Un año entero sin comprar ropa

(GTRES)

Un día como hoy, hace un año,  asumí el reto de no comprar ropa (tampoco bolsos, complementos o calzado) durante doce meses. Nada a no ser que fuera absolutamente imprescindible tipo «me fui de viaje y me robaron la maleta» o «toda la colada salió de color rosa». Nada de eso ha sucedido, hoy se ha cumplido el plazo y no he comprado nada. En casa solo han entrado dos camisetas de publicidad, y una de ellas la entregué a otra persona.

También pedí que no se me regalase ropa en navidades o mi cumpleaños, haciendo que mi fama de difícil a la hora de hacer regalos pasará a ser directamente de imposible (algo que jamás he entendido porque tengo muchos intereses, claro que paso de perfumes, maquillajes, accesorios, joyas, balnearios o milongas de MrWonderful. Y no sé qué hacer con las tarjetas regalo del El Corte Inglés salvo dárselas a mi madre para que las aproveche ella).

Pero me voy del tema. La cuestión es que hace un año decidí no comprar nada. ¿Por qué? Fue un impulso más que algo meditado.

Nunca he sido una víctima de la moda, no me interesan las publicaciones sobre el tema, no sigo las tendencias ni a youtubers o instagramers dedicados a este tema. La ropa me dura muchos años, me pongo lo que me gusta dándome igual lo que se lleve o no se lleve y salir de compras no es precisamente mi plan favorito. Aun así, aun siendo ajena a todo eso y prudente en mis compras, en un cambio de armario (ya sabéis, adiós ropa de verano, hola ropa de abrigo, que a ver cuando toca este año) me di cuenta de la cantidad de ropa que tenía, que era mucha, que había cosas que no me ponía hace demasiado, que ni me acordaba casi que tenía.

Ya había leído con anterioridad varios reportajes sobre lo contaminante que es la industria textil, sobre el ‘fast fashion’, la cultura de usar y tirar, de comprar sin pensar o pensando muy poco generando de paso residuos de difícil gestión.

Os dejo unos cuantos enlaces por si el tema os interesa: La industria textil, la segunda más contaminante del planeta, Antes de ir de compras, deberíamos ver #Sweatshop  y “Llegará un momento en que no será ‘cool’ cambiar tanto de ropa”. Os recomiendo especialmente el primero.

Fue entonces cuando decidí embarcarme en este reto. Qué da entre risa y vergüenza llamarlo reto, porque me consta que hay muchísimas personas que lo hacen por obligación año tras año porque tienen otras prioridades en las que gastar el dinero. Tantas o más que otras dedicadas a comprar y descargar prendas de manera constante. Paradojas de nuestro mundo.

¿Cómo ha sido? Pues sorprendentemente fácil. Tanto que podría seguir más tiempo sin mayor problema.

En definitiva, no es ninguna hazaña, soy consciente, pero sí creo que es un reto recomendable, del que se puede aprender bastante .

A mí me ha servido para aprender a dejar de mirar escaparates, para atravesar las tiendas en busca de la zona infantil (mis hijos crecen, rompen y necesitan ropa y calzado cada poco) sin mirar a uno u otro lado tocando y cayendo en la compra de el algo innecesario.

Entrar menos en las tiendas y no mirar escaparates ha evitado también que entraran prendas innecesarias en los armarios de mis hijos. Y me ha valido además para racionalizar y llevar a cabo de manera consciente la compra de ropa para ellos. Tampoco ahí era de tirar la casa por la ventana, pero ahora sé gestionarlo mejor.

También me ha servido para saber qué tengo realmente, qué necesito y qué me sobra. No voy a celebrar el fin de este año sin comprar saliendo a la carrera a llenar varias bolsas. En absoluto. No estoy deseando invertir el tiempo entre perchas y maniquíes. Hay algunas cosas, pocas, que tengo claro que me vendría bien. Tiempo habrá de ir por ellas.

En este año he aprovechado para gastar un poco más en libros, he empezado a leer y disfrutar mangas, que es algo que quería hacer hace mucho. He tenido un poquito más de tiempo para invertir en otros asuntos.

Y al mismo tiempo esa contención me ha servido para contenerme en otro tipo de compras. Es una buena escuela de gestión de impulsos.

Claro que es importante sentirse a gusto con lo que uno se pone encima, sentirse acorde y conforme, pero para lograrlo no creo que sea preciso rendirse a la compra constante, al descarte continuo, a la última tendencia o al perder el norte de lo que se tiene o lo que vale lo que uno va gastando de a pocos.

17 comentarios

  1. Dice ser M.

    Llevas mucha razón

    16 octubre 2017 | 09:31

  2. Dice ser Jose

    ¿Tampoco para tus hijos? ¿No crecen? ¿No rompen la ropa o zapatos?

    16 octubre 2017 | 09:34

  3. Dice ser David

    Afrontar la infinita levedad del ser capitalista. El dilema diario de millones de consumidores. ¡Oh, vaya! Y además, gracias al ahorro ha descubierto antiguas «nuevas» actividades…

    Sí, está bien de vez en cuando soltar todo nuestro inconformismo en las redes, creyéndonos algo.

    Reconforta, ¿verdad?

    16 octubre 2017 | 09:59

  4. Dice ser marian

    Tienes toda la razón, pero también es cierto que esa especie de moda de compra y tira, da trabajo a muuuchas personas y que si no cayéramos de vez en cuando en esa vorágine, no lo tendrían.

    16 octubre 2017 | 10:35

  5. Dice ser supin

    Su pin, gracias.
    ¿Y a tus hijos?

