Una de las muchas cosas que hace este deporte tan grande y espectacular es lo imprevisible que a veces resulta, lo que provoca que hacer predicciones en F1 sea tan sumamente difícil, y que acertar sea cada vez más complicado. Y este final de temporada lo está confirmando carrera tras carrera. Durante los últimos días, y más tras la sesión de clasificación de ayer, la situación estaba muy clara. Nadie podía pensar, intentando ser lo más objetivo posible, que Lewis Hamilton no fuera a acabar la carrera, ya que McLaren había hecho más que patente la fiabilidad de sus coches durante toda la temporada, y Lewis Hamilton no se ha caracterizado por cometer errores, sino todo lo contrario.

Ayer estaba todo muy claro. Estaba casi todo perdido, y Fernando lo tenía muy mal para llegar a Brasil con opciones con el cuarto puesto conseguido en la clasificación y la pole de Hamilton… pero todo ha dado la vuelta. Lo que ayer era decepción hoy es esperanza, y lo mejor de todo es que es una esperanza posible, muy posible. Todo se va a decidir en la última carrera, y hay tres pilotos con opciones reales de ganar el título, ya que no hay que olvidar a Kimi, que tras su victoria de hoy llegará a Brasil con posibilidades, escasas tal vez, pero visto lo visto, todo es posible.

A nosotros la única posibilidad que nos interesa es la victoria de Fernando Alonso y que Lewis no sea segundo. El resto de posibilidades yo las veo demasiado complicadas e improbables, aunque viendo como ha ido la temporada, ya no me sorprendería nada.

En cuanto a la carrera de Lewis, parece que ha querido ganar la carrera sin pensar en que se jugaba el campeonato. Ha cometido un error que le ha supuesto en primer lugar reducir su gran ventaja, y en segundo lugar hacerse con toda la presión del mundo para la última carrera. Y os aseguro que con toda esa presión va a ser muy difícil conducir el McLaren sin cometer errores, aunque es capaz de hacerlo.

En dos semanas sabremos como acaba todo esto, y esperemos que acabe de un modo favorable para los intereses de Fernando Alonso, es decir, que pueda ser Campeón del Mundo por tercer año consecutivo, y además en un año mucho más complicado de lo normal para él.

GRAN PREMIO DE CHINA

1º. Raikkonen (FIN) Ferrari 1:37:58.395

2º. Alonso (ESP) McLaren a 9.806

3º. Massa (BRA) Ferrari a 12.891

4º. Vettel (ALE) Toro Rosso a 53.509

5º. Button (GBR) Honda a 1:08.666

6º. Liuzzi (ITA) Toro Rosso a 1:13.673

7º. Heidfeld (ALE) BMW Sauber a 1:14.224

8º. Coulthard (GBR) Red Bull a 1:20.750

9º. Kovalainen (FIN) Renault a 1:21.186

10º. Webber (AUS) Red Bull a 1:24.685

11º. Fisichella (ITA) Renault a 1:26.683

12º. Wurz (AUS) Williams a 1 vueltas.

13º. Trulli (ITA) Toyota a 1 vueltas.

14º. T. Sato (JAP) Super Aguri a 1 vueltas.

15º. Barrichello (BRA) Honda a 1 vueltas.

16º. Rosberg (ALE) Williams a 2 vueltas.

17º. Yamamoto (JAP) Spyker a 3 vueltas.

Mientras hay vida, hay esperanza… Eso es lo que más se oye en los últimos días entre todos los aficionados a la Fórmula Uno en España. Y, la verdad, yo también lo creo así. Es cierto que está muy difícil, que Hamilton tiene el campeonato en la mano, pero no es menos cierto que quedan dos carreras y que esto es (no hay que olvidarlo) Fórmula 1, y todo puede pasar.

Si nos ponemos a buscar precedentes de finales de temporada milagrosos y hasta caóticos, no hay que retroceder mucho. Salvando las distancias, el año pasado a estas alturas Alonso tenía el campeonato perdido, y no era ante un novato, sino que era ante Michael Shumacher, que resulta que era siete veces campeón del mundo (que se dice pronto…) Y ya sabéis como acabó la historia: Fernando Alonso Campeón del Mundo por segunda vez.

En China a Fernando Alonso sólo le vale ganar la carrera para llegar a Brasil aunque sea con una posibilidad entre un millón. Las calculadoras van a echar humo, pero la verdad es que no hay otro resultado posible si pretende tener alguna opción en la última carrera.

Hay tres circunstacias que hacen toda esta historia posible, aunque sea mínimamente (casi lo mismo que aferrarse a un clavo ardiendo): Lewis Hamilton no ha corrido nunca en China ni en Brasil, lo cual le da una pequeña ventaja a Fernando, aunque tampoco había corrido nunca en Fuji y ya sabeis en qué posición quedó el inglés… pero también las circunstancias eran distintas. Por otro lado, Lewis Hamilton va a tener mucha presión encima, la cual va a tener que saber manejar si quiere ser el cmapeón del mundo más joven de la historia y el primer novato en ganar el campeonato. Hasta ahora lo ha llevado muy bien, pero no es lo mismo llevar bien la presión cuando te quedan 7 carreras que cuando lo tienes casi en la mano.

Hay otra cosa: parece ser que la FIA está investigando el incidente del Safety Car del otro dia. Van a tener que analizarlo, y es una decisión muy comprometida estando la cosa como está, pero viendo el video yo diría que esos frenazos no son muy normales en un piloto que encabeza una carrera detrás del SC, no?? Esto si que sería el colofón de un mundial de locos en el que ha pasado absolutamente de todo. Y no estaría mal.