Qué pasó en el Mundial de… Qué pasó en el Mundial de…

"Sólo tres personas en la historia han conseguido hacer callar el Maracaná con un solo gesto: el papa, Frank Sinatra y yo". Alcides Ghiggia, Mundial de 1950

Archivo de la categoría ‘Alemania 1974’

Alemania 74 a Italia 90. Porteros con el 5, centrocampistas con el 1: Argentina y los dorsales en orden alfabético

Osvaldo Ardiles controla un balón en el partido ante Bélgica del Mundial 82 (FIFA).

Osvaldo Ardiles controla un balón en el partido ante Bélgica del Mundial 82 (FIFA).

El artículo de hoy abarca varios Mundiales, en concreto cinco: Alemania 74, Argentina 78, España 82, México 86 e Italia 90. Y es que de lo que os voy a hablar hoy es de una curiosísima costumbre que adoptó la selección argentina de fútbol en las citadas Copas del Mundo a la hora de asignar los dorsales, lo que provocaba que viéramos cosas extrañísimas, como guardametas con el dorsal 5 o jugadores de campo con el 1.

Esta costumbre se inició en el Mundial de 1974, si bien los tres porteros (Carnevali, Fillol y Santoro) quedaron excluidos y portaron los dorsales 1, 12 y 21, que suelen ser los habituales de los guardametas (también el 13 y el 22). Aun así, había cosas raras como ver al entonces delantero del Atlético de Madrid ‘Ratón’ Ayala con el dorsal 2, al también colchonero Heredia, defensa, con el 10, o a otro defensa, Glaría, con el 9.

En la siguiente cita, la de Argentina 78, la asignación alfabética de los dorsales fue mucho más estricta: no se libraron ni los porteros. Así, el 1 lo portaba el centrocampista de River Norberto Alonso, mientras que los porteros, Baley, Fillol y LaVolpe, llevaron el 3, el 5 y el 13.

La tendencia continuó en España 82. Así, vimos a Ardiles con el 1, a Baley con el 3 o a Fillol con el 7. Pero hubo una excepción. Fue el primer Mundial de Diego Armando Maradona. Al ‘Pelusa’ le correspondía el dorsal 12, pero llegó a un acuerdo con el centrocampista de Estudiantes Patricio Hernández y le cambió el puesto, para poder llevar el 10.

Tres cuartos de lo mismo ocurrió en México 86, pero con tres excepciones. Maradona, Passarella y Valdano fueron los únicos exentos y eligieron los dorsales 10, 6 y 11.

En el siguiente Mundial, Italia 90, hubo continuidad con el asunto de los dorsales alfabéticos, pero ya con reservas, puesto que la FIFA obligó a los equipos a que uno de los tres porteros llevara el dorsal 1. Aún así, sorprendió ver al delantero Abel Balbo con el dorsal 3.

El portero holandés Jongbloed, con el 8 en la final del Mundial del 74 (BUNDESARCHIV / WIKIPEDIA).

El portero holandés Jongbloed, con el 8 en la final del Mundial del 74 (BUNDESARCHIV / WIKIPEDIA).

Las cosas cambiaron después. Los dorsales fijos con nombre empezaron a generalizarse en todos los campeonatos nacionales y el orden alfabético quedó eclipsado por el marketing.

El caso de Argentina, de todos modos, no fue el único. En Alemania 74, los holandeses iban numerados también por orden alfabético (Cruyff quedó exento para que llevara el 14) y así, el portero Jongbloed llevaba el 8 y el delantero Geels llevaba el 1. Curiosamente, Jongbloed repitió dorsal en Argentina 78, pese a que ya no se seguía el criterio alfabético. En España 82 fue algo común: adoptó el sistema Inglaterra, con la excepción de los porteros y Kevin Keegan, que quería el 7. También en la cita española Francia se ordenó por ese criterio, aunque Platini pudo elegir el 10. Finalmente, Italia fue la otra selección que no se complicó la vida a la hora de repartir dorsales. En México 86, repitió Francia con las excepciones de Platini y Giresse (12).

Una curiosidad más. Entre Argentina 1978 y Francia 1998 (y con la citada salvedad de España 82), Italia también repartió sus dorsales bajo otro criterio: el de demarcaciones. Así, con los dorsales del 2 al 8 (o al 9) jugaban los defensas. Del 9 al 16, los centrocampistas. Y del 17 al 21, los delanteros, quedando el 1, el 12 y 22 para los porteros.

Y como diría mi amigo Javi Ruiz, otra bola extra. Si España siguiera en Brasil 2014 el criterio argentino, estos serían los dorsales (eligiendo el nombre de guerra, no el apellido): 1. Albiol, 2. Azpilicueta, 3. Busquets, 4. Casillas, 5. Cazorla, 6. De Gea, 7. Diego Costa, 8. Fàbregas, 9. Iniesta, 10. Javi Martínez, 11. Jordi Alba, 12. Juanfran, 13. Koke, 14. Mata, 15. Pedro, 16. Piqué, 17. Reina, 18. Sergio Ramos, 19. Silva, 20. Torres, 21. Villa, 22. Xabi Alonso y 23. Xavi Hernández.

