Archivo de enero, 2020

Los animales de compañía se podrán registrar como miembros de la familia en los servicios sociales de Madrid (esperemos que no quede solo en algo escrito en un papel)

Ha sido noticia esta semana. Una muy buena noticia, a la espera de ver cómo se ejecuta. Ojalá no se quede solamente en una declaración de buenas intenciones.

Los animales de compañía tendrán su propio campo en los documentos de servicios sociales como parte de la unidad familiar, para proteger el vínculo establecido con las personas en situación especialmente vulnerable: víctimas de violencia machista, personas mayores y personas sin hogar.

La idea es poder anticipar posibles necesidades y planificar respuestas adecuadas para proteger ese vínculo y posibilitar la activación de las medidas necesarias para asegurar también la protección de los animales en situaciones de emergencia o riesgo.

Cuando una mujer, tal vez con niños, necesita protección, es muy duro obligarla a desprenderse de su perro o su gato, que puede haber sido su sostén, para poder aceptar la protección que le brinda la administración. Hay mayores que acaban con el corazón roto cuando le dicen que se busque la vida pero que el que ha sido su consuelo no tiene cabida ya en su vida por no poder seguir valiéndose por sí mismo. Igual que hay personas sin hogar renunciando a dormir calientes por no dejar a su compañero a su suerte.

«Hay mayores en situación de dependencia y de gran dificultad para las actividades básicas que se niegan a ir a una residencia porque no admiten animales de compañía», ha explicado el concejal Javier Barbero.


Lo saben bien en las protectoras, que demasiadas veces tienen que dar respuesta a situaciones así, prestando a esas personas la ayuda que la administración les niega. Una ayudita a que pasa por desprenderse del animal, cuando en demasiadas ocasiones no debería ser así. Nuestros perros y gatos nos pueden ayudar a pasar por situaciones difíciles.

La iniciativa ha sido aprobado a propuesta de Más Madrid y con el apoyo de todos los partidos (PSOE, PP y CSIC) salvo Vox, que está posicionado como el demogorgon a batir políticamente para lograr avances en los derechos de los animales y sus propietarios.

En dos meses se creará una mesa de trabajo formada por los grupos municipales, personal técnico y entidades especializadas para crear protocolos específicos de actuación. Crucemos los dedos para Edu esos protocolos se cumplan y, sobre todo, se doten de recursos.


Titán se entrega en adopción
con seguimientos, contrato, pasaporte europeo, microchip, vacunas, analíticas, desparasitaciones, esterilización y revisión veterinaria. Está en Córdoba pero puede viajar a cualquier punto de España. Todo esto será a coste cero para el adoptante, nuestra Asociación asume tantos los gastos veterinarios como el traslado del animal.

Titán tiene displasia de cadera y artrosis, sin embargo puede llevar una vida normal, vida que ahora no lleva. Cada vez que vamos a la residencia, se muere por salir a pasear y nos parte el alma no poder ofrecerle un hogar con una familia que le proporcione todo lo que se merece. Es un perro estupendo, noble, tranquilo y sociable. Aún así, nadie pregunta por él.

Desde que nos hicimos cargo de este grandullón sabíamos que iba a ser muy difícil encontrarle un hogar. También sabíamos que desde que nos hiciéramos cargo pasaría a ser un perro desapercibido, porque al asumirlo una Asociación no despertaría interés. También sabíamos que todas las ayudas económicas que recibía antes hacernos cargo, desaparecerían. Y así sucedió.

Contacto: informacion@elamigofielcordoba.org

Primer año de los Guauoyas, que han premiado a Oveja, de la película ‘Diecisiete’ y a Perruedines, de la serie ‘El vecino’

Este año, por vez primera, además de Goyas tenemos Guauoyas. Son una estupenda iniciativa de SrPerro nacida para reconocer las mejores actuaciones de perros en dos categorías, largometrajes y series. Una manera más de poner en valor a nuestros compañeros peludos que además tiene una vertiente solidaria, porque los premios para los ganadores son unas ilustraciones de Blowearts y pienso donado por Tiendanimal para las protectoras de su elección.

En esta primera edición los premiados han sido Oveja por la película Diecisiete de Daniel Sánchez Arévalo; y Perruedines por El Vecino, la ficción creada por Miguel Esteban y Raúl Navarro. Ambas, casualidades de la vida, disponibles en Netflix.

