Runstorming Runstorming

Poner un pie delante de otro nunca tuvo tanta trascendencia.

Entradas etiquetadas como ‘trail running’

Una montaña en medio de Barcelona

Collserola. Una montaña que está en mitad de la ciudad, del área urbana. Y la vamos a usar para correr hasta que nos caigan los goterones de sudor por la rabadilla.

De hecho ya se usa para eso. El Parc de la Collserola es un pulmón extra que le surge a toda la comarca del Barcelonés en las últimas décadas del siglo pasado. Antes de ser transformado en un terreno a preservar, los barceloneses teníamos aquella referencia como el lugar donde estaba instalado el parque de atracciones del Tibidabo, su basílica, el cementerio y los depósitos de gas de la carretera de Cerdanyola y algunas barriadas donde las pendientes nos hacían aprender a caminar cuesta arriba y cuesta abajo.

Llegaron los años del diseño previo a los Juegos de Barcelona’92. Algo había que hacer aparte de plantar la torre de comunicaciones. Así que en 1987 se creó el Parque de Collserola, una entidad de 8.465 hectáreas. Y se fue convirtiendo en un lugar con estupendos caminos para correr, montar en bicicleta de montaña. Con este panorama tan al lado de casa, el próximo 23 de Noviembre se lanzan a organizar el Compressport Ultratrail Collserola de la ciudad de Barcelona.

 

En medio, dos nombres expertos y un ramillete de marcas. Tanto Mònica Aguilera como Marc Ràfols, dos corredores con gran recorrido dentro del mundo de la competición de larga distancia, forman parte de la organización de la competición.

¿Es apetecible aprovechar las sendas y caminos de un entorno así? Cómo no. Pero además, Barcelona cuenta con un privilegio parecido al de otras ciudades españolas. A menos de una hora de desplazamiento, prácticamente la totalidad de sus habitantes pueden disfrutar de un entorno natural.

Por lo tanto no podremos paladear esas laderas sobre las que escribía Eduardo Mendoza en «La ciudad de los Prodigios»:

Además de aquellas maravillas el jardín tenía recodos innumerables, pabellones, quioscos, templetes e invernaderos, avenidas misteriosas, de trazado deliberadamente confuso, por las que el paseante podía extraviarse sin temor y en cuyas revueltas podía toparse inopinadamente con la estatua ecuestre del emperador Augusto o con el semblante grave de Séneca o Quintiliano en sus pedestales respectivos, a través de cuyos setos conversaciones clandestinas podían ser oídas, citas amorosas sorprendidas y besos apasionados espiados a la luz de la luna. En los prados que se extendían en siete terrazas escalonadas en la falda de la montaña evolucionaban parejas de pavos reales y grullas egipcias.

Pero vamos a dar rienda suelta a toda la fiesta de correr por el campo. Caminos para mí desconocidos, vistas con las que me crié, una mezcla de sensaciones. En el mismo centro de Barcelona. A dos patadas del Carmelo o del Turó.

¿Se asentará esta prueba y pasará el corte de un calendario cada vez más saturado? . Para la Ultratrail de 74km y la Mitja Volta al Parc de 43km hace tiempo que no hay dorsales disponibles y las bajas se han ido cubriendo con la lista de espera. O sea, casi 1.500 corredores que ya hemos confiado en el caramelo.

Lo veremos en nada.

Todo preparado para la IV Madrid-Segovia

El sábado, al despuntar el día, un millar de participantes saldrán desde la Plaza Castilla de Madrid con dirección noroeste. Por delante tienen la tarea de llegar hasta Segovia en menos de veinticuatro horas. A pie.

La distancia que recorre la cada día más popular Madrid-Segovia y que organiza Ultrafondo Internacional ronda los cien kilómetros. En concreto es la distancia una de las cosas que menos preocupa. Para los participantes y los organizadores, el éxito significa llevar con buen pie a los participantes, y en el mayor número posible de llegados, hasta la meta situada bajo el acueducto romano de Segovia.

Aprovechando las Vías Pecuarias del Camino de Santiago, como matiza el subtítulo de la Madrid-Segovia.

IMG_8822CJ

Cada año desde hace cuatro, los participantes se conjuran para salir con la primera luz del sábado en dirección a los viejos olivares y encinares del Monte del Pardo. Ascienden paulatinamente por los caminos que llevan a Tres Cantos y Colmenar Viejo, siguiendo el rescatado itinerario del Camino de Santiago de Madrid.