Hasta mañana.

Los balones mundialistas (I). 1970-1994: iconos aún vivos

Además de las mascotas, las sedes, y otros lugares comunes de los Mundiales de fútbol, existe un clásico que siempre tiene su lugar en los medios y en el comercio: los balones oficiales. Vamos a hacer un repaso a los balones de los Mundiales y vamos a empezar con la primera época.

AAA TELSTARTelstar (México 1970 y Alemania 1974).- El Mundial de México en 1970 fue una cita revolucionaria por varias razones. Fue la primera televisada en color, si bien en muchos reproductores todavía se veía en blanco y negro. Ese es el motivo por el cual este balón fue revolucionario y por ello es por lo que he decidido empezar con él.

Hasta el momento (es decir, hasta Inglaterra 66), los balones que se utilizaban eran las clásicas pelotas de cuero con láminas cosidas. Pero llegó la tele para todos y la tele en color para algunos, por lo que había que cambiar el diseño. Así que Adidas, que era y es la que se encargaba de las pelotas mundialistas, tomó prestado un diseño del arquitecto americano Richard Buckminster Fuller y creó el ya mítico balón formado por 32 piezas: 12 pentágonos y 20 hexágonos que unidos, forman una esfera. Los pentágonos se pintaron de negro y los hexágonos eran blancos. Este diseño se veía mejor en televisión. Precisamente se le bautizó con un nombre televisivo: Telstar, el satélite que transmitía la señal de televisión para Europa y América. El material era cuero, pero era bastante resistente al agua porque estaba recubierto de una fina película sintética. Para el Mundial de Alemania en 1974 se mantuvo el diseño, si bien al nombre de Telstar se le añadió el apellido Durlast. Este balón, o mejor dicho, su diseño, es quizá el más exitoso de todos los tiempos y se ha convertido en un icono del deporte del fútbol en sí mismo. Dibujos animados, escudos deportivos… todo lo que os podáis imaginar en relación al fútbol viene ilustrado con un Telstar. El diseño, ya a espaldas de Adidas, se ha repetido hasta la saciedad. En ocasiones los pentágonos negros se sustituyeron por otros colores en función de lo que se quisiera representar, como por ejemplo, colores de equipos, etc.

AAA TANGOTango (Argentina 1978 y España 1982): El nombre del balón estaba claro. Llegaba el Mundial de Argentina en 1978 y qué mejor que bautizar al balón oficial con el nombre del baile argentino por antonomasia, con uno de los símbolos del país sudamericano. Con respecto al anterior modelo, el Tango ofrecía mejoras en el apartado de impermeabilidad. De nuevo fabricado en cuero 100%, la principal diferencia del Tango con el Telstra era el diseño. Aunque mantenía el formato de 12 pentágonos y 20 hexágonos, el dibujo era diferente. Se crearon unas estructuras triples que, unidas, creaban el efecto óptico de que había dibujadas 12 esferas. Este diseño tan atractivo duró 20 años, puesto que hasta el Mundial de Francia 1998 fue el que utilizó Adidas. Cuatro años después, de cara a nuestro Mundial, Adidas no renovó el diseño ni el nombre (lo cual me parece indignante, con lo bien que hubiera quedado un Adidas Fandango o algo así, si bien le añadió el apellido ’España’), aunque llevó a cabo mejoras técnicas. Así, las costuras estaban hechas con material impermeable, lo cual mejoraba algo más si cabe la resistencia del balón a la humedad. Aún así, durante el campeonato mundialista de España, el balón fue sustituido en varios partidos por problemas de presión. También os diré que el Tango España fue el primer balón de la historia que tuvo versiones coloreadas para jugar sobre la nieve (en naranja y amarillo). Fue, además, el último balón mundialista confeccionado en cuero 100%.

AAA AZTECAAzteca (México 1986): Tras ’saltarse’ cualquier referencia a España y su cultura, Adidas recuperó un nombre muy apropiado para el balón del Mundial de México: Azteca. En cuanto a diseño, el esférico repetía la estructura fundamental del Tango (las famosas estructuras triangulares) pero por primera vez las aprovechaba para incluir en su interior un dibujo. En este caso, en cada una de las estructuras se dibujaron figuras geométricas inspiradas en el arte tradicional azteca. En el apartado técnico, hay que destacar que fue el primer balón enteramente sintético para jugar un Mundial. Esta fabricación le permitió tener una resistencia a la humedad nunca antes vista. De nuevo en esta ocasión se crearon otros dos modelos, uno amarillo y otro naranja, para jugar en condiciones atmosféricas adversas. Además, se crearon otros balones bajo el paraguas de la denominación Azteca: el Puebla, el Acapulco y el Maya.

