«Toíto te lo consiento menos faltar a mi mare». Esto se lo podría tatuar Sindia fácilmente, viendo cómo se pone cuando cualquiera se mete con su progenitora.
Creo que una vez el pescadero le dio mal el cambio a su madre y nunca nadie le ha vuelto a ver por el pueblo y ese mismo día se vio tierra removida en el monte y a Sindia con una pala.
Pero empecemos por el principio, porque si empezamos por el final… En realidad estoy hasta la coronilla de esta frase. Hala, a tomar por saco.
El caso es que Milá fue a la gala haciendo un homenaje a MA Barracus, para lo cual se había llenado el pecho de collares y medallas que si se cae al mar se va al fondo directa y no lo cuenta. Le faltaba la barba y la cresta.
En uno de los primeros vídeos vimos a Sindia recordar cómo su madre había años que no podía regalarles nada por Reyes. Así están millones de familias ahora mismo. Así que aprovecho para recordaros que se puede ayudar a los demás con muy poco. Cada cosa que das de corazón, tarde o temprano, te la devuelve la vida.
Y dicho esto. Las fina-finalistas de la semi-semifinal fueron introducidas cual supositorio en la casa grande, donde se encontraron con las +1. Como las fina-finalistas de la semi-semifinal no sabían nada de lo de los +1 fliparon en colorines.
De nuevo María y Sindia necesitaron un esquema y varios power point con dibujitos para entender de qué va lo de los +1.
Pudimos ver a Hugo luciendo su pelo de estropajo, que tiene el mismo brillo que el pelo de plástico de las barbies. De hecho, no descarto que haya rapado a doscientos Ken para ponerse una cabellera que él cree que es moderna y yo creo que es un resort-spa de piojos.
Por algún motivo en el plató se habló del pene de Zerhio. Ya tengo trauma para un lustro. Pa qué.
Tuvimos con gran profusión de detalles vídeos de estos cuatro días de Noemí con Alessandro. Pudimos verla en el jardín, por ejemplo, tirada boca arriba y llorando como si eso fuera Memorias de África en versión Calandracas de Abajo. En realidad, si coges el sonido de ese vídeo y lo pones en uno que salga un ciclomotor que no arranque, cuela.
Y de nuevo fue Aless el que se acercó a ella a hablar. Pero Noemí es más pesada que andar con el dedo gordo del pie metido en el culo y no es capaz de razonar ni entender. A este chico le van a dar el próximo premio Nobel de la paz y en el cielo ya le han guardado un sitio entre Ghandi y la Madre Teresa de Calcuta.
Alessandro dio en el clavo: Noemí se quejó de que le metieran a Fael, pero ella se puso a hacer el holligan chochero cuando le vio, que le faltó cantarle el alirón con el tenor barbudo.
Al cierre de las líneas y de las curvas los porcentajes quedaron 51,6% y 48,4%.
Pero ahí no habían acabado los vídeos de la mujer que piensa que el octavo mandamiento es «No dirás la verdad así te torturen, desgraciá» y de Santo Aless de los Mil Perdones.
A tenor de una pregunta impertinente de Dani se produjo una conversación en la que Noemí le dijo a Alessandro que no había hecho nada importante en la casa. O sea, básicamente que sin ella no habría llegado a la final.
A la jodía le molestó que Alessandro dijera que ella le había traicionado, porque no tenían nada.
Y vemos a Alessandro entró en cólera y le dijo «sólo me querías para chuscar» y Noemí «si te sientes así estás despechado». O sea, el mundo al revés de como suele ser.
Si alguna de vosotras me quiere sólo para «chuscar«, que no se preocupe, que yo se lo perdono, faltaría más.
El caso es que Noemí se puso en plan dramática, en plan víctima, pidiendo que la apedrearan, que solo faltó que apareciera Cristo para decir lo de las primeras piedras y las culpas.
«Rafa en cinco días me pudo dar lo que este no me dio en tres meses«, dijo la jodía y luego se puso a reír.
Y una vez mantenida la bronca padre, con histerias varias, Noemí se dio a la tarea de tirarse de nuevo a Aless. Y ya os digo que si Noemí se propusiera con igual ahínco conquistar Marte, en un año había en el planeta rojo hasta McDonalds.