Siempre a pie, muchos corriendo y la mayoría alternando carrera y caminata, se encaran las grandes cañadas ganaderas que acercan a Manzanares el Real. Es la antesala de la sierra y para los participantes el paso simbólico por el maratón: los primeros cuarenta y dos kilómetros. El cruce natural de quienes transitan entre ambas ciudades.

Guiados por las flechas amarillas y la señalización de la organización, la mitad del recorrido coincide con un anfiteatro de granito que abraza Mataelpino. Es el final de la tarde, y el alivio de las más altas temperaturas. Situado en la ladera soleada de la Sierra de Guadarrama, el segundo tercio de la carrera se hace durísimo al disputarse con los sólidos calores de septiembre.

Pero la cosa se suaviza. No así el recorrido que encara un tramo ascendente hacia la Barranca, entre piorno y roca, en dirección a Cercedilla, donde los corredores/marchadores cuentan con un punto clave: avituallamiento sólido, caliente, y donde podrán dejar las mochilas con ropa de repuesto y demás material. Este punto es crucial porque supone considerar la Madrid-Segovia como un reto ya vencido, además de afrontar la noche y su agradable temperatura. Psicológicamente se embarcan en la caminata fantástica bajo la oscuridad de los bosques de Las Dehesas.

mswww

Y es que el esfuerzo es diferente. Otros grupos musculares toman el relevo en el ascenso por la Carretera de la República hacia los mil ochocientos metros de altitud de la Fuenfría. Un café o un caldo caliente salvará los cuerpos del sueño y del cansancio. Los primeros hará tiempo que llegaron. El fenomenal Pablo Vega, o el vencedor de 2012, Carlos Morales, acarician el récord de la prueba en poco más de nueve horas (que data de 2011 en que venció el italiano Marco Bonfiglio). Pero los que disfrutan batiendo la dificultad de la distancia estarán encarando los largos kilómetros de descenso del antiguo itinerario romano.

La cruz de la Gallega es el aperitivo, finalmente, de la entrada en la ciudad castellana. Veinticuatro horas por delante para los mil participantes que agotaron en escasas semanas todos los dorsales.

Sin duda la Madrid-Segovia es una prueba diferente.

Información práctica:

Salida de Madrid – Plaza Castilla. 08.30am Sábado 21
Llegada a Segovia – Acueducto. hasta las 8.30am Domingo 22
Distancia aprox 102km
Desnivel acumulado 2.090m D+ / 1.820m D-
Participantes: 1000.

La fiscalía de Medio Ambiente de Asturias modifica una prueba de trail

La organización del DesafiOSOmiedo, prueba de montaña que arranca este fin de semana, ha recibido una resolución de la Fiscalía de Medio Ambiente de Asturias. En ella, con todo a punto para la celebración de la prueba y decenas de participantes desplazándose ya a la prueba, se emite un informe desfavorable.

La consecuencia más inmediata es la modificación de la prueba Ultra Desafío Somiedo, aduciendo impacto medioambiental. La organización ha comunicado a los participantes que se está buscando una solución que permita que la prueba se celebre. Entre otros, se afecta la primera parte del recorrido y la hora de salida, que ha de retrasarse por imperativo legal a las 7.00 am.

El UTDS, la prueba de más distancia y desnivel, recorre zonas de protección ambiental del entorno de Somiedo (Asturias). Evidentemente la comunidad de deportistas ha expresado su disgusto dado que los permisos se solicitan con tiempo para evitar estos inconvenientes.

Extrañamente, esta resolución podría afectar en lo sucesivo la celebración de algunas pruebas de trail en España. Siendo de obligado cumplimiento el presentar un dossier detallado en las pruebas al aire libre, se da la complicada situación de que el trail (y las carreras por entornos no urbanos en general) representan, precisamente, la opción más natural del correr hoy día.

Presiones.

La organización del DesafiOSOmiedo alega presiones que han surgido de diversas asociaciones de la zona. Es frecuente que las pruebas que se celebran por la montaña sufran algunos sabotajes, desapareciendo marcaje y balizas (habitualmente son cintas plásticas que se retiran al finalizar la prueba) y que entornos ecologistas extremos o propietarios de predios sobre los que se discurre estén en contra de esta modalidad.

