El Gobierno asegura que AENA aplicará el método CES a las colonias de gatos abandonados de los aeropuertos y que colaborará con protectoras

No sé si recordáis la polémica reciente respecto a los animales, mayoritariamente gatos, abandonados en las instalaciones del Aeropuerto de Madrid: Aena prohíbe alimentar a los 400 animales abandonados, la mayoría gatos, del Adolfo Suárez.

GFAM

La Gestión Felina Aeroportuaria Madrid (GFAM), una asociación sin ánimo de lucro formada por trabajadores del aeropuerto y que «lleva años gestionando las colonias según estos protocolos de Madrid Salud, aplicando CES», se dedica a «reubicar gatos de zonas conflictivas a zonas de la periferia del recinto aeroportuario donde no puedan causar ningún problema» y a «sacar decenas de gatos para adopción o acogidas», destaca que «la mayoría de los animales que habitan o entran en el recinto aeroportuario son perdidos por los pasajeros a la hora de coger un vuelo debido a la caida de un transportín roto o mal anclado, o abandonados por estos mismos pasajeros o incluso abandonados por trabajadores del mismo aeropuerto«. Precisamente el pasado año hubo dos casos de gatos perdidos al escapar de sus transportines para los que se pusieron en marcha campañas solicitando la colaboración de Aena, que se negó a permitir a los propietarios a buscarlos o a colocar jaulas trampas.

Ha habido algunas novedades y quería traerlas aquí.  Novedades que vienen de la mano de la pregunta parlamentaria partió en enero de Carles Mulet, senador por Compromís y miembro de la Asociación Parlamentaria en Defensa de los Animales, integrada por representantes de todo tipo de fuerzas políticas y sobre la que ya os hablé en el pasado. Mulet ya había interpelado el pasado verano al Gobierno solicitando la implantación del método CES (Captura, Esterilización y Suelta).

Según publica hoy la prensa, este martes, 9 de enero, entra en vigor una modificación de la Normativa de Seguridad en Plataforma por la que se prohíbe dar de comer a los animales dentro del recinto aeroportuario.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha rechazado la amenaza de Aena, que pretende expedientar a los trabajadores de esta empresa pública que den de comer a animales abandonados en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, y tacha la prohibición de alimentarlos de «maltrato animal».

Este sindicato ha pedido en cambio un mayor esfuerzo de gestión a Aena para solucionar el problema que supone para el aeródromo madrileño la amplia colonia de animales abandonados, en su mayoría gatos.

Desde el sindicato reconocen que los animales son un peligro y no deben estar en el recinto aeroportuario. «Es un peligro para aeronaves, personas y por descontado para ellos mismos», indican. No obstante, señalan que cuando esos animales están ya asentados, o llegan y no se controlan como se debería, no se puede sacar una nueva Normativa de Seguridad de Plataforma (NSP) que impida alimentarles, «porque eso está tipificado por ley como maltrato animal».

El censo de animales abandonados en el aeropuerto madrileño anualmente es de unos 400. En un escenario así, el sindicato demanda que, por encima de prohibiciones, es necesario. hablar de las medidas constructivas para luchar contra esa corriente de animales abandonados.

Las críticas no solo se han producido desde el CSIF, también se han elevado desde el colectivo animalista.

Visto el revuelo causado, las críticas y la incomprensión de esta medida, ¿Piensa el
Gobierno instar o promover una Normativa de Seguridad en Plataforma más flexible y respetuosa con los animales?

La respuesta del Gobierno ha llegado hace unos pocos días, y es la siguiente:

En relación con el asunto interesado, se señala que, tanto la Reglamentación Europea, como la de la Organización de Aviación Internacional (OACI), han identificado la fauna como uno de los mayores riesgos para la aviación, por ello requieren que los aeropuertos dispongan de los procedimientos adecuados para gestionarla debido al peligro que constituye para la seguridad de las operaciones y de las personas.

Además, la Agencia Española de Seguridad Aérea (AESA), dentro del proceso de certificación de los aeropuertos en virtud de la normativa europea, exige que éstos dispongan de dichos procedimientos.

Asimismo, OACI, en su “Manual de servicios de aeropuertos (Doc 9137), Parte 3: Control y reducción del peligro que representa la fauna silvestre” identifica de forma explícita
el peligro que constituye facilitar alimento a la fauna, al incluir varias referencias a la
aplicación de medidas para evitar la atracción de animales a los recintos aeroportuarios, y para ello pone especial atención en la necesidad de que en los aeropuertos no exista ninguna fuente de alimento a su alcance, exigiendo que se adopten las medidas necesarias para que el almacenamiento de los desperdicios alimenticios sea resistente a los animales silvestres, e incluso estableciendo la prohibición de alimentar aves u otro tipo de fauna.

Como muestra del riesgo que constituye la fauna existente en los recintos aeroportuarios para la seguridad de las operaciones, esta Organización publicó un informe en el mes de mayo de 2017, sobre los incidentes causados por animales, tanto silvestres como domésticos, en los aeropuertos de 105 Estados asociados, en el que se detalla que durante el periodo 2008-2015 se contabilizaron más de 97.000 incidencias de esta naturaleza.

Por ello, las normas de seguridad en plataforma elaboradas por AENA establecen, entre otras premisas, la prohibición de alimentar sin ningún tipo de control a animales en la zona de movimiento de aeronaves, por parte de cualquier usuario del aeropuerto. El objetivo es evitar focos de atracción de fauna en general que puedan provocar graves incidentes, por el riesgo que supone para la aviación, los pasajeros y los propios animales.

La normativa supone una gestión más respetuosa con los animales, ya que evita que personal no especializado interfiera en la labor de los expertos de control de fauna, que son los que tienen que velar por su bienestar, gestionándolos adecuadamente de acuerdo con la legislación vigente en función del tipo de fauna de la que se trate. Este Servicio está constituido por personal especializado, conocedor de los requerimientos de seguridad operacional y los establecidos por las leyes de protección animal de las comunidades autónomas y ayuntamientos. Por tanto, la misión que tienen encomendada estos servicios de control de fauna es compatibilizar la seguridad operacional con la protección de la biodiversidad del entorno.

Por último, cabe destacar que AENA comparte la preocupación colectiva por el bienestar de la fauna existente en sus instalaciones, y por ello con la entrada en vigor de esta normativa y de forma complementaria a las actuaciones que ya se están realizando, se ha procedido a reforzar las actuaciones de control de la población felina existente, mediante tareas de recogida, atención, esterilización y reubicación, según la normativa en vigor, en coordinación con las administraciones competentes y en colaboración con asociaciones protectoras.

Es decir, que a las instalaciones sólo puede acceder personal especializado, pero que se colaborará con protectoras e implantará en CES en las colonias felinas existentes.

Todo lo contado parece razonable, al menos sobre el papel. Esperemos que así sea, pero de verdad. Seguiremos pendientes.

1 comentario

  1. Dice ser Currito Matagatos

    Bichos en aeropuertos poniendo en riesgo la seguridad y la vida de las personas… hay que exterminarlos cuanto antes

    06 abril 2018 | 5:53

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