La foto (y la sorpresa) de ayer fue, sin duda, la elección del economista Miguel Sebastián, desconocido para el público, como candidato socialista a la alcaldía de Madrid. Ambos diarios lo dan en portada con una foto muy parecida, con el mismo sujeto (Zapatero o El presidente) pero con un verbo muy distinto. Tan distintos son los verbos («recurre» en El Mundo, «sacrifica» en El País) que más de uno podría pensar que ambos diarios llevan hoy, en este tama, el paso cambiado. Da la impresión de que la elección ha molestado más a El País que a El Mundo. Quizás en El País tenían alguna querencia especial por Javier Solana o por José Bono, como precandidatos idóneos de los viejos «renovadores» felipistas, y apenas conocen a este inédito Miguel Sebastián.

Estos son los titulares.

El Mundo:

Zapatero recurre a su asesor tras no encontrar mejor candidato para Madrid

El País:

El presidente sacrifica a su asesor económico para luchar por Madrid

Apenas conozco a Miguel Sebastián, salvo por amigos comunes, pero le veo a menudo salir del agua en Almería, incluso en invierno, y nos saludamos amablemente como buenos vecinos.

He visto algunas de las reacciones inmediatas que ha provocado su rara elección como candidato. Voy a esperar a mañana para dar mi opinión o valoración del candidato. Pero mi primera reacción, después de la sorpresa inicial, fue pensar que tiene más posibilidades de gobernar la ciudad de Madrid -naturalmente con el apoyo de IU– de las que la prensa en general le atribuye hoy.

Ya que estamos hablando de un candidato inédito, apoyado a tope por Zapatero, y que no tiene un pelo de tonto, no debemos descartar la sorpresa en los resultados electorales.