Desde un sector de los corredores se reconoce en que existen, ciertamente, impactos irreparables en el mundo del trail. Algunos participantes arrojan desperdicios que ponen en peligro la celebración de las pruebas. Este comportamiento irrespetuoso de unos pocos, junto con determinados intereses políticos locales o regionales, obligan a los organizadores a guardar exquisito equilibrio y cuidado en la celebración.

El caso del UTDS queda todavía pendiente de posibles ampliaciones en las sanciones o problemas que se puedan celebrar este fin de semana.

Se ha decidido trasladar a los participantes en autobús a Villar de Vildas. La salida del UTDS, será por tanto en Villar de Vildas y se retrasa a las siete de la mañana. El resto del recorrido coincide con lo previsto. La organización «está trabajando para hacer posible que la prueba se dispute, con la merma de kilómetros que os comentamos pero que al fin y al cabo, se dispute. El UTDS, quedaría en 80 kilómetros y se reajustarán los tiempos de corte».

 

Iker Karrera se lleva la carrera de montaña más exigente del planeta

Tor des Geants. Es necesario ponerlo en letra. Trescientos treinta kilómetros sorteando los picos más altos del entorno de los Alpes.

Iker Karrera ha destrozado el récord de la prueba con su victoria en la prueba más terrible jamás diseñada en el deporte moderno. Se ha impuesto en la meta de Courmayeur (Italia) después de setenta horas y media de carrera. Cinco horas más rápido que el anterior mejor registro.

El corredor de montaña de Salomon se sitúa en la cumbre de los corredores extremos tras la prueba diseñada girando alrededor de los colosos alpinos de Francia, Italia y Suiza. Iker sucede al aragonés Oscar Pérez como vencedor en el palmarés. Karrera venía de dominar el Gran Raid des Pyrenées, prueba disputada sobre 160km y diez kilómetros acumulados de desnivel, cifras que correspondían aproximadamente con la mitad del reto de Courmayeur y los colosos alpinos.

Oscar Pérez vencía en 2012 y ha sido segundo esta mañana en la meta de Courmayeur, a escasos veinticinco minutos de Iker (rebautizado Porsche) Karrera. Después de ascender y descender durante más de tres días, de circular con luz natural y  noche por cols hasta de tres mil metros de altitud, superó al poderoso corredor italiano Franco Colle en la última noche.

Ellas, igual de increíbles.

En categoría femenina falta por confirmarse la victoria de la italiana Francesca Canepa o si Nerea Martínez lograría recuperar cincuenta minutos de desventaja. A la hora de editar esta noticia (18:00CET) se situaban sobre el kilómetro 280, saliendo del refugio de Ollomont con un margen que puede ser nada, en favor de una o de otra. Trescientos kilómetros a pie y una escasa hora de diferencia entre ambas. Por delante números que asustan: todavía les quedan unas diez u once horas, con lo que llevan.

Nerea, la durísima corredora de Salomon, se mantenía en el top 20 de la general acompañada del cuarto de los españoles, Pablo Criado (Grivel), experto ya con un TDG a sus espaldas y un tercer puesto en 2011. Nerea Martínez fue superada en el último ascenso nocturno por Canepa. Por delante de ellos figura en décima posición el veterano y curtido Salva Calvo, vencedor de innumerables pruebas desérticas y de montaña.

Nacida hace cuatro años, Tor des Geants se situó al extremo de la resistencia del montañero. Con un halo casi místico, en estas pocas ediciones ha atraído a lo más veterano y experimentado del mundo del ultra trail. Incrustada en la ventana de buen tiempo de los Alpes centrales, exige de los participantes una experiencia sobre las montañas. Los sucesivos tiempos de control acercan al participante a collados en los que no hay que dormirse. Marchar siempre, trotar, dominar el sueño y establecer una estrategia global de carrera y descansos.

Ciento cincuenta horas son el límite.

Los Diez Mil del Soplao, recuerdos

Ha pasado un mes largo desde que apareció la crónica. Libero, una vez que ha pasado la venta al público de la edición de papel, mi colaboración en la revista Planeta Running.

Los Diez Mil del Soplao es una prueba múltiple que se celebra en Mayo en Cabezón de la Sal y las sierras colindantes. Todo comenzó como una prueba de bicicleta de montaña pero pronto dejaron paso a los tipos de los muslos duros y la cara angulosa. Los pateadores de sendas aterrizamos en Cabezón con la sana intención de correr bien 45 bien 118 kilómetros. Pues allí me planté, a conocer el equipo que dirige el archiconocido Chus y saber si la famosa ruta de los Puentes acaba con la paciencia de uno. Saber si los avituallamientos eran gigantescos o simplemente pantagruélicos.

