Encuadres

El tiempo pasa volando. Aunque no tanto para el protagonista de la conocida comedia que dirigió Harold Ramis, el meteorólogo de una cadena de televisión llamado Phil que estuvo reviviendo el mismo día, el Día de la Marmota, un 2 de febrero, en los mismos escenarios, con los mismos personajes, aprisionado en un bucle temporal en la pequeña población de Punxsutawney, Pennsylvania.

Divertidísima fue en su momento y las veces que la he vuelto a revisar me sigue resultando igual de tronchante y especial. Phil topándose con un amigo pelma del instituto que quiere venderle un seguro, Phil pisando un charco, Phil ayudando a esas ancianitas a cambiar la rueda pinchada de su vehículo… Phil agobiado, Phil intentando sacar el máximo provecho personal de esa repetitiva situación, Phil destrozando su despertador, Phil dispuesto a poner fin a su vida, Phil intentando acabar de una vez por todas con la marmota, Phil intentando ligar con Rita (Andie MacDowell), Phil intentando aprovechar el tiempo para mejorar como presentador o aprendiendo a tocar el piano. Phil, resumiendo, en un día a día que se repite y en el fondo siempre solo.

( ©Sony )

El despertador está a unos segundos de marcar las 6:00 de la mañana, otra vez volverá a sonar la misma melodía, I’ve got you babe de Sonny & Cher, y se escuchará la animosa voz de un locutor de radio parloteando: «¡Bien excursionistas, arriba! Despertad y no olvidéis los descansos porque hoy hace frío. Hace frío todos los días, ¿dónde creías que estabas, en Miami? Pues te equivocas…»

Atrapado en el tiempo (Groundhog Day) no sería lo mismo sin Bill Murray. El Phil perfecto (y de igual nombre que es marmota, en cierto modo, también meteoróloga, prediciendo con su comportamiento si llega la primavera o el invierno se alargará unas semanas más). Un tipo egoísta, amargado, cínico, malhumorado y también, muy al contrario, amable, solidario, templado, comprensivo. Las crónicas aseguran que durante el rodaje solía preguntarle a Harold: «Solo dime… ¿a qué Phil quieres, al bueno o al malo?».

Seguro que todo buen admirador de la película conoce sus principales curiosidades. En la vida real el buenazo de Murray ya tiene fama de cascarrabias, pero nunca podremos valorar lo suficiente hasta qué punto influyó que en esos momentos estuviera notablemente triste o deprimido a causa de la mala relación que atravesaba con su esposa Margaret Kelly, su novia desde el instituto (y que acabaría en divorcio tres años después). El caso es que estaba especialmente insoportable.

( ©Sony )

A punto estuvo, en su delirio, de convertir esta comedia en una especie de tragicomedia metafísica y eran frecuentes sus llamadas al director a altas horas de la madrugada para consultarle cualquier ocurrencia o nadería sobre el guion. Harold se cansó tanto de su compañero en Los Cazafantasmas que pasaría el resto de su vida sin hablarle, hasta su fallecimiento, en febrero de 2014.

La maldición que vive el protagonista es extrapolable a nuestras cansinas rutinas y la frase el «Día de la Marmota» se ha convertido en un referente popular. Pero entre las distintas interpretaciones incluso los budistas han visto en ella una bella metáfora del alma y su infatigable camino a la perfección. Como fuentes de inspiración de su argumento se han ido citando varios antecedentes, aunque el creador de la historia original, Danny Rubin (coguionista junto con Harold Ramis), siempre ha afirmado que las musas lo iluminaron con Entrevista con el vampiro, la novela de Anne Rice (no la película, que se estrenaría al año siguiente, en 1994), y el preguntarse cómo sería vivir eternamente.

( ©Sony )

Otra de las grandes preguntas filosóficas que ha generado es determinar cuántos años permanece Phil en Punxsutawney. El mismo director declaró que serían unos diez, después rectificaría. Durante su cautiverio Phil aprenderá a desarrollar otras habilidades, como tocar al piano, por lo que el período se estimaría en unos 30 o 40 años. En la película, realmente solo llegan a plasmarse 38 días.

También se planteó convertirla en un musical de Broadway* con composiciones creadas por uno de los grandes autores del género, Stephen Sondheim. Este finalmente desistió alegando que Atrapado en el tiempo era «simplemente perfecta. No se puede mejorar lo inmejorable». Puede que Sondheim lo dijera de corazón o simplemente por quedar bien, pero lo cierto es que así es. Su primicia mundial en Estados Unidos fue el 4 de febrero de 1993. A las salas comerciales llegaría el 12, y entre nosotros el 25 de junio. A Atrapado en el tiempo no le ha afectado el paso de los años. Su magia y diversión sigue conservándose intacta.

(*) El musical de Broadway basado en Atrapado en el tiempo acabó haciéndose (sin Stephen Sondheim). Inició su andadura en los escenarios en agosto de 2016, en Londres, y finalizó sus representaciones en septiembre del pasado año en Broadway, después de 176 funciones. Incluso fue nominada a 7 premios Tony, incluyendo los de mejor musical, actor protagonista, música y canciones.

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