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"It's the end of the world as we know it (and I feel fine)" Michael Stipe

Entradas etiquetadas como ‘#paradosenespera’

Licencia CC, de Carmen y Concha

Concha y Carmen. Carmen y Concha. Nunca más volverán a ser mencionadas la una sin la otra. Porque se han convertido en un hashtag. Y una vez más -habrán pensado algunos espectadores que vieron el domingo el programa de Jordi Évole-, por encima de los #paradosenespera, los verdaderos protagonistas. Así es Internet. Y así es la vida en general: las etiquetas mandan.

Resulta que el artífice de Salvados se fue al Congreso de los Diputados para hablar con dos portavoces de la comisión parlamentaria de Empleo y Seguridad Social. En concreto, con María Concepción Gutiérrez del Castillo, del PSOE, y María del Carmen Álvarez-Arenas Cisneros, del PP. Aka, Concha y Carmen. Las enfrentó telefónicamente con un parado, les puso unos vídeos y dejó que superpusieran sus palabras sin #bajarsedelburro, que diría el presentador.

La muestra política -bipartidista, escogida-, el tema delicado, la presentación y el conocido toque de la casa hicieron el resto. Suponemos que Évole no recurrió a otros grupos por no ser los artífices de las últimas reformas laborales; o porque Olabarría (PNV) y Barkos (Mixto) están algo más vistos; o porque Coscubiela (GIP) se hubiera puesto de su parte enseguida.

El caso es que el efectismo perseguido dio sus frutos y las diputadas se hicieron con la conversación. Tal cual. Desbancando incluso, y perdonad la broma, a dos pesos pesados de la cinematografía española. A las otras Concha y Carmen. Velasco y Sevilla. A quienes, siendo aún carne de Facebook, el tiempo de las redes sociales, probablemente, se les pasó.

Actuar con licencia CC -de Carmen y Concha- le dio a Évole dos trending topics mundiales durante el programa, cuyo final apoteósico disparó los comentarios en Twitter. No es que propiciar el uso de esta red social con hashtags concretos durante la emisión haya sido un acierto del programa –otros ya lo hacían e incluso con mucha repercusión-, es que el conjunto formado por redes y contenido, centrado en temas muy actuales/sangrantes, es la clave.

El periodista suele intervenir para guiar a los espectadores sociales durante el espacio. El hashtag se recuerda de forma constante en pantalla y se muestran los usuarios de Twitter de algunos de los entrevistados. Las pausas están bien gestionadas. Solo Concha tiene Twitter, aunque no lo utiliza desde el pasado 16 de noviembre (justo antes de las elecciones).

Este lunes, Carmen y Concha han sido el centro de informaciones en diarios digitales, de posts en blogs y -aún más- comentarios en Twitter. Muchos han afeado su conducta sin #bajarsedelburro mientras otros aludían a su condición de asalariadas de lo público (aquí, el registro de intereses y la declaración de bienes de Carmen; acá, el registro de intereses y la declaración de bienes de Concha; y aquí, lo que cobran ambas según el régimen económico en vigor).

Puede que la llamada televisión social no siempre suponga más audiencia -aunque Évole se llevó un 10,2% de share y 1.768.000 espectadores-, pero sí es muy posible que, en algunos programas, fidelice y termine acercando a ciertas personas reacias a determinados contenidos. El truco se resume, para mi, en una palabra: didacticismo. A aplicar en todo el paquete.

He sacado algunas estadísticas del hashtag #carmenyconcha para que veáis por encima en qué ha consistido todo este revuelo. La herramienta HashTracking dice que en las últimas 24 horas -lo he hecho justo después de comer- 1.500 tuits -el máximo que permite monitorizar- generaron 1.121.770 impresiones, alcanzando una audiencia de 790.418 usuarios (un usuario puede haber visto más de una vez un tuit):

HashTracking

Followthehashtag saca este bonito mapa:

Followthehashtag

Archivist nos dice que los retuits ganaron por poco a los tuits:

Archivist

Por último, Social Bro, que en un informe algo más largo explica que no solo desde España se comentó Salvados.

Queda una última entrega del programa de Évole. Y aunque el listón involuntario de Concha y Carmen ha sido muy alto, auguro un final de temporada de serie de ficción. Es decir, que nos dejará con ganas.