Por Lourdes Mestre
No puedo comenzar la carta diciendo estimado Sr. Ruiz Gallardón porque sinceramente, no le estimo nada.
Me gustaría preguntarle si usted tiene hermanas, hijas, amigas o compañeras, y lo hago porque no he llegado a comprender cómo es posible que como Ministro de Justicia de un país que se supone occidentalizado y democrático, se pueda indultar a un tipo que es capaz de grabar en vídeo la violación de una mujer, en lugar de ayudarla.
En mi opinión, este hombre es un indeseable que no merece vestir el uniforme de la Guardia Civil y demasiado leve fue la sentencia judicial que en 2013 le inhabilitaba como cargo público.
Sin embargo, que ahora venga usted a indultarle, me parece que es reírse de los ciudadanos.
Flaco favor está haciendo a las fuerzas de seguridad de este país si permite que gentuza así pueda estar en sus filas. Pero claro, se me olvidaba. Si su propio hijo es capaz de darse a la fuga tras un golpe en coche será quizás, que eso es lo que aprende en su casa, en lugar de aprender a sentir empatía, solidaridad y respeto al prójimo.
Acciones como éstas son las que nos están llevando a muchos ciudadanos a desconfiar de su “justicia”, de su persona y de las políticas que están llevando a cabo, en contra de las personas y del sentido común.