Conocido es el atractivo de las tierras norteñas para hacer más cosas que ir a practicar tu deporte favorito. Así que no me extenderé en cómo pasé el resto del fin de semana.

A efectos periodísticos, esto fue lo que dio de sí la prueba.

Diario de un corredor en vacaciones (8)

1.

Remiten las olas. La de bochorno que produce nuestra élite política. La de calor que asoló la costa lisboeta estos días y que me ha llevado a cometer imprudencias. La ola que, hasta ahora, hacía la ciudadanía a sus elegidos y que sacó a miles de portugueses a las tres de la tarde a manifestarse.

Las olas, oleadas, modas o disposiciones temporales y -por lo tanto, finitas- son sacudidas de la existencia. Son importantes porque nos acercan a ese estado calamitoso que definimos como «ay, Dios, que esto es el día del juicio». Necesarias.

2.

La concesión informal tácita del status de Salomon Field Tester (fanfarria) me comprometía a probar sus materiales. Luego a hablar de ellos. Un detalle: cuando una marca deportiva, en este caso especializada en trail running (and surroundings), contacta con servidor ha de saber de qué va cada palo. Me tranquilicé cuando su departamento de marketing confesó que seguía mis idioteces desde hace tiempo. Ya con tranquilidad moral, me puse a añadir kilómetros a esto. Hay que agradecerle a la marca la confianza.

En plena ola, la de achicharre, Salomon me facilitó un cinturón de hidratación al que llama Skin S-Lab Belt. Como si fuera un héroe de película de animación.

Suele suceder una cosa. En las distribuidoras españolas de cine intentan acercar el concepto de la película a lo primero que se le pone en los testículos. Así, Despicable Me pasa a ser Gru, Mi Villano Favorito. O sea. Como si me presentas a tu mujer como «Esta es Ángeles, mi chica» y yo me refiero a ella como «Ya se jodió mojar el turrón». Veamos si esto tiene implicaciones en el producto de competición de los salmónidos. Yo creo que, algo, sí.

Definiendo: sencillo cinturón que irá encajado en tus caderas. Ajuste de cierre de presa, tejidos autoajustables, y bolsillos delanteros para materiales extra en carrera. Compatible con botellines de bebida blandos 2 uds de 237ml y 2 uds de 149ml. Un producto racing absoluto.

Es ligero. Minimalista. Sacarlo del envoltorio y pensar en un peto para dirigir el tráfico a la puerta del colegio, todo uno. Esto tiene que servir para transportar cosas, como menciona la web.

Lo último que se duda es que la idea del cinturón Belt haya surgido en una tormenta de ideas entre los corredores más rápidos y versátiles del mundo Salomon. Tal cual se dice lo de:

Diseñada junto con los atletas para carreras intensas, esta riñonera ligera y muy bien ajustada con compartimentos frontal y trasero elimina los rebotes durante las carreras por montaña.

Es evidente que no dice nada de una carrera diaria, un entrenamiento local, salvo que sea intensa y simule los trotes y brincos de la montaña. Sirva como aviso a potenciales compradores: si comienzas a ampliar el rango de peso a transportar o kilómetros de trote estarás rompiendo el ethos del producto y, después, tus quejas u opiniones irán al contenedor de reciclar. Por tanto, he de confesar que las sucesivas pruebas han carecido de radicalidad para ser incluídas en este análisis.

Ahora bien. Por el bien de nuestra relación comercial y por ampliar un poco la esencia del cinturón, extrapolemos a la competición pura y dura.

Vale, trail racing radical, pero…

Las carreras de trail que el 95% de los corredores afrontamos exigen un material obligatorio. El 100% de las situaciones que afrontamos nos piden un respeto al complicado medio en el que corremos. La montaña y su clima cambiante, o la montaña y su clima extremo. O esa salida rápida de compromiso después de trabajar en la que subimos como relámpagos para un entrenamiento rápido de dos horas. Y, en los bolsillos anteriores, cabe poco. Hay que optimizar mucho dos geles o barritas energéticas. Un chubasquero hipercomprimido hará que nos falte espacio. Un recorrido sin fuentes nos exigirá más que estos ‘flasks’ de material blando a no ser que la carrera se dispute con temperaturas frías. El diseño de los bolsillos con cremallera son, eso sí, ideales para llanes, smartphone y algo de comida. Unos guantes y una badana y quizá un extremísimo cortavientos Bonatti tienen sitio de sobra, aprovechando una doble goma con interior de silicona en la parte posterior, cierto. Pero no consigo encontrar espacio para una manta de supervivencia, frontal, más comida y mínimo 750cl de líquido. Y es que uno es lento, imperfecto y tragón.