El primero aparece en una película en la que está más que presente la protección animal y el vínculo que se establece entre este perro abandonado y un joven, el actor Biel Montoro que acabó adoptando a su partenaire cuadrúpedo. La segunda, porque es perra aunque interprete a un macho, visibiliza que los perros con enfermedades crónicas, lesiones o discapacidad tienen una vida que merece ser vivida.

He tenido la fortuna de ser miembro del jurado de estos premios que espero se repitan año tras año junto a Alberto Rey, periodista especializado en series de TV; Anabel Vázquez, periodista de lifestyle; el ilustrador y fundador de Blowearts Pablo Gómez y la fundadora de la web SrPerro e impulsora de la iniciativa Micaela de la Maza.

Melisa Tuya:

Diecisiete tiene el gran mérito de mostrarnos que no se puede dar a nadie por perdido, ni a un perro abandonado ni a un chaval problemático. También que no podemos juzgar a los demás por nuestras primeras impresiones. Y lo hace llevando la realidad de la protección animal a un largometraje, algo que en muy contadas ocasiones hemos visto bien plasmado. Merece sin duda alguna este reconocimiento.

Alberto Rey:

Oveja es simplemente un perro. O, por qué no, un chucho. Uno maravillloso. A mí, que sólo he tenido chuchos, esa me parece una palabra preciosa. Cuando uno habla de su amigo perruno así le está dando más categoría de amigo que cuando nombra su raza o su (puaj) pedigree. Diecisiete va de amigos y de chuchos, que en el fondo son la misma cosa. Vivan los chuchos.

Anabel Vázquez:

Cuando terminé de ver Diecisiete escribí unos diecisiete mensajes recomendándola y todos incluían la palabra Oveja. Esta película tan mínima y tanmáxima me encantó. Ójala todos tuviéramos un Oveja que nos diera impulso para llegar donde queremos.

 

Anabel Vázquez:

Perru tiene la mirada magnética de las grandes estrellas clásicas. Me recuerda a Bette Davis, pero me inspira más ternura. Tenía el premio asegurado.

MelisaTuya:

Es todo un acierto que el equipo de El Vecino apostara por dar el protagonismo peludo de la serie a Perruedines (Ratoni), una perra rescatada del abandono y con discapacidad. Necesitamos que los animales de compañía dejen de considerarse accesorios de moda y en ese cometido las películas y las series tienen mucho por aportar, apostando por poner en valor todo tipo de perros y dejando de fomentar razas concretas tras las que luego llegan demasiados caprichos estéticos y malos criadores a los que no les importa el sufrimiento animal.

Alberto Rey:

Perruedines llega a El Vecino sin nombre… y sin ruedines. Su bautizo es de las cosas más divertidas de la serie de Raúl Navarro y Miguel Esteban. Pocos perros recuerdo tan piropeados en una ficción. Guapo, guapo y guapo (aunque en realidad es guapa: Perruedines es hembra). Que tenga ruedas es lo de menos. Hay mucho y mucho bueno en cómo una serie que en el fondo es una comedia cafre trata a una criatura tan especial.

Al menos 1.400 perros con pedigrí salieron de la fábrica de cachorros de pesadilla en la que tenían 270 chihuahuas con las cuerdas vocales cortadas

La semana pasada fue noticia la desmantelación de un criadero ilegal de chihuahuas, pomeranias y caniches en el que algunos animales tenían las cuerdas vocales cortadas para que no ladraran. Una noticia que amplié con un post.



Ha habido mucha gente interesándose por esos perros
por diferentes vías, ofreciéndose para adoptar alguno de ellos o para tenerlos en acogida, incluso recriminando a los medios que no demos información sobre dónde dirigirse para ofrecer su ayuda.

Probablemente gente con buena intención y el corazón sobrecogido por este maltrato terrorífico. También probablemente en un buen porcentaje, gente movida más por el impulso que por la reflexión, cuando siempre es más recomendable lo segundo que lo primero cuando se abre las puertas de tu hogar a un animal. Y no puedo evitar pensar que entre ellos hay muchos que, lo que buscan consciente o inconscientemente, es un chihuahua gratis.