    16 octubre 2017 | 15:02

  6. Dice ser Aletheia

    Dice claramente que a sus hijos sí les ha comprado ropa; la comprensión lectora bien, por lo que veo.

    Por lo demás estoy bastante de acuerdo. No me gusta ir de compras, odio probarme cosas, y cada vez que necesito pantalones es un horror (y eso que tengo una 38). Como tuve que ahorrar primero para comprar y después reformar la casa tuve que limitar el gasto al máximo y no fue ningún drama. Además me olvido de la ropa que tengo y al final acabo poniéndome siempre lo mismo por comodidad.

    16 octubre 2017 | 16:27

  7. Dice ser Esther Ortega

    NO es algo tan complicado. Yo no tiro nada. TEngo de todo mucho. Puedo estar sin comprar ropa ni nada el tiempo que quiera. Además, lo odio. Es triste que eso pueda ser noticia. Hay gente que no tiene más opción porque no tiene un euro para nada que no sea comer y pagar recibos, si llega.
    Un saludo

    16 octubre 2017 | 20:43

  8. Dice ser Mangaka

    Sobre manga te recomiendo Monster de Naoki Urasawa,un manga de misterio para adultos

    Saludos!

    16 octubre 2017 | 21:37

  9. Dice ser cristina

    Te felicito. Jose y supin no se han leído el texto completo, pero aun así comentan. De David deduzco, por su cinismo, que lleva más de un año sin comprar ropa ni nada de nada. Es tan fácil ser desagradable en los comentarios.

    16 octubre 2017 | 22:00

  10. Dice ser Uno ahi

    Los que preguntan por los niños, si leen bien lo pone, que solo va a la zona infantil, porque crecen, rompen etc. pero conteniéndose un poco más de no comprar cosas innecesarias.

    Lo del trabajo justifica todo, no vale, porque gracias a esa justificación el planeta está como esta, las empresas no invierten, no se renuevan y siguen con las mismas artes durante décadas, así están los trabajos precarios, y ciertamente ese trabajo para ese tipo de ropa no lo hacen precisamente adultos con su SS+mas sueldo digno y respetando el horario; si hablo de la explotación infantil y aunque sean adultos mirad las condiciones.

    Pd.: me parece un buen «reto» que si lo hiciera más gente si tendría un buen cambio, a priori todo el mundo se tiraría de los pelos, pero cuando pase el tiempo sólo seria a mejor, porque la industria textil tendría que renovarse para ser más eficiente, y no hablo solo de despedir, XD

    16 octubre 2017 | 22:11

  11. Dice ser Maria

    Deja claro que para sus hijos sí compra lo necesario.
    Yo llevo bastante tambien conteniéndome porque veo que no necesito ropa aunque sí que caigo con algún bolso o zapato, aunque no como antes, ni mucho menos.

    16 octubre 2017 | 23:11

  12. Dice ser En fin

    Pues nada, dejemos que se hundan los negocios textiles. No sé de que vivís en vuestra casa, pero espero que no nos de a todos por no consumir eso de lo que vivís.
    Cuando crees que en el mundo no cabe un tonto más…

    17 octubre 2017 | 00:48

  13. Dice ser ascension

    gran chorrada, para empezar cuando dice que no iba a comprar nada en un año seria porque tenia ropa, zapatos y de todo de sobra, yo casi lo hago, solo que por necesidad, no por ser gusto, ,y no pasa nada, ah! los libros se consiguen gratis en las bibliotecas.

    17 octubre 2017 | 00:49

  14. Dice ser iñigo

    Hemos convertido el consumo en un entretenimiento. Pero comprar ropa de manera indiscriminada es un atentado contra los derechos laborales y el medio ambiente. Yo tampoco compro más que cuando la ropa está ya muy estropeada. Y aun así en otros países podrían aprovechar la ropa que nosotros desechamos porque creemos que no nos vale.

    17 octubre 2017 | 02:13

  15. Dice ser Kushif

    Pues personalmente hace años que hago eso, no por ecología ni por nada más. Tengo mucha ropa y salvo desgaste evidente o rotura no he respuesto. Y en cuanto a mis hijas, lo mismo. Si crecen, pues compro, pero pasan la ropa de hermana a hermana o intercambiamos ropa con gente en el colegio, trabajo… nada del otro mundo, sólo es sentido común y así las vacaciones pueden durar un poco más 😉

    17 octubre 2017 | 06:49

  16. Dice ser LaCestitadelBebe

    Buenas,

    la verdad es que yo hago lo mismo, hasta que no necesito nada no lo compro, ya sea porque se ha roto o desgastado, no entro en gastos de comprar por comprar cosas inútiles y lo que utilizo son por regalos que al final dejé para usar pero no…jaja

    Besos!

    Anabel

    17 octubre 2017 | 07:50

  17. Dice ser Davinia

    Me encanta cómo leen algunos!!! A saltitos!!! En fin…criticar por criticar. La gente no se da cuenta de que esto no es una noticia sino un blog, y puede es opinión personal.
    Estoy de acuerdo y no. Creo que se pueden hacer pequeñas cosas sin llegar a tener que estar 1 año sin comprar ropa. En otros ámbitos quizás más importantes derrochamos más. Por ejemplo, la comida. Echas en la olla lo que vas a comer o echas el puñado de más por si acaso? En libros incluso. Es papel, tratamiento…coches…es necesario que nos gastemos ese dineral? si nos ponemos más papistas que el papa aquí no come ningún sector.
    Buen artículo. Un saludo.

    17 octubre 2017 | 09:26

Los comentarios están cerrados.