Porque este material requiere de una capacidad complicada de encontrar. La de llegar en brevísimo tiempo al próximo avituallamiento. Donde, posiblemente, tu equipo de apoyo o pacers tengan repuesto extra o ropa y material que requieras para la próxima sección. O sea, nada de recuperar caminando mientras se pasa la pájara, reservas para acometer la sección técnica mientras atardece y caiga la luz, o meter manguitos y chubasquero extra para la zona más expuesta al viento.

Quizá estemos delante de una riñonera que diseñó el fantástico Kilian Jornet para los corredores de un nivel altamente exigente. Pero las gacelas como KJ, AK o Núria Picas trotna en los ascensos y vuelan en los descensos. Sus ligeros chasis consumen eficazmente miles de calorías en una montaña mientras nuestra pesada carrocería diésel pide agua isotónico, bocadillos y una tregua en ese casi imposible ascenso. Y echamos más horas. Al sol, sed o frío.

A nosotros nos duele inscribirnos en un exigente trail y saber que hay que llegar a Courmayeur o al control de tiempo de Azkoitia con rapidez y todo solucionado, porque tendremos que arrear de nuevo en total autosuficiencia. La riñonera radical no soluciona más que una mínima porción de algunos entrenamientos del corredor estándar.

Volviendo a la comparación con las películas y el doblaje de su título, Belt, advanced Skin S-Lab podría perfectamente salir al mercado como Todo Aquello que Quisiste Saber sobre Cómo Kilian Guarda sus Chuches y que Nunca te Contaron Cómo lo lograba.

Pensando en esos mismos tipos de carreras que muchos afrontamos en las latitudes 36 – 40ºN, o sea península ibérica y contornos balear y canario, elaboré esta tabla simulatoria de Belt S-Lab/eficiencia para un corredor de monte del pelotón.

Modo/eficiencia.
Invierno-larga distancia. Descartada.
Invierno-corta. Ideal.
Otoño/Primavera-larga. Insuficiente.
Otoño/Primavera-corta. Ideal-Suficiente.
Verano-larga. Descartada.
Verano-corta. Suficiente-Insuficiente.

Otra gran cita de la alta montaña: Gran Trail de Peñalara

Últimos dos días antes del Gran Trail de Peñalara. El simpático y ya familiar getepé. Simpático y familiar son dos cariñosos epítetos que se han asignado a una excelente barbaridad de ciento diez kilómetros alrededor de los macizos más altos del Guadarrama.

El viernes por la noche varios centenares de corredores de montaña saldrán desde Navacerrada para contornear la gran cita del trail del centro peninsular. Las cifras son, aproximadamente, como salir de Madrid en dirección de Avila y, entre medias, sufrir los caprichos de un topógrafo borracho. De un atlante que hubiera sacudido la alfombra. Así, en una interminable sucesión de cumbres y valles, se ascienden y descienden ordenadamente un pico de 2.200 metros de altitud, un collado incómodo entre encinas y rocas mientras comienza a amanecer, otro col alpino de 1.800 metros, se descenderá por pinares hasta encarar otro collado de 2.000, el temible Reventón. La mediodía sorprende por las cumbres glaciares más altas del Guadarrama, que lleva a los 2.500 metros, y tirarse ladera abajo hasta La Granja para volver a la vertiente madrileña por una fácil ascensión a lo largo de la falda norte de Navacerrada. Una tortura que hizo agotar los dorsales en días.

Cambios en la edición del centenario.

La entidad que lo organiza tuvo a bien pensar en qué podía mejorarse esta bestialidad, que acumula cinco kilómetros verticales de ascensión. Los expertos montañeros de la R.S.E.A. Peñalara celebran sus cien años justo en la primera edición en que las pruebas (con distancias menores de 60 y 80 kilómetros) se disputan sobre el recién creado régimen de Parque Nacional.