Siempre que hay una noticia de incautaciones de perros minis de razas de moda, como ésta última, siempre se suceden las peticiones de gente que quiere adoptar o acoger uno. Todos ellos deberían hacer un importante examen de conciencia. Si alguien tiene interés en adoptar o acoger, en ayudar a perros y gatos de todo tipo que lo han pasado mal de diferentes maneras, hay multitud de protectoras con un montón de animales que lo necesitan urgentemente. No hay que esperar a todos estos, los hay que necesitan ayuda ya mismo. ¿O es que solo quiere ayudar si es un chihuahua o un pomerania?

Los perros de esta noticia no están en adopción. Por favor, que quede claro. Así lo contaban las organizaciones que se han hecho cargo de ellos en una nota de prensa: «FAPAM y ANAA se han hecho cargo de la custodia, cuidados y atención veterinaria de todos estos perros que además psicológicamente también necesitan ser rehabilitados, a consecuencia entre otras del confinamiento y hacinamiento al que han sido sometidos. Por el momento no es posible la adopción de ninguno de los perros«.

Una nota de prensa que da más información sobre esta fábrica de cachorros, que llevaba treinta años operando gracias a esos que quieren cachorros rápido y baratos sin preocuparse demasiado por su origen. Como bien apuntan estas asociacions: «Estas fábricas de cachorros no existirían si hubiera más conciencia entre la ciudadanía y a la hora de adquirir un animal de compañía no se colaborará con la explotación de animales y se diera una oportunidad a los miles de animales que se abandonan en España».

Al menos 1.400 perros con pedigrí salieron de la fábrica de cachorros de pesadilla. Al menos 1.400. Todo aquel que compre un animal por la vía fácil, sin interesarte a fondo en las condiciones en las que fue criado su futuro cachorro, es cómplice de sitios así, en los que el maltrato animal es la norma.

Los animales vivían en un zulo construido de manera ilegal en los bajos de un chalet. Se encontraban enjaulados en espacios pequeños y en unas condiciones «deplorables», según la Policía Nacional y en ocasiones había tres perros por cada jaula y los animales presentaban problemas articulares porque apenas podían moverse. El lugar no presentaba las mínimas condiciones higiénico-sanitarias, no tenía ventilación ni luz natural. El hedor era insoportable y el aire irrespirable, una actividad que el propietario de los animales llevaba a cabo de manera ilegal desde hace 30 años. Para evitar alarmas a los vecinos, a muchos de los animales se les seccionaron las cuerdas vocales y a las hembras destinadas a la cría habían sufrido cesáreas, amputaciones y tenían quistes en los ovarios.

Casi un centenar de jaulas apiladas era el lugar donde mantenían a los animales hacinados, toda su vida pisando un suelo de rejilla y sin poder hacer un mínimo de ejercicio. La vida de estos perros ha sido un infierno, encerrados en minúsculas jaulas sin apenas poder moverse, utilizados como máquinas de criar para conseguir un beneficio económico. Las hembras eran literalmente “explotadas” para conseguir el máximo número de cachorros para su venta.

Esta actividad se llevaba a cabo en la más absoluta ilegalidad, no presentaba ningún tipo de autorización de núcleo zoológico ni la correspondiente licencia de actividades.

Según la Policía Nacional “Se estima que llevan practicando esta actividad desde 1990. Desde entonces consta que han vendido al menos 1.400 perros con pedigrí, ya que son los que estaban dados de alta en la Real Sociedad Canina de España.

Según los cálculos de la Policía Nacional, los beneficios obtenidos superarían los dos millones de euros ya que los detenidos vendían los perros «de raza» por 3.000 euros, eso sin contar la venta de los canes sin pedigrí”.

En el momento de la incautación los perros presentaban problemas neurológicos, piómetras, malformaciones por la falta de ejercicio, fracturas consolidadas, en general diversos problemas de salud consecuencia directa de las pésimas condiciones de vida, de la cría abusiva/ explotación a la que han sometidos y de la ausencia de atención y cuidados necesarios para garantizar un mínimo bienestar.

FAPAM y ANAA se personarán como acusación particular en el procedimiento judicial, confiando en que los responsables de tanto sufrimiento paguen por sus actuaciones y que sea una condena ejemplarizante.