AAA ETRUSCOEtrusco (Italia 90): Empecemos por el nombre. Etrusco hace referencia a una tribu de la antigüedad que poblaba el centro de la península itálica. El diseño del esférico, al igual que ocurrió con el Azteca, hacía referencias al arte antiguo del país. Así, en las ya famosas triadas de la base Tango, Adidas introdujo unas estructuras triples con cabezas de león, que fueron el santo y seña de esta pelota. En el aspecto técnico, la principal novedad es que el Etrusco llevaba una capa de poliuretano bajo el cuero que impermeabilizaba la pelota, el gran caballo de batalla de Adidas durante años. Por lo demás, cabe reseñar que dos años después, fue de nuevo utilizado, esta vez en los JJ OO de Barcelona 92 (esta versión incluía el logo de los Juegos en una de las caras). Así que se puede decir que España fue campeona olímpica con un Etrusco.

AAA QUESTRAQuestra (Estados Unidos 1994): Cuatro años después, lo que se produjeron fueron grandes cambios técnicos. El nuevo balón fue bautizado como Questra, una palabra que al parecer significa «búsqueda de estrellas». La astronomía fue la referencia principal en la decoración de las triadas, que siguen firmes. Planetas, estrellas y nebulosas adornaban el balón. Pero como os decía, el componente técnico fue lo principal: Se usaron cinco diferentes materiales, incluido una capa externa de poliuretano, lo que le dio al balón condiciones únicas: Era más rápido y, por desgracia para los porteros, más imprevisible, sobre todo en vuelo. Se dice que estas condiciones se multiplicaban en ambientes húmedos (sobre todo en los partidos disputados en Florida y California), lo cual desató cierta polémica. Así, cabe recordar algún gol como el que le hizo Hagi ante Argentina. Aún así, el balón fue un éxito y se hicieron dos versiones más, el Questra Olympia, para Atlanta 96 y el Questra Europa, para la Eurocopa de Inglaterra del 96, que incluía un precioso diseño basado en los míticos tres leones del escudo de la Football Association inglesa.

Continuará…

FOTOS: WIKIPEDIA

Alemania 74. Zaire y el momento más hilarante de la historia del Mundial

Sí, amigos, hoy vamos a hablar de una anécdota muy curiosa, muy concreta, que es una imagen muy divertida, pero que esconde más de lo que parece.

Viajamos al Mundial de Alemania 1974. La cenicienta del campeonato es la selección de Zaire (hoy, República Democrática del Congo). En aquella época, sólo un equipo africano se clasificaba para el Mundial. Zaire se impuso a Zambia y a Marruecos en la fase de clasificación y se convirtió en el primer equipo del África subsahariana en participar en la Copa del Mundo. Era, como podéis imaginar, la participación más exótica de la historia de los Mundiales.

Zaire recayó en el grupo 2, junto a Brasil, Yugoslavia y Escocia. En su primer partido, en Dortmund, cayeron ante los escoceses por 2-0. En el segundo, perdieron 9-0 ante Yugoslavia en Gelsenkirchen. Y en el tercero, se enfrentaban a los vigentes campeones: Brasil.

El árbitro rumano Nicolae Rainea intenta colocar la barrera de Zaire (YOUTUBE).

El árbitro rumano Nicolae Rainea intenta colocar la barrera de Zaire (YOUTUBE).

El partido también se celebró en Gelsenkirchen. En el minuto 77 de partido, con 2-0 en el marcador a favor de la ‘canarinha’, el árbitro del encuentro, el rumano Nicolae Rainea, pita una falta cerca de la medialuna del área. El colegiado discute con los jugadores zaireños que forman la barrera. Por fin logra que se queden en su sitio y pita. Pero ante de que los brasileños saquen, el defensa zaireño Mwepu Ilunga, ante la sorpresa de todos, sale corriendo desde la barrera y ¡chuta el balón hacia el campo brasileño! Estupefacto, Rainea amonestó a Ilunga y la falta se pudo sacar. Apenas un minuto después, el brasileño Valdomiro marcó el 3-0, tras un grave error del portero Muamba.

En aquel momento, se vio tan surrealista imagen como un claro ejemplo de que África estaba aún muy lejos del nivel requerido para jugar el Copa del Mundo, de que eran inocentes e ingenuos y de que ni siquiera tenían el conocimiento necesario del reglamento.

Pero nada más lejos de la realidad. La absurda acción de Ilunga tenía un motivo, que él mismo explicó. Lo que en realidad quería Ilunga era ser expulsado. Era perfectamente consciente de lo que hacía y su motivo era protestar contra las autoridades futbolísticas de su país (que estaba dirigido por el dictador Mobuto Sese Seko), que se quedaban con el dinero que le correspondía a los jugadores: «No tenía ningún motivo para seguir sufriendo en el campo cuando los que se beneficiaban económicamente estaban tranquilamente sentados».

Hasta mañana.