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Regresar a tu hogar y encontrarte que han entrado a robar es una de las experiencias domésticas más dolorosas que se pueden imaginar.
Dentro de la lotería que supone que nos toque o no recibir visitas inesperadas, hay una serie de factores que influyen –y mucho- en que tu vivienda sea la elegida para dar el golpe.
Hoy me pongo contigo en la mente del criminal para estudiar cuidadosamente los puntos débiles de tu casa, y anticiparnos así a sus pasos.
Voy a hacerte una serie de preguntas y, a medida que vayas respondiendo con síes o noes, quedarán más claras las posibles mejoras en materia de seguridad que te puedes plantear.
1. ¿Es fácil escalar hasta el interior de tu vivienda?
Me preocupan especialmente los bajos o los primeros pisos. Pero ojo, a veces no resulta complicado trepar hasta un segundo o un tercero si existen estructuras que ayuden a ello, como andamios o equipamientos como tuberías o conducciones. Las alarmas de presencia especiales para exteriores pueden servir para ahuyentar este tipo de intromisiones tan peligrosas.
2. ¿Tienes un interfono con vídeo para identificar a tus visitas?
Es muy importante que en la comunidad todo el mundo ponga su granito de arena para tratar de evitar que penetren a las zonas comunes desconocidos, sobre todo en horarios nocturnos.
3. ¿La mirilla de tu puerta tiene visibilidad completa al espacio exterior?
Si en los pasillos del bloque es importante poder identificar a los visitantes, en el umbral de tu puerta se convierte en un asunto de capital importancia. Si tu mirilla no ofrece una visión limpia y amplia, sustitúyela por otra y no dudes en poner sensores de movimiento conectados a una luz para mejorar la visibilidad y espantar malas intenciones.
4. ¿Dispones de alarma y señalizaciones bien visibles desde cualquier posible acceso?
Ante la tesitura de robar en una vivienda u otra, un ladrón optará por probar en la más desprotegida de ambas. Si has contratado un servicio de vigilancia, hazlo visible.
5. ¿Se puede desconectar el sistema eléctrico de la casa desde el exterior de forma sencilla?
Los sistemas de seguridad actuales ofrecen medidas de protección como la autoalimentación de energía durante un tiempo prolongado en caso de corte eléctrico, y los teléfonos móviles han logrado que superemos la dependencia del fijo en casos de emergencia como un intento de robo. Pero un corte de luz será igualmente una oportunidad para los cacos de penetrar con mayor facilidad en tus inmediaciones.
6. ¿Y la red telefónica?
Es importante que revises todas las conexiones fijas e inalámbricas de tu hogar para estar mucho más seguro.
7. ¿Hay propiedades de valor a la vista que puedan servir de cebo a los ladrones? (por ejemplo, bicicletas, equipos informáticos, obras de arte, etc.).
No ofrezcas más tentaciones a estos visitantes indeseados y cierra siempre persianas o cortinas en aquellas zonas de tu residencia con objetos suculentos…
8. ¿Han sido renovadas recientemente tus cerraduras y otros equipamientos de seguridad como candados o cadenas?
Recuerda que hoy en día existen técnicas de intromisión como el ‘bumping’ que pueden dar al traste con cerraduras antiguas. Se calcula que más del 90% de las cerraduras existentes en el mercado pueden ser abiertas gracias al método bumping. Es una técnica relativamente sencilla de aplicar; para ello solo son necesarios una llave debidamente manipulada y cualquier objeto con el que golpear, por ejemplo, un simple destornillador. Además, cientos de webs explican cómo ejecutarla a la perfección. Por eso, mejor instala cerraduras anti-bumping y cúbrete en salud frente a esta táctica.
9. ¿Cuentas con varias cerraduras en la puerta principal?
Ante dos posibilidades, un ladrón elegirá siempre la más sencilla. No se lo pongas fácil y coloca doble o triple cerradura para reducir las posibilidades.
10. ¿Tienen tus persianas una protección extra con algún cerrojo o seguro adicional?
Tus persianas también pueden ofrecer una resistencia mayor gracias a este tipo de mecanismos que un cerrajero cualificado convertirá en un seguro de vida para tus vacaciones.
11. ¿Hay puertas de acceso secundarias (como las de un sótano) que estén menos vigiladas y resulten más fáciles de atacar?
Aplica las mismas soluciones explicadas en las líneas previas: iluminación, instalación de cerraduras modernas, visibilidad mejorada, etc.
Hay muchas veces en que no efectuamos una mejora doméstica hasta que ya es totalmente inevitable.
Cuando se trata de hacer reformas para mejorar equipamientos como las conducciones hidráulicas de nuestra casa o el sistema eléctrico, el resultado puede ser una avería perfectamente eludible.
Pero cuando hablamos de seguridad, la única opción razonable es adelantarnos al problema y poner las mayores dificultades posibles a los amigos de lo ajeno.
Por suerte, todos los criminólogos coinciden en que el robo es el delito más fácil de evitar.
El delincuente evalúa si merece la pena el riesgo en cada caso según factores como los que he repasado. Así que solo son necesarias unas pocas medidas y mejoras estructurales, y un cambio de hábitos, para reducir drásticamente el peligro de sufrir un robo en casa.
Para ello, un cerrajero profesional te puede aconsejar las mejores opciones sin ningún compromiso.
¿Y tu casa? ¿Cómo de protegida está ahora mismo?