¿Horrorizado por el criadero en el que cortaban las cuerdas vocales de chihuahuas? Adoptar nunca fomentará prácticas así

La Policía Nacional ha desmantelado dos criaderos ilegales de chihuahuas en Araganda del Rey (Madrid), en una operación en la que han sido rescatados unos 270 perros. Una noticia que te contábamos ayer en @20m. Un tipo de noticias demasiado habituales que indican lo mal que se cría (producen animales mejor dicho) en este país.

Muchísima gente la ha leído, indignada por esas prácticas. Siempre me alegra que esas noticias tengan mucha audiencia, por la esperanza de que cale el mensaje de que no se puede comprar un perro fomentando el maltrato animal.

Porque no vale de nada indignarse y luego encapricharse con la idea de tener un bichón maltés, un shiba inu o un border collie y buscar la opción más rápida y barata para conseguirlo.

Comprar por anuncios clasificados por Internet, a particulares, en tiendas, a granjas que trabajan múltiples razas… es probable que tenga detrás desconocimiento y economía sumergida en el mejor de los casos, mucho sufrimiento en el peor.

Si se compra es obligado visitar las instalaciones del criador, que debe estar especializado en esa raza y no en una docena; conocer a la madre; comprobar que el criador está registrado y tiene afijo; esperar a que el cachorro tenga cuatro meses antes de separarlo de sus hermanos y su madre y recibirlo con todos los papeles y vacunas que estipulan las leyes que, por nuestra región, correspondan.

Pero siempre es mejor adoptar. La opción más solidaria, la más necesaria, la que siempre salva vidas, con la que no estaremos jamás apoyando a gente sin corazón.

Trosky es un bichón maltés joven, de seis kilos, que ha procede de un criadero en el que estuvo toda su vida encerrando cubriendo hembras para producir cachorros.

Busca una familia  que tiene que tener paciencia, porque nunca ha vivido en una casa y tiene que aprender de todo. Eso sí, tiene muy buen carácter, tanto con las personas como con otros perros.

Está en Toledo, pero se envía a toda España.

Contacto: 654737370 (dejar WhatsApp)

 

 

Hansel, el pitbull usado para peleas que ahora trabaja para los bomberos y es embajador de su raza

Hansel es un perro entrenado para detectar acelerantes, sustancias que pueden estar detrás de los incendios intencionados. Hasta ahí, nada fuera de lo normal. Muchos perros nos ayudan a vivir más seguros, a que se persigan delitos, gracias a su prodigioso olfato. Lo llamativo de este caso es que se trata de un pitbull, raza sobre la que pesan demasiados estigmas.

Más aún. Es un perro que fue usado para pelear contra sus congéneres. Fue rescatado junto a otras tres decenas de estos animales de un sitio en el que monstruos a dos patas se divertían viendo como los perros se destrozan en Ontario, Canadá. La ley imponía que fueran eutanasiados, ya que esa raza está prohibida, pero Rob Scheinberg, dueño de un santuario, evaluó a todos los animales incautados para determinar su capacidad para vivir en sociedad y ser entrenados.

21 de los 30 pitbull se aprobaron las pruebas de Dogs Playing For Life, una organización de Florida que provee de perros entrenados a veteranos del ejército. Solo el hecho de que ese elevado porcentaje demostrase ser apto para tener una segunda oportunidad ya sería noticia.

Lo es el hecho de que Hansel ahora sea un perro ejemplar que presta valiosos servicios a la sociedad. De hecho se trata del primer y único perro que trabaja en Nueva Jersey junto a las autoridades y en beneficio de la comunidad. En los medios locales que cuentan su historia apuntan a que probablemente sea el único pitbull con un desempeño así en todo Estados Unidos. No me extrañaría que lo fuera del mundo.

Tyler Van Leer es el bombero que trabaja junto a Hansel en Millville, y asegura que aunque muchos crean que los pitbulls no valen para hacer este tipo de trabajo, están en un error y su perro es la prueba tangible; también que “es muy complicado” convencer a la gente que son grandes perros, grandes en el sentido de geniales, útiles, cariñosos…

Esperemos que Hansel sea embajador de su raza, que ayude a hacer entender que son perros, sin más, víctimas de forma injusta de tener un físico poderoso y, con demasiada frecuencia, de acabar en manos infames.

Este es Miliano, un mestizo de pittbull que está en adopción en Asturias, también a la búsqueda de acogida y de padrinos. «Fue abandonado muy joven y ya pasa de los 7 años. Ha estado en una casa de acogida este último año y nos cuentan que es formal, obediente, cariñoso y muy sociable».

