¿Que fue de Mikey (Sean Astin) de Los Goonies?

Hermanos, pongámonos en pie.

Si los ’80 se incendiaran y sólo pudierais salvar tres cosas, ¿qué os llevaríais? Yo creo que lo tengo claro: las Arcade, el Amstrad y esta maravilla. Los Goonies. Cambiaría mi última cena por verla otra vez. A no ser que para cenar hubiera chocolate. CHOOOO-COOOO-LAAAA-TEEEE.

Al lío: Los Goonies es un peliculón ochentero que tiene los fans más fieles de toda la industria del cine. Ni los de Harry Potter (fíjate lo que te digo, Mari) pueden presumir de ser tan leales como los que estamos dispuestos a autodesfigurarnos la cara para imitar a Sloth y echarnos unas risas cómplices, sólo a la altura de alguien que entienda qué carajo estamos haciendo. QUIERO CHOCOLAAAATE.  La fórmula, resumiendo mucho, es la que Netflix está usando tanto en sus series molonas (Stranger Things, 13 Reasons Way): niños en bici haciendo cosas. Bueno, va, que me paso de simplista (¿pero sí o no?): en la película, que es de estas que exaltan el valor de la amistad y que tus hermanos te quieren aunque te maten a collejas, un grupo de chicos y chicas sigue el mapa de un explorador, Chester Copperpot, para hallar el tesoro del bribón pirata Willy el Tuerto, que contaba la leyenda que había desaparecido con un inconmensurable tesoro:

Estrenándose sólo tres años después de E.T. (que había batido récord de recaudación en su fecha) la firma de Spielberg era una apuesta segura, y no defraudó: el día de su estreno, los Goonies recaudaron en USA y Canadá el triple del presupuesto de la película. Todos queríamos ser un Goonie. El que diga que no, es que no entendió la peli. Y ya está.

Todos sus protagonistas tendrán siempre un huequecito en nuestro corazón. ¿Qué habrá sido de ellos?

Bueno, pues vamos a empezar por el prota, Mikey (pronunciado «Maiki», no «Miki», ojito con esto), el actor Sean Astin a quien, en realidad, hemos podido ver mucho.

Después de ser Michael Walsh, salvo por Jóvenes intrépidos, del ’89, Sean fue pasando bastante desapercibido durante los siguientes años, a pesar de que casi todos los años tenía uno o dos proyectos. Apareció en papeles relativamente importantes, aunque no protagonistas, en películas como La guerra de los Rose, Bulworth o En honor a la verdad.  Hasta que de repente llega el año 2001 y… ¡BAM! ¡Te lo encuentras haciendo de Samsagaz en el puñetero mismísimo Señor de los Anillos!

Astin es el Rugrat de la derecha

Sam era mi personaje favorito en el libro, y he de reconocer que en mi mente se parecía bastante a Sean Astin, pero al Astin-Michael-Walsh, no a este señor grandote y peliteñido. Madre mía, qué sustazo. Eso sí, interpretó, por supuesto, a Sam Gamyi en las tres películas de la trilogía y acabó siendo el héroe invisible que lo arregla todo. Sé que esto me va a granjear enemigos, pero lo voy a decir: Frodo, eres un pringao, buuuuhhhh. #Sam4Presi

Al año siguiente de la última película de esta saga, en 2004, hizo un desternillante papel en la película de Adam Sandler 50 primeras citas, en la que daba vida al hermano de Drew Barrymore (mira tú por dónde, la niña de E.T.), apareciendo de una guisa que entre una camiseta de malla que en mi pueblo se llama súper-truñer y el ceceo exagerado no sabías por dónde cogerlo, pero reír te reías.

Ha hecho apariciones en televisión, como en Hércules, los viajes legendarios y la serie 24, desde 2012 es la voz de Raphael en la serie de dibujos Teenage Mutant Ninja Turtles y su papel en la película de 2014 Mom’s Night Out le valió los aplausos de la crítica.

Como curiosidad, en 2015, ahí donde lo tenéis, fue finalista en la Ironman de Kona, en Hawaii. Ahí es nada. El tío está hecho todo un señor deportista, faceta que muestra con orgullo en sus redes. El pasado noviembre lució medalla en la Marathon de Nueva York en Instagram:

Man, I absolutely have to lose weight. OR, Wow, look at how powerful I am, running 26.2 miles carrying 45 extra pounds the whole way…not quite carrying Frodo up Mt. Doom, heck it’s maybe more impressive. I only had to hoist that diminutive hobbit for a few feet of volcano, steep, but manageable. But seriously, I am FAT. Just finished the NYC Marathon 2016 in 6:02:33. It’s official, I’m a back o’ the packer now. By God, I won’t be forever, but as for today… eeeeek. Let me just say this, of all of the big city marathons I’ve run (Los Angeles 4x’s, San Francisco, Chicago, Marine Corps, etc…) I have never seen such intense, sustained, out of their heads crazy spectators…the sound was deafening every step of the 5 boroughs (Staten Island, Brooklyn, Queens, the Bronx & Manhattan)…I think they compete with each other…it was a 5 way tie. I ran Portland only a month ago, so I was happy that my legs held up. I think it’s fair to say that I’m a veteran marathoner now, well…I had to use every mental and physical trick in the book to get around the course today. I know my Mom was looking down on me today…kicking my ass every step…thanks ma! That’s all. Special thanks to everyone with the NYCM and ASICS for their hospitality.

Una publicación compartida de Sean Astin (@seanastin) el 6 de Nov de 2016 a la(s) 3:59 PST

Este año vamos a poder verlo en su último papel: Bob Newby, gerente de una emisora de radio en LA SEGUNDA TEMPORADA DE STRANGER THINGS.

¿Lo veis? Os dije que Netflix se traía rollito con Los Goonies…

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