Otro caso de un animal que es especial para los voluntarios del refugio en el que está, otro caso de un animal que se hace mayor sin lograr llamar la atención de una familia, sin conseguir su segunda oportunidad.
En esta ocasión nos vamos a Sevilla. Allí, en la protectora El buen amigo que está en Los palacios y villafranca, pasa sus días Junco. Un cruce de galgo que tiene ya diez años y que lleva tres siendo invisible.
Resulta triste que pocas personas se decidan por adoptar perros y gatos de edad avanzada. Son animales tranquilos, ya educados con frecuencia, que se adaptan bien al ritmo de aquellas personas que no tienen tiempo o energía para bregar con perros que necesitan mucha actividad o para educar cachorros.
Son, además, animales que lo pasan peor en las protectoras, expuestos en mayor medida que en un hogar a las inclemencias del tiempo.con la primera ola de frío importante encima, es inevitable acordarse de ellos.
Muchos evitan este tipo de adopciones por el temor a perder al animal demasiado pronto, pero eso no es algo que este asegurado. Una de mis perras, Troya, ha llegado a los diecisiete años sin problemas de salud. La anterior, a la que adopte cuando era muy joven, murió a los dos años por una leucemia.
Nadie sabe cuándo va a llegar la muerte, pero sí podemos decidir entregar nuestro amor y nuestros cuidados sin temerla.
Volvamos a Junco:
Nos apena que pase año tras año y no conseguirle un hogar. Ya es un abuelito noble, tranquilo e independiente que se lleva bien con otros perros. Es un poco tímido con las personas. El refugio es muy duro para todos pero en especial para los abuelos, Junco necesita un hogar cálido y una camita calentita, por favor ayudadnos a conseguir este sueño y necesidad para Junco.
Contacto: protectoraelbuenamigo@gmail.com
Estos días de frío extremo hay que hacer un esfuerzo extra por ellos. Serán pocos días de ola de frío. A los perros mayores se les debe dar cierto mimo ya que lo mas probable es que pasen la vida en el refugio. Cuando se vayan de esta vida por lo menos que nos quede el consuelo de que han vivido con dignidad y no les ha faltado una caricia de los voluntarios.
16 enero 2017 | 14:48