El día que la BBC prohibió contactar en directo con los ‘aliens’

Esta historia es vieja, pero no es demasiado conocida aquí. El segundo canal de la BBC emite un programa sobre astronomía llamado Stargazing Live, presentado por el físico y divulgador Brian Cox, un personaje muy popular en Gran Bretaña. Cox representa una figura que nos falta en España, como tantas otras cosas cuando se trata de ciencia: un divulgador que es científico profesional en ejercicio, con una carrera sólida que ejerce a caballo entre la Universidad de Manchester y el experimento ATLAS del Gran Colisionador de Hadrones (LHC) de Ginebra. Y por si fuera poco, además es enormemente guapo; en 2008 fue incluido por la revista People en la lista de los hombres más sexys del mundo, junto a nombres como Rafa Nadal, Ryan Reynolds o el príncipe Harry de Inglaterra.

El físico y divulgador Brian Cox. Bob Lee / Wikipedia / CC.

El físico y divulgador Brian Cox. Bob Lee / Wikipedia / CC.

Este último detalle parecerá frívolo e irrelevante para algunos, pero es un juicio equivocado: rompiendo ese estereotipo falso y desgraciadamente extendido de los científicos como friquis y nerds, tipos con unas habilidades sociales tan escasas como su atractivo físico y su gusto a la hora de vestir, Cox ha logrado no solo que la ciencia interese; esto puede conseguirlo cualquier buen divulgador. Su mérito añadido, y esto depende en gran parte de su estilo y su aspecto de pop star e ídolo juvenil (de hecho, Cox destacó antes de su carrera en física como teclista en un par de bandas), ha sido lograr que la ciencia mole, y esto es decisivo para inspirar la vocación por la investigación científica en aquellos que dentro de unos años tendrán que elegir su profesión.

Pues bien, en una ocasión el programa Stargazing Live invitó a sus espectadores a participar en la búsqueda de planetas extrasolares a través del proyecto Planet Hunters, una iniciativa que recaba el apoyo de voluntarios para analizar las imágenes tomadas por el telescopio espacial Kepler de la NASA. El resultado de esta invitación fue que dos astrónomos aficionados descubrieron un exoplaneta, probablemente gaseoso y del tamaño de Neptuno, al que bautizaron con sus nombres: Threapleton Holmes B.

Motivado por este descubrimiento, Cox tuvo una idea: apuntar uno de los radiotelescopios del Observatorio Jodrell Bank, perteneciente a la Universidad en la que trabaja, hacia el planeta Threapleton Holmes B para intentar detectar alguna señal que pudiera delatar la presencia de una civilización tecnológica. Y hacerlo en directo en su programa. Por supuesto, no era más que una flecha al aire, una actividad puramente recreativa, ya que las presuntas condiciones del planeta difícilmente permitirían la existencia de vida. Pero nunca se había hecho nada semejante en televisión, y tratar de captar en vivo alguna emisión alienígena era sin duda un emocionante gancho para la audiencia.

Lo insólito de la historia llegó cuando Cox comunicó su intención a los responsables de la BBC. Según reveló Cox en noviembre de 2012 en un programa matutino de la radio BBC 6, «lo que dijo la BBC fue: no puedes hacer eso. Necesitamos revisar las regulaciones de salud y seguridad y todo eso en caso de que descubramos una señal de una civilización alienígena». «Yo dije», continuó Cox, «¿queréis decir que descubriríamos la primera pista de que hay otra vida inteligente en el universo más allá de la Tierra, en directo y en el aire, y vosotros estáis preocupados por la salud y la seguridad de ello?». «Fue increíble. Tenían una normativa», dijo el físico. El presentador, Shaun Keaveny, apuntó que tal vez la BBC temía que los alienígenas dijeran palabrotas en directo.

