A ver, así, sin googlear: ¿en qué año Felix Baumgartner saltó desde la estratosfera?
Os doy un segundín.
Os lo digo yo: 2012. Era el 14 de octubre de 2012, concretamente, cuando Baumgartner, se convirtió en el primer hombre en la historia en romper (con su propio cuerpo, se entiende) la barrera del sonido.
Tenía por entonces 44 años. Austríaco, deportista, ex-militar, paracaidista, instructor de paracaidismo para la élite del ejército austríaco y saltador base, hizo historia aquel octubre de 2012 por romper, en un solo ejercicio, tres récords históricos: mayor altitud en globo tripulado, velocidad máxima de 1357,64 km/h y caída libre desde 38.969,3 metros de altura. Fue un evento único, altamente promovido en medios, con un marketing muy bien montado bajo el sello del todopoderoso Red Bull y que consiguió tener a millones y millones de personas alrededor del globo pendientes del salto de un hombre. Fue genial.
Lo anunciaron, lo esperamos, lo anhelamos, contuvimos la respiración… Felix saltó, el mundo entero aplaudió y… ¡Hop! ¿Qué fue de Felix?
Pues lo primero que hizo Felix al volver a su ciudad, Salzburgo, fue conceder una entrevista en la que dijo lo siguiente:
En una democracia no te puedes mover. Necesitaríamos una dictadura moderada donde haya un par de personas del sector privado que lo conozcan todo bien.
Y, claro, la gente se quedó un poco como… What the fuck. ¿Pero qué dices, Felix?
Vamos, que eso, sumado a que reconoció públicamente y sin ningún problema que se mudó a Suiza por cuestiones puramente económicas en materia de impuestos, no le ayudó a granjearse la simpatía del público general, ni le hizo ser el invitado más esperado en las tertulias de los late shows. Aunque, para ser francos, tampoco pareció que le importara demasiado.
Como «hombre para todo», Baumgartner pasó los siguientes años participando en diferentes eventos deportivos, aunque enfocándose casi siempre a su propio ocio en lo que para él ha de ser el equivalente a una vida lejos de los focos. Eso sí, con motor. MUCHO motor.
Participó, por ejemplo, en las 24 horas de Nürburgring en 2014, y en 2015 en la Heli Drift de Red Bull junto a Jakub Przygonsky, en la que el piloto polaco conducía su Toyota y Baumgartner, a los mandos de un helicóptero Bolkov BO105 trazaba sus movimientos en sincronía con el Toyota ASÍ de cerca:
Una manera fácil de seguirle la pista y estar al tanto de todas sus actividades, más incluso que su página web (que este año ha tenido pocas actualizaciones), es seguirlo en su página de facebook, en la que además de poder presumir de un millón y medio de seguidores va colgando todas sus inquietudes deportivas.
Aunque también os diré (y puede que esto os sorprenda) que, en octubre de 2014, otro saltador le quitó el récord a Baumgartner. Sí. Como lo oís. Alan Eustace, vicepresidente de Google, le arrebató el récord de altura de salto en caída libre y mayor tiempo de caída, aunque no el de mayor velocidad (a pesar de haber roto también la barrera del sonido) al saltar desde nada menos que 41.419 metros y estar cayendo durante quince minutos.
Y diréis vosotros, ¿y de esto por qué no hubo tanto eco? Pues por iniciativa del propio Eustace, quien no quería ser el foco mediático en que se había convertido en su momento Baumgartner y, rechazando incluso el patrocinio de su propia empresa, lo hizo de un modo mucho más privado. En el famosérrimo área 51, eso sí.
Y una cosa os digo, sin ánimo de quitarle mérito a Félix: meterse en una cabina y asomarse para saltar, difícil, pero para hacer lo que hizo Alan, que subió más de 40 kilómetros COLGANDO DE UN GLOBO para luego, simplemente, dejarse caer… Para eso, amigos, hay que ser de otra pasta.
Tengo una pregunta técnica: Si se está colgando de un globo y se asciende más o menos en línea vertical, y si la Tierra rota a aprox. 1.600 km/hora, desearía saber si el globo y su cápsula suspendida viajan de manera independiente por la atmósfera o se encuentran rotando de forma que resultan solidariamente «arrastrados» por la Tierra…, porque de no ser así, cómo es posible que después de 2 horas de ascensión Baumgartner cayera «cerca» de su lugar de despegue, pues el terreno a la vertical de su globo estaría a 3.000 km de distancia hacia el Oeste, ¿no? Me gustaría una respuesta de esta duda. Gracias.
22 junio 2019 | 11:49 am