Atentado con hielo contra Mila Ximénez en ‘Gran Hermano VIP’

Nunca, nunca, os pongáis una copa cerca de Mila Ximénez y menos si lleva hielo. Porque esta mujer es más sensible que un sismógrafo metido en una lavadora. Su última paranoia en la casa es que han intentado agredirla con una bolsa de hielo. ¿Y es verdad? Ni de coña.

A Mila Ximénez le gusta tanto hacerse la víctima que le jode no salir fusilada en el cuadro de Goya del 2 de mayo. Mila quiere ser una concursante coraje, que entre decir que Gran Hermano es una mierda y maldecir por todo, se vea cómo se repone de las adversidades. Las adversidades son que alguien no le la razón al grito de «sí, Buana».

– Los plátanos son azules.

– Mila, son amarillos… como mucho verdes y…

– ATAQUE, ATAQUE CONTRA MÍIIIII

Y así.

Pero antes… ¡Yo me consideraré víctima de la indiferencia si no me seguís en redes! Instagram: @GusHernandezGH | Twitter: @realityblogshow | Facebook: Gus Superviviente Hernández.

La gala de anoche la comenzamos sin embargo con el asunto de Adara y Gianmarco, que están haciéndose ojitos, estando Adara ennoviá de Hugo fuera. Con esto, lo de Pol y Joao y con lo de Kiko y Sofía, Gran Hermano VIP ha roto más parejas que el Tinder y la rutina juntos.

El Maestro Joao está ejerciendo un doble papel. Por un lado, intenta que Adara se quede con su novio de fuera, por otro, intenta que se líe con Gianmarco. La superpoblación de China fue culpa de un viaje que hizo por allí Joao y acabó emparejando a tanta gente que hubo un boom de nacimientos. Cupido va con un arquito de mierda, Joao lleva una puta ametralladora de corazoncitos.

«Habla mucho, menciónale mucho, para que no haya rollos», le aconsejó Joao sobre Hugo.

– Buenos Hugo Días. Voy Hugo a Hugo desayunar Hugo como Hugo estáis Hugo.

Así debe comunicarse Adara con los demás.

«Cuando dos personas son muy amigas, se nota, cuando se miran, se nota también«, dijo el Maestro a continuación, haciéndole ver a Adara que sí, que había algo entre ella y Gianmarco.

«Es que no puedo evitarlo«, dijo ella, que mira a Gianmarco como cuando estás a dieta y pasas por delante de una pastelería.

Y hacía minutos que le había dicho a Adara que mencionara mucho a Hugo cuando dijo: «A Hugo cuando habló le vi como un témpano de hielo«.

«Exacto, exacto», respondió Adara. A ver, ¿es que esta gente no conoce a Hugo? La última vez que Hugo gesticuló tenía un médico sosteniéndole por los pies y dándole cachetes en culo.

«Estaba muy frío conmigo… quería agarrarme a algo bonito, notar que me echaba de menos… y no lo noté», dijo en el confe Adara, llorando. «No noté ningún tipo de emoción», añadió. Joder, a ver si le han puesto a Adara a un androide para darle los mensajes.

Adara hizo de Doña Inés en el Don Juan Tenorio y no notó que el Tenorio estuviera por ella.

– Me dijo no sé qué mierda de que la luna daba luz a cholón y que estaba mal del asma y respiraba mejor, pero no noté que me quisiera ni me echara de menos.

«La estoy liando, súper, la estoy liando«, lloraba en otro momento Adara, porque se da cuenta de que esto fuera se puede interpretar como un comienzo de amorío. Vamos, lo que es.

«Necesitas, correr, explotar, a hacer ruido, volver a ser niña», le aconsejó Joao. Joder, «correr, explotar, hacer ruido»… no sé si le estaba recomendando ser niña o ser un cargamento de dinamita metido con antorchas en un camión cisterna.

«Este es mi mundo ahora y dentro de este mundo se intensifica todo mucho», se excusó Adara, que llorando decía «no sé qué mierdas estoy haciendo, no lo sé», que es lo mismo que pasa cuando tienes la tripa mal y vas corriendo al baño, que no sabes qué mierdas estás haciendo.

Ya en directo, Jordi González afirmó en plató: «Me están diciendo que cuente esto ahora mismo o ruedan cabezas«, pero era solo para dar paso a un vídeo. Cómo se las gastan en Gran Hermano, te puedes acordar de la madre de la directora, pero como te saltes el guión te descuartizan.

Momento moñas.