Otro episodio esperpéntico, relató Cox a Keaveny, tuvo lugar cuando Stargazing Live pretendió dedicar un programa a Marte en el que se invitaría a los espectadores a buscar posibles signos geológicos de vida pasada o presente. «Alguien de la BBC me dijo, ¿tendría que haber un premio si alguien lo descubriese?», dijo el físico. «Yo dije, ¿qué quieres decir? ¿Vas a decirle a alguien, has descubierto la primera prueba de vida alienígena fuera de la Tierra, y aquí tienes un cheque regalo para un libro? ¿Piensas que eso va a hacerlo mejor? ¿Puntos de Nectar [una tarjeta de fidelización de los comercios británicos] o algo así?»

Como no podía ser de otra manera, Nectar recogió el guante y lo aprovechó como estupenda estrategia publicitaria, ofreciendo diez millones de puntos a la primera persona que descubriera vida inteligente fuera de la Tierra. Posteriormente el copresentador de Stargazing Live, Dara O Briain, aclaró que Cox había utilizado algo de «licencia de comedia» en su narración, pero confirmó que ni la BBC ni la ONU sabrían que hacer ante un contacto con una civilización alienígena.

Tal vez esto no sea sorprendente, y que lo verdaderamente pasmoso sea que el Vaticano sí reflexiona sobre ello. En 2009, la Academia Pontificia de Ciencias celebró una conferencia científica sobre astrobiología a la que asistieron los principales expertos mundiales. Este hecho, junto con ciertas declaraciones de responsables eclesiásticos a los medios, levantó en los círculos ufológicos de internet la teoría de que la Iglesia Católica preparaba un anuncio público sobre la vida en otros planetas, lo que a su vez inspiró a algunas webs satíricas la idea de que el Papa Francisco había contactado personalmente con E. T., lo que se tradujo en que el Vaticano ocultaba pruebas ciertas de la existencia de alienígenas, lo que, cómo no, alimentó la paranoia apocalíptica. Si el genial humorista Eugenio levantara la cabeza, disfrutaría con esta versión de aquel gran chiste del eclipse en el cuartel.

Un fotograma de la película 'The visit'. Imagen de Sundance / Autlook Film Sales.

Un fotograma de la película ‘The visit’. Imagen de Sundance / Autlook Film Sales.

Lo cierto es que quizá nos hemos acostumbrado ya de tal manera a que la idea del contacto con una civilización alienígena pertenece al mundo del cine y la televisión, y no a la vida real, que si algún día se produce nadie sabría cómo reaccionar. Esta premisa es de por sí un interesante terreno a explorar: no el primer contacto, sino la respuesta de la humanidad a ese primer contacto. Así lo ha entendido el director de cine danés Michael Madsen (no ese Michael Madsen), que en su película The visit, una de las propuestas de este año del festival de cine independiente de Sundance, plantea las repercusiones de una situación semejante a través del formato de falso documental.

Así se anuncia The visit en la web del festival: «A través de inquietantes entrevistas con expertos de la NASA, Naciones Unidas y el Instituto SETI, entre muchas otras, el aclamado director danés Michael Madsen construye un creíble y escalofriante escenario del primer contacto en la Tierra, comenzando con la más simple de las preguntas: ¿Por qué estáis aquí? ¿Cómo pensáis? ¿Qué veis en los humanos que nosotros mismos no vemos?».

El astrónomo jefe del Instituto SETI (Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre), Seth Shostak, ha escrito un comentario sobre la película, que según él «se atreve a ir a donde ninguna película de ciencia-ficción ha ido antes». «La verdadera esencia del encuentro retratado en The visit no está en materias tan mundanas como si el visitante va a arrasar nuestras infraestructuras, sino en las implicaciones sociológicas. ¿Cómo funciona vuestra mente?, preguntan los expertos. ¿Tenéis imaginación? ¿Un concepto del bien y el mal?», reflexiona Shostak.

Por cierto, finalmente el programa de Cox apuntó el telescopio al nuevo planeta, pero solo recogió lo mismo que hemos obtenido siempre hasta ahora, lo que el astrofísico Paul Davies, experto mundial en la búsqueda de inteligencia extraterrestre, llamaba en su libro «un silencio inquietante».

