¿Vosotros sabéis que Barbra Streisand dirigió una película en 1991 que fue candidata a siete Oscars? No ganó ninguno, pero oye, candidata a SIETE, que es un montón. Entre ellos, Oscar a mejor actor protagonista. La peli era El príncipe de las mareas, y su prota era Nick Nolte.
Que, a ver, tampoco es que fuera un chavalín por entonces, porque -como muchos recordaréis- a Nolte ya nos lo traíamos bien calado desde… Yo diría que el ’82, en Límite 48 horas, ¿no? Y justo en 1990, un año antes de El príncipe de las mareas, se había estrenado 48 horas más. Que, me vais a perdonar que os diga, poner a Nolte haciendo pareja con Eddie Murphy es una magnífica ilustración de eso que tanto se dice: «Los ochenta, que hicieron mucho daño«.

La complejidad de esta foto estuvo en encontrar un color de pared que les quedara bien a los dos.
A pesar de todo esto, si os digo la verdad, para mí Nolte es «el tipo de Tres fugitivos» (1989). No puedo evitarlo. Me coincide con la edad en la que mi memoria histórica empezó a ser funcional. Pero fueron sin duda los noventa sus años dorados o, al menos, de mayor producción interpretativa. Desde El cabo del miedo hasta La delgada línea roja, sin olvidarnos por supuesto de Aflicción (por la que estuvo nominado por segunda vez al Oscar), una veintena de títulos llenó su trayectoria. Salió a dos pelis por año.

Nolte en ‘La delgada línea roja’ (1998)
Pero es como que, de repente, envejeció. Como si hubiera sido un adulto normal y corriente y de pronto se convirtiera en el ermitaño de las cavernas, o algo así.
Yo creo que la primera película en la que lo vi y ya no lo reconocí como «un actor más» sino como «¡Anda! ¡Mira quién sale!» fue en Hulk, en 2003 (el desastre de Eric Bana, no el desastre de Edward Northon).
¿Os dais cuenta? Solo hay cuatro años entre estas dos últimas y, sin embargo, parece que hubieran pasado quince.
Aunque os confieso que, con diferencia, de la primera década de este siglo yo me quedo, sin el menor atisbo de duda, con Tropic Thunder. En serio, si no la habéis visto, vedla, porque es una joya de la comedia.
Pero, ¿y estos últimos años? ¿Dónde se ha metido?
Pues lo cierto es que, no es que haya sido un no parar, pero… No, no ha parado.
Empezó fuertecito con Warrior, en 2011, por la que recibió nuevamente una tercera (y última, de momento) nominación al Oscar (aunque esta vez como actor secundario).
A lo largo de estos años, aunque ha seguido coleccionando títulos de largos (a un ritmo bajito, eso sí) me llama la atención, de manera particular, que se ha vuelto a meter en series, cosa que no hacía desde Hombre rico, hombre pocbre, allá en el ¿lejano? 1976 (que no olvidemos que estamos hablando de un señor nacido en 1941). Entre 2011 y 2012, Nick participó en Luck, protagonizada por Dustin Hoffman. Una serie de HBO dirigida por Michael Mann acerca de varios personajes que tienen en común una pista de carreras de caballos, y luego en 2014 apareció en seis de los diez episodios de Gracepoint.

Nolte en ‘Luck’
En 2015 se le vio en The ridiculous 6 (que igual pensáis que es una parodia de Los odiosos 8, pero no: lo es de Los 7 magníficos), peli original de Netflix que protagoniza Adam Sandler, que ahora parece que está abonado a Netflix y no hace prácticamente nada que se salga de la plataforma streaming.

¿Os sabéis la de cuando Nick Nolte se conviritó en la Duquesa de Alba?
Y en 2016 se metió en uno de sus últimos proyectos importantes como actor: protagonista en Graves, de Joshua Michael, en la que Nolte, que interpreta a un expresidente de los EEUU, vuelve a parecerse a su imagen de chavalín, y esto yo ya no sé cómo gestionarlo.

¿El que está al lado de Nick no se os da un aire a Miguel Bosé?
A Nolte este papel le ha valido su última nominación importante: mejor actor de serie de televisión en los Globos de Oro del año pasado. Pero, a pesar de ello, la serie, que ha tenido una crítica favorable muy justita, fue cancelada después de dos temporadas.
Acaba de estrenarse su último trabajo, The Padre, que co-protagoniza con Tim Roth y en la que Nick es un juez de justicia en persecución de un estafador. De momento la crítica no está siendo demasiado generosa con la cinta, pero ¡oye! Nick vuelve a salir con barba, que es un plus 🙂
Hablar de Nick Nolte y no mencionar «Hombre rico, hombre pobre» es dejar su biografía a medias. La serie mítica que le dio fama mundial y en la que salía el malo más odiado de la historia de la televisión: Falconetti! Para los que no se acuerden Nolte hacía del hermano pobre.
https://www.youtube.com/watch?v=-ZuHQCP8wlE
25 octubre 2018 | 9:22 am
Emigrante me parece que no has leido el artículo; si no, ¿a que viene mencionar así la serie y poner un enlace?
Te dejo aquí un «copia y pega» donde viene esa mencion:
» Empezó fuertecito con Warrior, en 2011, por la que recibió nuevamente una tercera (y última, de momento) nominación al Oscar (aunque esta vez como actor secundario).
A lo largo de estos años, aunque ha seguido coleccionando títulos de largos (a un ritmo bajito, eso sí) me llama la atención, de manera particular, que se ha vuelto a meter en series, cosa que no hacía desde Hombre rico, hombre pocbre, allá en el ¿lejano? 1976 «
25 octubre 2018 | 10:37 am
Vaya manera de degradar (por decir algo descalifcativo 😉 ) a Rudolph Giuliani ex Alcalde de Nueva York
» ¿El que está al lado de Nick no se os da un aire a Miguel Bosé? »
Lo digo porque si se parece al Bosé es al actual, que está que da penita; con esa piel aparentemente tan estirada y ese horrendo maquillaje en los ojos
25 octubre 2018 | 10:41 am
Tiene películas tremendas. La última que recuerdo suya es Warrior.
25 octubre 2018 | 10:46 am
en sus pelis de «viejo» está el guerrero pacifico, de cuando da el salto a joven- viejo
25 octubre 2018 | 12:18 pm
En la última que le he visto yo super viejo es en «un paseo por el bosque», con Robert Redford.
25 octubre 2018 | 9:35 pm