«Necesito un mundo que se haga cargo de mi forma diferente de hablar» #SoloTartamudeo

Es causa de acoso escolar, de risas ajenas, de motes impuestos (Cacarlos), de insultos, de incomprensión y malentendidos («no estés nervioso», «tú tranquilo»), que arrastra prejuicios y estereotipos infundados («será que es un poco lento», «no podrá ser profesor»…), de discursos interrumpidos porque hacemos callar o porque terminamos por ellos.

Hablo del tartamudeo.

Hoy, 22 de octubre, es el Día internacional de la tartamudez. Y hoy os traigo una campaña de la Fundación Española de la Tartamudez que ojalá alcance toda la difusión que merece, porque ayuda a entender todo por lo que pasan las personas que tartamudean y lo importante que es que la sociedad cambie y limpie la percepción que tiene sobre ellos, una percepción con frecuencia injusta.

En el vídeo hay dos niños, Alejandro y Rocío; también una maestra, María Vigueras; y la veteranía de José Vicente Carretero. Por favor, escuchad lo que tienen que deciros. Un mensaje que es a la vez un recorrido vital y de aceptación que ojalá cale y que podría resumirse en el lema de la campaña de concienciación: «Cuando tartamudeo, solo tartamudeo», acompañado del hashtag #SoloTartamudeo.

Alejandro:

Querido diario: a veces no me salen las palabras. Pensaba que le pasaba a todo el mundo, la verdad. Pero alrededor mío siempre veo alguna cara rara y alguna risita cuando hablo. Si hubiera un ‘entrenador de palabras’ me encantaría ir. Se lo voy a decir a mis padres a ver si ellos saben algo, porque cuando sea científico y tenga que dar discursos, no quiero que me pase esto.

Rocío:

Necesito un mundo que se haga cargo de mi forma diferente de hablar y un altavoz para gritar. Si tartamudeo no es porque esté nerviosa. Si tartamudeo, no pongas en duda mis capacidades. Si tartamudeo, no es culpa mía. Si tartamudeo, no me cortes las frases. Si tartamudeo, solo tartamudeo.


María:

Con 20 años, de tartamudez, uno no se muere, más bien se convive. Deja huella, marca y moldea la personalidad. No eres tú, eres lo que ella te deja ser. Durante muchos años he ocupado el último lugar de la fila. Hoy dusfruto ocupando el primero, el de maestra. Y ya no odio escucharme, ya no me esfuerzo por no tartamudear, pero necesitaría que a ti tampoco te molestara, porque tu mirada crítica aumenta mi dificultad. En cuanto a mi trabajo, tranquilos, lo puedo desempeñar con la misma eficiencia que tú.

José Vicente:

Ya no busco tu aceptación, ya no necesito tu aceptación. Al fin soy libre de mi mochila y de tus prejuicios.Y he llegado hasta aquí, después de admirar el valor de mis palabras y de elminar el deseo de cambiarlas. Esto me llega cuarenta años tarde, pero me sirve sin con ello entiendes que cuando tartamudeo, solo tartamudeo.

2 comentarios

  1. Dice ser LaCestitadelBebe

    Los prejuicios los deberíamos dejar todos aparcados mejor iría el mundo, esperamos que con el tiempo íbamos a evolucionar y ser más educados, pero parece que a contrario.. Esperemos que lo que estamos pasando sirva para algo y nos conciencie..

    Saludos,

    Anabel

    26 octubre 2020 | 10:51

  2. Los tartamudos cuando cantan no tartamudean.

    28 octubre 2020 | 13:21

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