7 comentarios

  1. Dice ser Antonio Larrosa

    Cuan equivocados estaban porque….Estuve en un desierto de Marte, me acorde de ti y te compré una novela titulada EL CACIQUE D. DANIEL http://antoniolarrosa.com

    Clica sobre mi nombre .

    07 febrero 2015 | 14:56

  2. Dice ser Divulgadores científicos españoles

    Es cierto que en España hemos tenido pocos divulgadores científicos pero me viene a la cabeza dos muy importantes:
    – Manuel Toharia, es cierto que no es tan mediático como los americanos ero si hacía divulgación.
    – Felix Rodríguez de la Fuente: sin duda el más importante que tuvimos y gran defensor del medio ambiente, hasta el punto que nos advirtió de muchos problemas que tenemos ahora pero en una época en que los españoles estabamos más preocupados por otras cosas.

    08 febrero 2015 | 10:08

  3. Dice ser La ciencia y sus demonios

    Es curioso que a pesar de los pocos divulgadores científicos que hay y de que en este país lo único que interesa es el fútbol, si existieron importantes inventores y hoy hay gente que intenta hacer divulgación de ello como en el blog la ciencia y sus demonios:
    http://lacienciaysusdemonios.com/, http://www.malaciencia.info, etc…
    Hacemos palmas con las orejas con los triunfos futbolísticos pero no nos avergüenza apenas haber conseguido ningún nobel importante, si quitamos a Cajal y Ochoa.

    08 febrero 2015 | 10:12

  4. Javier Yanes

    La ciencia y sus demonios y DCE,

    Es cierto, hay muy buenos blogs de ciencia en este país, muy buenos periodistas de ciencia trabajando en los medios, y también científicos que hacen un gran esfuerzo en divulgación y lo hacen bien. Félix fue, en efecto, una figura irrepetible, y Toharia es científico y muy buen divulgador… Pero una figura tan mediática y popular como Cox es algo que a la ciencia española le sería muy beneficioso. Me vais a perdonar, pero insisto en lo de guapo. De verdad, creo que en esta sociedad de la imagen no es un factor menor, y creo que la ciencia tiene que librarse (ya lo he dicho aquí otras veces) de su propio meapilismo. Fijaos, incluso Sagan, sin ser quizá estrictamente guapo, era un tipo tremendamente atractivo, me atrevo a decir.

    En cuanto a los Nóbeles de ciencia, yo diría solo Cajal. Siempre sostengo que Ochoa fue un Nobel estadounidense. De haberse quedado aquí hoy no sabríamos ni quién fue.

    Un saludo,
    Javier Yanes

    08 febrero 2015 | 11:02

  5. Javier Yanes

    Añado una cosa. Creo muy sinceramente que en su día el conflicto de los controladores aéreos no solo fue tan aireado mediáticamente por su innegable importancia social entonces (afectaba a millones de usuarios). Me consta que a su portavoz (siento no recordar su nombre, pero imagino que sabéis a quién me refiero) se le deseaba muuucho en los medios por razones completamente ajenas a sus responsabilidades. Para bien o para mal, es la sociedad en la que nos ha tocado vivir.

    Y un par de cosas que olvidé decir: ni Félix ni Toharia han sido verdaderamente científicos en ejercicio; Félix era dentista de formación y, que yo sepa, no hacía investigación personalmente más allá de las que elaboraba para sus programas (recuerdo el huevo del alimoche); y Toharia sí, es físico, pero si no estoy equivocado creo que empezó a trabajar de joven como periodista y no ha hecho una carrera investigadora.

    Un saludo.

    08 febrero 2015 | 11:11

  6. Dice ser alejo

    El único posible contacto que la humanidad ha podido tener con alguna inteligencia extraterrestre, la eñal Wow!: http://documentalium.blogspot.com/2014/11/la-senal-wow-y-los-sonidos-de-origen.html

    08 febrero 2015 | 12:41

  7. Dice ser manzapulas

    la prueba inequivoca de que existe una inteligencia superior en el universo es que no han venido aqui a visitarnos. ahi queda eso.

    11 febrero 2015 | 18:06

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