Contacto: info@aprever.es

Estamos locos por los animales. Los queremos felices y defendemos sus derechos. Nos gustan, aprendemos de ellos, nos divierten y soñamos con una sociedad cada vez más respetuosa con ellos.

Esa es la declaración de intenciones del nuevo grupo que 20minutos.es ha abierto en Facebook con el nombre de Animaleros. Os invito a sumaros a él, a participar, para lograr que sea una comunidad útil para todos, sobre todo para los que no tienen voz.

Nueve libros con los que aprender a respetar a los animales

Este domingo, con motivo de las celebraciones de San Antón, me pidieron en Hoy por Hoy Madrid de La Ser que recomendara varios libros que nos pueden ayudar a abrir los ojos ante la realidad de que los animales tienen derechos, que no son cosas, que sienten y que cada uno de ellos es un individuo único y, por tanto, una vida valiosa, igual que nosotros.

Por suerte hay muchos. Tantos que es difícil e injusto elegir. Finalmente seleccioné títulos muy distintos que nos enseñan y, al mismo tiempo, son muy disfrutables. Os traigo los libros de los que hablé y algunos más.

Empiezo por un cuento. Uno de esos que gusta y emociona a los niños y también a sus padres mientras se lo leen. Porque como dice su autora, «el cambio hacia una sociedad más justa para todos comienza por los niños, y lo más radicalmente trascendental que podemos hacer nosotros por el futuro es educarles».

Galgui es un cuento que recoge una historia inspirada en una real, en la de un galgo abandonado que fue rescatado por la protectora Arca de Noé de Córdoba y acogido cuando tenía pocos días por la autora del libro, científica en el csic, escritora y madre María José Rodríguez. Las ilustraciones, que nos presentan un galgo con cara de lápiz inolvidable, son preciosas. Son obra de Andrés Arcos, que forma parte del equipo de la preciosa película de animación Klaus, que aspira a un Oscar. Nació por crowdfunding así que se puede comprar desde la web de la autora.

El veterinario y comunicador Carlos Rodríguez tiene varios libros recomendables, pero yo recomendaría uno que publicó hace tres años con el título Llévame contigo, guía de adopción responsable (Oberon), un libro que en su prólogo y su presentación ha contado con Dani Rovira como padrino y está trufado de fotografías e historias de adopciones, rescates, encuentros… Además de aportar su conocimiento sobre la situación que existe en nuestro país respecto a la protección animal, da voz a muchos familias en las que hay un animal y que tienen algo que contar.

De como los animales viven y mueren, de Javier Ruiz, no centra el foco como los anteriores en los animales de compañía, habla también de aquellos de los que nos alimentamos, de los que usamos en espectáculos. Es un ensayo que tiene el mérito de poner sobre la mesa un debate imprescindible, el del trato que damos a los animales, nuestra relación y responsabilidad con ellos.

Si hablamos de ensayos con los que aprender de los animales, de su rica vida emocional, de dónde viene su domesticación, de la responsabilidad que tenemos con ellos, también destacaría La vida emocional de los animales de Marc Bekoff y editado por Fundación Altarriba y todos los libros de Desmond Morris, empezando por El mundo de los animales.

Novelas hay muchas. Para los más pequeños me resulta inevitable recomendar Gran Lobo Salvaje de René Escudié. El primer libro, editado por Barco de vapor, que yo recuerdo haber terminado de leer sola.


Y, por supuesto, está el gran Jack London. Excelente escritor de calidad incuestionable, fue probablemente pionero en girar el foco hacia perros, lobos y sus mestizos, con el marco de la fiebre del oro y el desierto helado del norte de América. Todo lo que ha escrito merece la pena, pero Colmillo blanco y La llamada de la selva son magníficos. Equivocadamente clasificado como juvenil y carente de interés para los adultos, encierra mundos enteros de etología intuida, observación del comportamiento animal de primera mano, aventuras crudas y una exploración de la naturaleza humana y de nuestra relación con la naturaleza y con otros animales. No os podéis conformar con haber visto alguna de las películas, hay que leerlo.

Termino recordando que tenéis mi última novela, Mastín y la chica del galgo, a la venta en la web de la Fundación Amigos del Perro y con todos los beneficios que genere para sus animales.


