Un terremoto ha hecho temblar NY y Nueva Jersey, y enseguida te acuerdas de las Torres Gemelas, que arruinaron el póster clásico y dejaron NY como un erial. Qué estropicio, qué zancocho. La mundial y luego Irak, Afganistán y el lío que aun sigue. El lío sigue por delante y por detrás. Ahora Irán amenaza a Israel por lo de Damasco, el lío va engodando. Irán avisa que se va a vengar, aunque la venganza es el estado por defecto de esa zona. Irán no amenaza por los siete de José Andrés, que le dan igual. La ONU ha votado que Israel lo deje estar, que van por cien mil entre muertos, heridos, desaparecidos… sin contar los suyos, y aquellos rehenes. Ya vale pues. En vez de hacer caso matan más, quizá para adelantar faena antes de que USA les pare, si es que puede. China ha hecho un plan eco para crecer el 5% pero occidente le pone muchas pegas, sobre todo porque si lo cumple va a arruinar a Europa y USA ya está arruinada endeudada pero mientras mande no hay nada que oponer. El que manda y dirige la moneda mundial puede deber lo que no está escrito. Pero un terremoto o lo que sea ha hecho temblar NY y ya nos hemos puesto de los nervios porque… por eso. Se cayó el puente de Baltimore. Y ha habido terremoto más grave en Taiwán, que es la madre nutricia de los microchips de menos de cinco nanómetros. Si Taiwán colapsa se acaba el mundo mindundi. Y si China le pone asedio o lo bloquea, pues igual. Hay que saber si los terremotos se pueden provocar con la tecnología actual, como por ejemplo cuando se rompió el gasoducto NordStream 2 aquel.
Los ucranianos trastean y hackean drones por garajes y locales olvidados y así mantienen, reparan y crean flotas de apoyo para el frente. Lo cuenta The Economist con vídeo y todo.