller y la que armó. Iñigo traía una serie de personajes un tanto esperpénticos pero que la gran mayoría de las veces resultaban divertidos. Era una época en que la televisión era más inocente y no estábamos rodeados de tanto reality.
13 septiembre 2017 | 11:08 am
Aún me sigo partiendo el culo viendo cómo Carlon, vía Randi le pilló pero bien!
Randi es famoso por algo en lo que la gente no reflexiona.
Randi te da un millón de pavos si demuestras, bajo condiciones estrictamente científicas, que alguien tiene algún tipo de poder sobrenatural. El millón de pavos sigue ahí después de 40 años.
Randi demostró que la homeopatía es un jodido timo.
Randi demostró que los zahoríes son un jodido timo.
Randi demostró que la astrología es un jodido timo.
Randi demostró que la grafología es un jodido timo.
Randi demostró que es muy fácil engañar a científicos porque se pasan por el forro de los cojones todo control estricto sobre las pruebas al creerse que ellos lo saben todo. De hecho adiestró a dos chavales para que engañasen a dos científicos, aleccionó a los científicos para que fueran estrictos con las pruebas. y coño, los chavales lograron que los científicos avalasen erróneamente sus poderes, se saltaron todas y cada una de las recomendaciones que los científicos recibieron.
Todo esto deja meridiano que las chorradas no son reales.
13 septiembre 2017 | 11:10 am
Recuerdo perfectamente ese programa. Al día siguiente no se hablaba de otra cosa en el colegio.
«Directísimo» era un programa muy interesante. Iñigo traía personajes muy curiosos. Aún recuerdo cuando llevó al programa a un Kamikaze que seguía cabreado por no haber podido estrellarse contra un barco norteamericano.
13 septiembre 2017 | 1:53 pm
Respondiendo a Skalo75. Totalmente de acuerdo. Hace unos años tuvimos que llamar a una empresa de perforaciones para excavar un pozo para sacar agua en un terreno familiar. El dueño de la empresa nos dijo que ellos se guiaban por las características del terreno, pero que en su coche llevaba varillas de zahorí porque en algunos pueblos, si no hacía «el paripé de las varillas» (palabras textuales) no les dejaban cavar.
13 septiembre 2017 | 1:55 pm