¿Qué libros añadiríais a estas recomendaciones?

Arranca un San Antón mermado en Madrid, con solo una decena de protectoras en lugar de las 72 que hubo en 2019

Hoy es San Antón, la festividad que tiene el foco en los animales y que ya hace años superó la típica estampa de las bendiciones en la iglesia. Desde ayer y durante todo el fin de semana se aprovecha para crear conciencia, informar sobre la situación de maltrato animal en nuestro país y lograr adopciones en toda España.

(Juan M. Espinosa/EFE/ARCHIVO)

En Madrid esta fiesta se va a ver empañada por la reducción drástica y sorprendente del número de protectoras que participarán. 62 asociaciones no podrán tener su stand y explicar su labor a los vecinos de Madrid interesados, tampoco podrán presentarles a sus animales necesitados. No estarán algunas tan representativas y veteranas como la Sociedad Protectora de Animales y Plantas de Madrid (SPAP), Proyecto Cañada o Madrid felina.

Ante esa situación la mayoría de las entidades damnificadas han escrito un comunicado conjunto denunciando esta situación:

Se acerca San Antón y como cada enero los animales de Madrid se preparan para celebrar su día grande. Pero 2020 será una excepción para los animales abandonados que esperan en entidades de protección animal a encontrar una familia. Ellos no disfrutarán de esta festividad. El Ayuntamiento de Madrid ha decidido excluir de las celebraciones a las asociaciones protectoras de animales de la ciudad, dejando una mínima representación de menos de diez asociaciones elegidas por el propio ayuntamiento sin dar explicaciones.

Para la festividad de 2020 se había elegido una ubicación con mayor extensión para dar más cabida a todas las asociaciones que día a día se desviven por recoger, recuperar y entregar en adopción a los animales abandonados de la capital. Sin embargo, el nuevo consistorio ha decidido que lo ideal es dejar una representación escasísima de estas organizaciones y ha reducido a seis las asociaciones para que representen mínimamente lo que es un grandísimo problema en la gran urbe: el abandono y maltrato animal. Se reduce así el número en más de 60 asociaciones respecto a 2019. 

Es necesario reseñar que, además, no se ha dado ninguna oportunidad a las entidades de protección animal a optar por formar parte de este importante evento, ya que no se ha abierto ningún tipo de concurso para que las asociaciones pudieran solicitar su participación. Sencillamente se ha elegido con algún tipo de criterio, desconocido para todos y del que queremos saber por qué sólo hay seis protectoras de animales que harán una pequeña representación de todo el trabajo de miles de voluntarios que diariamente dejan su vida en una tarea que corresponde a las administraciones. Son grandes olvidados también de este San Antón los gatos, las organizaciones CES (captura, esterilización, suelta), alimentadoras, los animales exóticos y los santuarios.

Un grupo de asociaciones ha decidido reunirse para luchar por los derechos de todos los animales abandonados y reclamar al consistorio que rectifique y que San Antón sea una fiesta abierta a todas las protectoras que deseen demostrar a los madrileños el gran trabajo que realizan, casi siempre en la sombra.

Cabe destacar que este grupo de asociaciones busca denunciar una situación que se viene repitiendo por parte de las administraciones cada vez que eliminan cualquier tipo de posibilidad de recibir ayuda para el desempeño de su labor y para dar visibilidad a los animales abandonados y la importancia de la adopción, la concienciación y la denuncia del maltrato animal. Estas asociaciones denuncian el desacierto del ayuntamiento con una decisión que deja fuera de esta gran celebración a miles de animales madrileños abandonados a su suerte. Este año, el nuevo alcalde les vuelve a abandonar. Por todo esto exigimos una explicación a los hechos acontecidos y una solución para los animales madrileños celebrando un evento para TODOS.

Y aquí todas las protectoras firmantes de este comunicado:

Mas Madrid se ha unido a esta petición, solicitando en una nota al Gobierno de coalición formado por PP y Ciudadanos que «mantenga el modelo abierto de participación a las entidades de protección animal».

También Pacma ha criticado que se «ningunee a las protectoras», «obviando a todos los santuarios y a las cuidadoras/ alimentadoras de colonias felinas de la ciudad. Además, algunas de las asociaciones que estarán representadas ni siquiera son de la Comunidad de Madrid». Según el partido animalista, «la organización se ha dejado en manos de personas afines al actual Ayuntamiento, que incluyen, incluso, hasta a criadores de perros. Es decir, aquellos que fomentan justamente lo contrario a lo que se intenta promover en una feria en la que se conciencia sobre la adopción».

