Ron Weasley, todos lo sabemos, es el mejor amigo de Harry Potter. Ron es el pelirrojo fantástico, el escudero incansable, el moderno Samsagaz.
Por repasar un poco: la primera de las películas de la saga, Harry Potter y la piedra filosofal, se estrenó en 2001 y la última de ellas, la segunda parte de Harry Potter y las reliquias de la muerte, en 2011. Entre medias, otras seis películas, haciendo de Harry Potter una de las sagas más largas del cine. Esto, de cara a los personajes, se traduce en que los conocimos con doce añines y la voz sin cambiar, y vimos en directo cómo les crecía la barba. Literalmente. Bueno, a Hermione no.
A Rupert, aunque es un poco más difícil seguirle la pista, de vez en cuando conseguimos verlo metiendo la naricilla en algún lado interesante, y por eso los fans se vuelven (nos volvemos) locos cuando lo descubrimos en alguna novedad, especialmente si es algo de la talla de lo que os vengo a contar hoy.
Pero hagamos antes un repaso:
El mismo 2011 en que terminaba la saga, hay que hacer mención especial a una de las apariciones más queridas entre los fans de Grint: su colaboración en el vídeo de Ed Sheeran Lego House, que os recomiendo disfrutar despacio.
En 2012, Rupert se llevó, junto a Watson, Radcliffe y Tom Felton, el MTV Movie Award a mejor reparto, y él y Emma quedaron finalistas en el premio a mejor beso por el morreaco que se habían dado en la última peli.
En 2013 se lanzó al teatro en la obra Mojo, representada en el Teatro Harold Pinter de Londres, en el papel de Sweets. El mismo año, protagonizó Super Clyde, una película para televisión en la que interpreta a Clyde, un empleado de restaurante de comida rápida que decide convertirse en súper héroe.
Por cierto, ¿recordáis la peli Futbolín? Pues Rupert le ponía la voz a Amadeo (personaje principal) en la versión en inglés, y en Postman Pat a Josh (personaje destacado).
- Amadeo
- Josh
En 2014 volvió a subirse a un escenario y actuó en Broadway, en la obra It’s only a game, y además se alzó con el premio a revelación londinense del año en los Whatsonstage Awards por su participación, el año anterior, en la obra Mojo.
En 2015 tuvo de nuevo un papel protagonista en la película Moonwalkers, nada menos que junto a Ron Perlman, uno de los nombres más polifacéticos de Hollywood.
En 2017 el salto fue importante, porque se metió en dos series que, cuando menos, llamaban la atención: Baja por enfermedad, donde daba vida al protagonista, Daniel Glass, y compartió reparto con Nick Frost, uno de los talentos más reconocidos de la industria británica. En la serie, a Daniel le diagnostican por error una enfermedad terminal y él se da cuenta de que todo el mundo lo trata notablemente mejor. Cuando descubre que el diagnóstico no era tal, tiene que decidir entre decir la verdad o continuar con la farsa. ¿Adivináis? Humor muy british. La otra, Snatch: una serie sobre prostitución, robos y crimen organizado (aunque menos dura de lo que pueda parecer por la descripción).
Cuando Snatch llegó a su fin, en 2018, pasó brevemente como Inspector Crome en tres episodios de Agatha Christie: El misterio de la guía de ferrocarriles, para llegar después, en 2019, a lo más importante que ha hecho en los últimos años: las tres temporadas de Servant, una serie de terror de Shyamalan, disponible en AppleTv, en la que Grint tiene uno de los personajes principales y de la que se siente particularmente orgulloso.
Y, por si no estaba lo bastante claro lo bien que se le da el terror, acaba de estrenarse uno de los títulos más esperados por los amantes del género: El gabinete de curiosidades de Guillermo del Toro. Una antología de siniestras historias, creada por Guillermo del Toro y dirigida, cada capítulo, por una mente privilegiada del terror diferente, como Jennifer Kent (Babadook), Panos Cosmatos (Mandy) o Vincenzo Natali (Splice).
Esta antología tiene un total de ocho episodios. Rupert aparece en el sexto, El sueño en la casa de la bruja, en el que interpreta a Walter Gilman, un hombre obsesionado con acceder al mundo de los espíritus para traer de vuelta a su hermana melliza, fallecida cuando ambos eran niños.
La serie se estrenó el pasado día 25 en Netflix (la fecha fue mantenida en secreto hasta casi el último momento) y estrenaron dos episodios diarios hasta completar los ocho, justo a tiempo para Halloween.
Por si no la habéis visto o no sabéis de qué os hablo, os invito a echarle un ojo y entre tanto os cuento que Grint ya tiene en postproducción su próximo trabajo, también en el género y dirigido por Shyamalan: Llaman a la puerta, que tiene fecha de estreno prevista para 2023.