Cápsulas de cine:
A los estudios Disney se les podrá acusar, juzgar o criticar por muchas cosas, pero al menos son honestos y uno de los objetivos es contentar a su público. Con la adquisición de los derechos de la saga de Star Wars a George Lucas se las prometían muy felices, ellos y los fans de las antiguas trilogías o las nuevas generaciones.
Más enfrentamientos entre jedis y el lado oscuro de la fuerza, X-wings, TIE fighters, AT-AT en todo su esplendor, armas láser, sables de luz y… el reencuentro con la princesa Leia, Han Solo y Luke Skywalker. Pero tres años y cuatro películas después, todo parece haber cambiado. El público ya no está respondiendo cómo quisieran a su megaproyecto de nuevas trilogías y spin-offs. De hecho, todo empezó con la tercera entrega, Los últimos Jedi, y se agravó con Han Solo: Una historia de Star Wars.

( J.J. Abrams «dando instrucciones» a R2D2 en el rodaje de ‘El despertar de la fuerza Disney/Lucasfilm)