«Eres lo más importante para mí aquí, te tengo mucho cariño», le dijo Gianmarco a Adara un día que estaban los dos juntos en la cama. «Qué bonito», dijo Adara, que estaba así:

Y vimos una manita acariciando no se sabe qué debajo de las sábanas. Lo mismo podía ser Adara sacándose el tanga del culo que Gianmarco rascándose el cojón izquierdo.

«Me encantaría saber lo que piensas…», Gian. «Me gustaría saber qué piensas tú«, respondió él. Eso parecía un entrenamiento de la CIA. El primero que responda no puede ser espía.

«¿Echas de menos a tu bebé?«,  le preguntó Gianmarco a Adara. «Si», dijo ella rotunda.

«¿Y a tu chico?»

Silencio incómodo.

«Sí». Pero era un sí de tipo que tu suegra te pregunte si están buenas las lentejas y así estén requemadas dices que sí.

Madre de Gianmarco: «Como son dos personas dulces no me extraña que se hayan acercado«, dijo la señora, que piensa que las golosinas tienden a estar juntas. Hacen manadas. (¿habéis leído mamadas, personas cochinas?) Si se os pierde un chupa-chups dejáis un caramelo en medio del salón y al rato él os lo encuentra. Están los imanes y los caramelos.

«El séptimo sentido que es el de la información y me decía que estábamos nominados», dijo Joao cuando les leyeron las nominaciones. El octavo sentido es del de hacer croquetas.

En otro vídeo, Joao insistía: «Vuestra amistad es muy de niños, muy pura». JA JA JA JA Claro, Joao se encuentra a los dos desnudos, con Adara montando a Gianmarco, condones por todas partes y un letrero de «ESTAMOS FOLLANDO COMO CANICHES» y diría: «míralos, jugando a médicos como niños, inocentemente».

«Yo le he tocado el pelo a Gianmarco y le he dado masajes y no pasa nada, no tiene por qué malinterpretarse», intentó tranquilizar Joao, que si pudiera le metía a Gianmarco un palmo de chopped.

Esta semana ha habido GRITOS EN EL EXTERIOR. Sí, es gente que emplea su fin de semana en irse a Guadalix de la Sierra a gritar cosas. Y luego que si no hay opciones de ocio sano para los jóvenes.

– Mamá, ¿me drogo o voy a Guadalix a gritar?

– Toma 20 euros y llama a tu dealer, hijo.

«¡Mila, traidora!», dijeron y a continuación «¡Mila, que has nominado a Joao!»

Y claro, Adara, Joao, Hugo… se fueron a preguntarle a la interfecta. «Yo nomino a quien me sale del mismísimo moño«, dijo Mila, que lo de dar explicaciones se le da mal.

Adara defendió que Joao siempre ha estado por ella, pero que ha sido Mila la que se ha cambiado de bando al que machaca a Joao. Eso al Maestro le dolió en el alma y en el bazo y se puso a llorar.

«¿Estás llorando de verdad?», preguntó Mila, como si ver llorar fuera como ver a un mago cortando a una señora por la mitad.

«Durante dos meses he dicho que a Joao no le iba a tocar hasta que le tuviera que tocar«, dijo Mila. O sea, que la lealtad de Mila tiene fecha de caducidad.

– Al cerdo no lo mato hasta que tenga que esté gordo. Para algo es mi amigo. Uy, mira, ya está gordo.

«A mis amigos hasta el culo, a mis enemigos por el culo y a los indiferentes se les aplica la legislación vigente», dijo Mila, que es la Paulo Coelho de los bajos fondos. Y al que te de bajonazo, navajazo. Al que no me ceda el asiento, lo reviento. Y así.

Ya en directo, a punto de ver el vídeo en el que Mila apuñalaba a Joao dejándole nominado y salvando a Antonio David, Mila dijo: «Si de algo sirve, lo volvería a hacer», dijo Mila, que aseguró estar «esperando las balas». Ahí ya buscando el drama. OH, ME VAN A FUSILAR POR DECIR LA VERDAD.

Cuando Antonio David se supo salvado su sonrisa era como para anunciar dentífrico a base de plutonio. «Puedo disfrutar mi momento de alegría, ¿no?», pidió. Joder, qué miedo le a la nominación.

– Antonio David, estás nominado.

– NOOOOOOOO NOOOOOOOO

– Que no, que sólo has perdido el pene por gangrena.

– Ah, bueno… ¿puedo tener mi momento de alegría?

«Voy a proteger al que necesite más estar en la casa«, alegó Mila, que es como la Cruz Roja, salvando gente y repartiendo caridad.

«Tú qué sabes cuáles son mis cuentas», dijo Alba, que era la otra posible salvada y que tenía un cabreo de mil pares de ovarios porque ella pensaba que lo justo era que hubiera sido ella la salvada.

