Y así van pasando los siglos, tin tan, think tank, como caen las cuatro gotas adjudicadas en la chapa hueca del bidón.
Ploc ploc…
Y para de contar. Las cuatro gotas son este año dos gotas. Y con eso y una ristra de ajos, de dos ajos, salen las habas tiernas y gastronómicas.
Gastroétnicas habas del printemperio, la intemperie primavérica
Los tanatorios echan humo que da gozo verlos *
(Los tanatorios son nuestras fábricas)
Por esas estepas erizadas de depósitos niquelados
de granjas de cerdos.
A veces chillan, a veces callan.
Becquer debería ver esto, hasta pasa a veces un autocar.
Polvorientos caminos vacíos, se seca la nariz, los oídos se secan, las mucosas se rebelan, las abejas se han ido
No liban, que diría Goya.
No liven.
Ahí llega la comitiva, los abogados de las energéticas.
Saca la escritura y dásela.
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* Manuel Vilas: Una sola vida (Lumen): El crematorio, p 127.