Hasta ahora, nosotros solo teníamos socios y, eventualmente, donaciones extras que ayudaban a amortiguar una economía maltrecha pero estable. El trabajo actualmente con la residencia nos ha afectado bastante porque, a parte de los mil euros fijos que pagamos por las jaulas que tenemos alquiladas, siempre tenemos que estar pagando jaulas extras para los casos urgentes que nos llegan, como cachorros o animales en estado de abandono extremo. Gastos que antes no teníamos.
Motivado por todo ello, ha nacido la figura del Padrino. Un padrino es aquella persona que elige pagar parte de la estancia en residencia de un determinado animal. La cuota es variable, entre 50 cnt y 4€ diarios, según pueda el padrino colaborar. El padrino tiene derecho a un carnet de apadrinamiento, con todos los datos del animal, y a estar informado de todo lo que pasa con él. Además, puede venir a visitarlo cuando lo desee. Un vez el animal en cuestión sea adoptado y salga de nuestras instalaciones, el padrino tendrá la opción de dejar de pagar, puesto que su animal ya no está generando ese gasto, o de apadrinar a otro animal.
Actualmente, tenemos con nosotros los siguientes perros adultos y cachorros, y una jaula para gatos. Los perros adultos que pueden apadrinarse son:
-> Negrita: estaba abandonada junto con un hermanito, ya adoptado, y lleva con nosotros desde que era cachorra.
-> Golfo: muy joven, abandonado en un pueblo durante mucho tiempo. Lo ha pasado muy mal.
-> Cruz: cruce de labrador que recogimos cuando tenía 7 meses y nadie ha preguntado por ella.
-> Bolt: cachorrón recogido de una urbanización donde pedía comida y caricias a los vecinos.
-> Sultán: lo encontramos enfermo y en muy mal estado caminando por el arcén de una carretera. Actualmente está ya totalmente recuperado.
-> Kito: Cruce de pequinés que llegó a nosotros hace casi un año y por el que nadie se ha interesado.
-> Gala: preciosa perrita joven y juguetona que tampoco ha tenido suerte en todo el tiempo que lleva con nosotros.
-> Topilla: es la podenquita que parió en el campo y estuvo a punto de morir quemada junto con sus cachorros. Ya está separada de ellos por motivos de salud.
-> Fogg: perrito muy vivaracho y dicharachero, que lleva también mucho tiempo con nosotros.
-> Tom: muy joven y bueno, le encanta dar besitos. Estaba en un barrio marginal, donde se crió solo y en la calle desde que era un cachorrete de pocos meses.
-> Chocolate: precioso animal, muy jovencito, un cachorrete. Otro que lleva mucho tiempo con nosotros y que no ha tenido suerte.
-> Yasmina: una perrita nueva en nuestra gran familia. Entró hace unos días. Es una perrita muy linda y simpática.
-> Quini: También lleva mucho tiempo con nosotros. Es muy joven, activo y juguetón. Nadie ha preguntado nunca por él.
-> Ratona: perrita medianita, muy simpática, que no para de mover el rabido buscando caricias.
-> Vida: pastor alemán recogida de la calle con una piometra y en un estado realmente desastroso. No se movía del suelo.
Los cachorritos que necesitan de un padrino son:
-> Romero, Albahaca, Hierbabuena y Jara: Son los cachorros de Topilla. Debido a su edad y a problemas de la salud de la madre, ahora están separados en una jaula para ellos solos.
-> Mickey y Minnie: cachorritos de mes y medio, recogidos de una cuadra donde un hombre guarda a los perros de su zona antes de que los desalmados de los vecinos los maten. Actualmente están en acogida, pero pronto entrarán en la residencia y ocuparán una jaula.
-> Britney, Madonna y Casanova: tres cachorritos recogidos de debajo de un coche, donde los habían abandonado. Tienen apenas tres meses. Ahora mismo, la mujer que los encontró los tendrá hasta la semana que viene, pero luego entrarán en la residencia, con el gasto que ello conlleva.
A todos ellos, se añaden los gatos. Todos los gatos buscan padrino.
Y la lista de espera para ocupar un lugar en la residencia, a refugio de malnacidos y maltratadores y de las inclemencias del tiempo, sigue creciendo día a día.
Si quieres ser padrino de cualquiera de nuestros animales (iremos actualizando la lista semanalmente), solo tienes que contactar con nosotros escribiéndonos a maemar@arcasevilla.es, arca@arcasevilla.es o llamarnos al 654 94 97 59.
Y para acabar, aquí os dejo un abuelete de 17 años que me mandan desde la 
La 
Radikal ha tenido mucha suerte. Quedó abandonado junto con otros dos gatos en un piso que era de una pareja de ancianos que se fue para no volver.