Y se montó una competición entre Antonio David y Alba a ver quién de los dos necesitaba más el dinero y quién tenía la peor situación personal. Era como ver a Marco discutiendo con Bambi a ver quién tuvo peor infancia.

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VÍDEO:

Hugo se puso a hacerse lomo a la plancha para cenar como si no hubiera un mañana y cuando se lo criticaron con educación empezó a decir que Noemí y Alba eran unas dictadoras.

– Esto… Hugo, estamos en el desierto, esas son las últimas reservas de agua potable y la estás usando para poner a remojo la polla, lo mismo no…

– ¡DICTADORAS! ¡A VER SI NO VOY A PODER MOJAR EL CIRUELO! ¡FASCISTAS! ¡ASESINAS DE LA LIBERTAD!

Y así.

«Que se atragante, que se coma la nevera«, concluyó Mila, que es de muy buen resumir.

«Hugo, te toca lavar los platos«, le encomendó Mila como jefa de la casa. «¡LA PEOR TAREA!», dijo Hugo. JA JA JA Y quería que le pusieran a otra persona. Para fregar unos platos. La madre que lo trajo.

Hugo piensa que las uñas de los pies crecen para joderle a él y obligarle a cortarlas.

Mila le dijo que hiciera su tarea y punto, que ella era la jefa de la casa. Soy yo y le digo, ¿platos es lo peor? vale, pues haces baños. Y antes de que empiece le cago hasta el techo.

«Está encantada de que yo esté aquí», dijo Hugo de Mila. JA JA JA Sí, está Mila tan llena de gozo que ya no sabe dónde ponerlo. Estanterías llenas de alegría tiene. Tú miras debajo del sofá de Mila y hay pelotillas de alegría de tener a Hugo.

Y Joao, que está más pegado a Adara que su tanga, le dijo que Hugo le iba mal como amigo. Y ella emperrada en defender a Hugo. Y Joao diciéndole que le abandone… Joder, Joao, quiere manejar a Adara que el día menos pensado la chica se despierta y está Joao tratando de meterle la mano por el culo para moverle la boca a lo Rana Gustavo.

En directo dijo Mila que «quiero que se sepa públicamente que si soy jefa de la casa y puedo salvar a alguien siempre va a ser Antonio David». A no ser que aplique el criterio Joao, que es «hasta que me vaya bien».

Hugo se quejó de que Mila tenía de primero a Antonio David y de segundo a Alba. Y Alba, otra vez cabreada, dijo «yo no cuelgo de nadie». Alba está al borde de un barranco y le ofreces la mano y se lanza con tal de no colgar de nadie. A Alba le puedes dar potro, silla eléctrica o lo que quieras, pero ahorcarla no, porque ella no cuelga.

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Hugo vs Mila o cómo Mila aprovecha para hacerse la gran víctima que no es.

«Es difícil encontrar los momentos para limar asperezas«, dijo Hugo. Lo que pasa es que este señor no lima las asperezas, les lanza misiles con cabeza nuclear y no quedan ni asperezas ni quien las tenga.

Mila se montó un drama que no lo superan en la Compañía Nacional de Teatro Clásico. «No puedo con este tío, no puedo con él». Ni que tuviera que cargarle en brazos. A Mila le pones a Bud Spencer cogido a caballito y tira bien, pero con Hugo no puede.

Mila vio a Antonio David hablando con Hugo en el jardín y le montó un pollo a Antonio David. «Me ha parecido como si me apuñalaran», dijo Mila. «No es lo que yo haría», añadió ella. Mila ve que un amigo suyo discute con la cajera del súper por el cambio y a la que la muchacha sale de trabajar Mila la atropella con un tractor.

Y la tontá de la agresión helada. Hugo sacó hielos, rompió un poco la bolsa y le salpicó a Mila. Y ella pensó que estaba intentando agredirla. El típico atentado con cubitos de hielo. A Kennedy estuvieron dudando si dispararle o abrir una bolsa de hielo a su lado. Y optaron por la opción menos violenta.

«Es la última vez que haces un movimiento violento conmigo, lo has hecho adrede», acusó Mila, que piensa que cuando graniza es que están intentando matarla.

El tuit de Mila de anoche decía que Hugo era el que hacía que Mila tuviera vida en esa casa. «Pues si Hugo es mi vida yo prefiero estar muerta». A tomar por culo. Mila pilla el ébola y la sangre de Hugo es la cura y no se la inyecta.

Mila… entre la maldad, la provocación y el victimismo. Todo positivo y guay.

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