Eran los ’90, los culebrones adolescentes como Sensación de vivir o la española Al salir de clase triunfaban en la parrilla televisiva y nadie quiso quedarse sin un trozo de ese joven pastel. De manera que, a finales de la década, Antena 3 se lanzó a ello y, basada en la venezolana A todo corazón, estrenó, melodía de Cómplices mediante, su exitosísima Nada es para siempre.
Un elenco formado por, como no podía ser de otra manera, un montón de gente guapa con inerpretando personajes carismáticos y magnéticos garantizó que un gran número de espectadores se mantuvieran pegados a sus pantallas una tarde tras otras, hasta que la serie se canceló algo más de un año después de su estreno, tras más de 300 episodios.
Y el protagonista absoluto de todo aquel percal era él, Adrián, a quien daba vida Carlos Castel.
Pasó de ser Fran Chicote en Al salir de clase a Adrián, el objetivo amoroso de sus compañeras de clase en la de A3.
De todos los actores que pasaron por la serie, Carlos Castel es uno de los que siguieron más activos en el mundo del espectáculo y cuenta con una amplia trayectoria en cine, televisión, teatro y como presentador.
Le hemos visto como secundario en Amar es para siempre, Hospital Central, C.L.A. No somos ángeles, Obsesión y Cuéntame cómo pasó.
También le han llamado en numerosas ocasiones para presentar programas y galas, como Sorpresa, sorpresa, Combo Club, Un domingo cualquiera, Con tus propias manos, Planeta Mágico, Peque Prix y Desafío Ben 10. Como presentador, tal vez su trabajo más relevante fue en KOMBAI & CO, que se emitía los fines de semana por la mañana en Telecinco y que presentó durante dos años.
Otras dos de sus actividades frecuentes son el teatro y el doblaje.
Sin saberlo, le hemos escuchado doblar a personajes de la serie Dexter y de películas como X-men 3, Alvin y las ardillas y Futbolín, entre muchas otras. También ha locutado a menudo la publicidad de Cartoon Netwook.
Respecto a las tablas le seguimos la pista con su propia productora, Telón Corto, con la que ha dirigido y producido varias obras de teatro y también audiovisuales. De lo último que ha hecho es el musical Monster Rock, «una historia musical terrorífica» que arrancó temporada en febrero.
Padre de tres hijos que van dejando de ser pequeños y que ya han hecho sus pinitos en la interpretación, y de quienes de vez en cuando el actor presume en redes, sigue íntimamente vinculado al teatro y a Castilla La Mancha, si bien no es especialmente activo en redes sociales es a través de sus cuentas donde informa puntualmente de las novedades, de manera que, si queréis estar al tanto de lo que hace, lo tenéis fácil.