A mi lo que me sorprende es la paciencia de Alessandro. Yo habría mandado a la mierda a Noemí hace tiempo. Más que nada porque está desequilibrada. Esta mujer entra en un templo budista y acaba saliendo Buda desquiciado.
Y medio minuto después del broncón padre y de poner a parir a Alessandro, la chavala se puso en plan guay a hacerle carantoñas al italiano. Yo creo que en Noemí viven varias personas. Y todas están de frenopático.
Y para que Alessandro no volviera a dudar de su fidelidad, se dedicó a tocarle los huevos a Pepe, pero en el sentido literal, agarrándoselos como si no hubiera mañana, como si fueran un asidero y su vida dependiera de que los cojones de Pepe quedaran como huevos kinder en agosto.
Sí, esta chica es muy racional. Racional como el sombrerero loco hasta arriba de LSD. Es como un estropajo, la jodía, cómo se frota con Aless. La veo de mayor acosando a jovencitos en los parques:
– Señora, que no quiero nada, que no me toque.
– Ven aquíiiii, paaaapi, mosqueteeeeero.
– Policía, policíiiia.
Una cosa así, vamos.
¿Sabéis lo que os digo? Que el amigo de Pepe en plató, que por cierto, me gusta lo mismo que un bocadillo de cagarrutas de cabra, la cagó pero bien diciéndole a Pepe que cogiera a Noemí para la final. Menudo lastrecito le ha colocado.
Este fue el mismo que recomendó a la gente coger el Titanic para cruzar el océano o comprar acciones de Bankia.
El caso es que Milá mandó a todo el mundo al jardín, donde les dijo que la banda sonora de GH es de unos tal canis que cantan canciones de mucho amor. Y aparecieron los susodichos delante de una pantalla, en plan rueda de reconocimiento.
Eran un tal Cali y un tal El Dandee. Una especie de raperos pero con mucho azúcar y cariño. Como los Andy y Lucas del Hip Hop.
Creo que en la casa no gustaron, porque había varias concursantes llorando. Pobrecillas, que sufrimiento. Sería cosa del directo, pero sonaron como un karaoke de coreanos borrachos. Que me perdonen sus fans.
El disco de GH dijo Milá, es el más vendido en España. Claro que sí, que le den por el culo a Glenn Gould y esa gentuza mediocre.
En el plató dijeron que si Noemí quería el perdón y reconquistar a Alessandro debía dejar de tocarle el pepinillo juguetón (en el sentido literal) y hablar más con él.
¿Pero qué mierda es esa?
Mujeres de España, a mi, si no os apetece hablar, no me importa que me conquistéis atendiendo a mi pequeño amigo tuerto, ya si eso hablamos otro día.
Vimos un vídeo de cómo les han regalado una camisetas horteras de colores como de carta de ajuste y con la publicidad en grande, a lo TALLERES MANOLO, que deberían pagar por llevarlas.
Para decir quién era la finalista se llevaron a Sindia y María a la pecera del plató. Allí, cuando les abrieron la compuerta, se pusieron las dos a saltar que parecían monas en el zoo.
Como se quieren mucho, las dos se abrazaban como si fueran dos langostas el domingo a medio día en el estanque de una marisquería.
¡¡¡Y MARÍA FINALISTA!!!
NOOOOOOOO. La Arrazopordondepazo noooooooooooooooo.
Sorpresón, todo el mundo (yo incluido) pensaba que sería Sindia.
Hugo sonreía en el plató con cara satisfacción y según se ampliaba su sonrisa a mi se me abría una úlcera del tamaño de Australia.
Durante su entrevista Hugo le dejó claro sin embargo que «a María la conozco solo de dentro de la casa y la tengo que conocer fuera también». Cretino…
Como María gane GH se va a tirar de los pelos, más que nada, porque como ganadora de GH le habrían dado el doble por salir en Interviú.
Y esa fue una de las cosas que más vergüenza le dieron, que le pusieron las imágenes del chaval de la barba mendiga viendo sus fotos en Interviú, que le faltó preguntar dónde estaba el baño más cercano y pedir un pañuelo de papel.
Al final Milá tuvo que echar a Hugo fuera de la pecera por soso. ¡¡OLE POR MILÁ!!
¡¡Y ELIGIÓ DE +1 A SINDIA!!
