El cine en realidad virtual son 360 grados en los que uno puede zambullirse en busca de nuevas narrativas. Es sumergirse en una historia usando una tecnología ciberpunk. Una experiencia con los ojos enclaustrados en unas gafas de VR. Es nadar por un cuento, una trama, un juego, arrastrado el espectador por la corriente lumínica del contador de historias.
Todavía experimental, es inmersión. El visitante cruza el portal a través de las lentes y conoce un mundo sumergido.
Luz, imágenes, música, voz y sobre todo presencia.
Realidad Aumentada. Estás rodeado de tramas…
¿Cine del futuro?
…Inmersión.
Apnea en un sueño digital. Los primeros espectadores, más bien visitantes, están nadando en la charca de un arte nuevo que aspira en este siglo a su revolución.
Os traigo a este blog un ejemplo de esta disciplina, la extensión del séptimo arte que cuenta ya con sus premios y jurado en festivales como el de Venecia. La siguiente pieza fue premiada en 2017 a la Mejor experiencia en Realidad Virtual.
La multifacética artista Laurie Anderson unió su talento al taiwanés Hsin-Chien Huang para crear una pieza titulada The Chalkroom (La sala de la tiza). Aquí se une la capacidad inmersiva de la tecnología con una historia, la narración con las posibilidades sensoriales digitales, en un formato adulto que trasciende al videojuego.
Ambos artistas han creado una sala de realidad virtual que presentan en distintos museos. El espacio es un viaje a través de las palabras y los símbolos. Es como flotar por los pavimentos internos de una historia. Así lo detalla su autora:
La pieza ofrece a los espectadores la oportunidad de viajar no solo al espacio de la imaginación que crea una historia, sino a la arquitectura misma de la historia: caminar, o más bien flotar, a través de sus pasillos a medida que las palabras y las letras se mueven como si fueran copos de nieve.
Un laberinto onírico. Lenguajes fracturados, cosas que explotaron y una estética mineral de tiza.
Laurie Anderson Interview: A Virtual Reality of Stories from Louisiana Channel on Vimeo.
Supongo que en el futuro ir al cine no será ir a ver una película, sino casi formar parte de ella. Aunque el espectador no participe activamente en la historia, sentirá formar parte de ella.
31 octubre 2018 | 19:28
Las cosas que ha ve Laurie Anderson, tanto en arte como en música, suelen ser una maravilla.
01 noviembre 2018 | 05:36