Por su parte el Ayuntamiento de Madrid, después de que la noticia saltara a los medios, facilitó a EFE su postura al respecto. Aseguran que la reducción del número de colectivos se debe a problemas de espacio:

Según la Junta de Centro, que es la organizadora, además de las bendiciones en la iglesia de San Antón, las vueltas en su honor y la venta de panecillos, se va a hacer en la galería de Cristal del Palacio de Cibeles un homenaje a los perros que prestan un importante servicio a la sociedad, tanto desde el punto de vista de seguridad (Policía Municipal, Policía nacional y Guardia Civil), como a personas con discapacidad (ONCE y Roncescan).

«Esta actividad ocupa un espacio importante del Patio de Cristal, por lo que la presencia de expositores este año es menor», han añadido las mismas fuentes.

Entre las asociaciones y sectores invitados por la junta de distrito, se han seleccionado aquellas que son, a su juicio, más representativas y cuya actividad permite dar a conocer una amplia oferta de servicios vinculados al cuidado de las mascotas, como es el caso de Bichos Raros que atienden a animales con discapacidad, la mayoría en silla de ruedas, y trabajan en su rehabilitación y sus cuidados.

Una pena. Necesitamos que todas las asociaciones que le están resolviendo la papeleta a las administraciones públicas tengan voz. Es tristemente paradójico que los ayuntamientos le den la espalda a las protectoras, cuando estas asociaciones están asumiendo una responsabilidad que, en realidad, corresponde a los consistorios. La pelota difícilmente manejable de la protección animal están en el tejado de las administraciones municipales, que la dejan resbalar y cuyo rebote cogen, como buenamente pueden, estas organizaciones.

Lo mínimo que podrían hacer todos los alcaldes es prestarles su apoyo, y nunca adoptar decisiones tan desafortunadas como el del Ayuntamiento de Madrid este año.

Cuidado antes de arrancar el coche los días de frío, puede haber un gato dentro

En torno a las seis y media de la mañana. Mi perra va olisqueando la calle, con ganas de hacer los deberes pronto para volver al calor de nuestra casa, en la que ahora dormitan tras desayunar tres gatos. Tula es almeriense y friolera. Al pasar junto a un coche, cuyos cristales su dueño tendrá que rascar para poder conducir si lo va a necesitar pronto, un gato blanco y sucio sale por debajo y desaparece tras regatear unos contenedores.

Sale por debajo, pero tal vez salía de su interior. Del calor que el motor albergaba cuando fue allí aparcado. Muchos gatos callejeros se guarecen en el interior de los vehículos, aprovechando la temperatura residual durante los días de frío como los que ahora vive Madrid.

Hay muchos gatos sin dueño malviviendo en nuestras ciudades. Sombras fugaces condenadas a una vida corta sorteando distintos peligros. Y los hay que a veces, por demasiado jóvenes, ancianos o enfermos, quedan atrapados dentro de esos mecanismos, que incluso acaban heridos o muertos al poner el coche en marcha y no poder salir.

Por eso en estas fechas conviene recordar la necesidad de dar un par de golpes, de leves patadas a las ruedas delanteras o a la chapa que al al lado o tocar levemente el claxon, antes de arrancarlo, para asegurarnos de no acabar con una vida de camino al trabajo o al colegio de los niños.

Es mucho más habitual de lo que suponéis.

Rabito es joven, apenas tiene cuatro meses. Es juguetón y cariñoso, como buen cachorro, y busca un hogar.

Contacto: Adopciones@madridfelina.com

¿Tienes perro? Cuidado al entrar o salir de los ascensores

En muy poquito tiempo hemos mostrado en 20minutos dos vídeos que, por suerte, han acabado bien, pero que también muestran que los ascensores pueden ser muy peligrosos para nuestros perros.

Yo siempre lo he tenido presente. Era adolescente cuando una amiga de mi madre perdió a su perro, uno de pequeño tamaño, por culpa del ascensor de su vivienda. Aún recuerdo el impacto cuando me explicó que había muerto ahogado al quedar atrapada la correa entre las puertas.