Era 1913 cuando se fundó la Asociación Peñalara «Los Doce Amigos», embrión de lo que sería en breve la Real Sociedad Española de Alpinismo Peñalara. Los pioneros amantes de la naturaleza y apasionados de la montaña poco podían suponer del éxito que, un siglo después, conllevaría el fenómeno de caminar y correr por las montañas. De modo que, para la cuarta edición del GTP, se decidió lidiar con el calor de final de Junio adelantando la salida a la noche del viernes. Previos años nos habían llevado a correr desde primera hora ya con el día iniciado y un eterno paisaje azul y rocoso.

Como de los kilómetros y del esfuerzo no se libraba nadie (es uno de los ultra trails más duros del circuito español) al entrenamiento y la presencia de ánimo obligatorios la organización colaboró humanizando las primeras horas de competición. Posiblemente incida en los registros de los vencedores pero mucho más en las medias horarias del resto de los participantes.

Así, se espera evitar las imágenes de golpes de calor, como el que retiró al duro y experimentadísimo Aitor Leal en el kilómetro noventa, cuando encabezaba la prueba con un enorme margen sobre el récord del circuito. También se espera que los cientos de inscritos comiencen el sufrimiento real pasada la mitad de la prueba, cuando se encara la ascensión a las hasta hace nada nevadas cumbres del Risco de los Claveles o Peñalara.

Los inscritos en la edición de 2013 intentarán superar el récord de Federico Galera (13h27) y de Chari Adrián (16h23) aunque estas marcas se conseguían con un horario diurno. Este año habrá menos calor pero por delante se podrá correr algo menos. La nueva lista de aspirantes tiene en sus manos demostrar si el getepé es más humano con estos cambios.

Romper con la épica distancia, con esta vuelta completa a las grandes cumbres del Guadarrama a imagen y semejanza de los clásicos recorridos alpinos y pirenaicos. Es el objetivo de los participantes: terminar.

Las citas del baile de verano son:

110km, 11.200 metros desnivel, 30 horas de límite, salida 23.00 Viernes desde el pueblo de Navacerrada
80km, 7.800 metros desnivel, 21 horas de límite, misma salida, meta en La Granja
60km, 5.000 metros desnivel, 15 horas de límite, salida 08.15 del sábado, desde Rascafría
12km, 900 metros desnivel, cross de iniciación nocturno, salida 23.15 desde Navacerrada

cachoDSC_2745

Información práctica: 

www.grantrail.es

twitter: @GTPenalara

La versión de los ingleses del campo a través

Venga, un poco de variedad a nuestro mundo de polígonos industriales y avenidas con sucursales de bancos (en quiebra). Ayer me llegaba un correo del organizador de la Fairlands Valley Challenge (UK). Es una carrera que se celebra el Julio y que posee varias cosas a tener en cuenta:

– vacaciones en verano
– por la campiña inglesa
– muy cerca de un aeropuerto donde opera una línea low cost (London Luton)
– varias distancias

No es una prueba trail al uso. Es más, casi no parece una prueba, porque el recorrido no está marcado. Al participante le dan las instrucciones en unos folios que tienes que llevar en carrera. Están escritas en inglés (claro) como si fueran instrucciones dadas por sms y allá te las compongas.

Tal que así: «200yds R(ight) then over fence bhnd pub, 1/2m aid stn» significaría «200 yardas torcer a la derecha, luego cruzar sobre la valla tras el pub, a media milla puesto de avituallamiento».

Cada año es más popular y personalmente uno de los sitios más bonitos donde corrí. La hice en verano de 2005. Se puede participar desde 12 millas hasta 30 (de 20km a 50km) y se cruzan esas praderas de las películas, de pasa por algún pub, se rodean bonitas casas y hasta se cruza (se cruzaba) un cementerio y por el medio de un campo de golf.

Si no me falla la memoria era altamente fácil de llegar desde el aeropuerto de London Luton hasta Stevenage (Hertfordshire).

Un club premiado.

Los espartanos fueron premiados en una encuesta en Runner’s World como el mejor club de Reino Unido. Cuando uno llega al lugar donde se corre el Challenge, se siente inmediatamente arropado por los chicos vestidos de presidiario (su camiseta es a rayas verticales negras y grises).

La pradera, la barbacoa final después de la prueba, las sencillas instalaciones y una familiaridad muy de ‘countryside’ (pero sin caer en la fábula del buen salvaje). Esta prueba de finales de Julio debería estar en las agendas de los grupos de corredores de todos.

Hala, ¡a quitarse la rosca de la boina!

