¿Qué sucede cuando tienes una gran idea y la desarrollas con mimo y acierto, pero descuidas todos los elementos que la rodean? Pues que acabas creando algo muy parecido a Sniper Elite V2, un videojuego correcto, incluso magnífico en algunos puntos pero con un desequilibrio general que desconcierta.
El punto fuerte del título es precisamente su leitmotiv, nuestro papel como francotiradores. Como en tantos otros juegos de acción, la trama nos traslada a la Segunda Guerra Mundial, donde encarnamos a un francotirador al servicio de Estados Unidos a lo largo de diversas misiones. El hecho de que el personaje central sea este tipo de combatiente le da al título una personalidad que lo diferencia de los muchos otros shooters bélicos que hay en el mercado.
La idea —retomada y pulida a partir de una entrega previa que vio la luz durante la generación anterior— proporciona experiencias muy satisfactorias en las que la clave es el combate a distancia. Como francotiradores hemos de ser silenciosos, cautelosos y muy pacientes. A la hora de apuntar y disparar, variables como el viento y el pulso se convierten en elementos de vital importancia a los que hemos de prestar mucha atención. Si somos muy precisos y realizamos tiros sobresalientes, Sniper Elite V2 nos recompensa con secuencias en las que vemos, en cámara lenta y con efecto de rayos X (al más puro estilo Mortal Kombat), el impacto de la bala en el cuerpo del enemigo.
El gran problema llega cuando nos damos cuenta de que no basta con ser un soldado nivel Enemigo a las puertas sino que también tenemos que superar enfrentamientos cercanos. Muy a menudo, cuando somos descubiertos mientras realizamos una misión o cuando tenemos que desplazarnos o huir, nos vemos en la tesitura de tener que hacer frente a muchos enemigos sin la protección de la distancia. Contamos con armas de corta y media distancia, sí, pero la jugabilidad de esas situaciones no está muy pulida, ni por el control ni por la nefasta inteligencia de los enemigos, que en ocasiones parecen patos mareados que pululan por el escenario sin ningún propósito.
Si la IA fuese el único fallo de Sniper Elite V2, no habría gran problema, ya que los momentos de francotirador compensan sobremanera los combates a cercanos. Por desgracia, existen otras deficiencias destacables que empañan los puntos positivos: escenarios con poca libertad de movimiento, fallos de diseño (especialmente en los puntos de reaparición de enemigos) y, sobre todo, la repetición de misiones, una circunstancia que, a no ser que te encante el concepto del juego, puede hacer que acabes abandonándolo antes de terminarlo. El nivel técnico tampoco es espectacular pero cumple su función y las voces (aunque no se escuche en los vídeos que he incluido en el post) están dobladas al castellano.
A pesar de todos estos defectos, no diría que se trata de un mal videojuego. Sniper Elite V2 es un título modesto que cumple de manera impecable en su idea central (la experiencia de francotirador) pero que se embarra según se interna en terrenos que se alejan de ese concepto. En cualquier caso, parece que el juego ha convencido a muchos, puesto que ha logrado alcanzar el primer puesto en las listas de ventas de Reino Unido.
¿Habéis probado Sniper Elite V2?, ¿qué os parece?