No sé si me gustó más porque Sindia entre de nuevo o porque Hugo se quede fuera. El chaval aplaudía y ponía cara de «muy bien, muy bien», pero en realidad estaba más jodido que una muñeca hinchable en una despedida de soltero.
María dijo que elegía a Sindia porque «se ha portado muy bien con ella, porque ha sido una alegría en la casa y porque se lo merece». Y añadió que su «corazón elegiría a otra persona, pero lo dejamos por más adelante».
Sindia por su parte entró en el plató como un Miura dopado en la plaza, para cornear a su madre, a la que abrazó como lo haría el Último Guerrero a Hulk Hogan.
La pobre mujer no hacía más que levantarse el escote para no enseñar tetilla, no fuera que su Zerhio la repudiara por fresca. Aunque poco después vimos que eso iba a dar igual.
Sindia, que estuvo en la entrevista muy seca, llevaba unos pendientes inspirados en los escudos de los caballeros medievales. De hecho, estaban construidos a escala 1/1.
Milá le preguntó por sus zozobras con Pepe a lo que la chiquilla contestó que «ahí dentro me he liado», y que «ahora estoy igual». Chaaaan, chaaaaan.
Durante la entrevista abrió los ojos tanto que pensé que estaba bajando los toldos de la terraza. Madre del amor hermoso, en una de esas se le escapa el párpado y se le deja al descubierto el cráneo.
Zerhio intervino todo picado: Milá le preguntó a Sindia si Pepe es machista (por la bronca aquella que tuvieron) y Sindia dijo que no. Entonces Zerhio saltó y dijo con sorna «él no, pero yo si».
Oigo a Zerhio y oigo la España profunda más rancia y revenida. No me extrañaría que en el pueblo de Zerhio aún quemen brujas.
«Por cierto, Sergio, eres un machista, y tú, otro, Christian», dijo Milá. Y claro, el muchacho montó en cólera y llamó a Milá «feminista».
Y para qué queremos más: bronca Milá-Christian de las que si no las tienen, ni es gala ni es ná. «Eres tan perfecta y tan divina que tendré que aprender de tí«, terminó diciéndole Christian a Milá.
¡¡Y SE ARMÓ LA GORDA!! Y cuando digo armarse me refiero a que la tal gorda se hizo con un par de cabezas nucleares.
Zerhio se metió con la madre de Sindia diciéndole «estás más colgada que un chupete» (uuuuh) y Sindia saltó de la silla y yéndose hacia la grada chilló a su madre «no quiero un espectáculo aquí» y a Zerhio «y a mi madre la respetas».
Nos enteramos de que Zerhio no ha perdido el trabajo, sino que pidió una excedencia. ¡Embustero!
Sindia vio los vídeos de sus broncas con Zerhio y de las broncas de éste con la madre de Sindia y la muchacha sentenció mirando a su (ex) novio: «Para mi eras grande, pero esto que estoy viendo aquí me demuestra que eres esto (gesto de pequeño)». Ahí faltó una música dramática y un plano alejándose entre la tormenta.
Azucena dio el cante interviniendo para defender a Zerhio. Chaaaan, chaaaan. «Sergio es una gran persona y si yo veo a mi novio rebozándose con otra, reacciono igual», dijo la muchacha, así, sin complejos y moderna como encender el fuego frotando dos palos.
¡¡Y SINDIA SE PUSO EN MODE ARRABALERA ON!!
«¡Anda cállate, rebozándose, que vienes ahora de entendida!», le dijo.
Madre del amor hermoso. Creo que en los campos de mandarinas Sindia llega y dice «¡Abajo tóas!» y las mandarinas se cagan la pata abajo y se tiran al suelo solas.
Las cosas se tranquilizaron cuando Sindia vio que María la había elegido como +1. Sindia se puso a llorar como si la fueran a fusilar allí mismo.
Lo último bueno de la noche fue el regreso de María a la casa, ya como finalista. Lo mejor fue la cara de Noemí, como si acabara de tragarse un litro de bilis fresca. Ah, que últimos días nos esperan de buen rollo y amiguismo.
(No llegamos a ver la entrada de Sindia).
LA FINAL SERÁ EL LUNES QUE VIENE. El jueves van a hacer un especial finalistas con testimonios de familiares y cosas así (no lo seguiremos en el blog).
Y así se quedó la cosa, amigos. Decidme, ¿quién va a ganar GH 12+1?