Penyagolosa Trails presenta su vídeo de 2013

Un trabajo que hasta hace bien poco tiempo mirábamos con asombro y envidia en las pruebas de trail de Estados Unidos y, sobre todo, Francia. Pues ya se están produciendo fantásticas imágenes en las principales pruebas de España. Los chicos del CSP115+MiM, las dos etiquetas bajo las que se presentan las pruebas que unen Castellón ciudad con la montaña de Castellón (y el santuario de Penyagolosa) han metido posibles en un buen material visual que hará que más y más gente le eche el ojo a este clásico de Mayo.

A los fabulosos vídeos de la TransVulcania, la TransGrancanacia, Gran Trail Peñalara y otros muchos, añadimos un nuevo producto. La Unica Sepia Creativa nos ha unido estas imágenes tan inspiradoras. A retuitearlas.

Se disputa en Madrid el «Maratón más duro del mundo»

Diecisiete ediciones consecutivas para probar el eslogan de la prueba. Posiblemente sea «el maratón más duro del mundo«. Los 42km y 195m de la distancia olímpica se multiplican arriba y abajo. El asfalto sobre el que se escriben las gestas épicas se cambia por sendas, riachuelos, roca y más roca. El resultado es casi 45 kilómetros con un acumulado de 5.300 metros de desnivel.

Todo esto configura la XVII edición del Maratón Alpino Madrileño que se disputó ayer. Con salida en la localidad madrileña de Cercedilla, desde sus escasos mil metros de altitud se ascendio varias veces hasta los dos mil y se descendió por nombres que están más asociados al alpinismo (Peñalara, Bola delMundo) o al ciclismo (puerto de Cotos, puerto de Navacerrada). Lo que habitualmente son tiempos de dos horas y cuarto en un vencedor en ruta, este año las cifras volvían a merodear el doble. El salmantino Alfredo Gil se imponía con 4h:01:18, con un márgen de quince y veinte minutos a Cristofer Clemente, y Federico Galera, respectivamente.

En dos horas se había agotado el medio millar de inscripciones disponibles en internet. El éxito de una prueba trail tan técnica y dura al lado de una megalópolis de seis millones de habitantes han convertido un dorsal del alpino en caviar.

Este verano había condicionantes extra, después de que las cumbres del recién estrenado Parque del Guadarrama permanecieran cubiertas de nieve hasta la semana de la carrera. Por esa llamada del peligro o por el furor de correr por sendas y pedregales, las cumbres atrajeron a los fieles del circuito de las carreras de montaña.

Desde Cercedilla se asciende al Puerto de Navacerrada por la vía más recta: el camino del Calvario. Coronado este santuario del esquí madrileño, todo recto hacia la cumbre de la Bola del Mundo, por encima de los 2.200 metros. Línea recta por las cumbres hasta Cotos, desde donde se encara la cima de Peñalara, el pico más alto de la zona (sobre los 2.400m).

En este punto la líder de la prueba femenina era la alemana  Lea Baeuscher, del equipo Salomon. Tras el descenso del vértice del Guadarrama se encara la tremenda ascensión a las Cabezas de Hierro por una pendiente de roca que merma las fuerzas y convierte los reflejos de las rodillas en mantequilla. Desfortunadamente Baeuscher sufrió un accidente en la bajada de Valdemartín y tuvo que ser evacuada, dejando la victoria para el duelo entre la madrileña Sonia Elgueta, que también sufrió problemas estomacales por la ingesta de un gel que no le sentó bien, y Sofía García Bardoll, tercera hasta entonces.

Al descender de las cumbres la carrera se juega en un serpenteante sendero que deshace el camino hasta Cercedilla. Son ocho kilómetros donde los músculos gritan y el equilibrio se gestiona con muchísimo entrenamiento en descensos. En chicas Sofía distanció en apenas dos minutos a Begoña Sánchez, ambas en la frontera de las 5h30 de esfuerzo. Tercera sería la canaria Raquel González.

El Maratón Alpino Madrileño es uno de los únicos maratones en el ránking de la Federación Internacional (ISF).

Paralelamente, se celebraron una carrera mini para los más jóvenes, y un cross de iniciación, el durísimo del Cross Alpino del Telégrafo, una carrera más corta que se empezó a organizar para dar oportunidad a los que se querían iniciarse en las carreras de montaña. Con 17 Km y 1.400 metros de desnivel acumulado, contó con las victorias del segoviano Óscar Baeza y Ana Paz Bermúdez.