Kiko Rivera se enfrenta a María Jesús Ruiz y acaba reventado en ‘Gran Hermano Dúo’

Lo primero que vimos en la gala de anoche fue a María Jesús llorando. María Jesús sufrió una mutación genética de niña por la que los lacrimales se le desarrollaron. Le crecieron un poco. Ahora tienen el tamaño de un aguacate gordo. Así que María Jesús puede producir lágrimas que se va triste al desierto y lo convierte en un vergel.

«No quiero que me vean llorando, no quiero…«, pues hija, como no nos arranquemos los ojos y nos los metamos por donde amargan los pepinos no sé cómo no te vamos a ver llorar, si esa actividad te ocupa el 80% del tiempo.

El caso es que María Jesús ha regresado a primera fila del protagonismo de Gran Hermano Dúo. 

«Tu hija va por detrás, se le está viendo la patita y lo que quiere es el maletín«, dijo Anabel Pantoja de María Jesús la prima de Kiko, porque Kiko no quiere el maletín, está en Gran Hermano para ayudar a la humanidad.

Ylenia dedicó un saludo a la selección española de fútbol masculino, que estos días en un vídeo salía imitándola: «Tiki tiki Miau Miau ¡Viva España! ¡Arriba!«. Si llega a jugar España contra Malta después de esta gala y nos devuelven los 12 goles.

Como no tenemos poco con lo de México, GH se ha empeñado en que España tenga conflictos diplomáticos con medio mundo. Así que les pusieron a llamar a varios países para que personas de allí dijeran «tiki tiki miau miau».

Llamaron a Egipto. Probablemente tikitikimiaumiau en árabe significa «las patatas de tu abuela son peludas»

Entre seis personas no fueron capaces de marcar un número y hablar. Y es que claro, pusieron a Juanmi, en serio, a Juanmi, a llamar. Eso es como si pones a mi abuela a pilotar un caza de combate. Se apañaría regular.

Después se puso Kiko Rivera, que tiene un inglés de Oxford. Del bar Oxford, de debajo de su casa. Así que al pobre desgraciado que le cogió el teléfono le dijo: «yuespiquininglis? ainidaflavour. ripit guiz mi tikitiki miaumiau«. El pobre recepcionista de hotel que cogió el teléfono, porque siempre llaman a hoteles, está ahora de baja psicológica.

Después se puso Alejandro Albalá, cuyo inglés era como oír a Arévalo contando un chiste de gangosos, pero que dio con un pobre hombre que hablaba español. Y a pesar que Albalá le hablaba en un inglés que haría llorar a la reina Isabel II.

Se puede ser más machista que tú?

«¡A mí no me vuelvas a llamar machista!», se enfafó Kiko, mientras seguramente pensaba en que Irene debería recortarle un poco las uñas de los pies o lavarle la ropa un poco.

A Kiko, que le dices 8M y se piensa que estás hablando del primo de CR7, le molestó que le llamaran machista. «Ese término lo usan cuando quieren, a Antonio le dijeron no sé qué», se escandalizaba.

Ya ves, qué injusto lo de Tejado, que se llevó un disgusto cuando supo que las mujeres pueden votar porque quería tirarse a los pies de unos caballos para reivindicar el voto femenino él.

«Si se lo digo a un hombre [calientapollas] ¿qué soy, un feminista?», dijo Kiko. Lo mismo hasta lloro. Kiko piensa que cuando dicen «nosotras parimos, nosotras decidimos» se refieren a decidir el nombre del niño y ya.

María Jesús se cogió un disgusto gordo. Lo que pasa es que María Jesús se coge disgustos de llorar mucho por cualquier cosa. Ella sale a la calle y hace sol y llora. Está nublado y llora. Hay intervalos nubosos y ahora llora, ahora no, ahora sí.

«No quiero que me vean llorando porque luego la gente dice que si lloro». JO

Bien sabe el Señor y la Virgen de la Cabeza y Todos los Santos del cielo que a mi no me preocupa la nominación«, dijo María Jesús. Sí, a ti el Papa te Canoniza y lo de María Jesús es primero que te dicen al hacerte santo.

– ¿Hola, san Eufrasio? Soy San Pedro, atiende, ojo, que a María Jesús no le preocupa la nominación.

– ¿Pero de qué cojones me hablas? ¿Qué pasa con lo de que te pongan velas y eso?

– ¡ATIENDE, COÑO! ¡Que no le preocupa lo de la nominación!

Y así.

«Menos mal que tengo a Juanmi, que es el único humano«, dijo María Jesús. ¡LO SABÍA! Sofía no es humana. Esa forma de comer como desencajando la mandíbula era sospechosa.

Y acabaron discutiendo Kiko e Irene,

Para Kiko «calientapollas» no es despectivo, pero «machista» es un «ataque gratuito». Y ante eso flipaba Sofía y flipaba hasta Irene, que trataba de convencerle de que no había estado acertado.

«Es una calientaespectadores», terció Sofía.

Al final Kiko acabó diciendo que se quería ir del concurso. JA JA JA JA No lo sacan de ahí ni con una excavadora. Kiko entra y se queda. A Kiko le pilla el Vesubio en Pompeya y es el único que no corre. Lo encuentran los arqueólogos con los pulgares hacia arriba en plan OK.

Bueno, eso ahora, porque de los otros realities se fue en un suspiro. Kiko no hacía realities, había abandonalities.

«Aquí hay muy malas personas, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy, muy malas», dijo María Jesús en el confesionario.

– ¿Y CÓMO LO DIJO, AMIGUITOOOOOS?