Casi me alegré de vivir en un tercero sin ascensor.

Ahora que vivo en un tercero con ascensor, siempre tengo cuidado con las correas y las puertas. A mis perras las suelto ya al cruzar el portal si veo que no hay vecinos. De haberlos, las he llevado siempre bien sujetas, con la correa corta, y me aseguro de que entren a mi lado.

A mi hija también le he explicado el riesgo que tienen para que esté pendiente de que entra sin correa o con la correa controlada.

Lo que nunca hay que hacer es dejarles sueltos con la correa arrastrando, llevarles con correas extensibles sin controlar en la mejor tradición del perro cometa o quedarse de charla con algún vecino ante el ascensor si hay peligro de que se abra la puerta y entre.

A ver. Tampoco quiero con esto crear alarmismo. Es cierto que lo normal es que no pase nada, que estos accidentes son raros. Pero no lo son tanto, así que conviene adoptar ciertas precauciones.

No cuesta nada y nos puede evitar un buen disgusto. ¿No creéis?


Max es un pitbull que lleva prácticamente toda vida en la perrera de Jaén. Tiene siete años así que su edad, unido a que es un PPP, hace muy difícil la tarea de encontrar un hogar.

Me cuentan que es tranquilo, bueno y cariñoso. “Tiene una leve cojera en una de sus patas traseras, fruto de una vida durmiendo sobre el frío suelo de un chenil, y con los años, sus huesos se resienten. Pero puede hacer vida normal. Aunque es un perro sociable, se lleva mucho mejor con perros pequeños que con grandes. A los grandotes casi que prefiere verlos de lejos”.

Contacto: ageraaproyectohogar@gmail.com 670 95 96 88

Por mucho que abandones tu perro o a tu gato junto a una emotiva nota, sigue siendo un abandono y, por tanto, un delito

Estos días es noticia, de mucho éxito además, el abandono en una iglesia británica de Cracker, un cruce de Staffordshire y bull terrier. Y si es una noticia de Reino Unido cuya viralidad se ha extendido a otros países es por la nota que dejó el dueño del perro. Un escrito muy emotivo en el que decía que quería mucho al animal y que lo lamentaba mucho, pero que ya no podía ofrecerle techo y alimento y pedía para él, «con el corazón roto», un buen hogar. Cracker, por suerte, está en una protectora a la espera de una familia. Ha sido imposible encontrar a su anterior dueño.

(RSPCA)

Leía la noticia y recordaba otros casos que he visto en este país de animales abandonados con notitas al lado, sobre todo una publicación reciente de una protectora española en Instagram, que por desgracia no recuerdo ni he sido capaz de encontrar para mostrárosla, que ante un caso semejante de abandono con enseres y escrito, explicaba que eso sigue siendo un abandono y, por tanto, un delito.

Toda la razón. A un animal no se le puede dejar en la calle, abandonado en libertad o atado en un parque, una iglesia o a la salida de un colegio (casos todos que he visto). No se le puede dejar en la calle con o sin notas, haya detrás o no una historia verdadera de no poder seguir haciéndose cargo de él o sea todo cuento o pocas ganas de esforzarse y afrontar retos.

Si de verdad hay tanto amor por ese animal y una imposibilidad real de conservarlo, habrá que buscarse la vida para encontrar una familia que lo quiera y tenga en buenas condiciones tirando de contactos, de redes sociales, de lo que haga falta. No será sencillo, así veremos lo dura que es la labor de las asociaciones protectoras. También hay protectoras a las que acudir, saturadas pero que escucharán si vamos con un problema real, con disposición de colaborar y de aguantar con el animal en lista de espera. Hay perreras municipales inmundas, pero también las hay mejor gestionadas en las que hacen lo posible por encontrar un buen hogar a los animales que recogen. Hay residencias caninas y cuidadores en los que tenerlos hasta que esa nueva familia llegue, si el problema para mantenerlo no es económico sino de tiempo o alergias por ejemplo.

El abandono es la solución rápida, fácil y cruel. Con nota o sin nota.

Y precisamente porque no es sencillo desprenderse de un animal de la manera correcta, encontrando un buen lugar para él, deberíamos reflexionar sobre lo importante que es que solo abramos nuestras puertas a uno si tenemos del todo claro que asumiremos la responsabilidad de su cuidado hasta el final y bajo cualquier circunstancia.