– ¡¡LLORAAAAAAAAAAANDOOOOOOOO!!

Volviendo a las matrimoniadas: «Me estás demostrando que eres un auténtico robot, no te reconozco«, dijo Kiko a Irene.

«Es que me he hecho una coraza«, explicó Irene, a la que le va a llamar Tony Stark para que le explique cómo ha hecho la coraza esa para mejorar a IronMan.

Pero además de coraza Irene tiene unas uñas como las de Lobezno, escondidas pero si las saca corta hasta el granito. «Tú has tenido problemas con más de la mitad de la casa, por algo será», le dijo Irene a María Jesús en directo.

María Jesús se puso brava (el lloro va luego, en el confe) y dijo que «todos y cada uno de los conflictos los habéis provocado vosotros». Pero todos, ¿eh? Incluida la Primera Guerra Mundial, que al archiduque Francisco Fernando de Austria lo mató uno que había discutido con María Jesús.

Al final Kiko e Irene comenzaron un broncón con María Jesús en directo, en el que María Jesús se quejó de Irene, diciendo que «es ella la que se está volviendo loca».

Y María Jesús le dijo al matrimonio lo que Josefina le dijo a Napoleón después de la noche de bodas: «Tenéis una lengua muy mala conmigo».

«¿Yo te he insultado?»

«Se han puesto los dos a gritarme», dijo María Jesús, como si ella no hubiera levantado la voz tanto que empezaron a dirigírsela los controladores aéreos. María Jesús no retuerce la realidad, la deja trenzada.

Se vio un vídeo en el que María Jesús se negaba a ir a ver cómo los demás hacían la compra, mientras se quejaba de que los demás hicieran la compra. JA JA JA.

– ¿María Jesús quieres este millón de euros?

– No, gracias, no me hace falta.

– Ah, pues no te lo doy.

– ¡MALA PERSONA, CON LO MUCHO QUE ME HACE FALTA EL DINERO!

Juanmi se quejó hace unos días de que alguien había escupido en su taza de desayuno. Así que el programa cogió las doce horas previas al momento y las pasó en un vídeo a cámara rápida. La taza parecía no haber sido tocada por nadie.

La teoría del programa es que después de estar doce horas sin fregarse después de usada, se había formado roña reseca en ella, algo que Juanmi interpretó como un gapo. Joder Juanmi, como para ir a CSI. Este hombre piensa que las fresas son rojas porque les han echado sangre.

«Cuando yo fui a actuar a Nueva York yo era Bob Dylan y la gente decía AAAAH«, dijo Kiko. JA JA JA JA A Kiko la modestia le da repelús. No tiene ni falsa ni verdadera. Kiko le echa matarratas a su modestia.

Yo creo que lo que la gente decía era AAAARG, pero él oía AAAAAH.

Una cosa es tener amor propio y otra cosa es lo de Kiko, que se quiere tanto que pasea por el parque cogiéndose una mano con la otra y haciéndose carantoñas a sí mismo. Kiko en la cartera lleva una foto de Kiko.

Y se salvó de la expulsión… ¡¡MARÍA JESÚS!!

JA JA JA JA JA

Las caras de los demás eran así:

REVENTÁS.

Así que ahora son candidatos a la expulsión Albalá y Sofía.

Y precisamente de ellos dos trató la última parte de la gala. El Súper les propuso que dibujaran, cada uno por separado, la curva de su relación.

Antes, llamaron a María Jesús al confe y Jordi le preguntó: «¿Te ves ya con el maletín?».

«Jordi, para mi la oportunidad de entrar en este programa y que la gente me conozca es el verdadero premio», dijo ella.

JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA

NO.

No se lo cree ni ella ni aunque se lo diga un notario.

Volvemos a Tristalá y Sofía.

Sus curvas de la relación eran bastante dispares. La de Sofía eran como una escalinata cuesta abajo. La de Albalá parecía un par de chalés adosados.

Sofía dijo que en Supervivientes se equivocó, pero no por su culpa, ojo, sino porque le habían puesto los cuernos antes y claro, quedó marcada un poco por la desconfianza y por eso «tonteó» con Logan. Y eso que sólo fue un poco, que yo creo que si le da un poco más de desconfianza se lo tira encima de una palmera.

«Me colapsa la cabeza de información», dijo Sofía sobre Albalá. Joder, salir con Alejandro es como estudiarse unas oposiciones.

«Cuando la conocí íbamos en el coche y yo no la miraba de la vergüenza que me daba», dijo Albalá, que no se mató con el coche de puro milagro, porque iba mirando por la ventanilla del conductor todo el rato. Es más seguro hablar con el móvil fumando y tocándose el huevo derecho mientras te pintas las uñas a bordo de un camión que subirse en un coche con Sofía y vergüenza.

«Para los niños de España que lo estén viendo, que no hagan lo que hicimos nosotros de ir a vivir con tu novio a casa de tu madre», dijo Sofía. Muy buen consejo. Meterse en las drogas, robar y asesinar, regular, pero sobre todo, sobre todo, no os vayáis a vivir con la suegra.

«Has dicho en la tele que como plátanos y que me ducho dos veces al día«, le reprochó Albalá, enfadado por semejantes injurias hacia su persona. Joder, a mi me acusan de ducharme dos veces y me querello.

Sofía acabó poniéndose como una energúmena porque le dijeron que su problema era su madre, de la que no se separa nunca. Al principio de los tiempos Dios miró a Sofía y a Maite y miró la Pangea y se dijo ¿qué separo? Pero era ya sábado y quería librar el domingo así que creó los continentes, que era más fácil.

 

Almacenado en: Gran Hermano Última Hora